( Capítulo 7)

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Holis mi gente linda ❤️.

Han pasado 84 años... 🤣

No tengo más que decir que " Bloqueo" y no me deja de dar . Me pasó que los tres fics que tengo en proceso quedaron todos en momentos claves. Eso mismo, me está sucediendo con Simplemente tú ( he escrito algo pero no es lo suficiente).

En fin, sepan disculpar a este humilde cerebro colapsado 😅

Sin más preámbulos, los dejo con el siguiente capítulo que está  😏😈

PD: Tengo meses de no escribir lemons, espero no decepcionarlas 😶‍🌫️

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/ 🔞 El siguiente capítulo contiene lenguaje adulto, escenas de sexo explícito y algunos comentarios pueden llegar a ser ofensivos dependiendo la mente de cada persona, se recomienda discreción y queda bajo criterio de cada uno continuar con la lectura 🔞/

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Su inocente rostro se encuentra tan sonrojado que estoy seguro de que si pincho su mejilla con una aguja, brotará sangre.

Su boquita, la misma que tanto me enloquece, se encuentra semi- abierta mostrando parte de su dentadura. Esos hechizantes ojos, tan azules, tan brillantes como si fueran dos zafiros recién pulidos, solo hacen que me pierda un poco más en ese mar inexplorado aún por mi.

( tómala)

-- Deja de incitarme--

__ No sabes lo que haces, no sabes lo que dices. __

Trato de persuadirla de sus convicción porque está claro que soy un maniático, tentarme es muy peligroso.

Acaricio con adoración su tersa piel. Oliendo su mejilla, y vuelvo con la hipótesis de no poder controlar mis impulsos más oscuros, no tengo tanto poder.

Mira mis labios, ahora sus ojos se posan en los míos y asiente contra mi rostro, tomándome con delicadeza por el, acariciándome en el proceso de esta hermosa tortura.

__ ¿Soy de su pertenecía?. __ pregunta a centímetros de mi boca.

( Lo es)

__ Lo eres. __

Apoyo mis manos sobre sus muslos, logrando sentir como su suave terciopelo se va erizando ante mi delicado tacto.

Realmente no sabe lo que hace porque está entregándome su alma en bandeja de plata y luego de esto, no podrá escapar jamás.
Aunque si llegaría el hipotético caso de intentar hacerlo, está claro que sería la última acción que efectuaría pues nunca le permitiría tener una vida lejos de mí, esa posibilidad es imposible.

Toca sus labios, temblorosa, la ayudo a ello, los acaricio también que descubra el deseo.

__ No vuelva a dejarme sola, nunca más. __

En sus preciosos ojos noto algo diferente, un abismo intermitente.
Y de sus dulces labios suena una amenaza disfrazada de petición.
Si ella realmente supiera que nunca la dejaré, incluso, ni en la muerte misma porque la seguiré hasta donde Ades me lo permita, me convertiré en su Orfeo porque desde el primer momento que la vi, no existió la opción de escapatoria para ella.
Así, como hoy no existe opción para mí. Estamos juntos enredados en un hilo, el cual, nadie podrá nunca cortar.

__ ¿Si no.. qué?. __ pregunto, solo queriendome deleitar con el caos que he provocado en su mente del cual, estoy orgulloso.

La sorpresa se refleja en su tierno rostro y mi seriedad la hace pensar, removiendose un poco pero mi agarre se intensifica.

Si ella comenzó todo esto, deberá por terminarlo.

Vuelve a acariciar mi rostro y cierro mis parpados porque en este preciso momento si ella me pide cualquier cosa, estoy dispuesto a dársela. Soy capaz de entregarle mi vida incluso acabar con la humanidad misma solo para protegerla de cualquier cosa que atente contra su integridad.

Aprieta mis mejillas y su boca tiembla contra la mía.

__ Acabaré con mi vida. __

Se ríe de una manera angélical, aunque en el contexto en el que estamos, no podría definirla con ese adjetivo. Junto sus lágrimas que caen por sus mejillas y beso con cautela esta.

Mi corazón se acelera de solo pensar ello pero la seguridad con la que lo ha dicho, me confirma que no bromea y que finalmente, ella ha caído, aclaro.. hemos caídos.

Hemos caído presos de nuestros nublados y codiciosos sentimientos de amor desesperado en este triángulo hambriento.
Que tal como lo cuenta el mito todo lo que cae allí, no regresa nunca más, desaparece...
Así como ha desaparecido mi cordura que junto con la de ella se van tomadas de la mano dejando que nuestros deseos más bajos salgan a flote, demostrando que en toda oscuridad hay un destello de luz y en toda luz brillante siempre habrá oscuridad.
La misma, que estoy viendo ahora en su dulce mirar.

Tengo el mismo efecto que el triángulo de las Bermudas y es vivir en una incertidumbre desconocida, un tanto genosida para ambos porque no solo soy capaz de morir por ella, sino que ahora ella, también está dispuesta hacerlo por mi.

-- Un ángel... un demonio.. y una maquiavelica Bestia --

( "Maquiavelica bestia" me gusta que me reconozcas aunque tengo nombre.)

Jalo de la cadena que lleva en su cuello. Y lamo su mejilla como el hambriento depredador que soy.
Un suspiro sale dejando escapar quizás su último anhelo de libertad o las inmensas ganas de ser la princesa de este enfermo mental que la mantendrá por el resto de la eternidad recordandole cada día que es solo de su pertenencía.

Mientras mi lengua llega a su mandíbula, la veo inclinarse tan solo un poco y sonrio ante su inexperiencia que me llena de satisfacción porque sino, fuese otro el caso.

La tomo sorpresivamente de su nuca, devorandome sus labios comiendome su grito al verse capturada con fuerza por unos de mis brazos con el cual, ejerzo presión sobre su diminuta cintura haciendo que ella finalmente sienta que no solo soy un demonio sino que soy peor que ello...

Soy un hombre...

Nos despegamos de este beso apasionado. Será solo por un momento porque necesito ver en sus ojos cual es su reacción.

Trata de controlar su respiración y quiere acomodarse de mejor manera pero sus piernas aún no responden como deberían.

Baja su vista hacía mi sur, obviamente aún no puedo deleitarla con la visión como debería pero lo siente a traves de la tela.

( Cachorra hermosa )

Solo me sonrio en respuesta, tomando su mano.
Si, la llevo hacía allí para que toque todo lo que le pertenece.

__ Puedo saciar tu curiosidad. __

La coloco sobre el bulto que quiere romper este pantalón ella me mira con preocupación. Como si estuviera por cometer algún tipo de delito. Y si lo vemos de este modo quizás, si lo sea.

__ Oh .. __

Un leve gemido sale de su boca cuando entra en contacto con el calor que emana mi carne bajo este pantalón, la he dejado aún más preocupada.
Apoyo mi nariz contra la suya y cierro mis ojos dejándome llevar por esas caricias que yo mismo induzco con su mano bajo la mía.

__ Tranquila no te hará daño. __

__ Aún.. Aún no he..

Jaló de la cadena enojado atrayendola más hacía mi.

__ Claro que no o te mato. __

No la dejó ni terminar lo que se que está a punto de decir porque me enfurezco de solo pensarlo.

Se asusta y abre sus ojos y yo me como esos labios carnosos, suaves hechos para besarme solo a mí. Le debe quedar claro que me pertenece o mi mente se pertuba más y más por su culpa.

Mis manos comienzan a bajar su vestido rasgado, ese mismo que ella con sus manos rompió.

Tiembla de miedo, pero beso sus hombros tranquilizandola y con suma delicadeza dejo caer sola la fina tela por sus delgados brazos.

Huele a vainilla, huele a paz, huele a que cada rincón de su cuerpo será finalmente mío.

__ Mn.. __

En un intento desesperado quizás por lo desconocido que la estoy haciendo experimentar. Trata de cerrar sus piernas pero no puede porque su movimiento aún sigue escazo.

__ shs... __ Acaricio su muslo tratando de calmar su frenesí. __ Me acerco a su oído acariciando el lóbulo de su oreja con mi nariz y le hablo de manera sensual y suave sin dejar de hacer círculos con mi pulgar no muy lejos de su ingle.

Ella está abrazada a mi cuerpo, gimiendo temerosa, sin saber que le está sucediendo a su virginal cuerpo.

( Corderito mío)

Con mucho cuidado la tomo por sus hermosos muslos y la recuesto sobre su cama.

Sus cabellos esparcidos sobre la sábana blanca me hacen creer que es la obra de arte más hermosa jamás pintada en un fino lienzo.

Mi mente decide grabarlo, por el resto de la eternidad y quemarlo en lo profundo de mis retinas.

Desprendo mi camisa ante su atenta mirada. Sus azules brillan con tanta intensidad. No se pierde lujo de detalle hasta que le sonrio.

Recién pareciera percatarse, la vergüenza aparece y con sus manos tapa sus ojos.

( cosita dulce)

-- La comeremos--

__Abre los ojos. __

Le ordeno pero parece no escuchar lo que acabo de decir pero cuando siente el sonido de la evilla de mi cinturón vuelve a abrirlos, comenzando a jadear.

Me acercó nuavamente hacía su rostro, pegando sus manos a mi pecho desnudo, no tarda en acariciarme, lo hace tan sutilmente que estas parecieran danzar por cada línea de mis definidos músculos, se siente tan delicioso que no puedo ponerlo en palabras.

El dolor de mi miembro comienza a tornarse insoportable, he soñado tanto con esto, solo yo, se cuanto me he estado conteniendo por no tomarla contra su voluntad y ahora que ha llegado el momento debo de hacer todo de manera perfecta, no debe existir fallo.

__ Ah... __

Se retuerce gimiendo contra mi boca cuando mis manos exploran todo su utópico cuerpo. Corro sin esperar más el encaje de su delicado brassier y con sumo cuidado dejo uno de sus pequeños senos expuesto.

Observo la perfección del mismo, redondo, firme de un tamaño perfecto, adornado por su mínimo pezon rojo que pareciera una cereza sobre un postre, uno que me como sin reparo.

__ oh.. __

Su cuerpo se curva cuando lamo y succiono con fuerza tragandome todo su pecho mientras amaso el otro jugando con su protuberancia.

Sus manos arañan mi espalda y solo puedo oír un; " porfavor más ".

Desesperado ante tanta delicia, rompo con mis manos su brassier y paso mi lengua por entre medio del valle de sus senos bajando peligrosamente, dibujo un círculo alrededor de su ombligo y termino por moder levemente su abdomen.

Dejo tatuado cientos de besos en cada particula de su ser, eufórico, para que el día de mañana su cuerpo le muestre lo linda que se verá con mis marcas. Me detengo cuando mi boca llega al borde de su braga.

__ No.. __

__ Quieta. __

Cuando quiere cerrar las piernas, presa del pudor, la sujeto con firmeza para luego bajar la tela dejando expuesto lo más perfecto que mis ojos han tenido el honor de alguna vez ver.

No me pierdo detalle alguno ante tanta majestuosidad. Es tan rosada, tan hegemoníca, su clitoris adorna como si se tratara de una perla sobresaliente, está inflamado, palpitando, esperando a ser atendido. Se ecuentra tan mojadita, que brilla para mí.

-- Soy un maldito perverso--

( Orgulloso de ello cachorro)

Paso mi dedo pulgar por su botón, mordiéndome los labios.

__ Señor.. __

Cierro los ojos, su coño es desmedidamente suave, tibio y acojedor.
Me permito sin culpa a explorarlo pero solo con muchas delicadas caricias aunque mi deseo sea enterrar mis dedos hasta tocar su cervix no soy tan imbécil como para desflorar mi sagrada margarita de ese modo.

__ Ábrete más. __

Un intento fallido por intentarlo hubo y mis manos con fuerza se apresuran a sostener sus piernas elevandolas, para pasarla por mis hombros.

Adiós firmeza, pierdo el control.

Succiono con vehemencia como un loco desesperado. Los gritos no se hacen esperar. Escarbo con mi lengua su inexplorado interior con mis manos abro aún más que pareciera estar haciendo una inspección ginecólogogica y mi lengua es mi herramienta fiel.

Me embebo de su dulce néctar que comienza a brotar, sus manos se han posado en mi cabeza, sujetandola, invitándome a comerla más y más y es lo que hago porque muerdo, jalo, chupo y lleno de besos sus hermoso y perfecto coñito que se contrae de tantos espamos y cuando está a punto de correrse, me detengo.

Quiere articular palabra quizás para preguntar porque me he detenido.
No es momento para decirle que me pasaría toda la noche comiendo su dulce manjar pero que necesito ser uno solo con ella..

Mi pantalón queda tendido junto con mi bóxer en el suelo.
Mi erección la apunta como si fuera una daga que está a punto de clavarse en ella.

Me acarició vulgarmente frente a sus ojos, muy lentamente porque duele, duele tanto. Mis venas están al punto del colapso.

Gime sorprendida cuando apoyo la punta de mi glande en su entrada y gruño como animal, en respuesta. Estoy tan cerca, comienzo a masturbarme pervertidamente en su pequeña entrada.

Se asusta pero comienzo a gemir, a gruñir. Ya no puedo más pero necesito oírlo tener la seguridad que me desea tanto como yo a ella.

__ ¿ Quieres que sea solo tuyo? __

Paso mi pene por toda su entrada juntando sus fluidos, empapandome con su lubricación natural.
Desesperada toma mi rostro y muerde sus labios contra los míos.

__ Solo mío. Usted es mío. __

( Solo suyo)

Y me entierro sin piedad alguna, sin miramientos. Un grito desgarrador sale lastimando seguramente su garganta.

Su cuerpo se curva convulsivamente. Y grito junto con ella ante el semejante dolor,asfixiante, que me provoca ser oprimido demencialmente por su diminuto orificio que se ha expandido aceptandome con tanto amor y fervor convirtiéndonos en un solo ser, bautizando esta sagrada comunión con su dulce elixir, su sangre.

__ S.. sessh..

Hay un gran dolor en su llamar, beso su frente consolandola, es mi niña pequeña.
Mi mano deciende entre medio de nuestros cuerpos hasta llegar a su pubis abultado, atorado por toda mi carne que se ha clavado en el centro de sus entrañas.

Acaricio tratando de alguna manera menguar aquel dolor que ha provocado nuestro acto de amor.

__Confía en mí, ángel...__

La veo asentir y con ello, comienzo a deslizarme en ella. Como si se tratara de una mutua tortura, su sangre no deja de salir, se mezclan con nuestros fluidos y mi verga solo se incrementa de tamaño poniéndose más y más caliente haciendo más difícil mi trabajo de no herirla.

__ D.. duele

Comienza a acariciarce sus senos sin percatarse que ha caído ante uno de los más grandes pecados, la lujuria.
Y si existía alguna pizca de enteresa en mí, esta se pierde en el océano y queda estancada con una anlca enterrada en las arenas.

Así como estoy enterrado en ella.

Me salgo de manera violenta y me vuelvo a introducir agresivamente haciendo un caos en su coñito que se amolda y late sobre la piel de mi falo.

__ Que pequeñita estás, Corderito.__

Mi morbo es tan grande que mi vista no se ha despegado de nuestra obscena unión.
En cada embiste el chapoteo de sangre se incrementa haciendo que las sabanas que en un principio fueron blancas se vayan tiñiendo de un intenso carmesí, mi color favorito.

__ Más...

Sacó, meto, mis estocadas son certeras y punzantes. Mi pelvis se mueve en un frenesí único. Es tan salvaje ,la estoy tomando tan primitivamente que mis testículos golpean con fuerza su perineo.  Sus gemidos se convierten en ronroneos que junto con el exquisito y sensual sonido que emite nuestro coito se crea la sinfonía más erotica que ni mozart ha tenido el honor de crear.

Su senos rebotan, su cuerpo perlado en sudor al igual que el mío que al apoyarlo contra el suyo, nos quemamos y nos consumimos en el fuego del infierno.

__ N.. no puedo..

Está claro lo que va a suceder. Su hermosa vagina comienza a apretarme, a estrujarme, al punto que siento que me abotonaré a su ardiente interior y le regalo el primer orgasmo de su vida, yo, su único hombre.

__ Oh.. por Dios... . __

Ella clava sus uñas en mi piel y yo clavo las mías en sus definidas caderas.
Todo mi cuerpo ejerce presión sobre el suyo y finalmente me libero torrencialemente en lo recóndito de su acojedor interior. Mi esperma sale a borbotones, está tan espeso que mi orificio se expande tratando de dejar su útero totalmente lleno de mi.

Queda exhausta, es una belleza inexplicable aún no me he salido, beso sus labios y ella trata de no cerrar sus preciosos ojos pero falla y antes de hacerlo, su mano me brinda una última caricia y sus labios susurran algo que jamás pensé ella diría..

__ Lo amo... Lo amo Sesshomaru.. __

Continuará...

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