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Mi amado es mío, y yo suya;

Cantares 2:16

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7:00 p.m

— ¿Emocionada por el día de mañana? — preguntó Dan, quien estaba sentado frente a mi, sosteniendo un vaso de limonada en su mano.

Me había invitado a salir, nuestra última salida como novios; pues a partir de mañana seriamos esposos.

Habíamos ido a un restaurante cerca de su casa donde vendían comida deliciosa.

— Estoy nerviosa — confesé — pero me siento feliz de que cumpliré uno de mis sueños contigo.

Sonrió y sonreí al verlo hacerlo. Dan tenía la sonrisa más linda de todo el mundo.

— ¿Recuerdas cómo nos conocimos? — preguntó mientras miraba hacia la nada como si estuviese recordando.

— Claro — respondí y a mi mente vino ese día cuando lo vi por primera vez en la tienda de ropa. Nunca olvidaré lo que me dijo.

— ¿Estas bien? — me preguntó.

— perfectamente bien — respondí con sarcasmo.

— pues no parece que estés bien ¿por qué lloras?

— Es que...nunca podré ser perfecta como ellas — señalé al grupo de amigas que estaban en los vestidores.

Sonrió, yo la mire extrañada. Luego dijo:

— Eres perfecta tal y como eres.

— Lo dices solo para que no me sienta mal ¿cierto?

— Lo digo en serio.

— No lo creo.

— Si te vieras a través de mis ojos te darías cuenta de que digo la verdad.

Chocamos solo por accidente y muchos dirán que fue coincidencia, pero yo no lo creo, creo que Dios ya tenía un propósito para nosotros.

— Desde ese día no pude dejar de pensar en ti — dijo y me miró fijamente — era algo nuevo todo lo que causaste en mi, los sentimientos que despertaste. Nunca antes me había sentido así.

— Me pasó lo mismo, pero como en ese tiempo estaba luchando con encontrar mi identidad...intenté...intenté olvidarte porque me decía a mi misma que alguien como tú jamás se fijaría en alguien como yo.

— pero eres Hermosa — sonrió — era imposible no enamorarme de ti. De verdad, eres la chica más linda que mis ojos han visto.

Bajé la mirada sonrojada. Aún no me acostumbraba a los cumplidos que me hacía de vez en cuando.

— Te amo Dan.

— yo también te amo.

— por cierto, quiero darte algo — de mi pequeño bolso saqué una tarjeta que había hecho hace unos días.

— ¿qué es? — me preguntó cuando le hube dado la tarjeta.

— Léelo — desdobló el papel y comenzó a leer lo que tenía escrito.

Era un versículo bíblico que quería dedicarle desde hace tiempo, para ser más específica, Cantares 2:16.

— Mi amada — dijo encontrándose con mi mirada — bien, no me esperaba esto...— sonrió — Te amo tanto.

— Yo también a ti.

Dan se me quedó viendo fijamente con una sonrisa en su rostro por varios segundos, cuando iba a preguntarle la razón se adelantó a decir:

— Toda tú eres hermosa, amada mía, bella en todo sentido — Sonrió — Cantares 4:7, Realmente lo eres.

Sonreí y quería llorar de la emoción que sentí al momento que dijo aquello. Era tan lindo que me dedicara un versiculo.

— Sin duda eres la persona con la que quiero estar para siempre — le dije.

Cuando acabamos de comer, Dan pagó la cuenta y salimos del restaurante. Como quedaba cerca de su casa habíamos dejado el auto ahí y habíamos caminado hasta allá.

La noche ya había llegado. Las luces de la ciudad se encendían cual estrellas en el cielo oscuro.

Arriba, el cielo estaba hermoso. Una noche perfecta, a pesar de que no había luna, pues las nubes la cubrían impidiendo que su luz brillara.

— Te noto muy pensativa — dijo Dan mientras entrelazaba su mano derecha con la mía.

— Solo...— solté un suspiro — no puedo creer que vaya a casarme contigo.

— ¿por qué? — preguntó con una sonrisa en su rostro.

— porque eres maravilloso — lo miré fijamente a los ojos — Eres increíble...y...

Mi corazón comenzó a acelerarse a medida que él acercaba su rostro más al mío quedando de frente a mi.

— Y...No hay nadie que pueda compararse a ti...— terminé de decir.

Sonrió.

— Eres la mejor — su vista bajó a mis labios, estábamos tan cerca, lo suficientemente para besarnos.

Lentamente se acercó más y más hasta que sus labios hicieron contacto con los míos.

Era mi primer beso y estaba segura de que él lo sabía. Honestamente la idea de besarlo me aterraba pues nunca antes había besado a nadie y no sabía que hacer. Pero fue hermoso. Mi primer beso con el único novio que había tenido y que sería mi esposo en unas horas.

Al menos ya no tendría que preocuparme de besarlo en la boda, pues ya lo había hecho y sería igual.

— Tenía tantas ganas de besarte desde hace mucho — Dijo una vez nos separamos.

— ¿por qué no lo habías hecho? — le pregunté.

— porque sabía que era tu primer beso y quería que fuera especial y que lo recordaras por siempre.

— Gracias por esperar.

— una vez te dije que te esperaría toda una vida...

Sonreí al recordar ese día hace años cuando ambos nos reconciliamos y prometimos esperar el tiempo de Dios para iniciar una relación.

No fue fácil la espera, pero valió la pena, para llegar hasta este momento donde nuestras vidas se unirán para siempre.

Caminamos un rato por las calles, tomados de la mano, viendo el cielo y disfrutando de la noche.

Luego regresamos a la casa de Dan. Entramos unos momentos y luego salimos. Nos subimos al coche para que Dan fuera a dejarme a mi casa. Eran casi las 10 de la noche y ambos debíamos descansar para el día siguiente.

En el transcurso del camino íbamos escuchando música y cantando. Cuando llegamos a mi hogar se estacionó y antes de que me despidiera dijo:

— Mañana es el día y aunque estoy feliz me pone triste que mis padres y mi hermana no estén aquí — apoyó sus manos en el volante y bajó la cabeza.

No sabia que decirle, después de varios segundos logré armar una respuesta.

— Lo siento — dije — pero imagina que ellos estarán viéndote desde arriba, y sigue confiando en que un día volverás a verlos.

— Lo se — alzó la vista — esa es mi esperanza — sonrió un poco triste.

— Te amo tanto Dan.

— yo también, Aly — sonreí — Bien, es hora de que vayas a dormir...

— tú también, trata de descansar bien y no pensar mucho.

— lo haré.

— te veré mañana en el altar — dije.

— Yo estaré hasta el frente, vestido con un traje formal en color negro — sonrió alzando las cejas divertido.

— ¿en serio? Bueno espero no confundirte con alguien más, tal vez habrá más que estarán vestidos igual — dije bromeando.

— bueno, pero yo seré el más guapo de todos — rió mientras me guiñaba un ojo.

— Lo se — reí también — y yo seré la de blanco.

— será fácil identificarte — respondió — eres y serás la más hermosa.

— Bueno, hasta mañana — me acerqué a él y lo besé.

— Hasta mañana — dijo.

Abrí la puerta del auto y me bajé. Entré a casa y escuché como Dan ponía en marcha el auto.

Mis padres estaban en la sala viendo la televisión, una vez me hube despedido de ellos subí a mi habitación. Abrí la puerta y recorrí todo el lugar con mi vista. Iba a extrañar mi habitación.

Entré y me recosté en mi cama pero sin poder dormir. No sé si eran los nervios o las ansias de que llegara el día.

También Pensé en Lucas y en que no sabia si estaría en la boda. No había tenido oportunidad de ir a verle por los pequeños detalles que faltaban. Pero esperaba que tal vez si pudiera estar, era nuestro amigo y que mejor que todos nuestros amigos estuvieran presentes.

Miré el techo y por más que trataba de cerrar los ojos no podía dormir, pero debía pues sino mañana estaría desvelada y con ojeras, lo cuál no quería que sucediera.

No fue hasta cerca la 1 de la madrugada cuando por fin el sueño me ganó y caí rendida.

Cantares 2:16 [RV1960]
Cantares 4:7 [NTV]

N/A

Holaaa a todos🤗...

¿Cómo están?

¡y...la boda es en el siguiente capítulo...así que...¡¡están invitados!!

Les dejaré algo por aquí...👇

Psdt: el tiempo es ficticio porque obviamente estamos en Marzo😅...y prácticamente es en el siguiente capítulo...pero se me ocurrió hacer la invitación para que fuera más formal✉...(no se si quedo bien

así que ¡¡no falten!!

Y ¿qué les parece si pongo imágenes sobre como seria el lugar, la decoración, el vestido...o cosas así...?🤭...

Bendiciones!❤