Después de mandarle un mensaje a los chicos, intente dormir un poco, Nos reuniríamos a las seis.
Llegue a casa a las 2:30 de la mañana, son las 4:12 y aún no puedo pegar el ojo. Estoy muy preocupada por los chicos ¿si les hacia algo? Que pregunta... ¡Seguro que les hizo algo!
Desde que llegue he Estado pensando en algo para ayudarlos. William no tendría tanto control en ellos si no tuvieran el estímulo eléctrico. Un momento ¡eso es! Si le quitamos el estímulo eléctrico a los chicos, William ya no tendrá control de ellos. Fritz y Michael podrían quitarse los, son unos genios de la robótica.
Me levante de la cama y tome mi libreta, tenía que empezar a planear, espero que los chicos puedan ayudarme.
Estaba tan metida en el plan, que el tiempo paso tan rápido que no me di cuenta. Solo me entere que eran las seis de la mañana cuando sonó el timbre.
Deje de lado el cuaderno, me cepille un poco el cabello y fui a recibir a mis compañeros. Aun estaba preocupada por los animatronicos, pero estaba emocionada por decirle a los chicos lo que descubrí.
En la puerta estaban Kevin, Fritz con su portátil, Michael y Axel, supongo que los demás llegaran un poco más tarde. Me hice a un lado para que pudieran pasar y tomas asiento en la Sala.
— bien — veía que algunos aún estaban algo somnolientos — ¿quieren tomar un café o algo hasta que lleguen los demás?
— Yo, no pude conciliar el sueño — respondió Fritz.
— esta bien, ya vengo — fui a la cocina.
Mientras preparaba el café y por lo menos algo de jugó para los demás, el timbre volvió a sonar.
— ¡abran alguno de ustedes! — grite desde la cocina.
— ¡voy yo! — respondió Michael del mismo modo.
Termine de preparar las cosas y fui a la Sala, donde ya estaban Jeremy, Mike y Andrew. Todos tomaron asiento y me prestaron atención.
— bien — solté un suspiro — descubrí muchas cosas esta noche, la principal, quien es quien nos está persiguiendo.
— ¿en serio? ¿Quien? — pregunto Axel, por un momento se le había ido ese humor de perros.
— tal vez sea un poco difícil para ustedes, Michael y Axel — los chicos no parecían entender muy bien a lo que me refería — Ennard me dijo que la persona que creo a los Funtime y que lo asesino, es William Afton.
— no... Es imposible que fuera mi padre — respondió Michael en Shock — ¿p-por que mataría a su propia hija?
— el creó a los Funtime, pero el alma que estaba dentro de Ennard estaba tan resentido que modificó a Baby para que atacara a Elizabeth — respondí — el me lo confeso todo.
— además... — Fritz abrió su portátil y mostró la pantalla a todos — la ubicación del tipo del teléfono confirma lo que dice ___.
Marcaba un punto en el plano, en la vista 3D del plano, se podía ver una casa, la cual distinguimos como la antigua residencia Afton. Parecía abandonada, el lugar perfecto para esconderse.
— marca que esta varios metros bajo el suelo — agregó el pelinaranja.
— Hermano... — Axel coloco una mano en el hombro de Michael, el parecía estar en shock.
— E-esta en el circo — murmuro sin apartar la mirada del monitor — e- entonces... Papá es...
Michael no pudo más, se cubrió la cara con las manos y rompió en llanto. Axel abrazo a su a hermano.
- ¿podrían darnos  un momento? - asentí y guié a los chicos hasta mi cuarto, era un momento difícil para ellos.

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Llevo 7 años viviendo con Michael, nunca la ultima vez que lo vi así de mal fue cuando nos esteramos de la muerte de mamá. El me ayudo en todo momento, era mi turno de hacerlo ahora. Se había quitado los lentes y se apoyo en mi hombro, yo solo le pasaba la mano por la espalda, tratando de que se calmara.

- yo... ya sospechaba que papá andaba en algo raro - sollozo - pero no quería ver la realidad...
- eras muy apegado a el, a mi también me hubiera costado ver la realidad - en ese momento, solo quería que mi hermano se sintiera mejor.

No se cuanto tiempo paso, tampoco me importaba. Michael se aparto y se limpio las lagrimas mientras se volvía a colocar los lentes. Ya se había desahogado un poco.

- vamos a buscar a los demás - dijo mientras se levantaba.

Me levante y fuimos hacia el cuarto de ___. Tenia la puerta abierta, pero aun así podíamos escuchar de lo que hablaban.

- si Michael, Axel o algunos de ustedes ya no quiere seguir con esto, lo entiendo, pero no me pidan a mi que termine con esto - pude distinguir que hablaba ___ - no después de lo que vi en la noche.

Se hizo un silencio ¿en serio planean dejarla sola en el peor momento?

- todos tenemos una historia inconclusa en ese lugar - escuche que hablo Mike - ya no es por la investigación o porque un asesino esta detrás de nosotros, es para hacer las cosas bien.
- no importa lo que suceda, puedes seguir contando con nosotros - dijo Fritz, parecía bastante animado.

Mire a mi hermano, el miraba a la puerta, parecía perdido en sus sentimientos.

- ¿que dices? ¿seguimos en el juego? - pregunte colocando una mano en su hombro.
- nuestro padre tiene que pagar por lo que hizo - Michael levanto la mirada y me vio - tenemos que ayudar a que eso suceda.

___

Cuando empece todo esto, creí que estaría sola, pero ahora veo que tengo personas en las que confiar. Tal vez nunca hubiera llegado tan lejos sin su ayuda.
Tocaron la puerta del cuarto, Jeremy la abrió, dejando ver a Michael y Axel. Aun tenia los ojos rojos, tal vez estuvo llorando mucho. Es de esperarse, yo reaccionaria igual si me enterara que mi padre es un asesino.

- Michael ¿te sientes un poco mejor? - pregunte preocupada.
- si, estoy mejor - se acomodo los lentes - escuche lo que dijeron, Axel y yo seguiremos en esto.
- me alegra escuchar eso - sonreí leve, pero esa sonrisa se transformo en confusión al escuchar el timbre.
- ¿esperabas a alguien? - pregunto Jeremy.
- no,  voy a ver quien es - dije mientras caminaba hacia afuera del cuarto.
- ten cuidado - dijo Kevin, parecía preocupado.
- no creo que el asesino toque el timbre antes de matar a su victima - dije algo eseptica.
- pero si antes de secuestrarla - respondieron al mismo tiempo Mike, Fritz, Andrew y Axel.
- solo por si acaso... ¿alguno puede ocultarse en la cocina? - pregunte con una sonrisa nerviosa.
- yo voy contigo niña - Axel también salio del cuarto.

Los dos bajamos al primer piso, el se oculto en la cocina. Justo volvió a sonar el timbre cuando iba a ver en la puerta. Por mi fortuna, solo era una mujer, de lo poco que lograba ver, es que era mas alta que yo, tenia unos bellos rizos rubios y un especie de chaleco de un verde algo opaco.
Algo confundida abrí la puerta. Efectivamente, era una mujer, estaba vestida con lo que parecía ser un traje de negocios y un sombrero que cubría la mitad de  su rostro.

- disculpe ¿necesita que la ayude en algo? - pregunte algo confundida.
- me han dicho que una joven modista trabaja y vive aquí - respondió con una sonrisa, su voz se me hacia familiar.
- si, pero en este momento solo estoy aceptando cosas fáciles, como reparar vestidos o faldas de uniformes - le respondí a la señora, aun no me falta el dinero, pero se veía como alguien que necesitara un gran vestido de gala.
- oh, entonces ¿podrías reparar la falda de mi vestido? es que mi gata lo ha arruinado un poco - recién me percataba que llevaba un vestido en sus manos, si fuera un arma ya estaría muerta.
- pase y déjeme ver si puedo ayudarla - me hice a un lado y la señora paso.

Ella me entrego el vestido y lo revise un poco. Era un estilo que se había puesto de moda hace diez o viente años, no lo recordaba con claridad. Lo que pude notar, es que las rasgaduras de la falda no estaban hechas por un gato, parecían tijeras. Ademas, este vestido tenia un aura algo pesada. Esto no me esta gustando.

- vaya pequeño desastre que hizo el gato - dije tratando de sacar un pequeño tema de conversación - pero no es imposible de reparar, solo tendría que rehacer la falda ¿lo necesita pronto?
- tranquila, es para dentro de un mes - ella volvió a sonreír - ¿lo puedes hacer?
- claro - esta mujer se me hace cada vez mas familiar.
- muchas gracias jovencita - ella saco algo de dinero de su bolso y me lo entrego - aquí una pequeña seña.
Casi me caí de espalda ¡con esa cantidad se podría comprar un vestido de diseñador!
- o-oiga señora - estaba atónita, jamas había tenido tanto dinero en mis manos.
- por favor, dime Rebeca - me interrumpió.
- rebeca, esto es mucho dinero, mas de lo que sale la tela y repararlo - dije aun sorprendida.
- lo se, tambien es una pequeña ayuda - ella camino hacia la salida - cuento contigo para dejarlo perfecto ___*
- ¿que? - no podía creerlo, me había llamado por mi apodo, pero Rebeca justo se fue - ¿que diablos..?
- ___ - Axel salio de la cocina, parecía estar casi tan sorprendido como yo - esa mujer no se llama rebeca.

1543 palabras! Es el capítulo más largo que he hecho en toda mi vida! Y encima con esto todabia no se me seco el cerebro, sigo escribiendo el capítulo 26.