Y
Dos fuertes gemidos resonaron cuando el suave colchón amortiguó la caída, sus cuerpos, ya desnudos, se rozaron, y amando la sensación, Namjoon empujó todavía más para volver a sentir el mismo cosquilleo.
—¡Joder! Para ya o harás que me corra, idiota —gruñó Hoseok, cuando en realidad solo quería que el mayor siguiera empujando contra él, pero dentro.
Lilith rio mientras entraba al cuarto siendo cargada por Jungkook, ambos también haciéndose un lugar en la cama para jugar con aquel par. Hoseok no tardó en apoyarse en uno de sus codos y atrapó la boca de la pelirroja mientras Namjoon acomodaba una almohada debajo de sus caderas. Él más que nadie sabía lo que eso significaba.
Solo bastó un segundo para que un ahogado jadeo sea liberado por el pelirrosa cuando el mayor de todos lo hizo abrir sus piernas para que sus labios se perdieran entre ellas. Después de un tiempo sin hacerlo, Hope ya se había vuelto estrecho y eso es lo que lo hacía más excitante para Namjoon.
—Me vas a estrangular el pene cuando te la meta —bromeó el moreno antes de volver a dar otra profunda lamida y al fin comenzar a penetrarlo con su lengua.
En ese momento, Hoseok no podía decidir qué se sentía mejor; si la estimulación en su entrada o los gemidos de Lilith que morían en sus labios mientras él apretaba esos pequeños y perfectos pechos.
Una nueva nalgada resonó y Lilith gimió aún más fuerte cuando esta vez, sintió dos dedos de Jungkook enterrarse en su trasero. En su maldita vida jamás pensó en explorar aquel lugar y hoy se preguntaba por qué se había tardado tanto tiempo. No sabía si eran solo los dedos de Jungkook y la increíble habilidad que parecía tener para tocar en los lugares exactos, pero ese maldito la estaba llevando a la gloria.
—Ah... como aprietas, muñeca —jadeó el pelinegro, bombeando más profundo y constante hasta hacerla susurrar una plegaria continua en la que solo su nombre era pronunciado.
Una nalgada más.
—D-Daddy... —soltó al final, mojándose aún más solo por el hecho de sentirse tan excitada cuando Hoseok la miró lujurioso al decir eso. Jungkook sonrió contento de al fin lograr lo que quería y no tardó en enterrar su tercer dedo en ella. Al principio suave y sin prisa, a pesar de que sus instintos primitivos le pedían que jodiera de una vez por todas aquel lindo trasero. No quería ser brusco y llegar a lastimarla.
—Ya n-no... No puedo más...
—Yo tampoco... —susurró Hope y ambos se sonrieron antes de separarse.
Namjoon pronto quitó sus dedos del interior del otro en un exquisito pop que lo estremeció por completo y Jungkook le dio una última nalgada a la pelirroja mientras se acariciaba a sí mismo, ansioso por lo que vendría. Lilith lo miró mal, fingiendo molestia por tantas nalgadas, pero terminó por sonreírle cuando éste se tendió sobre la cama, invitándola a que se recostara sobre su pecho.
—No, así no, bonita —le habló Hoseok cuando Lilith se acomodó sobre Jungkook, besando su pecho antes de intentar llegar a sus labios.
La pelirroja entonces se volteó y miró confundida a Hope. Éste, al igual que Namjoon, no dejaba de acariciarse mientras la esperaba.
—Esto será mejor —habló entonces Jungkook, ayudándola a girarse sobre él, pegando su espalda a su pecho que subía y bajaba al mismo ritmo frenético que el suyo.
Entonces, tomándola desprevenida, Jungkook se alineó con ella y comenzó a penetrarla lentamente queriendo morir cuando la estrecha cavidad comenzó a engullirse su polla. Casi que no necesitó empujar y Lilith de nuevo se preguntó por qué había esperado tantos años para curiosear con su trasero.
—Joder, no saldré jamás de aquí —Los demás rieron entre jadeos y pronto Hoseok se metió entre sus piernas, acariciando sus muslos y labios antes de llegar a su clítoris. Solo con un pequeño roce, Lilith casi lloró.
Esa sin duda había sido la mejor descarga que sintió su cuerpo y lo mejor era que no sería la única.
Mientras Jungkook, debajo de ella, la ayudaba a moverse, Hoseok se abrió paso entre esos finos labios que parecían darle la bienvenida y empujó hasta el fondo, rozando con toda la intención del mundo aquel único lugar que la haría llegar verdaderamente al cielo. Esta vez, la pelirroja lloriqueó y Hoseok jadeó cuando empezó a mover sus caderas en un lento y tortuoso vaivén. Sin duda, Lilith no era la única que se sentía arañar el cielo con las manos. Menos cuando Namjoon se abrazó con un brazo al cuerpo del pelirrosa, ambos sosteniéndose en sus rodillas, y ayudándose con su mano libre, se abrió paso entre las firmes mejillas del Hoseok. Jungkook y Namjoon también podían sentir lo mismo que los otros dos porque la estrechez de los cuerpos contrarios los hacían delirar tanto como ellos mismos hacían gemir a los otros. Y Lilith... joder, ella jamás se había sentido tan llena antes.
Sus uñas no tardaron en clavarse en las sábanas y en la cintura de Hoseok, tratando de sostenerse como pudiera mientras movía sus caderas queriendo sentir más a ambos mientras Jungkook se deleitaba con su cuello y de vez en cuando elevaba sus caderas solo para bombear más rápido, haciéndola ver estrellas detrás de sus párpados.
Lilith quería llorar porque eso se sentía tan bien. Incluso mejor que bien.
—Cambio —jadeó Jungkook cuando Lilith cayó sobre su pecho ya sin fuerzas en sus brazos y él se sintió lo suficientemente embriagado como para sostenerla. Necesitaba alejarse al menos un momento de esa lasciva entrada o juraba que se correría en los siguientes segundos.
Namjoon tomó esa como su oportunidad y abandonó el calor de Hoseok cuando éste lo miró por sobre su hombro.
—Creo que fue mucho para el pequeño —susurró Hope, bromeando mientras Lilith jadeaba en sus brazos.
—Déjenlo... en paz... —protestó ella mientras sonreía. Namjoon no tardó en tenderse en el lugar que anteriormente estaba Jungkook y abrió sus brazos para recibirla a ella quien no tardó en besarlo con un fuego creciendo en su pecho.
—Uhm... vaya bienvenida —susurró el moreno y devoró sus labios una vez más mientras separaba las piernas de Lilith y se perdía en su interior. Juró que sintió su pene contraerse cuando ella se estremeció por estar recibiendo también a Hoseok. En cuanto terminó de acomodarse entre las piernas de Namjoon, el pelirrosa separó las blancas mejillas de la mujer y la penetró suavemente. Ahora entendía por qué Jungkook todavía deliraba jadeando sobre las almohadas.
—Mierda, mierda, mierda —susurró y comenzó a empujar, olvidando su delicadeza quien sabe dónde. Lilith no tardó en comenzar a gemir mientras se aferraba a los hombros de Namjoon con éste también penetrándola con ímpetu. Lo peor es que no lo hacía profundo. Namjoon chocaba una y otra vez con sus paredes vaginales con el único objetivo de estimular aquel punto que la hacía delirar como nunca.
Esto ya era demasiado, pero incluso así, quería aún más.
Mucho más.
—No pares, no pares... —lloriqueó en los brazos del rubio cuando aceleró su empuje, sincronizándose con Hoseok. Jungkook, recostado en el respaldo de la cama no dejaba de tocarse por lo excitado que se sentía. Él sabía que esa mujer estaba hecha de fuego, pero no llegó a pensar que los haría arder a todos junto con ella.
De pronto, su polla dio un respingo cuando esos intensos ojos lo miraron, como llamándolo. Lilith le sonrió y él no tardó en acercarse cuando ella se apoyó sobre el pecho de Namjoon.
—Joder, muñeca... —jadeó cuando Lilith no tardó en tomar su pene y llevárselo a la boca. Sin preámbulos y vueltas, lo engulló hasta donde pudo antes de comenzar a succionar, al mismo tiempo que le acariciaba el resto.
Namjoon no tardó en aprovechar la posición para poder besar y morder esos rellenos pechos que tanto amaba. Sentirlos como se endurecían todavía más entre sus labios, era una sensación única de la que jamás se cansaría. De la nada gruñó desde abajo al mismo tiempo que Hoseok cuando ella contrajo sus músculos vaginales. Lo había hecho a propósito. Lo supo por la mirada pícara que le dio antes de volver a engullir el pene de Jungkook.
Joder, esa mujer sí que iba a volverlos locos.
Fue entonces cuando cruzó miradas con el pelirrosa y ambos se sonrieron de acuerdo y listos para su venganza. Namjoon no tardó en sostenerla con firmeza de sus caderas y Hope separó aún más sus mejillas. En perfecta sincronía, ambos comenzaron a penetrarla en un constante y certero vaivén que la hizo gritar e implorar el nombre de los dos mientras la llenaban. Para ese instante, la habitación ya era inundada por gemidos, jadeos y gruñidos acompañado del sonido de sus cuerpos chocando entre fluidos, extasiándose con el olor a sexo.
Jungkook no tardó en tomarla por el cabello y Lilith se llevó de nuevo toda su extensión a la boca. Todos estaban a su límite. Todos se encontraban arañando el clímax, embriagándose con las sensaciones que algunos se encontraban sintiendo por primera vez.
Pronto Lilith chilló y fue la primera en correrse cuando Hoseok acarició su clítoris, metiendo la mano entre sus cuerpos. A ella le siguieron el moreno y él, al sentir aquella exquisita presión sobre sus falos tan tiesos como rocas que bombearon un par de veces más hasta vaciarse por completo en su interior. Y, por último, Jungkook, ayudado por la lujuriosa vista y su mano que bombeó duro la base de su pene hasta descargarse en la boca de la pelirroja. Incluso sintió que se podía venir de nuevo solo con verla mirarlo de esa manera, mientras se relamía los labios, tragándose toda su esencia.
—Por una mierda —jadeó, dejándose caer hacia atrás —. Esto le hará mal a mi corazón —habló agitado y los demás rieron igual de deshechos que él.
—Eso fue increíble —confesó Hoseok. Al igual que Jungkook, él también se había desplomado en el borde de la cama luego de abandonar el interior de la pelirroja. El único que todavía estaba dentro de ella, era Namjoon.
—Más que increíble —susurró Namjoon, acariciando los cabellos de su amada mientras ella respiraba agitada sobre su pecho —. ¿Te sientes bien, nena? ¿No te lastimamos?
Lilith asintió y luego negó a sus preguntas y sonrió antes de abrir sus ojos y besarlo. Se sentía casi como una bebé recién nacida que no podía controlar su cuerpo e incluso no recordaba cómo hablar.
—Tomaré eso como un: fue increíble y el mejor de todos fue Namjoon.
Lilith se carcajeó cuando los otros dos gritaron un «¡Oye!» y comenzaron a atacarlos con almohadazos. Aquello incluso se sentía como la primera vez de unos adolescentes que terminaban en peleas divertidas luego del sexo; con la diferencia de que ellos no eran solo dos, sino cuatro.
—¿Se imaginan si Yoongi hyung hubiera estado aquí? —rio Jungkook —. Creo que ya se habría desmayado solo con ver a Lilith chupándomela en la sala.
Cuando se dio cuenta que él era el único que todavía reía, su cerebro pareció hacer clic y no tardó en darse cuenta de las miradas que lo atravesaban. Hoseok y Namjoon, parecían querer comérselo vivo mientras que Lilith lo veía sorprendida.
—¿Yoon...gi? ¿Min Yoongi de...? ¿Mi Min Yoongi de Marketing? —tartamudeó ella y los dos mayores se golpearon la frente con sus palmas.
—¿Ups? —soltó Jungkook, sabiendo que había metido la pata. Se suponía que no debían revelar la identidad del resto porque así lo habían acordado y porque habían elegido un orden para confesarse a Lilith.
Casualmente, Yoongi iba a ser el último porque todavía no se sentía preparado para ello.
—Bien, metí la pata, pero por favor, muñeca, no se lo digas a Yoongi hyung porque sé que es capaz de castrarme —lloriqueó, haciéndola reír por ser tan tierno. Ciertamente, Lilith más que nadie conocía el duro carácter del señor Min, su mano derecha en el área de Marketing.
De pronto se sintió curiosa. Jamás se habría imaginado que Yoongi sería uno de los hombres que decían estar locamente enamorados de ella. Y fue entonces cuando se preguntó cómo intentaría conquistarla. Por primera vez, la curiosidad fue más grande.
—Quiero a Yoongi.
—¿Eh? —soltaron los tres, mirándola boquiabiertos cuando ella se acomodó mejor sobre el pecho de Namjoon, reposando sus brazos bajo su mentón.
—Que quiero a Yoongi —volvió a repetir, entretenida por sus caras —. Quiero que él sea el siguiente en aparecer —pidió, sonriendo de forma traviesa frente a esas miradas sorprendidas.
(2/2)
Espero que les haya gustado este regalito 7u7
Se supone que esta semana no actualizo, pero todo sea por mi esposa que hoy cumple años.
PD/ no sé por qué siento que la narración de este lemon fue mejor que las anteriores 😂 Quizás solo deba dedicarme a narrar orgías :v
Nina Glastor❤
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