Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 59: LUCAS🎹

Capítulo dedicado a:

VanessaSnchz

__________________________

Jeremías 10:19

Mi herida es profunda
    y grande mi dolor.
Mi enfermedad es incurable,
    pero debo soportarla.

[NTV]


●°●°●—————— 🎹 ——————●°●°●

— Lucas Hernández — me levanté de mi asiento en cuanto la enfermera me llamó.

Comencé a caminar por los pasillos hacia el consultorio del Doctor.

Había acudido al hospital a que me revisaran. Ya no era normal tener dolor de estómago todos los días y a todas horas.

Pensaba que se me pasaría pero cada vez empeoraba más.

<Qué sea lo que tú quieras> le dije a Dios antes de entrar al consultorio.

— Adelante Lucas — dijo — Sientate.

Me senté en la silla quedando de frente al escritorio donde él estaba sentado.

Suspiré al ver que el tomaba unas hojas que supuse eran los exámenes que me habían realizado un día antes.

— ¿Esta todo bien? — estaba impaciente por conocer el resultado, fuera bueno o malo quería saberlo.

— Dime — comenzó a decir — ¿Desde cuándo te has estado sintiendo mal?

Comencé a recordar antes de responder.

Creo que fue a principios de Mayo cuando fue la graduación en el instituto.

Desde ahí era aveces que me dolía pero leve, desaparecía y luego volvía a aparecer el dolor. No le hice caso pues pensé que era un malestar común.

Luego llegaron días que eran seguido hace unas semanas.

Estábamos a principios de Julio así que...

— Hace aproximadamente dos meses — contesté.

El doctor me miró sorprendido.

— ¿Dos meses? ¿Por qué no viniste antes a consultarte?

— No pensé que fuera grave — dije.

— Lucas — habló serio — Estuviste enfermo de Cáncer y luego desapareció misteriosamente...pero eso no quiere decir que no pueda volver en cualquier momento.

— ¿Qué me está queriendo decir? — pregunté sin entender a que quería llegar.

— Él cáncer volvió — soltó mirándome fijamente — Y lamentablemente esta muy avanzado, de hecho puedo decir que es un milagro que estés aquí aún...

Quedé en Shock.

El cáncer había vuelto...

Y

Estaba avanzado.

— ¿Harán...— intenté hablar aún sin poder procesar lo que me había dicho — Quimioterapias o alguna cirugía?

— Podemos intentarlo — respondió — Pero en este estado...con certeza puedo decirte que no va a funcionar...

— Debe haber una manera — dije al borde del llanto.

— Me temo que no la hay, Medicamente no podemos hacer mucho por ti...Si tu cuerpo no responde al tratamiento...

Iba a morir.

No me preocupaba eso.

Me preocupaba mis padres y Bruna.

¿Cómo se lo diría?

¿Cómo le diría qué el cáncer había vuelto a mi?

¿Cómo le diria que tal vez nuestro planes de casarnos y estar juntos no se harían realidad?

<Dios mío, ayudame>

El médico me programó una cita en tres días para hacerme más estudios y ver si había alguna posibilidad de hacer algo más.

Salí del hospital con el corazón destrozado.

Miré al cielo y dije — No se por qué permites esto nuevamente...pero no estoy enojado contigo...Solo dame fuerzas...

Llegué a casa y subí directo a mi habitación. Lo bueno era que mis padres no estaban así no me verían en ese estado.

Se lo mucho que sufrieron en el tiempo que estuve en el hospital. Mamá me cuidaba en todo momento, y papá trabajaba mucho, apenas y tenían tiempo para descansar. Ya habían sufrido mucho por mi, ya habían hecho mucho...

No iba a permitir que volvieran a sufrir así que decidí no decirles nada...actuaria como si nada pasara y pondría mi vida en las manos de Dios, solo él tenía la última palabra.

Pensé en Bruna.

¿Y si termino con ella?

Pero ¿cuál sería la excusa?

Porque tampoco quiero que lo sepa. Se pondría muy mal y verla sufrir me rompería el corazón.

¿Por qué tuve que enamorarme?

¿Por qué tuve que confesarle mis sentimientos hacia ella?

¿Por qué le hice promesas que ahora no se si podré cumplir?

Nadie tenía que saberlo.

Dan y Alin estaban sufriendo aún por la pérdida de su bebé, no añadiría más sufrimiento al decirles que nuevamente estaba enfermo.

Rodrigo tenía a su familia, su esposa y su hija. Estaban muy felices que tampoco arruinaría su felicidad con mi enfermedad.

Mía...Mía también estaba pasando momentos difíciles en su familia, su padre se había ido de casa y su mamá se ausentaba mucho por trabajar...

Definitivamente no. Nadie tenía que saberlo. Si tenía que sufrir lo haría solo, bueno solo con Dios, pero no involucraría a nadie más, sería egoísta de mi parte.

Estando en mi habitación derramé mi alma delante de Dios, pidiendo solamente un milagro, no por mi, porque si Dios quisiera llevarme yo iría con gusto a su presencia, pero pensaba en las personas que quería, estoy seguro que sufrirían mucho.

Tres días después fui nuevamente a que me hicieran más estudios. Los resultados fueron iguales de negativos.

El médico me dijo que podía iniciar las quimioterapias cuanto antes y que debía internarme nuevamente.

Eso o...

Tratar de llevar una vida normal hasta donde aguantara.

Lo primero podría quizás ser la mejor opción para mi, pero de nuevo mis padres sufirian como lo hicieron cuando me internaron, además que ya no podría trabajar y todos los gastos recaerian sobre mi padre.

No, no podía hacerles eso otra vez.

Así que tomé la decisión de vivir mi vida normal, hasta donde Dios me diera vida o hasta donde me concediera un milagro nuevamente.

Yo sé que él podía hacerlo, pero tampoco podía exigirle que lo hiciera, ¿por qué, quién soy yo para decirle que haga algo? Soy un simple ser humano así que mi vida está en sus manos.

Hola amor
¿Podemos vernos?

Mi teléfono vibró al recibir un mensaje de Bruna. De hecho no la habido ido a ver desde que me enteré que nuevamente el cáncer había vuelto. La extrañaba, pero no sabia como actuar sin que ella notara algo raro en mi.

¿Será que lo mejor es terminar con ella?

¿Pero cómo le digo?

Tenia tantas preguntas en mi mente para las cuales no tenía respuesta.

Decidí responderle. Iría a verla a su casa y luego saldríamos a caminar, y tal vez, solo tal vez si tenía el valor suficiente terminaría con ella.

No podía atarla a mi sabiendo que estaba enfermo. No le haría eso, la amo tanto que si tengo que dejarla ir lo haré, no me perdonaría nunca verla sufrir al verme cada día agonizando a medida que el cáncer me destruye por completo.

Esa misma tarde fui a verla y salimos a caminar por el parque. Se veía tan hermosa, su sonrisa irradiaba paz y felicidad.

— Te extrañaba ya — dijo.

— Yo también — respondí.

— ¿Estas bien? — me preguntó.

— Si — sonreí — ¿por qué preguntas?

— No lo sé, estás muy callado.

— Solo...tengo un poco de sueño — respondí.

Se acercó a mi y me abrazó. No me lo esperaba pero de alguna forma me hizo sentir bien. Correspondí a su abrazo.

No podía hacerlo.

No tenía tanto valor como para terminar con ella. Además cual sería mi excusa si no quiero que se entere de mi enfermedad.

No sabía que iba a hacer, pero en ese momento cuando me abrazó, supe, que no quería alejarla de mi lado.







































Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro