O cuando la luz propia debe apagarse.

A lo largo de la terapia y mis reencuentros con los recuerdos que tanto me había obligado a mantener había descubierto once cosas.

1- Con Patrick hice cosas que con nadie mas había hecho, como la primera vez en un bosque. Pero no me refería solo a eso, él me hizo sentir cosas por primera vez que nadie más me había hecho sentir.

2- Un beso puede no ser la gran cosa para muchas personas pero tiene ese poder de hacer sentír que eres uno con la persona que amas. Aveces cuando lo besaba no sabía cual era la línea donde comenzaba él y yo terminaba. Sus besos podían hacer que todo lo malo de mi mente desapareciera.

3- Aveces las personas son como el cielo, un día alguien puede ser la persona más feliz del mundo pero por la noche pude nublarse y llorar miedos e inseguridades.

4- Las películas que vemos no son las mismas si se comparten con la persona que amas. Las películas que vemos cuentan realidades que no muchos alcanzan a ver, hay que abrir la mente para poder captar la esencia que en verdad transmiten. Aquella vez que Patrick me dijo que no quería perderme pensé que eso sería imposible. Hasta ahora, yo lo perdí a él.

5- Si vives tu vida esperando que una estrella cumpla un deseo por ti pondrás fe en que será así. Los deseos de corazón los tiene que cumplir uno mismo. Le pedí a una estrella jamás lastimar a mi ángel, hacerlo feliz para siempre. Y no se cumplió.

6- Cuando una pareja adopta una mascota debe ser demasiado segura de si misma. ¿Acaso no piensan en lo que esa mascota puede sentir? Estoy seguro que Spring, nuestro gato, aun se sienta frente a la ventana como solía hacerlo solo para verme llegar. Me pregunto si Spring sabe que no voy a regresar.

7- Otra cosa que aprendí es que hay que tener mucho cuidado con las personas que son universos. Cuando sales con una de esta o tienes su amistad y por algún motivo la pierdes estarás condenado a andar por la vida equivocandote con meteoritos buscando que te llenen como ellos.

8- No puedes regalar tu libro favorito a la nada. Si alguien te confía algo así, guárdalo. Patrick me abrió su mente y aun leo aquel libro solo para recordar sus pensamientos tan locos que el tenía. Y sí, aun lo hago, después de todo este tiempo y para siempre.

9- Patrick se veía tan hermoso estudiando que en serio lamento no haberlo visto así mucho tiempo. Ojalá pudiese devolver el tiempo y quedarme horas y horas. Aunque si soy sincero no lo recordaba tan bien y me odiaba a mi mismo porque él comenzaba a desvanecerse de mi mente.

10 - Después de nuestra ruptura seguí yendo a Sunlax, me sentaba en la esquina y comprendí porque amaba sentarse así. Podías ver detalle de todos. Sunlax tenía clientes tan animados que se te pegaba la felicidad con tan solo verlos, solo qué para mi ya era muy tarde.

11- La luz no se refleja igual para todos. Mientras unos las hacen brillar más otros acaban opacandola. Estoy seguro que no existe nadie en el mundo que logre este efecto como Patrick lo hacía.

Camino por la calle con una mochila y una carta en la mano, he conseguido su nueva dirección y sin tardar más tiempo la dejo en el buzón del correo más cercano.

Y mientras la oscuridad del subterráneo me envuelve me siento en un asiento vacío, mirando como la luz va cayendo.

Apague la luz de tres personas.

Mi luz debía ser apagado.

El bosque que fue testigo del amor del doctor y el periodista y fue testigo de la última nota triste de amor de este último.

Mis ojos se cierran. La luz de Dereck se apagó para siempre.