Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 43

Capítulo 43

Escenas llorando, Dj, Scott, Krist, el fútbol, las vueltas, la locura, esto y aquello hacen que me levante de un salto sudando hasta la coronilla. Me quedo recostado por unos minutos asimilando que tuve una pesadilla bastante fuerte. Ya más calmado, observo donde estoy, la habitación luce muy limpio y ordenado, hay varios libros, balones de fútbol americano de diferentes tamaños y colores, la ropa guindada y un olor peculiar de perfume que me encanta y caigo en cuenta que estoy en la habitación de Scott.

El desgraciado tiene una colección completa de mini carros más geniales del mundo, álbumes de todos los años de su vida y dibujos brutales que supongo que de eso se inspiró para realizarse tantos tatuajes. Sinceramente su televisor me da envidia, es más grande que el mío y pueden verse todos los canales que uno no tiene por ser un maldito pobre, los tiene él porque es Scott Jackson pues.

Debería comprarse una casa para él solo, no necesita vivir con nadie y puede tener todo lo que cualquier ser humano como uno requiere para vivir plenamente feliz. Viendo y curioseando hay un álbum que tiene y salen fotos de cuando era un niño, se ve tierno como carga a Britt y sonríe, maldito imbécil porque tiene que salir bien en todo, bastardo de mierda. Sigo viendo cada página y me causa felicidad, yo sé que Scott no quiere nada conmigo que sus sentimientos son hacia su novio, pero no puedo negar que me vuelve loco, me hace feliz en cierta forma y me gusta ver su pasado.

―Eres la única persona que ha entrado a esta habitación ―guardo inmediatamente el álbum y lo coloco en su lugar―. ¿Qué haces aquí? ―okey, bueno no sabía que era tu puta habitación, pienso detenidamente y no sé qué decirle a este ser para que no malinterpreté las cosas.

―No sabía que era tu habitación, solo tenía sueño y me acosté ―y curiosamente estaba viendo tus cosas sin que lo notarás―. Disculpa si te molesto con mi presencia.

―No me molesta que estés aquí, Cris. No pongas esa cara. Si quieres, te puedes quedar, iba a ver una película.

―Scott, en serio no quiero que seas amable conmigo ―es algo que no debo decir, pero por mi bien hay que mencionarlo―. De verdad.

―Cris, no estoy haciendo nada. Simplemente...

―Lo sé, Scott. No hace falta que me expliques nada. Dejemos las cosas como están, es más sano para mí y para ti. Lamento una vez más desordenarte tu cama.

―De acuerdo, olvida lo que dije. Phill y Britt están en la cocina, si deseas verlos.

Mi corazón se encoge, a veces me encantaría abrazarlo, besarlo, que me haga sentir incómodo y feliz a la vez; sin embargo, no puedo perdonarlo todavía y sonreír junto a él, me cuesta aceptar las cosas. Tranco la puerta y voy hacia la cocina donde están mis amigos. Ellos me miran misteriosamente, como no comento nada, se limitan a preguntarme.

¿Cuándo será el día en que olvide completamente a Scott? Es un sufrimiento que detesto, haber dormido en su cama y no poder eliminar esa escena de mi mente es imposible, vive en mi como si hubiese sido hace segundos. ¿Esto no era lo que necesitaba para que dejarán en paz? Pero precisamente el amor es traicionero y uno se ilusiona demasiado rápido, y finalmente no puedes dejar que las cosas fluyan porque es peor.

―Cris, ya deja de matarte tanto la cabeza ―si los consejos de Phill son directos―. Dile que lo extrañas y listo. ¿Qué tan difícil puede ser?

―Te ves demasiado tierno dando vueltas por la casa ―se da cuenta Britt―. ¡Scott no muerde! Que tenga los tatuajes y es grande no quiere decir nada, es un osito de peluche llorón.

Es más presión que tus amigos te inciten a lo prohibido, ambos se mueren de la risa como estoy actuando. Parezco un loco jalándome los cabellos, caminando en todas las direcciones murmurando cosas y sin comprender cuál es el maldito sentimiento que tengo por dentro. ¡QUE FASTIDIO Y QUE ESTRÉS!

―Bueno, ya tengo todo listo. ¿Hiciste el informe, Cris? ―cambia el tema.

―Si, ya se lo entregué al profesor el mismo día.

― ¡Como no tiene a Scott que lo moleste, es más diligente! ―Britt y Phill son cómplices de todo, como se ríen de mi desgracia―. ¿Vas a regresar a tu casa?

―Si, mañana tengo que salir a comprar algunas cosas y tengo que ir al campus a buscar unos libros.

― ¿No sientes que es demasiado grande la casa, Cris? ¿No te sientes solo?

―Ya me acostumbré, si hay algo paranormal, solo coloco el televisor a todo volumen y me duermo enseguida. Además, he estado muy cansado y llego a dormir.

―Siéntete libre de quedarte cuando quieras, cariño ―la señora Jackson aparece junto a una chica más joven―. No queremos que te sientas solo. Deberías considerar algo más pequeño, cariño. Te queda muy lejos de la universidad y es bueno tenerlo cerca.

―Ya se lo dijimos, mamá. Cris es como cierta persona que es terco de nacimiento, por eso sigo afirmando que son el uno para el otro.

―Concuerdo con eso, prima Britt.

― ¿Lo ves? Hasta mi prima sabe que son el uno para el otro.

A veces me encantaría sonreír, reírme de estos momentos, pero mi corazón sigue negado a tener la valentía para perdonar y yo tampoco puedo hacerlo, me cuesta mucho y necesito tiempo para pensar, estar solo y concentrarme en las cosas que son útiles, el amor debe esperar y sinceramente prefiero estar así que sufrir. Phill y Britt me llevan a mi casa y me despido de ellos prometiéndoles que pronto nos veremos, necesito pleno descanso y en estos momentos no quiero estar con nadie, entienden y se retiran.

Sé que Phill y yo estamos en el equipo de futbol y es inevitable no verlo en las prácticas, sin embargo, como James me odia a muerte entonces me hace hacer más ejercicios que los demás y generalmente estoy solo en el campo. Aunque William intenta defenderse, el tipo en serio no les hace caso a las peticiones de nadie y cuando alguno dice que es injusto me hace correr más vueltas y termino de noche corriendo como un idiota sin descanso.

Ya son las diez de la noche y sigo dando vueltas, me faltan 100 y mis piernas están débiles. Como sé que el idiota pone a alguien que sea chismoso para vigilarme, no puedo escaparme, aunque lo desee demasiado.

― ¿Qué demonios haces aquí, Cristopher? ―Es Krist el novio de Scott―. Deberías ir a casa, estás soportando demasiado.

―Corriendo.

― ¡Chico, estás explotándote! Eso no es bueno y cuando juegues no tendrás fuerza para nada.

―Lo lamento, señor. Pero debo hacerlo, no me interrumpa por favor.

Krist se aleja de mí y al rato aparece con el entrenador. Menos mal porque caigo al suelo y no puedo levantarme, me duele muchísimo las piernas, y todo el cuerpo.

―Señor, no puedes permitir que James siga molestando al chico ―opina Krist.

―Ya lo conversaré con él. ¿Tienes auto?

―Lo dejé en casa, usualmente me vengo en autobús, señor.

―Yo lo llevo, señor. No se preocupe.

―Bien, Krist. Lo veo mañana en mi oficina, dígale a Scott que no se esconda, lo necesito.

―Si, señor.

Krist me carga sin hacer mucho esfuerzo y me introduce en la parte trasera de su auto. Me extraña que no ande con Scott, quizás vino a hacer otra cosa y el idiota está en su casa, supongo.

Estoy llorando del dolor, es algo horrible y no soporto. El auto se detiene en algún lugar que no reconozco. Él abre la puerta y me saca como si fuera una caja vacía que no pesa nada, al ver el lugar es un hospital. Va directamente a la sala de emergencias como si fuera su casa y me acuesta en una de las camas disponibles.

―Ha estado corriendo por mucho tiempo y debe tener alguna fractura o lesión en las piernas ―le dice a una chica vestida de azul completamente―. Le haremos unos exámenes para comprobar lo que tiene.

―Enseguida, doctor.

¿Doctor? ¿Es una maldita broma? ¿Desde cuándo Krist Evans es doctor? Que yo sepa estaba jugando en las Águilas negras y su mánager no ha dicho nada si esta fuera del equipo, incluso lo vi jugar el viernes pasado.

― ¿Renunciaste a las Águilas negras? ―lo sé, no puedo controlar mi instinto fanático.

―No.

― ¿Y eres doctor también? ¡No entiendo!

―No te preocupes, Cris. No dejaré el equipo, tengo una carrera de médico solo que nunca lo dije y ahora que tengo un poco más de tiempo puedo hacerlo.

¿Este tipo es un genio o qué? ¿Cómo vas a ser médico y jugador de fútbol profesional al mismo tiempo? ¿Quién carajo hace eso?

― ¿Cómo haces?

―Organizándome.

―Pero...es imposible, ¿y cómo haces cuando un paciente se está muriendo y tienes partido el mismo día?

―No me ha ocurrido y tengo mis limitaciones, Cristopher.

Me llevan a la sala de rayos X para hacer el examen respectivo. Dejo de hacer preguntas y me quedo callado para no interrumpir ni ser incómodo con Krist quien ha sido demasiado amable conmigo en las últimas horas. Menos mal que mis padres están lejos y no se han enterado de esto, seria humillante y tuvieran varias bromas que hacerme.

―Listo, llévalo a la habitación.

Krist vuelve al rato con una enfermera, le dice algunas cosas sobre otros pacientes y ella se retira de la habitación.

―Afortunadamente tienes contracciones musculares y nada grave. Aquí tienes unas cremas y compresas que debes colocarte, ¿de acuerdo? ―Krist sonríe y me da una bolsa con todo eso―. Ya conversé con el entrenador, asistirás a los entrenamientos, pero no harás ejercicio físico por 3 días, ¿okey?

―De acuerdo, gracias.

―De nada, Cris. Ya viene Britt a recogerte, cualquier cosa no dudes en contactarme, ¿sí?

―Nuevamente gracias, Krist.

―De nada. Te veré luego, ahorita ando muy ocupado.

Mi mejor amigo y su novia llegan a los quince minutos con el rostro de preocupación.

―Por suerte no paso más allá. ¿Te llevamos a tu casa?

―Si, necesito descansar.

―Nos quedaremos contigo, Cris. Tienes que recuperarte y solo no vas a poder cocinar ni hacer las cosas en tu casa.

―Está bien.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro