"El barco pirata espacial Pt.2"

•°P.O.V (Tn)°•

Frente a la gran puerta negra, estábamos Pit y yo, los tres tesoros sagrados.

Lo que le permitirá a Pit acabar con esta absurda guerra, y con Medusa a fin de cuentas.

- Bien, esto pronto acabará, ahora es que debemos darlo todos.-Pit rompió aquel silencio que se había generado, me brindo una de sus grandes sonrisa, ya estaba acostumbrada a esas sonrisas.

- Tienes razón pero... Aún así me da algo de miedo, ya sabes, el tema de que iremos al Inframundo con la gema esa que conseguimos de Tantos... Me da miedo que nos pase algo...-Aferre mi arma contra mi pecho, era un arco meteoro.

- Todo estará bien.-Puso su mano sobre mis cabellos y los acarició, mis mejillas tomaron un tono suave de rosa notable debido a mi blanca piel.

Pit tenía el bastón sombrío que conseguimos en unos cofres durante la batalla contra Dark Pit en las ruinas.

Y si, lo bautizamos con ese nombre porque fue lo primero que se nos ocurrió.

- Bien chicos, ¡Ahora!-Palutena intervino abriendo las grandes puertas dejando ver aquel gran cielo nocturno con nubes que no dejaban ver la gran luna y los rayos de luz lunar que emitía la misma.

Ambos desplegando nuestras alas, Palutena le concedió el don del vuelo a Pit para que, ovbiamente, volará, duh-

- ¿Y bien? ¿Cómo se supone que llegaremos a dónde los tesoros sagrados?-Pregunto Pit alzando una ceja.

- Bueno... Heheh.-Se escucho la risa nerviosa de Palutena.

- ¿Lady Palutena?-Pregunte algo asustada por aquella risa nerviosa.

- Al infinito, y más allá.-Solo dijo eso.

- ¿Eeeehhhh?-Tanto Pit y yo hablamos al mismo tiempo ante la respuesta de Palutena.

Los mounstros de Inframundo aparecieron, seguramente en busca de los 3 tesoros sagrados y su urna, seguramente para que Medusa se haga con ella y no podamos hacer nada contra ella.

- Solo espero que estén preparados para subir muuuuy arriba.-Eso fue lo último que dijo antes de empezar a dirigir el vuelo.

-[...]-

- Madre se Zeus...-Pronuncio Pit con los ojos iguales a remolinos, igual que yo.

- ¿Porque a Lady Palutena se le ocurría ésto?...-Dije por mi parte, con una mano en la cabeza, mientras que la otra sostenía el arco meteoro.

Historia rápida, después de eso, Palutena nos llevó hacia arriba, literal, nos estaba llevando al espacio...

-Sacudí un par de veces la cabeza, y al darme cuenta, el ambiente era hermoso.-

El ambiente era hermoso, las Miles de estrellas iluminaban el cielo, la luna alumbraba con fuerza tal y como el sol, dejando de brillos lo que Palutena explico como el "Mar galáctico".

Mirando hacia abajo, realmente parecía un mar, las estrellas reflejaban aquel mar, y brillaba con fuerza con tonos azules, morados y blancos, hasta tonos amarillos de manera fugaz, porque si, había estrellas fugaces que pasaban por encima de ambos e iluminaban el mar.

- Vaya...-Pronuncio Pit viendo al rededor y dando una vuelta sobre su propio eje.- ¡Es hermoso!-Exclamó con sus ojos empezando a brillar.

- ¿A poco no lo es?-Palutena hablo con obviedad y soltando una risa, durante todo el este tiempo, estuvo dirigiendo nuestro vuelo al lugar donde deberían de estar los tesoros sagrados, en un barco pirata... Espacial.

- ¡Es precioso Lady Palutena!-Dije mirando hacia abajo, el mar, podía ver su reflejo perfectamente en el agua al igual que el de Pit.

- Me alegra que les guste, pero mejor tengan atención a los seres del Inframundo.-Apenas dijo eso Palutena, los mounstros aparecieron de repente y enfrente nuestra, poniéndonos en guardia a la par que disparabamos nuestras armas.

Pasados unos momentos algo desde las profundidades empezaba a hacerce cada vez más claro.

- ¿Que es-- Pit fue cortado puesto el gran barco espacial salió desde abajo del agua haciendo un gran salpique que dejó medio mojados a par.

- Es el barco, Pit...-Respondi, moviendome el cabello mojado que tapaba mis ojos.

- Perfecto, chic-- Y ahora Palutena fue cortada, puesto el barco salió a toda velocidad, para ser un barco así de grande, vaya que era veloz.- ¡Tras el!-Ahora grito activando nuestro vuelo para dirigirlo, además de que el don del vuelo de Pit ya se hiba a acabar.

El viaje fue más movido de lo que pensé, los mounstros del Inframundo, el barco a toda velocidad, y... Rayos láser, así como me escuchan, ¿Que clase de sistema defensivo tiene ese barco? Se supone que es un barco, un tanque armado hasta los dientes del mismo.

- Lady Palutenaa...-Dijo Pit contra el piso boca abajo, jadeando y apuntó de posiblemente morir.

- Lo siento chicos, pero era la única entrada que encontré a tiempo antes de que les frieran las alas.-Se disculpó.

- Me duele todo... Siento que mis pulmones van a explotar...-Dije, yo terminé también el suelo, pero boca arriba, con un brazo sobre mis ojos, el arco al lado, y mi otro brazo apoyado en el piso.

- No se preocupen chicos, todo esto acabará pronto, no falta mucho.-Nos alentó, conmigo no sirvió, pero si con Pit.

- Tiene razón.-Me miró y avanzó hacia mi.- Vamos (Tn) no podemos tirar la toalla, no ahora que estamos tan cerca de acabar con Medusa.-Extendio su mano hacia mi, lo mire, sus ojos estaban brillando.

Mire sus manos unos segundos, antes de arrodillarme y tomar su mano para de esta manera pararme como el. Vi como su sonrisa se agrando y cuando me termine de enderezar, me abrazó.

Mis mejillas empezaron a arder con fuerza, esto ya era nuevo, desvíe la mirada y sentí como Pit ponía su mano en mis hebras de cabello y los acariciaba.

- Gracias por todo, (Tn).-Me susurro al oido, escuchaba un tono dulce y acarmelado saliendo de el.

- ¿E-eH?-titubie sin saber que decir.

Y allí fue cuando se separó y soltó una risa.

- ¡Ven! ¿A qué esperas? ¡Los tesoros sagrados nos están esperando!-

Y salió corriendo, yo solo me quedé helada en el sitio.

«¿QUÉ?»

Sacudí un par de veces la cabeza, intentando concentrarme, de repente mi corazón latio con tanta fuerza que parecía que se saldría, cuando salí de mi trance, ví que Pit ya no estaba, me alerte y sali corriendo por el único camino abierto por dónde pudo haber ido Pit.

- ¡Pit! ¿Dónde estás!-Grité llamando a Pit mientras corría por aquel camino.

- ¡(Tn)! ¡Aquí estoy!-Lo escuché, mis pasos corrieron a dónde escuché de dónde venía.

- Pit, pero qué-- -Mi voz fue cortada por un disparó, que casi roza mi mejilla, mis ojos se movieron a dónde vino aquel proyectil...

Era... Un robot, ¿Pirata? Ya veo.

- ¿Qué?-Pronuncie, fue lo único que salió de mi boca.

- Sip, lo mismo dije.-El soltó una risita nerviosa.

Oh por Zeus, aquí vamos otra ves.

-[...]-

El luchar contra robots y mounstros del Inframundo al mismo tiempo no era muy sencillo, solo digo-

Había muchas bombas por los lares, teníamos que disparar a distancia para explotar las bombas y que estás hicieran su trabajo, númerosos rieles deslizadores y caminos fuera de la nave, casi transparentes y brillantes, en esas zonas avanzavamos con mucho cuidado, puesto como el barco hiba a tanta velocidad y era difícil mantener el equilibrio fuera del barco... Seh, pueden imaginarse las caras de miedo tanto la mía como la de Pit en esos momentos.

- ¿Cuánto falta? ¿Acaso los robots estos son infinitos?-Me queje en voz alta, aún corriendo, ¿De qué? De una Coravera, teníamos que pasar por un camino con una de esas en el medio, pero como el pasillo era muy estrecho, había que tener cuidado en esa acción.

- Casualmente, ya estamos a nada, solo suban al siguiente riel deslizador que les llevará a estribor, justo donde el capitán para recuperar los tesoros sagrados.- Que casualidad, justo cuando dije eso, Lady Palutena dió su respuesta.

Me giré hacia Pit, veía los brillitos saliendo de el, apesar de esta circunstancia, el seguia sonriendo.

Nos subimos al riel deslizador, el cual rodeo todo el barco, Mis ojos brillaron al ver todo el barco, y la sonrisa de Pit se ensanchó, se notaba su alivio de que todo esto hiba a acabar pronto, los tres tesoros sagrados, lo que nos permitirá acabar con esta guerra de una vez por todas [Hades;; Emmm ¿Debería?]

Al llegar a dónde se supone que estarían los tesoros sagrados, había un pirata espacial más, pero con un gorro de pirata y era de un color rojo, ya que los otros eran de un color amarillo u azul.

- ¿Qué está diciendo?-Pregunto Pit con confusión al escucharlo hablar, una combinación de sonidos robóticos inentendibles.

- Déjenme les traduzco.-Palutena aclaró su garganta.- «GRRRR, ¡Acabaré con ustedes y los haré caminar por la tabla espacial!»-

- ¡Todo menos la tabla espacial!-Grito Pit asustado, yo solo lo mire tratando de no reír por semejante tontería.

Cuando parecía que nos enfrentaríamos a aquel robot, un... ¿¡Tentáculo gigante!? ¿¡Que rayos!?

El tentáculo tomo al robot y se lo llevó a un mejor lugar, o eso creía.

Un momento de silencio, y númerosos tentáculos a nuestro Alrededor se asomaron  envolviendo la plataforma dónde estábamos.

- ¡Un Kraken espacial! Pensé que ya no existían.-Palutena argumento sorprendida, trague saliva al escuchar eso.

- ¿Cómo se supone que lo venceremos?-Pregunto Pit, el tentáculo paso por debajo de nosotros lo que provocó que diéramos un salto para no ser sacados de la plataforma.

- ¡Disparen a sus tentáculos! Eso debería hacerle daño.-

- ¡Si, Lady Palutena!-Tanto Pit como yo hablamos al mismo tiempo con la indicación que nos dió nuestra superior.

Nos dividimos en ambos lados, Pit de izquierdo y yo del derecho, disparando a los tentáculos, 3 de cada lado, 3 que cada uno tenía que derribar, saltando los mismos cuando pasaban cerca nuestro para evitar salir volando y morir.

- ¡Pit! ¿Cuánto te falta?-Le pregunté gritando, puesto estaba en la otra esquina de la plataforma.

- ¡Mmmm...! ¡Listo!.-Derribo el último tentáculo.

Sonreí aliviada, pero entonces un pequeño sismo me saco de ese momento, y delante mía apareció lo que era el Kraken, toda su cara, colores rojos oscuros y azules, ojos negros grandes, tenía aquel aspecto amenazante.

Me quedé helada, y Pit corrio hacia mi jalandome el brazo y alejándome de aquella criatura, me dejó en el sitio, dejándome un par de pats en la cabeza para de esta manera correr a enfrentar al kraken, yo seguía en el sitio, parada con mi arco meteoro en mano.

Siento que me dió un derrame cerebral.

- ¿(Tn)? ¿Estás bien?-Las manos de Pit pasaron frente a mi cara haciéndome volver a la realidad, parpadee un par de veces.

- ¿S-si? ¿Pit?-Lo miré posando mi mano libre en mi cabello.

- Mira.-De detrás de el, saco una urna, colores coral muy oscuro y desteñido, con brillos rosas y partes de plata.

- ¿Qué es-- ¡Son los 3 tesoros sagrados en su urna!-

- Que raro, yo la recordaba más pixelada.-Palutena intervino, Pit asintió par de veces y yo ladee la cabeza AÚN confundida.

- Vamos, solo nos falta derrotar a Medusa.-Con eso dicho, los pilares de luz.

•°P.O.V Narrador°•

Al llegar al templo de la luz una vez más, Pit casi se cae de no ser de que se haya apoyado con la Urna, luego se enderezó con la misma urna al lado.

- ¡Me alegra que haya regresado a salvó chicos!-Frente a ellos la diosa de la luz dió sus felicitaciones a ambos angeles, la noche era propensa, y al rededor de la gran sala donde estaba el trono de la luz, antorchas de flamas fuertes de tonos rojos hasta azules iluminaban el lugar.

- Si... Lady Palutena...-Respondio Pit apoyando ambos brazos sobre la urna con un notable cansancio.

La peliverde se acercó a ambos, y miro la urna dónde estaban ambos.

- Se merecen un descansó después de tanta locura, pronto acabará esto, se lo merecen.-Con una leve sonrisa, su mirada paso por ambos.

- ¿En serio? No sabe cómo se lo agradecemos Lady Palutena.-La castaña de ojos mieles observo a la superior.

- ¿Podemos descansar? ¡Muchas gracias Lady Palutena!-El ángel de ojos azules adiamantados, con una gran sonrisa, miro de igual manera como la femenina, a la diosa.

- Claro, ahora.-Tomo la urna entre sus brazos.- Vayanse a dormir.-De esta manera después de pronunciar esas palabras, dió la espalda, para irse.

- Bueno, buenas noches (Tn), sueña bien.-Con una sonrisa, ahora dulzona y algo nerviosa, le dió un pequeño beso en la mejilla a la chica antes de irse, sus alas se abrieron un poco cuando dió el pequeño beso.

La femenina puso su mano en su mejilla y estás mismas se pusieron de tono rojo suave, desvío la mirada antes de guardar su arco e ir a su habitación.

Nuevamente, al entrar a su habitación, una pequeña punzada llegó a su corazón, lugar donde se puso la mano, y tomo aire en busca de calma, junto a que esa punzada desapareciera.

Lentamente se sentó en la cama, y vio la rosa a su lado, aquella rosa negra de la mañana, la tomó con cuidado, y una sensación cálida lleno su pecho de repente, que tomo el lugar de esa punzada.

Soltó un suspiro observando la rosa, con su otra mano se quitó la corona de laurel y puso en su mesa de noche al lado de su cama.

Sus ojos amarillentos fueron a la ventana, pensando en todo lo que ah pasado con esa ventana en las noches. En un momento sus ojos vieron la rosa, algo le llamo la atención, la rosa además de aquel pétalo rojo, lentamente había manchas rojas al lado del pétalo negro siguiente al rojo, como si lentamente aquella rosa empezará a teñirse de aquel color representante de tantas cosas.

Mantuvo la calma, y dejo la rosa nuevamente en dónde estaba, está vez no hubo una presión en el pecho como antes, lo que la hizo sonreír tranquila, tal ves mantener la calma era la clave.

Dejándose caer hacia atrás, su cabeza toco la almohada, se acomodó mejor y abrazo la segunda almohada blanca que tenía, quedándose dormida entre sus pensamientos, alta fumada de sueño seguro que mandé.

Los ojos rubí brillantes y tan fuertes como la sangre, la observaban, pensando en aquella belleza a la cual no lograba acercarse, todo por aquella "rivalidad" provocada hace días, tal ves logré acercarse, pero hey, eso arrinuaria el drama ¿No creen?

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Nidea si alguien aquí sigue vivo-

Me retarde, lo siento gente :::(

Aquí les dejo un meme como disculpas, no es mucho, pero son unas disculpas honestas;;

[No Pit, que wea-]

[_;;Stela_OwO~