Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 68: TAN SOLO TÚ💗

Capítulo dedicado a:

Todos los lectores❤🌻

_________________________

Cantar de los Cantares 8:7

Las muchas aguas no pueden apagar el amor,
    ni los ríos pueden ahogarlo...

●°●°●—————— ⭐ ——————●°●°●

Dan y Alin llegaron a su casa cerca de las 10 de la noche, luego de haber estado en el hospital haciendo compañía a la familia de Lucas.

Luego de estacionar el coche. Dan se bajó inmediatamente y corrió a abrirle la puerta a su esposa. Le tendió la mano pero ella no quiso recibirlo.

Se bajó e inmediatamente ingresó a la casa. Aún pensaba en todo lo que Hania había dicho en el restaurante.

Dan soltó un suspiro. Cerró la puerta del auto y también caminó hacia adentro.

Subió las escaleras y llegó a la habitación.

Alin estaba sentada sobre el borde de la cama, su mirada se mantenía fija en algún punto del suelo.

— Amor — pronunció Dan — ¿Podemos hablar?

Alin alzó la vista y miró a Dan sin ninguna expresión en su rostro.

— Iré al baño y luego a dormir — se puso de pie y caminó al cuarto de baño que estaba ahí mismo en la gran habitación que tenían. Le puso seguro a la puerta y se recargó en ella.

Soltó un suspiro mientras pensaba en lo que Hania había dicho y lagrimas comenzaban a salir de sus ojos. Lloró en silencio para que Dan no pudiera oírla.

Dan se acercó a la puerta y tocó tres veces.

— Aly, por favor...Necesitamos hablar...— se recargó en la puerta.

Alin no respondió y por su mente cruzaba la idea de no salir hasta que Dan se quitara de la puerta y se fuera a dormir.

— No me iré de aquí hasta que salgas y hablemos — dijo como si hubiera sabido lo que estaba pensando.

Después de 10 minutos. Alin decidió salir. No tenía otra opción.

Cuando Dan escuchó que iba a abrir la puerta, se quitó de ahí.

Alin salió y caminó hacia la cama donde volvió a sentarse.

— ¿Qué ibas a decir? — le preguntó.

— Yo...Siento mucho que Hania te haya hecho pasar un mal momento...

Alin escuchaba atenta.

— Pero te lo dije y te lo vuelvo a repetir...no pasó nada con Hania, Ella esta mintiendo...Tienes que creerme...

— ¿Pero saliste con ella o no? — preguntó.

Dan soltó un suspiro, sabia que debía hablarle con la verdad y contarle lo que verdaderamente había ocurrido.

— Si.

— ¿Lo ves? ¡Estuviste con ella!

— No...Deja que te cuente todo...por favor — suplicó.

Alin no dijo más, dándole a entender que podía continuar hablando.

— Yo estaba cansado — comenzó a decir Dan — Me sentía agobiado por todo lo que había pasado...tú no querías hablar conmigo y honestamente pensaba en dejar todo ya...sentía que ya no podía seguir más...perdimos al bebé y sentía que también te estaba perdiendo a ti...

Suspiró antes de seguir hablando.

— y ese día cuando me pediste que me fuera y dijiste que no querías verme...salí de casa...no sabia a donde iba...conduje el auto sin tener una dirección...solo...quería despejar mi mente...

Hizo una pausa.

— ¿qué pasó después?

— Me encontré con Hania y ni se la razón pero solo le pedí que fuéramos a dar una vuelta en el auto...luego me detuve en un callejón...ella comenzó a hablar, pero yo no le estaba prestando atención. Mi cabeza era todo un caos en ese momento...— soltó un suspiro — luego ella comenzó a insinuarse, me dijo que podíamos ir a su departamento.

— Y tu Accediste...— Dijo Alin, en su voz se podía percibir tristeza y decepción.

— No — se apresuró a decir Dan — No accedi. Intentó besarme y por unos instantes estuve a punto de caer...pero en ese momento Dios se hizo presente en mi vida...recordé el compromiso que hice contigo y con Dios...te recordé a ti...y al recordarte a ti...fue suficiente para negarme a fallar nuevamente...porque Te amo...porque Tú eres la mujer de mi vida...y porque en ese momento más que nunca, Dios me recordó que debía seguir luchando por ti...

Dan se acercó a su esposa quien estaba sentada al borde de la cama. Se arrodilló únicamente con una rodilla, y tomó las manos de ella entre las suyas.

— No pasó nada con Hania — dijo mirándola fijamente a los ojos — Tienes que creerme...yo Te amo solo a ti...por eso me casé contigo...

— En realidad fue por qué en la empresa te pedían estar casado para asumir el mando...

— No solo por eso — Dan rió un poco — desde que te vi por primera vez siempre soñé con casarme contigo...y hoy me siento afortunado por poderte llamar mi Esposa.

— Dan...

— Aly, te estoy diciendo la verdad...No volvería a fallarte...— acarició su mejilla.

Dan estaba siendo sincero con ella. Alin meditaba en sus palabras y su corazón se llenaba de paz a medida que lo escuchaba decir esto último y eligió creerle a Él en vez de a Hania.

— Te amo Dan — le dijo — Y perdóname...

— Tú perdóname a mi...debí decírtelo desde un principio...

— Esta bien...

— ¿Estamos bien? — preguntó Dan. Ella asintió con un sonrisa en su rostro — ¿Podemos orar juntos? Por nuestro matrimonio y también para pedir por la vida de Lucas...

— Si, claro.

Ambos se pusieron de rodillas sobre el suelo y tomados de la mano oraron a Dios. Pidieron que los ayudara en todo momento en su matrimonio y que pudieran amarse con un amor sincero y verdadero.

Pidieron por Lucas, porque Dios hiciera su voluntad en su vida. Por sus padres para les diera fuerza.

Oraron por Bruna, para que ella pudiera descansar en Dios de todo eso que la estaba agobiando.

Luego de orar fueron a dormir.

Dan apagó la luz.

— Aly...— susurró.

— ¿Si?

— Gracias por no irte de mi lado...

Alin, quien le estaba dando la espalda, se dio la vuelta y lo miró fijamente a los ojos.

— Y nunca me iré de tu lado...— Sonrió dulcemente mientras se acercaba para besarlo.

Dan correspondió al beso con tanto amor y cariño.

[.....]

Los rayos del sol entraban por la ventana. Un nuevo día había llegado.

Afuera se podían oír los cantos de los pajarillos.

Dan abrió lentamente los ojos y volteó a ver a su lado a su esposa que aún dormía. Sonrió.

— Amor — le habló hasta que ella logró despertarse — Buenos días.

— Hola — dijo ella sonriendo.

— ¿Dormiste bien?

— Si. ¿Y tú?

— Si — sonrió — Iré a bañarme ¿okey? Si quieres puedes seguir durmiendo...yo prepararé el desayuno.

— ¿No irás a trabajar? — Alin lo miró confusa.

— Me quedaré contigo — le respondió — Ayer terminé los pendientes que tenía...

— ¿Estas seguro?

— Si — Dan sonrió — Quiero pasar todo el día con mi amada Esposa.

— Bien — Alin sonrió — Te amo.

— Yo a ti — Dijo Dan antes de dirigirse a la ducha.

Alin sonrió al verlo irse. Suspiró sintiéndose afortunada por tenerlo a su lado. Cerró los ojos unos instantes y sin saber cómo volvió a quedarse dormida.

















Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro