( Capitulo 3)

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Holis gente linda ❤️ como hice un pequeño aviso en el día de ayer que ya lo he borrado, retomo este fic que tenía tiempo sin actualizar, las musas volvieron espero lo disfruten 🙌

Como siempre quiero agradecer la página de Es Sesshome por realizar las bellísimas portadas y apoyar a mis historias ❤️🙏

Les mando un abrazo de 🐻 a todos..

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/ 🔞 Advertencias 🔞/

El personaje principal presenta disociación mental, doble personalidad, psicopatía y sus actos serán crueles y aberrantes.
Presenta privación de libertad, síndrome de estocolmo. Y agresiones físicas y psicológicas, se recomienda discreción y con esto aclarado queda bajo criterio de cada persona continuar con la lectura

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__ Te encuentras bien, Sesshomaru?__

El platinado apartó la vista de su monitor por unos momentos, observando la bella y esbelta mujer que lo observaba del mismo modo atentamente.
Solo asintió y siguió en lo suyo.

__ Al menos podrías tener una charla con tu madre, no lo crees?__

Ante el silencio de su hijo, prosiguió.

__He venido a
felicitarte...
Eres el presidente del hospital finalmente, así como alguna vez, lo ha sido tú padre.__

Esta vez sacó sus lentes, apretó su cien con ambas manos y dorados contra dorados se analizaron.

__ Gracias. __

Fue todo lo que respondió, nunca había sido de muchas palabras.

__ Has actuado de una manera muy extraña, estos últimos meses.
Te ha sucedido algo? Sabes que puedes confiar en mí, quizás pueda ayudarte con lo que te aqueja.. __

__ Madre. __

Fue suficiente para saber que su hijo no diría nada de lo que ella creía con fervor lo inquietaba.

__ Bien, comprendo, has tenido un día ocupado.
Solo recuerda la cena de hoy, porfavor es importante para tu hermano.__

( No te atrevas)

__ Allí estaré. __

( Sabes que no iremos, debemos cuidar de nuestro ángel)

Vió como su madre cerraba la puerta y suspiró aliviado.
Su progenitora lo conocía demasiado, más que nadie y era tarea difícil ocultarle algo pero confiaba en su inteligencia y en su capacidad de mantenerse ecuánime ante cualquier situación.

(Regresemos)

-- No--

En esos momentos su pelea era interna y Sesshomaru quería demostrar a aquello que perturbaba y le hablaba en su mente constantemente que era él, quién tenía el total dominio sobre ella y sobre su cuerpo.
Así que, asistiría a la cena de compromiso de su hermano menor, incluso si esto implicase llegar prácticamente a media noche a su alejada casa de campo.

( La necesito)

-- Luego --

Esa maldita y tenebrosa voz que hablaba constantemente en su cabeza sin cesar, pasándole imágenes del delicado y pequeño cuerpo de su cordero que temblaba como una hoja a punto de caer en pleno otoño, no lo dejaba en paz, parecía haber creado una especie de simbiosis con la hermosa Azabache.

Él también tenía una vida fuera de su casa de campo y no podía abandonar todo de la noche a la mañana sin explicación alguna solo para complacer a ese temido ser, que residía en su mente.

-- Serán solo horas--

( Tiempo que nunca más volverás a tener, sabes que nos espera )

-- No es cierto, me teme--

( Solo por ahora )

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Kagome se encontraba nuevamente en su blanca y solitaria habitación.

La mujer que se econtraba con una especie de máscara en su rostro volvía a colocar la cadena a la cama y dejaba a un lado la silla de ruedas.

Nunca había hablado ni una sola palabra con la misteriosa dama que hacía cada cosa que el Platinado le ordenaba.

La castaña acomodó con su mano el largo y ondulado cabello de la joven y colocó un pequeño lazo en este.

__ Por qué, haces esto?__

La joven por primera vez, habló sabía que no saldría de allí, que más daba?.

La mujer agachó su cabeza sintiendose miserable y dejó de acomodar el cabello de Kagome. Se puso en pie, agarrando una bandeja con la merienda y en una pequeña mesa que se econtraba al lado de la gran cama, la colocó, saliendo rápidamente de aquella oculta habitación, su corazón se rompía sin poder ayudar a la bella ojiazul.

-- Él en cualquier momento aparecerá --

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No, su bestia está vez no había ganado, claro que no, él iba manejando directo al evento de su hermano y su cuñada.

( Nunca nos amará)

__ Ya cállate! Tengo una vida!. __

El platinado gritó enfurecido golpeando el volante una y otra y otra vez.

Recordando aquella vez cuando por primera vez, vió esos azules que lo llevaron a la perdición.

( Flashback)

La ventisca de aquella mañana le trajo a sus fosas nasales aquel impregnante olor a vainilla que por un momento lo hizo levantar su vista.

Era una mujer de contextura delgada, de un tamaño pequeño sus cabellos ondulados se mecían agraciadamente con el viento y sus curvas parecían danzar en cada trote que daba.

( Es mía)

Fue la primera vez, que escuchó aquella tenebrosa voz en su mente y que por un momento, perturbó su impoluta tranquilidad.
Sacudió su cabeza hacia ambos lados creyendo estar equivocado, y volvió a levantar su cabeza tratando de parecer disimulado, más no lo logró, aúnque...

Ella ya no se encontraba.

Desde un columpio se escuchaba la risa picara de su pequeña hermana
La observó por unos momentos y volvió la vista en la dirección donde aquel bello ser, había seguido su camino, sin siquiera notarlo, sin saber que había despertado a un demonio sediento de su alma.

( Ve por ella)

( Fin del flashback)

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(Pov Sesshomaru)

Por mi cabeza pasan miles de cosas .
Y la que me aqueja día tras día , hora tras hora, minuto tras minuto, es el hecho del crimen aberrante que estoy cometiendo lo sé, soy muy consciente de ello, lo que me hace más cruel aún.

Quién le cortaría las alas a un ángel? Quién podría tener cautivo a tan celestial ser?

Me desconozco a mi mismo, nosé quien soy cada vez que miro mi reflejo al espejo, soy un monstruo...

Yo.. Sesshomaru Taisho..

Siempre me he destacado en absolutamente todo.
En simples palabras, siempre he sido el mejor en absolutamente todo, nunca nadie me ha superado en nada.

Méritos, honores, soy el doctor más joven, reconocido mundialmente por ser una eminencia en la cirujía.
Tengo tantos premios por mi destacada labor que he perdido la cuenta de cuántos.

Mi posición económica siempre me ha permitido tener acceso a la mejor educación junto con una vida de muchos lujos, sin contar que soy de esos iluminados que se destaca por su natural belleza, belleza que no va acorde a mi manchada alma.

Mujeres siempre ha sido lo que me ha sobrado, incluso en algún punto me ha llegado a perturbar la existencia de ellas. Tan  asquerosamente vulgares, tan deplorables y arrastradas por tener solo una noche conmigo aunque debo de admitir que para pasar algunas cuantas horas, no estaba mal, cero compromisos solo espacio para ser el mejor doctor del mundo y generar más dinero.

Toda esa vida perfecta, porque claro que mi vida lo era. Toda esa utopía, se ha ido al retrete cuando he decidido llevar a Rin aquel domingo, a ese maldito parque.

Este momento de lucidez que estoy teniendo me permite pensar, recapacitar y creer que debería de entregarme a la policia ahora mismo.

Pero no...

Mis dedos ágilmente están insertando el código de seguridad de mí residencia en este hermoso campo, totalmente alejado de la gran ciudad que por cierto lo he adquirido, literalmente, al día siguiente aquella vez, cuando me la crucé por primera vez.
Mi mente no pudo evitar, imaginar un futuro sin ella y si, en mi cabeza la vi vestida de blanco corriendo en un hermoso campo, la proyecté y en algún momento será así.

Debería estar celebrando la unión de mi hermano menor y su futura esposa Kagura pero no...

Me ecuentro aquí, ingresando en su cuarto, en esta habitación que diseñé solo para ella, tan blanca, tan limpia, tan impoluta y pura como lo es, mi ángel...

Kagome ...

Te nombro en mis pensamientos y te deseo hambriento de tu sangre que ha sido mí prohibido elixir el cual, hay veces en las que me permito beber cuando el intenso deseo de poseerte me acorrala y me embarga, conduciendome a la locura misma, pero no!
Es mi honor el que está en juego, asíque solo espero que algún día seas tú, quien te entregues a mí por voluntad propia, corderito mío.

Te veo recostada de lado durmiendo plácidamente como si no estuvieras encadenada a tu cama de princesa, que he comprado solo para ti, quiero lo mejor para ti, un ser sublime como tú, no debería andar por este mundano mundo sin alguna protección donde hay tantos peligros al asecho..

Yo te protegeré Kagome, nada te sucederá aquí conmigo.

Justo cuando estoy por tocar tu preciosa pierna, tentado por el agónico deseo que me exige solo un roce de tu suave piel.

Dirijo mí vista hacía tu bello rostro y te veo con esos enormes ojos tan únicos y particulares.
Aquellos que añoro, y admiro recelesomente en silencio.

En mis 32 años de vida, he visto muchísimos ojos azules pero ese extraño tono, solo los he visto en ti, princesa.

Das leves suspiros...

__ S.. Sesshomaru.__

Me nombra y se me eriza por completo la piel junto con mi estómago que se contrae, pareciera que no tuviese nada dentro, solo un vacío. Jamás mi nombre me ha sonado tan bello como cuando ella me nombra.

Me alejo para que no me tema más de lo que ya lo hace y la escaneo sin emitir palabra alguna.

La luz es tenue, por lo que veo se acomoda sentandose y enciende la lámpara, que tiene a su lado.

Inmediatamente cuando me ve, agacha su bella mirada, sus mejillas están totalmente sonrojadas

Sientes vergüenza, lo sé. Poco a poco hemos avanzando.

-- Es tan hermosa--

( Ella es nuestra)

-- Lo es, claro que lo es--

__ He hecho algo malo?.__

Su pregunta me saca de lugar.

Ahora su vista se dirige hacía un lado y veo que unas cuantas lágrimas caen por ese perfecto e inmaculado rostro.
Me pierdo en su belleza irreal nuevamente, esa misma, que me ha conducido a un abismo, al mismo infierno en donde estoy ardiendo solo por ella.

Porque he enloquecído, de eso ya no hay duda.
Es la única definición que puedo darle a mí padecimiento mental, sin pertenecer al campo de la psiquiatría.

Me pongo en frente suyo, colocandome en cuclillas para poder apreciarla mejor, para poder deleitarme mejor...

-- Si soy el lobo feroz--

__ Qué malo podrías hacer?__

--Si eres un ángel --

Mi corazón se rompe junto el de ella sin saber del porque su tristeza, hace rato habíamos superado esa etapa, que la tiene así?.

__ No.. no lo sé, dígamelo usted que no me ha dado mi cena. __

-- Qué?--

( Debes matar a esa perra, lo ha hecho a propósito)

__ Me estás diciendo.. que no te han traído de cenar?__

La veo asentir y la furia, la ira misma, me carcome lentamente la cabeza y solo me imagino a aquella inútil mujer siendo estrangulada con mis propias manos.
Me pongo en pie furioso, estallando en cólera, quiero salir en su búsqueda pero siento como mi corazón se paraliza, se me corta el aire, la piel se me eriza por cada parte de mi cuerpo y un frío recorre mi espinal dorsal, cuando siento por primera vez, su suave, mágico, delicado y tan efímero tacto, hasta podría decirse que me estoy sintiendo  mareado.
Mi ritmo cardíaco se ha ido incrementando más y más, creo que sufriré algún tipo de conmoción, si no logro tranquilizarme, por suerte mi rostro nada demuestra.

__ Quizás ha tenido algún incoveniente, siempre me cuida, porfavor, no le haga daño. __

-- Más le vale--

Pienso, pero esto no se quedará así, solo complazco su corazón
herido al creer que fui yo quien me he olvidado de ella.
Como si ello fuera posible, como si pudiera existir aunque sea esa irreal posibilidad.

Eso nunca sucederá Ángel, ni con una lobotomía podría olvidarme de ti. Porque si ese fuese el caso yo volvería a buscarte de mil maneras y juro que te encontraría porque tú.. tú, eres Mía....

__ Nosotros siempre cenaremos juntos, Ángel. __

No contesto ante lo que me ha solicitado pero está más tranquila, lo sé, ella asume que nada le haré a la detestable e inservible Sango.

Sus mejillas vuelven a teñirse de un carmesí que combina con sus perfectos labios, es tan naturalmente bella, tan inocente, tan, hermosa, tan mía...

Solo asiente.

__ Ahora regreso, iré por nuestra comida. __

Escucho un suave suspiro y sonrio victorioso de lado mientras cierro la puerta con llave para dirigirme hacía la cocina.

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Te observo comer tranquilamente en tu silla, ajena a mis macabros pensamientos.

Cómo es posible que este simple  acto banal me haga inmensamente felíz?

El solo hecho de verte disfrutando de la cena junto a mi.

Tú no sabes cuanto dominio tienes sobre todo mí ser, simplemente te necesito para vivir, Kagome.
No te imaginas lo que significas en mí vida, tú.. tu eres mi vida.

__ Cocinas delicioso. __

-- Vaya, un cumplido, eso si que es nuevo. --

( Avanza)

__ Gracias. __

Veo que su plato está vacío.
Lo que acaba de decir, me parece  tan tierno y lleno de dulzura, que le ofrezco más, aunque dudo que acepte.

__ Se te apetece más?. __

Asiente, haciendo entrega de su plato.

( Ella está cediendo cada días es más nuestra. )

Esto me ha sorprendido más de la cuenta, asíque vuelvo a servirle, apoyo el plato sobre la pequeña mesa y no tarda nada en saborearse mientras come, estaba apetente.

__ Haré este plato más seguido. __

__ Si. __

Se da cuenta de lo que acaba de responder y se vuelve a sonrojar pero está vez, no puedo no tocarla con mis dedos rozo su colorada mejilla, sus ojos brillan con intensidad y su tenedor cae, me mira y por primera vez me regala una angelical sonrisa donde sus dientes parecen perlas recién sustraídas del mismísimo mar que son sus ojos, y el perfecto delineado de sus labios produce la curva más hermosa que haya existido jamás siento como mi mente se perturba lentamente y me adueño más y más de ella...

-- Inocente --

Pienso, mientras recojo el tenedor que se ha caído al suelo, trata de agarrarlo pero le doy otro, jamás permitiría que sus labios toquen algo contaminado.

__ Eres tan hermosa . __

Se me escapa aquello cuando nuestras manos entran en contacto la observo esperando que la aleje como tantas veces lo ha hecho..

No lo hace, solo se queda mirando ignora el tenedor y aprieta la suya contra la mía.

( Es mágico)

No puedo expresar lo que siento, lo que he esperado por este momento.
Dejo que investigue mi piel, temerosa.

__ L.. lo siento. __

Me enoja en demasiado que se aleje pero es simple vergüenza asíque lo acepto.
Mis codos de apoyan sobre la madera y mi rostro se acerca al de ella. Paso uno de sus sedosos cabellos tras su oreja, está temblando.

__ Sabes? Pronto tus rodillas cicatrizarán, ya no queda nada y necesitarás de mi para hacer tus ejercicios. Tendremos más contacto que un simple roce de manos. __

Su boca se abre levemente formando una O y estoy tan cerca que podría profanar sus preciosos labios y saciarme de ellos hasta desgastarlos con mi propia boca. Lo ansío, lo anhelo, la deseo tanto. Quiero ser su príncipe que la despierte todo los días con un beso así como en los ridículos cuentos que nos leen de niños, pero no..

Porque es ella quien me lo debe pedir..

Está incredulamente felíz, lo sé, con tal noticia que le acabo de dar . Han pasado tantos meses desde que reside aquí que ha perdido la noción del tiempo, tanto así, que no se ha percatado que está lista para su rehabilitación. 

Esto me aqueja, me perturba pero aún, hay un largo camino por recorrer para que nuevamente pueda dar sus primeros pasos.

He sido tan mordaz en la cirujía que le he hecho.
Cada corte ha sido certero y no ha quedado un ligamento sin cortar pero ella es joven, atlética y su recuperación puede tomarme desprevenido aunque eso nunca pasará, pues está todo calculado..

El tiempo está a mí favor y ella me amará, lo sé..

Me amará tanto que seré la única razón de su existencia..

__ Podré volver a caminar?__ su mirada se dirige hacía los pulcros vendajes y acaricia sus piernas, su vista se posa nuevamente en mí con anhelo y esperanza.

__ Claro que lo harás, princesa.. __

Y así como ella me ha regalado su primer sonrisa, yo le muestro la mía.

Es palpable su asombro junto con otro sonrojo a esta altura deberé de tomar su temperatura porque cada vez se pone más y más roja, la adoro, amo su inocencia, esa dulzura, eres tan deliciosa angelito.

__  Volveré a competir. __ susurró totalmente esperanzada.

Y en mí cabeza siento un click y en mi hipotálamo se crea un reloj, el cual, se detiene en este preciso momento.

La imágen de ella corriendo, entrenando para lo que se ha estado perfeccionando desde muy pequeña el anhelo de ser una gran atleta.
Mí mente se descontrola y pese a que estoy inmóvil, estoy tan furioso, ella está afirmando que volverá a su antigua vida una vida sin mí.

Mí ojos bajan hacía su pecho y se enfocan allí donde reside su órgano vital.
Hay veces en la que muero por sacar mi fiel bisturí y abrir tus suaves carnes, dejar expuesto tu tórax para así poder ver ese corazón en el que debería de grabar mi nombre así me ames de una maldita vez!

Porque desde que te he proclamado como mía, tu vida pasada ha dejado de existir y con ella, Kagome Higurashi..

A caso no me quiere en tu vida? Por qué, recuerdas aún el pasado? Mis manos han comenzado a temblar erraticamente.

Me levanto firme pero por dentro tambaleo, no puedo controlar mi ira. Ni si quiera la miro, y una lampara que está al lado de la puerta recibe toda mi incontrolable furia porque la tomo y la arrojo con fuerza contra la pared.

La escucho dar un leve grito de espanto y mis puños se fruncen saliendo de allí, colocando llave y candado a su puerta para luego atravesar el pasillo e insertar el código de seguridad.

No puedo permitir que tengas ese tipo de pensamiento en tu mente. En tu vida solo debo de existir yo. No hay pasado, no existe más,  solo debe de pensar en su presente y su futuro junto conmigo.

( y si nunca llega a querernos?)

Me tomo la cabeza con mis dos manos y cierro los ojos con fuerza porque aquella pregunta ha retumbando fuertemente.
Camino sin mirar y me voy golpeando con todo lo que se me atraviesa hasta que siento dar con algo firme, el gran espejo me frena, puedo ver cómo en mi rostro se refleja mi furia.

Pego mis manos contra este y me observo, me detesto, me aborrezco cuando por mi mente pasa su rostro opacado por el pánico y el temor.

__ Kagome.. Kagome .. Kagome ___

Debes entender que eres mía!

( mía, mía, solo mía!)

1, 2 , 3, 4 y en el quinto golpe que le doy al espejo con mi cabeza siento como crujen los vidrios y el líquido caliente comienza a correr por mí frente, me veo borrosamente cubierto de sangre .
Paso mi mano por mi piel y llego a sacar un pedazo de vidrio incrustado, doy unos pasos hacía atrás tambaleando en el proceso, el sofá me parece a kilómetros de distancia y caigo con todo mi peso golpeando con fuerza contra el suelo, haber estrellado mi cabeza contra el espejo, no ha sido buena idea, deseo ponerme en pie, más no puedo.

Mi sangre brota a borbotones, siento un fuerte zumbido en mis oídos.
Mis ojos se van cerrando lentamente, mi mente me juega una mala pasada nuevamente y lo último que diviso.

Es a ella...

Continuará...

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