Los recuerdos me invaden, cada sonrisa, cada caricia, cada beso, cada bello momento, cada mal momento que superamos juntos llega a mi memoria.

Sin pensarlo lo abrazo, inhalo su perfume, aquel perfume que tanto me reconfortaba.

Dios, lo extrañaba.

Sigue siendo el chico del que me enamoré, sus brazos me hacen sentir tan segura, como hace años.

—Te extrañé, Jakey.

—Y yo a ti, Livie.

Suspiro separándome de él.

—Debemos entrar ya a esa reunión —hablo.

—Si, porque... ¡Es hora de que lleguen los reyes de Romester Hill! —exclama y yo río.

Entramos, saludamos, bailamos, reímos, comimos –mucho más yo-, bebimos, recordamos...

—Queridos ex-alumnos de Romester Hill —habla la directora Hudson—. Tengo el honor de estar aquí con ustedes el día de hoy. Han pasado ya dos años desde que fueron egresados de nuestra institución, y estoy muy orgullosa de que muchos de ustedes estén encaminados a ser profesionales. Sin mas que agregar, le pido a la señorita Olivia Lee y al señor Jake Flynn que den unas palabras — ¿Qué?

¡Ha dicho Olivia! ¡Yo soy Olivia!

Y también dijo Jake.

Ay no.

Consecuencias de ser ex-presidenta del cuerpo estudiantil.

—Por favor dime que no fui el único que oyó nuestros nombres —susurra Jake en mi oído.

—Desearía poder decir lo contrario, Flynn —contesto. Subo hacia el podio y el pelinegro sube detrás de mí.

Le sonrío a la directora y tomo el micrófono.

—Eh ¿Hola? Bueno, soy Liv —río con nerviosismo—. Okay, pasaron dos años, wow. Para mi fue un placer ser presidenta del cuerpo estudiantil durante todo mi periodo escolar. En ese instituto hice amigos, conocí personas maravillosas, me enamoré —miro a Jake con disimulo—. Pasaron cosas buenas, malas, terribles ¡Pero fue la secundaria! Según muchos esa es la mejor época de la vida de una persona ¿Y saben que? Estoy de acuerdo. Cabe resaltar que todos aquí nos conocemos, algunos desde kínder, otros desde primaria, tal vez otros desde la secundario. Pero nos conocemos, y eso bastó para pasar ¿Cuántos? ¿Siete años? Si, siete años juntos. Bueno, ya he soltado el rollo, el punto es que agradezco haberlos conocido, eso es todo, adiós —aplausos, gritos y risas se oyen de fondo, pero estoy concentrada en entregarle el micrófono a Jake, susurra un pequeño "gracias" y lo recibe.

—Yo sé que debería dar palabras de agradecimiento o admiración como buen ex-vicepresidente del cuerpo de estudiantes, pero la verdad, queridos ex-alumnos, es que las palabras que siguen, son para aquella chica que logró capturarme en un instante, ya sabes que eres tú, Olivia Lee.

En multimedia, De mi by Camila.