Después de esa conversación mejoramos como pareja, ya no peleábamos, hablábamos todo lo que nos molestaba nos quedamos algunas noches en su casa y luego en la mía, almorzábamos junto en el restaurant o en la agencia, desayunábamos juntos, y nos íbamos juntos donde fuera, el viernes prepare un pequeño bolso, lo subió a su auto junto con el de él, anduvo con eso todo el dia y apenas yo salí del instituto nos fuimos camino a Busan, reímos en el camino, comimos, cantamos, bailamos, llegamos a una casa muy cerca de la playa, bajamos las maletas y algunas cosas para comer que compramos y las metimos a la casa, ya era tarde y no veía nadie en el lugar, cruzamos la calle y nos sentamos en la arena, él se sentó atrás de mi abrazándome y metiéndome dentro de su chaqueta, era muy romántico estar ahí, así, gire mi cabeza para besarlo y luego mi cuerpo completo, recostándome sobre él, nuestros calores subieron mucho, mis manos desabrocharon su pantalón sus manos estaban bajo mi polera tocando mis senos, deseaba que ese dia al fin me hiciera suya, desde que nos vimos no lo ha intentado, y me gustaba porque disfrutábamos de los momentos nuestros, en una relación no todo es sexo.

Nos detuvimos mirándonos, agitados y excitados, él dijo vamos y nos levantamos de la arena camino a la casa, me abrazaba, camine frente a él escondiendo el bulto en su pantalón, y con cada paso que dábamos, el me rosaba lo que hacía que mis hormonas se revolotearan más de lo que ya estaban, apenas entramos por la puerta el me jalo a el besándome desesperado, lo estábamos, había pasado mucho desde que no estábamos juntos, me quito la ropa y yo la de él, dejándola dispersa por toda la casa en la que nos quedamos, deliciosamente me hizo suya, al fin, más de una vez, cuando nuestros cuerpos se recuperaban volvíamos a intentarlo.

Después de unas veces descansamos abrazados, besándonos, le pedí que me recordara de comprar píldoras y rio nervioso. Dormimos hasta tarde, comimos y salimos a recorrer lugares maravillosos juntos, recorrimos BIFF Square, las casas de Gamcheon, subimos a la torre de Busan, mirando la bella ciudad de noche con el mar de fondo, las grandes tiendas de Shinsegae. Y cada vez me enamoraba más de él, por el dia disfrutábamos momentos memorables, sacándonos fotografías juntos y por las noches disfrutábamos de nuestros locos deseos. Pero el hermoso fin de semana se acabó y tuvimos que regresar a Seúl, en el camino compramos pizza y llegando a su casa la comimos reímos, revisamos las fotos que saco, y nos fuimos a la cama.

Los días siguieron pasando y mi cumpleaños llego, mi hermana organizo algo en su casa, donde los invito a todos. Nos preguntaban si volvimos a estar juntos y dijimos que sí, llevábamos unos días, hobi dijo, entonces son novios y negamos, a la vez dijimos estamos saliendo, y Nam respondió, llevan más de un año saliendo, reímos, y me quedo pensando en eso.

Jimin ya no se me acercaba, no en ese sentido por lo menos, pero tampoco volvimos a ser amigos, el fin de semana fue corto, más porque el debió trabajar el sábado hasta muy tarde, luego vino las 2 semanas en que debió ausentarse para grabar unos capítulos, el dia que volvía yo me quede en su departamento, escribía para mi clase del lunes pensando en que cuando llegara lo besaría y llevaría a la cama, pero, recordé que no había tomado mis píldoras el fin de semana en Busan ni en todos los días que hicimos el amor, un frio recorrió mi cuerpo y me entro la desesperación, era muy tarde, le llame preguntando si ya se venía.

Jk – voy llegando, entrando al estacionamiento. ¿Por qué, llego mama?

So –no, espérame en el auto, necesito salir.

Jk – amor me asustas, ¿todo bien?

So – espérame, estoy bajando, -subí al elevador, apreté el botón del estacionamiento y bajo, rogaba a Dios que no pasara nada, apenas las puertas se abrieron vi su auto, subí- necesito ir a una farmacia –me miro asustado y manejo, no dijimos nada en todo el camino, me llevo a la más cercana, baje comprando píldoras y pedí 3 test de embarazos. Diferentes marcas. Del más económico al más caro. Sudaba, tiritaba, pague con mi tarjeta, tome las cosas me gire y camine, la chica me hablo, recordándome de mi tarjeta la tome y camine de nuevo, subí de nuevo al auto, frotando mi frente, Jeon froto mi espalda intentando tranquilizarme, que se supone que haría, nosotros estábamos juntos pero no estábamos comprometidos, teníamos el problema de su madre encima de nosotros, si cuando ella se enteró que salíamos se alteró y debí irme del país que se supone que haría ahora que probablemente este embarazada. Subimos al elevador, yo me sentía afligida, me imagino que él estaba preocupado, no lo vi, no podía ver sus ojos, no en ese momento. Camine muy rápido a su departamento, dejándolo atrás abrí la puerta, camine y luego entro el, me encerré en el baño, orine en ellos, me senté en el piso esperando el tiempo de espera nerviosa, frotando mis manos, deje pasar un tiempo más, me levante nerviosa, ansiosa – mierda, mierda, mierda, mierda. –alce mi voz, los tres test salieron positivos, camine de aquí para allá dentro del baño, el golpeo la puerta despacio, tímida abrí la puerta, el me abrazo – ahora si tendremos hijos reales –el carcajeo-

Jk – eso me pone feliz. ¿ahora si aceptas ser mi novia? –reí y lo apreté a mí.

So – tengo miedo –llore.

Jk - ¿Por qué amor?, estamos juntos, seremos padres, -tomo de mi cara limpiando mis lágrimas.

So – tu madre hará todo para separarnos. estoy segura, y ahora si no puedo estar sin ti. no podre sola.

Jk – no lo voy a permitir, no de nuevo, lucharemos juntos, lo prometo. Casémonos en secreto.

So – estás loco –reí limpiando mis ojos- hay que pensar en algo. Mañana iré a pedir hora al médico.

Jk – te llevo –negué-

So – te pueden ver, le pediré a macarena que me acompañe, ella ha tenido 3 bebes debe saber más que yo.

Jk – bien, pero desde la próxima iré contigo. Siempre, me da igual si me ven o nos sacan fotos, y deja de llorar, vamos a ser papas –sonreí, tomo de mi cintura levantándome y girando- seremos padres .... Me harás padre –beso- me haces feliz Sofía. Completamente feliz. Wow, me recibiste con una hermosa noticia. Nos vamos a casar. –me soltó quitando su ropa-

So –yo no te he dicho que si –me saque mi ropa-

Jk – pero lo harás, lo sé, tu corazón está completamente derretido y aferrado a mí –entro a la ducha-

So – ay no te creas, puedo volver a congelarlo. –entre con el riendo-

Jk – lo volveré a derretir si en necesario. –dio el agua para ducharnos- te casaras conmigo y punto.

So – Mm ...Mm –negué- tú no puedes decidir eso por mí.

Jk – estoy muy seguro que cuando te lo pida dirás que sí, me abrazo, el agua caía sobre su espalda me beso despacio- cásate conmigo –negué deslizo su mano de mi cadera a mi trasero, la separo y azoto, gemí – cásate conmigo –recalcó, volví a negar me volvió a golpear, gemí un poco más excitada que la vez anterior – es la última vez que te lo pregunto, piénsalo bien –lo bese para que no lo preguntara. Enrede mis manos atrás de su cabeza, y no quise soltarlo del beso, tomo de mis piernas, levantándome las enrede en su espalda, pujo solo un poco y entro en mí, gemí soltando el beso, y volví a besar, volvió a entrar más fuerte y más rápido apoyo de mi cuerpo en la pared de la ducha, y fue más fácil para el envestirme, mi cuerpo se contraía, levante mi cabeza terminando para él, soltando sus labios – cásate conmigo –lo mire interrumpiendo mi orgasmo, entro tan fuerte que me hizo sobresaltar.

So – me caso contigo –esta vez me beso el entrando seguido a mi cuerpo, me hizo sentir mejor con el embarazo, y ya no sentía miedo por lo de su madre, si debíamos enfrentarnos a ella lo haremos, orgullosos de lo que sentimos por el otro. Se separó de nuestros labios, y terminamos vibrando para el otro – te amo Jeon –nos miramos y sonreímos, aun sin asimilar la noticia que recibíamos.

Pusimos nuestros pijamas, el seco mi cabello, sentándose atrás de mi con sus piernas cruzadas, al terminar el me enredo con ellas me abrazo, poniendo su mentón sobre mi hombro, mostrando entre sus dedos un anillo, le pregunte donde tenía eso riendo nerviosa, dijo que había comprado hace mucho, pero como no acepte ser su novia nunca se atrevió a pedirme antes que nos casáramos, tomo de mi mano y deslizo por mi dedo, prometiendo que me hará la mujer más feliz del mundo, beso mi mejilla y nos recostamos a dormir, pose mi cabeza en su pecho, acariciando su pectoral con mis dedos, hipnotizada por el anillo en mi dedo, sin dejar de sonreír ni un momento.