La pequeña y adorable princesa parecía un pequeño tomate en esos momentos.

Ante ella tenía a los dos hermanos mayores, hijos de Beatrix, mirándola atentos y...con su camisa blanca abierta y mojada marcando sus torsos.

-no pases tan fuerte la esponja por su espalda, inútil!, su piel es sensible -regaño el azabache al rubio que bufo.

-no seas molesto, no lo hago con tanta fuerza.

La cara de lisanna se puso más colorada al escuchar su charla y mal pensarlo. Con su mente fujoshi no podía parar de mal pensar lo que ellos hablaban.

-"c-cómo llegamos a esto?".

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Luego de que shu le dijera que la iba a bañar ella se avergonzó por completo pero luego lo pensó bien y temió nuevamente por su vida. Si él la bañaba corría el peligro de morir ahogada, primero con ayato y ahora shu!, el mundo quería verla en momento suicidas o qué.

-mmm -se exaltó cuando el rubio la miro atento -no sé de bebés supongo que...debo de preguntarle a reiji.

Un sonrojo volvió a cubrir sus mejillas al imaginar a esos dos en paños menores.

-"los soñé en mi vida pasada en esta situación pero era entre ellos no conmigo!, maldición mi dignidad se va al demonio, aunque ejejeje~ nfu~ puedo imaginarlos juntos y...será que podré juntarlos?".

Parece que su lado fujoshi volvía a salir y estaba fuera de control al imaginar a uno de sus shipp en el baño juntos y semi desnudos.

Ni siquiera se dio cuenta cuando el rubio apareció en la habitación del oji fucsia, el cual miró a su hermano con irritación y dejó su libro de lado.

-hn, acaso eres tan inútil que no puedes hacerla dormir?.

El mayor ignoró su insulto y cerró sus ojos agarrando mejor el cuerpo de la bebé mientras ella apretaba su camisa al pensar que se podría caer. Si bien el mayor temor fue con ayato ahora no se podía confiar con el rubio.

Ninguno de ellos trató con un bebé antes y al ser ella quien era su nuevo "juguete" tenía miedo que la dejen caer. No podía confiarse en ninguno.

-lisanna no puede dormirse así que pensé que sería mejor bañarla después de todo leí por ahí que un baño.... ayuda a dormir a los bebés -esquivo la mirada de su hermano mientras que la albina lo miraba divertida.

Parece que el rubio investigó en secreto sobre bebés, y no era el único.

-eso es verdad -el azabache se ajustó los lentes y se levantó de su asiento -supongo que no leíste cómo bañar a un bebé, así que te ayudaré.

Ella lo miro sorprendida y luego miro a shu que tenía una leve sonrisa. Era posible que aquellos dos se hayan unido por solo unos momentos por ella?.

Era increíble.

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Y más increíble era la imagen que tenía ante ella.

Los vampiros estaban solo con su pantalón negro y su camisa blanca medio desabrochada dejando ver un poco sus torsos.

Los tres estaban en el baño del mayor, el segundo se estaba encargando de que el agua para la menor estuviera templada mientras que el rubio la dejó encima de unas toalladas mirándola atento verificando cómo sacarle la ropa.

Después de todo debía de sacar la ropa con una mano y la otra sostener su cuerpo. Cómo diablos hacían los padres para bañar a sus hijos?.

De tan solo pensarlo le parecía problemático.

-el agua ya está.

El azabache miró a su hermano en blanco, el rubio estaba teniendo una competencia de miradas con la albina.

Cómo llegaron a eso?.

-oe, es posible que ella no quiera que la veamos desnuda? -rompio el contacto visual con su hermana para mirar a su hermano menor el cual suspiro ante lo que dijo.

-eso es estupido, es una bebé "aunque no me extrañaría que ella demuestre su desagrado a las cosas, como ahora, ella es alguien peculiar".

Decidió ignorar sus pensamientos y se acercó a ellos.

Los dos tragaron saliva ante la mirada neural y fija de la menor. En verdad parecía que no quería que le vean desnuda.

-"por kratos, hera, hades, ares, quien sea!, pero que estos dos no me desnuden!".

La menor estaba rogando a todos los dioses que conocía para que sus hermanos no la vean desnuda, una cosa es que la hayan visto desnuda su "madre" y las sirvientas pero ellas son mujeres. Ellos son hombres y son sus hermanos!. Son los vampiros sádicos que de seguro se atreverían a burlarse de ella en el futuro.

Se exaltó cuando reiji la agarró con cuidado de la espalda y empezó a subir su pijama, ella apretó sus puños con temor y miro al rubio que también estaba sacando su pijama con cuidado.

-ten cuidado con su cabeza, es lo más sensible de su cuerpo.

-ya lo sé, tú ten cuidado cuando la sujetas.

-hmp!.

Entre pequeñas peleas le sacaron el pijama y sintieron que estaban a punto de chillar como laito cuando la vieron en pañal y mirándolos con el ceño fruncido y un pequeño sonrojo. Su cuerpito con rollitos y esa carita enojada les daba ganas de hacerla reír a mimos.

Cerraron sus ojos tratando de controlarse, esa pequeña bebé adorable y hermosa los estaba convirtiendo en otra persona. Ahora entendían al trillizo mayor.

En cuanto a lisanna cada vez estaba más roja como si estuviera expuesta al calor más fuerte de su vida. Por lo menos estaba con su pañal puesto pero eso no sería por mucho tiempo.

-bien, ya preparé las cosas que vamos a usar -el azabache agarró a la menor con cuidado -sacale el pañal, debemos de bañarla rápido no sabemos si podrá estar limpia por mucho tiempo.

Trató de no hacer una mueca de asco al imaginarse manchado de las necesidades de la bebé pero no pudo.

-...bien -aún con duda por la mirada de la albina empezó a sacarle el pañal mientras ella cerraba sus ojos con fuerza.

Ahora estaba totalmente expuesta ante sus dos hermanos. El mundo la odiaba.

Maldecia a ese hombre que le dio otra oportunidad de vivir!.

Su cuerpo se relajó inconscientemente cuando sintió el agua tibia contra su cuerpo, el agua le llegaba hasta su ombligo.

-y este shampoo? -el rubio miró curioso el shampoo.

-es para bebés, su piel es más sensible y ese no le irritara los ojos si por accidente le cae en los ojos mientras la bañamos -explicó mientras agarraba un poco de agua con su mano y la dejaba caer con suavidad en la espalda y cabeza de lisanna.

Ella al poder controlar su vergüenza abrió un poco los ojos y se sorprendió cuando vio el rostro nervioso del azabache. Luego sonrió levemente y cerró sus ojos con suavidad al sentir que el rubio pasaba un poco del shampoo en su cabello.

Parece que en verdad estaban tratando de cuidarla lo mejor que podían. Tal vez, con su llegada cambiaría muchas cosas. Incluso el trato entre sí que tenían los hermanos.

No se había dado cuenta pero un sentimiento de alivio y alegría surgió en ella cuando notó aún más que esos vampiros seguían teniendo un poco de inocencia y humanidad a pesar de todo lo que pasaron.

Luego de pasarle el shampoo y acondicionador de bebé, reiji agarró un jabón con un dibujo de un pato.

Por qué siempre le hacían dibujos así a los jabones para bebés?. Era una duda que lisanna no podía resolver.

Se exaltó cuando sintió el jabón pasar por su espalda para luego el azabache pasar sus manos por abajo de sus axilas. A medida que su mano pasaba por su cuerpo su cara se iba volviendo más roja.

Ojalá no recordará su pasado hasta los 5 años, era horrible ser una adulta en el cuerpo de un bebé.

-el agua se está enfriando -el rubio sostuvo con cuidado a su hermana mientras el azabache enjabonaba su cuerpo entero.

-y abre un poco la canilla -habló como si fuera lo obvio.

El oji celeste sostuvo con una mano a lisanna y acercó la otra a la perilla.

Al acordarse reiji lo miro rápido.

-espera!, abre la otra perilla....!!!!

Los tres se quedaron en shock cuando el agua cayó de la regadera mojando por completo a los hermanos.

-...maldición!, eres un inútil!.

-que ruidoso, yo no tuve la culpa.

-claro que sí!, rubio teñido!.

-soy rubio natural, no tengo la culpa que envidies mi cabello.

-maldito rubio!.

Apretó con fuerza el jabón en su mano mientras el rubio solo cerró sus ojos ignorandolo.

Jajajaja!.

Los dos se quedaron en shock cuando escucharon la risa infantil y alegré de la menor. Al mirarla la vieron reír con fuerza y alegría.

Era la primera vez que reía.

Sus mejillas estaban sonrojadas y al abrir los ojos los miro con una enorme sonrisa dejando ver sus encías aún sin dientes.

Ellos sonrieron sin poder evitarlo y suspiraron divertidos.

La sonrisa de lisanna la ganaron ellos. Ellos pudieron ver la primer risa de su hermana.

-...parece que tendré que bañarme por tu culpa, pequeña ruidosa -peino hacia atrás el cabello de su hermana haciendo que ella lo mire sonrojada pero con una pequeña sonrisa.

-hn -el azabache solo sonrió y siguió su labor.

Al reaccionar lisanna se avergonzó pero miro satisfecha la sonrisa de sus hermanos. Por lo menos los hizo sonreír.

Aunque su lado fujoshi no tardó en aparecer arruinando el tierno momento.

-"absjabssnsb están mojados, shurei!!!kyaa~".

Ellos volvieron a pelear mientras lisanna fantaseaba con la imagen de esos dos.

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Los hermanos suspiraron cuando terminaron de bañarla y la dejaron encima de la cama de shu con una toalla cubriendo su cuerpo. Solo faltaba cambiarla.

Ella al haber superado su vergüenza o mejor dicho derrotar a la voz que le hacía acordar que esos dos vampiros habían visto su cuerpo desnudo y tocando lugares que ella ni siquiera tocó. Los miraba divertida por verlos en ese estado.

Tal vez podría olvidar su vergüenza y aprovecharse de ellos o tratarlos indiferentes y seguir con su plan de huir de toda la trama dramática que vendría a futuro.

-nunca pensé que bañar a un bebé me cansará tanto -bostezo el rubio.

-ya apurate a ayudarme a cambiarla, estoy cansado.

Entre los dos volvieron a cambiarla aunque se les complicó cuando tuvieron que ponerle talco en casi todo su cuerpo.

Jajajaja!.

Ella se volvió a reír de ellos al verlos ensuciados con el talco mientras ellos trataban de ponerle el pañal y terminar con todo eso. Al ponerle bien el pañal le pusieron su pijama y volvieron a suspirar cansados viendo un poco satisfechos a su hermana que seguía riendo y alzaba sus bracitos feliz.

Si bien era tranquila y neutral ella seguía siendo una bebé.

-bien, mi trabajo está hecho.

El azabache ajustó sus lentes y luego de mirar a su hermana les dio la espalda a punto de desaparecer.

-reiji -el nombrado miro de reojo al rubio que estaba serio -gracias.

El azabache lo miro por unos segundos para luego mirar hacia el frente.

-hn...de nada, vago.

Desapareció ante la vista del rubio que sonrió de lado. Luego miro a su hermana y tomó su mano entre sus dedos.

-quién pensaría que gracias a ti pude acercarme a mi hermano.

Ella solo le sonrió alegré y el rubio besó su pequeña mano.

-quédate un rato aquí mientras me baño -la dejo en medio de la gran cama rodeada de almohadas y al entrar al baño dejo la puerta abierta para poder verla por si algo pasaba.

Al quedar sola se apoyó por completo en la almohada y miro al techo cansada.

Ahora entendía por qué los bebés se cansaban tanto luego de un baño.

-"por lo menos no decidieron bañarse conmigo ahí si que me hubiera desmayado...aunque" -miro hacia la ventana donde estaba el sirviente de su padre viéndola fijamente, volvió a mirar al techo -"no pensé que gracias a mi ellos dos se acercarían, lo esperaba de los trillizos o Subaru pero no de ellos dos, después de todo reiji odia a muerte a shu...parece que en serio cambiaran las cosas".

Sin poder evitarlo bostezo y poco a poco sus ojos se fueron cerrando hasta caer en los brazos de morfeo.

El albino oji ámbar sonrió levemente al recibir las memorias de su sirviente.

-lisanna...en verdad harás un gran cambio en esos niños...espero que seas un cambio en la vida de todos.

Miro la luna en el cielo nocturno y cerró sus ojos apoyándose en su asiento.

Desde que su hija nació, sentimientos humanos lo inundaban día a día.

Cuando el rubio salió del baño miro a su hermana que estaba durmiendo plácidamente en su cama. Apagó las luces y sacó las almohadas de un lado para acostarse a su lado.

Se tapó un poco y se quedó mirándola un rato apoyado en uno de sus brazos. Veía atento su ceño fruncirse por unos segundos para luego apretar sus puños y mover sus pequeños pies.

-...cómo alguien tan angelical puede pertenecer a esta familia?.

Miro atento su rostro y besó su mejilla con suavidad.

Observó por última vez a su hermana y poco a poco fue cerrando sus ojos.

Lo había decidido, protegería a ese pequeño angelito a su lado. Ella no merecía sufrir. Ella merecía ser feliz.

Por primera vez luego de años se sintió aliviado al lado de alguien. Se sintió feliz.

See you...

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