Encontró al chico quien se mantenía tal vez escondido entre el almacén intentando limpiarlo, fallando al primer intento debido a que mojo y casi hace caer a varios compañeros de trabajos. Sostuvo el trapeador entre sus manos y lo ayudo a limpiar para después llevárselo a un lado del estante de productos de comida.

— Este carácter dice: Fecha. Y este otro dice: Lote.

— Son iguales. — le respondió Seungcheol.

Tomó dos frascos, cada uno contenía caracteres chinos describiendo el producto, tenía que enseñarle a separar los productos en base a caducidad. Aunque Seungcheol verdaderamente no lograba distinguir o diferenciar los caracteres que le mostraba, le hablaba en inglés y le repetía la pronunciación en mandarín para que se lo aprendiera. Pero era un caso distinto porque Seungcheol seguía respondiendo: — Son iguales.

Suspiro dejando caer los frascos, no imagino que el primer intento sería realmente difícil.

Seungcheol miró a su compañero de trabajo. Estaba asombrado, ¿Cuánto sabía de mandarín? Tan vez más avanzado que Seokmin, quién era su amigo. A veces se arrepentía de acompañarlo, estaba causando problemas por no saber nada. En Beijing nadie hablaba inglés, sólo mandarín. De Jihoon le parecía raro, ¿él era un estudiante o un aspirante como ellos? Porque se veía joven, de un tamaño bajo, bonito y delgado.

Con cuidado tomó prestado uno de los frascos que Jihoon sostenía, las analizó detenidamente y sonrió. Si, es difícil.

— Esto es difícil, ¿Como aprendiste mandarín?

Oh, estaba siendoinformal.

Tomo prestados algunos productos caducados marcando los caracteres en pot-it y dejo a Seungcheol mirándolos, casi como a un niño regañado quien le enseñaba las tablas.

Por un momento recordó a su hijo, al menos Minghao era mucho mas capaz de aprenderse las cosas por sí mismo. No quería decir que Seungcheol fuera tonto, solo que le desesperaba en cierto modo. Tal vez porque su hijo creció y aprendió como cualquier otro, mientras que Seungcheol era un adulto que se debía acoplar al idioma desde de cero.

Mientras Seungcheol seguía pegado a los post-it intentando diferenciarlos y leer la traducción en inglés, desvió un momento para mirar a Jihoon, tal vez se sintió inútil como niño chiquito que debían cuidarlo y Jihoon era la madre. Solo esperaba no ser golpeado o regañado por no avanzar como esperaba su compañero.

Suspiro tanto que se pregunto si sus pulmones aguantarían tanto aire, era aburrido admirar los caracteres, eran trazos tan difíciles y complicados de hacer. Pronto Jihoon lo mando a hacer planas sobre hojas reutilizables, mientras escribía el carácter debía poner la traducción a un lado.

Después de ello le dejo la pequeña tarea de repasar y seguir haciendo planas sobre esas hojas, le dolía la mano y probablemente estaba siendo derrotado. No intercambiaron muchas palabras durante su 'clase de diferenciar caracteres chinos', Jihoon solo le dictaba, ordenaba hacer planas y escuchaba algunas de sus frases para luego irse a su respectivo trabajo. Lo estaba admirando, siendo tan grande estaba siendo humillado. Dejo de ver a su amigo Seokmin, al parecer paso de ser cajero a ser paquetero, están feliz por el y un poco celoso, mientras recibía clases, Seokmin paseaba por Beijín.

Era casi media noche, pese a ser un trabajo en tienda, los miércoles se debían cubrir dos turnos, Seungcheol se sentía cansado, con sueño y agotado, su espalda dolía y solo podía sentir envidia de sus demás compañeros porque ellos parecían estar bien. Tal vez también se debía que por ser media noche la mayoría de los clientes bajaba y todos podían darse un poco de descanso.

— Puedes descansar un rato si deseas. —dijo Jihoon asustándolo, porque estaba comenzando a dormirse entre el montón de hojas. — Ve al baño y enciérrate, así nadie te vera que duermes en tu horario.

¿Realmente se podía hacer eso?

— ¿Y no hay cámaras de seguridad en los baños?

— Son los baños —respondió. — Ya lo hice un par de veces, y otros también. Ve a descansar diez minutos.

Jihoon desapareció después de unos minutos. No esperaba que le dieran un pequeño tip secreto, lo cual agradecía infinitamente.

Hizo lo que le ordeno, se encerró en el baño y durmió un poco.

Solo un poco, puso una alarma para para despertar seguro.

Estaba bien, podía resistir venir al baño cinco o diez veces durante la madrugada para soportar los dos turnos.

Seungcheol se pegó a Jihoon preguntando sobre los demás caracteres, logro aprenderse y diferenciar entre lote y caducidad, era un avance, o casi un avance. Porque ahora tocaría aprenderse los siguientes: frutas, verduras, utensilios de cocina, ropa, etc.

Por un momento el chico quiso rendirse, dos fue difícil, ahora otros dos o tres le resultaría aun mas complicado. Revolvió su cabello desesperado. Logro memorizar dos caracteres en medio día, ahora ocupaba un día para aprenderse tres más.

— Frutas, verduras, cosas de cocina. —recito no muy convencido de su pronunciación.

— Es utensilios de cocina. —regaño.

— Es lo mismo.

— No, no lo es.

No refuto. El que sabia chino era Jihoon, no Seungcheol.

Nadie dijo nada, Jihoon siguió rellenando el inventario que le correspondía. Mientras Seungcheol se retorcía entre el estante y el piso admirando los caracteres nuevos.

Parecía un niño. Solo que mas grande y berrinchudo.

Al ser la hora de salida, Jihoon se despidió dejándole tarea: hacer planas.

Tal vez solo fue idea de Seungcheol, le estaba agradando Jihoon.

Jihoon llego a casa a medio día, Minghao lo esperaba en la cocina quien tenía algunos cucharones entre sus manos pegándole a un balde simulando un tambor. Lo dejo un rato hasta que se harto y los guardo en el estante más alto.

— Jihoon. —llamo su hijo quien lo siguió hasta la cama. — ¿Puedo salir al parque?

Negó tomando a Minghao entre brazos y aprisionándolo entre la cama y él. Extrañaba cuando su hijo apenas era un bebe, al llegar de su doble turno solo constaba de acostarse al lado de su bebe y se dormían los dos. Ahora que Minghao tenia cuatro años le era imposible conciliar el sueño porque el niño estaba lleno de energía, quería salir y Jihoon se sentía cansado.

Minghao se restregó entre su padre hasta liberarse de sus brazos, se quedo dormido y camino de puntitas hasta la cocina. No quería hacer ruido, pero al ver el estante donde Jihoon había guardado los cucharones no tuvo más opción que buscar la silla mas alta y ponerla para subirse. Cuando logro alcanzarlos, los tomo y bajo para dejarlos en la mesa.

Fue por sus 'juguetes' que eran simples palos y simulo una pista de carreras con los cucharones y algunos vasos. Anteriormente antes de que lo suspendieran vio como su compañero Huan llevo su autopista de pequeños cochecitos, tuvo envidia, sí, pero no podía hacer nada.

Siempre estuvo consiente que no era como los demás, iba a una escuela donde todos tenían cosas que Minghao no tenia, como el libro de ingles o el uniforme de deportes incluso más que eso, era el único porque los demás niños si tenían. Tampoco tenia amigos, sus compañeros lo rechazan llamándolo 'pobre', aunque Minghao era listo no sabia a que se referían con esa palabra.

Miro el estante de pequeños libros que Jihoon guardaba, leyó los que pudo. Anteriormente supo que la palabra Diccionario consistía en un libro con muchas palabras. Lo aprendió gracias a su maestra. Intrigado de saber como seria no lo encontró entre la mini biblioteca de Jihoon. Se sentía decepcionado.

Debía esperar otras cuatro otras para que Jihoon despertara. Quería entender porque Jihoon nunca estaba en casa. Y porque ese 'trabajo' se lo llevaba y cuando se lo regresaba estaba todo cansado.

Minghao se quedosolo, jugando y fingiendo divertirse con sus amigos, amigos hechos dedesgastados palos y trajes de papel.

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Mínghào es un bebito y Jihoon es un bebé también.

Seungcheol es un poquito, solo un poquito torpe con el trapeador y el agua, solo eso ~

Gracias por leer ~