>> maldita, mocosa... <<su fuerza era aún mayor que la mía por desgracia y pronto sentí la lluvia caer con furia, eso me tomo desprevenida y miré al techo cuando algo cayo con fuerza en el techo, pero me distraje y mi oponente me apartó con fuerza y me estrelló contra el suelo, pero me levanté al instante para que me tomará contra la pared y por mi cuello>> reconsideré la oferta, creo que mejor me llevo tu cabeza y la del gran Carlisle, pero haré de este juego muy divertido <<y se acercó a mi oído para musitar>> ahora serás mi títere, Julieta <<

Y sin previo aviso se alejó de mí, con ese aire amenazante, me dejó. Apartó la ropa de la puerta y salió por ella con una sonrisa en sus labios, mi mirada se dirigió al hombre aún inconsciente, aún su corazón detenido, intenté sanar su herida y su problema cardíaco, el poner de Ferb me ayudaría a ello, eventualmente lo hizo, su herida cerró y poco a poco su sangre volvía a circular, su vida estaba volviendo, había cerrado mis ojos para una amyor concentración, pero cuando me di cuenta de que su corazón estaba volviendo a bombear y recibir sangre abrí mis ojos para levantar al hombre y ponerlo sobre su silla, para limpiar la sangre que había con la ropa y para cambiar la que tenía yo ahora, me tomo poco tiempo encontrar otra ropa mediocre para mí, pero no podía salir oliendo a sangre, así que la guarde en una bolsa, el hombre aún inconsciente estaba lleno de sangre y de alguna forma me llenó de pesar, una vez cambiada mi ropa, opte por cubrirlo con una sábana blanca del departamento humilde de sábanas para ponerla sobre su cuerpo, así lucía mejor, el piso limpio y él vivo, pronto se animaría, había encontrado mi vestido y lo demás que necesitaba, tomé el dinero que Alice me dio y lo deje en el mostrador para salir de la tienda.

Miré a mis lados, no había casi nadie, pero las personas transitaban, suspire buscando la llave del auto y abriendo la puerta del mismo, ya que estaba cercano y metí las bolsas de ropa en él, pero estaba tan alerta en ese momento que supe de mi vigilancia y el hedor que antes había sentido en aquella tienda de alquiler de autos, levanté mi mirada casi directa y mi corazón muerto se removió por el impacto de mi certeza cuando descubrí a aquel chico de apestoso hedor entrando a una cafetería al otro lado de la calle, nuestras miradas se cruzaron por instantes, pero lo suficiente para saber el uno del otro.

Volví mi mirada al auto con la intención de ir a mi cabaña alquilada, pero tenía curiosidad por su fisiología, ahora que lo notaba el chico lucía igual que Jacob Black, poco más pequeño, pero formado y de piel rojiza, recordé el día de la tienda de alquiler y el calor que se sentía entre ellos, miraba a ambos lados y discutía en mi cabeza si debía ir con él y averiguar si realmente era parte de los hombres lobos o irme y olvidarlo.

Pero, no quería irme, ahora no.

Mire la bolsa en la parte trasera del auto y cerré el auto, puse la alarma y cruce la carretera. Antes de siquiera entrar al restaurante lo ví a través de la vitrina, sentado en una mesa solo, estaba de espaldas. Entré por la puerta sin mucho protocolo y llegué a él sentándome frente a frente.

Y entonces volvió a posar su mirada sobre mí, como si me amenazara con ella.

Sonreí de un lado divertida>> entonces ¿Pretendes espiarme? <<Pero de alguna forma no le pareció gracioso, más bien en miraba con tanta furia, con tanta fijación que me hacía sentir algo incómoda, por eso reí algo nerviosa>> oye, di algo <<pero se mantenía en silencio mirándome fijamente, que por un momento pensé que se había quedado impactado mirándome, no era indiferente para mí que alguien se detuviera en la belleza vampírica que poseía, pero él me hacía sentir de alguna forma incómoda por como lo hacía.

Pero no incómoda, del estilo perverso, sino incómoda del estilo intrigante.

Entonces una mesera se acercó con una bebida grande y la puso frente a él>> aquí tienes Seth, doble mora explosivo <<y se abstuvo a verme, como si hubiera vuelto en sí, como si por un momento se desconectó y volvió.

Sonrió algo extraño a la mujer>> sí, Marlene, gracias <<

>> ¿Se le ofrece algo a tu amiga? Seth <<ahora me miraba, Marlene era de hoyuelos en sus mejillas, pero era alta y de cabello corto miel, tenía muchas arrugas y era muy delgada>> ¿Quizás un café? Oye me parece conocida <<

>> No, Marlene, trae mejor un té frío para ella, es mejor, le arde la garganta <<él reía nervioso y hablaba con ella, evitaba que yo lo hiciera, lo sabía.

Ella asintió y sonrió>> correcto, te lo traeré cuanto antes <<y se fue.

Había olvidado por un momento mi sed, porque me había intrigado por completo en él y su aroma evitaba que siquiera obtuviera mi sed por sangre, baje mi mirada un instante, aunque el restaurante estuviera completo de personas, parecía en silencio con él>> apestas a sangre <<masculló apenas entre dientes y eso me tomó por sorpresa, cuando esa fue la primera frase que se atrevió a concederme.

Eso me hizo gracia, sin embargo no dije nada ofensivo>> perdona, tuve un altercado no hace mucho <<admití sin filtro, fruncí mi ceño cuando me sentí vulnerable, no debería.

Pero él no se veía amenazador, me miraba con su ceño fruncido sí, pero nada en su postura me hacía creer que me atacaría o algo parecido>> sabes bien que tienes prohibido el matar a alguien más <<

Levante mi mirada tan pronto lo dijo y lo recordé casi al instante, justo después de mi ataque por el enorme lobo, uno de ellos me miró antes de irse, el último fue quién me dio el ultimátum de gruñir hacia mí como advertencia. Me incorporé en mi asiento>> eras tú <<

Quito su mirada de mí y tomo la bebida que Marlene había traído para mí>> gracias Marlene, eres la mejor <<volví a mi postura.

>> sí, gracias Marlene <<

>> ahora lo recuerdo <<pero creo que Marlene estaba animada a hablar, se mantuvo en nuestro comedor>> tienes un gran parecido a una de los hijos del doctor Cullen <<tome el té frío en mis manos lentamente>> ¿eres familiar de ellos? <<

Carraspee poco antes de responder>> sí, puede decirse que soy familia lejana de uno de ellos <<