⚠️Capítulo 5 El asesinato.⚠️
Stefan P.O.V
Me había levantado antes que mi hermana a escribir en mi diario y Damon que estaba duchándose seguramente iría después a despertarla. De pronto me mandó un mensaje Klaus y bajé abajo a llamarle en el porche para que Luna pudiera seguir durmiendo y no se enterase.
- ¿Cómo ha logrado escapar Connor? - pregunté serio.
- Yo diría que es culpa de la incompetencia. Pero señalar culpables no me ayudará. Lo harás tú - contestó.
- Podría estar en cualquier sitio - repliqué.
- Piensa, Stefan. Si se llevó la cabeza del híbrido, es que quiere veneno de hombre lobo - dijo tan tranquilo.
- Pretende quedarse en Mystic Falls para matar vampiros - reflexioné.
- Qué pena que esté tan lejos desenterrando a un cazador porque sin acceso a mi sangre, no tenéis antídoto. Sin embargo, ese tatuaje es el único mapa hasta la cura así que tu tarea es muy sencilla. Búscale, captúrale y, sobre todo mantenlo con vida. Muerto no nos sirve - dijo algo molesto.
- Damon le está buscando. Si se cruza en su camino... - empecé a decir.
- Mantén a Damon controlado - dijo empezando a ponerse nervioso.
- Sería más fácil si les dijera la verdad a él y a Luna. Luna nos podría ayudar con sus poderes de diosa a capturarlo - dije estresado.
- ¿Le confiarías a Damon la cura? - preguntó.
- Yo creo que prefiere a Luna tal como está - añadió.
- Buen intento, pero confío en Damon y Luna mucho más que en ti, sobretodo en Luna - contesté.
- Yo no confío en nadie. Por eso mi hermana yace con una daga clavada - dijo.
- Cuanta más gente sepa lo de la cura más gente intentará buscarla. Hay naciones que han ido a la guerra por menos - añadió explicando.
- Escúchame bien: si lo cuentas, lanzaré la Espada del Cazador al mar y la búsqueda acabará ahora mismo. ¿Me has entendido? - me amenazó.
- Sí, está bien - contesté colgando el teléfono.
De pronto Emma vino echa una furia.
- Papá, Nathan no para de perseguirme para asustarme - gritó ariscamente como si se tratase de una gata. Eso lo había heredado de su madre.
- Ve a hablar con tu madre cuando se despierte, yo tengo cosas que hacer - contesté intentando que se calmase.
Luna P.O.V
Estaba tan tranquila durmiendo cuando de pronto noté unos labios sobre los míos y acabé despertándome para encontrarme a Damon besándome y Emma haciendo una mueca de asco.
- Me encanta despertarte, eres tan tierna... - comentó con una tierna sonrisita.
Emma se acercó a mí y yo me levanté para vestirme. Aunque Damon me empujó de vuelta a la cama diciéndome.
- Tú, te quedas ahí, tenemos cosas pendientes - dijo empujándome de nuevo a la cama.
- Mamá, dile a Nathan que deje de acercarse a mí. Estoy harta de que me esté asustando - se quejó enfadada.
- Vale, yo se lo diré - contesté provocando que se fuera algo molesta.
- Me voy a dar un paseo para calmarme - dijo yéndose.
Cuando se fue Damon me miró y comentó.
- Stefan está raro - comentó
- Ya - contesté algo preocupada por él mientras me levantaba a vestirme.
- Mmmm... - se quejó de morritos.
- Llámale con tu móvil, a mí no me lo coge - añadió cogiendo mi móvil para mirarlo.
- Te lo advierto, voy a cambiar la contraseña - le dije mirándole con desafío.
- Tienes algún secreto de diosa que esconder - contestó a mi provocación para pasarme el móvil.
- Te noto preocupado por nuestro hermano - comenté cambiando de tema con una sonrisa para llamar a Stefan.
Al cabo de un rato saltó el buzón de voz y me puse triste. Colgué la llamada y Damon me rodeó con su brazo.
- O bien nos está evitando a los dos... - empezó a decir.
- O algo va mal - terminé de decir con preocupación.
De pronto nos llegó un mensaje diciendo que en el Mystic Grill estaba el cazador con rehenes y uno de ellos era una niña.
- ¿Qué vamos a hacer? - le pregunté a Damon con bastante preocupación.
- Dejaremos para luego nuestro sándwich sexual - dijo abrazándome para tranquilizarme.
De repente nos llamó Tyler a su móvil y nos reunimos todos en el salón.
- Entramos por puertas distintas y atacamos a la vez - propuso acariciándome para que no estuviera nerviosa.
En cuanto llegó Stefan corrí a abrazarle entre lágrimas.
- ¡Stefan! - dije abrazándole.
- ¿Dónde te habías metido? - le preguntó Damon.
- ¿Tenéis algún plan? - preguntó abrazándome.
- Sí, el plan es que voy a arrancarle el corazón a Connor y se lo voy a hacer masticar - contestó Damon.
- Se lo vamos a arrancar - añadí entre lágrimas.
- Tenemos que ir con cuidado. Connor tiene a Jeremy, Emma, Alura y a saber cuantos más rehenes - dijo provocando que Damon se pusiera serio.
- Pues va a ser más complicado - comentó con seriedad.
- Damon, tiene razón. Connor es fuerte pero no va a poder con todos - dije secándome las lágrimas con preocupación.
- He pedido ayuda a los híbridos - dijo Tyler.
- Esto hay que pensárselo muy bien - dijo Damon con seriedad. Desde que volví fue la primera vez que lo vi tan serio.
- Mi madre ha mandado cortar las calles. Dirán que es por el mantenimiento del gas. Vámonos - dijo Caroline.
- Un momento. No vais a ir todos - dije.
- Tengo poderes de sobra para cargármelo en un instante - añadí.
- Luna, no vas a ir tu sola - dijo Elena.
- Claro que sí, soy una diosa. Me puedo encargar de esto yo sola - dije.
- A mí me disparó nueve veces. Si vamos a martarle quiero ir - dijo Tyler.
- Tiene a Jeremy, voy a ir - dijo Elena.
- Nadie va a ir a ningún sitio hasta que averigüe dónde nos estamos metiendo - dijo de pronto Stefan.
- ¿Hasta que tú lo averigües? - preguntó Damon molesto.
- ¿Qué has desayunado? Estás muy marimandón - añadió enfadado.
- Ese tipo es experto en trampas. Sería absurdo meternos en una y más si tiene veneno de hombre lobo - contestó Stefan.
- Yo podría hacerlo - agregué.
- ¿Tiene? - preguntó Elena.
- Lo ha tenido - contestó Stefan.
- Bien, Bien. Si quieres hacer un reconocimiento tienes una hora. Pero vamos a necesitar más ayuda. ¿Y la malvada bruja del Oeste? - dijo Damon enfadado.
- No puede hacer magia - contestó Caroline.
- ¿En serio? Pues llámala y dile que... - empezó a decir mi hermano.
- Lo haré con Leah - contesté llamándola.
- No, déjalo, podemos hacerlo sin necesidad de Leah - dijo Stefan para mí.
Nos pusimos a organizarlo todo y Damon y yo nos quedamos en el piso de Alaric.
- No puede ser verdad - le dije preocupada.
- Sí, Emma te dijo que iba a dar una vuelta pues luego seguro que se llevó a Alura con ella para molestar a Nathan - dijo Damon con enfado.
- Vale - contesté con preocupación.
- Eh..., yo me ocuparé de todo, no te preocupes - contestó besándome para tranquilizarme.
- Cuando todo termine necesito acostarme con vosotros dos - le dije agarrándome de su camisa.
- Sí, sí, tranquila, pronto tendrás tu sándwich sexual - me dijo poniéndose de morritos.
- Estoy deseándolo - contesté sonriendo.
- Sí, yo también - dijo agarrándome un pecho para provocarme.
- ¡Ah! - gemí.
- Bueno, preparémonos, hay que salvar a nuestra hija y a tu hija - dijo besándome.
Entre los dos recogimos las armas que tenía Alaric en su piso y cogió un mapa para extenderlo en una mesa. Entonces le pregunté.
- ¿Qué es eso? - le pregunté.
- Nuestra vía de entrada. A Alaric le interesaba la ruta del Ferrocarril Subterráneo de Mystic Falls - contestó.
- Túneles, como los de la propiedad Lockwood - comenté.
- Sí - contestó cogiendo su móvil para hacer una foto del mapa.
De pronto me llamó Stefan y se lo cogí.
- ¿Qué has averiguado? - preguntó Damon quitándome mi móvil. Odiaba cuando hacía eso, me ponía nerviosa.
- Solo he oído las voces - contestó.
- ¿Cuántos rehenes? - preguntó Damon.
- Cinco, pero tiene a Matt y a April Young - contestó Stefan.
- Oh, no - dije preocupada.
- Serán idiotas. Atraen el peligro - se quejó nuestro hermano.
- Tenemos que sacarlos de allí - dije nerviosa.
- Necesito un rato más - contestó Stefan.
- Se acaba el tiempo, hermanito - le recordó Damon.
- Preferiría que te ahorraras el comentario - dijo colgando el teléfono.
Mi hermano dejó mi teléfono en la mesa y le dije con seriedad.
- Me voy a esos túneles - dije con seriedad cogiendo mi móvil.
- No, quieta. Ese tío no sabe que eres vampira y menos diosa. Es mejor así - me dijo sujetándome de la muñeca.
- Por eso mismo. Puedo ofrecerme a cambio de que libere a los rehenes - dije soltándome.
- No, lo mejor que puede pasarte es que acabes siendo su rehén. Y como la cosa se tuerza te descubrirá y te matará al momento - dijo volviéndose a sujetarme de la muñeca.
- Te recuerdo que no puedo morir si no es por kriptonita celestial y aunque muera volveré a la vida y deja de tratarme como si no pudiera defenderme. Las brujas me prepararon y me entrenaron - dije molesta.
- ¿Crees que puedes cargarte a un asesino profesional? - me preguntó enfadado.
Con su velocidad vampírica cogió una estaca y se acercó a mí diciendo.
- Pum, estás muerta. ¿Y ahora qué?- me dijo.
Me deshice de la estaca de mi hermano y me tiré a la cama encima de él.
- Gané, porque soy también diosa y la estaca no basta para matarme - dije con una sonrisa coqueta.
Él sonrió y comentó.
- Para no querer parecerte a mí se te da muy bien - dijo apartando mi mano en la que tenía la estaca.
- Sí que me gusta parecerme a ti pero también a Stefan - contesté sonriendo por la sonrisa que había puesto.
De pronto él empezó a pasar sus manos lentamente a modo de masaje por mis piernas.
- Qué bien que hayas decidido ponerte una blusa y una falda - comentó sensualmente besándome para comenzar a lamerme lentamente.
- Nuestra hija y mi hija son todo para mí al igual que lo sois vosotros y lo son sus hermanos. Si algo les pasara... - dije preocupada empezando a notar su respiración agitada.
- Las sacaremos. Palabra - me prometió tranquilizándome.
Me bajé de él y me dijo al ver la notificación de su móvil.
- Ya viene Stefan. Todo acabará pronto - dijo tranquilizándome.
- ¿Tienes el mapa del túnel? - preguntó entrando Stefan.
- Lo encontré. En el cajón de las armas con siete estacas, una ballesta rollo MacGyver y los últimos restos de verbena de Mystic Falls. Venga, ya es hora de rescatarlas - contestó nuestro hermano.
- Aún no. Klaus envía a uno de sus hombres. Irá por delante y tú y yo por los túneles - replicó seriamente además de nervioso.
- ¿Desde cuándo nos asociamos con Klaus y sus lameculos? ¿Y por qué nuestra hermana no puede ayudarnos? Es más poderosa que todos nosotros juntos - replicó Damon con enfado poniéndome detrás de él.
- Te he dicho que Connor tiene veneno de hombre lobo. Nos conviene que lo use y los híbridos son inmunes. Es lo mejor - contestó Stefan.
- ¿Y cómo sabes que tiene veneno? ¿Por qué has metido a Klaus en esto, Stefan? - preguntó Damon mientras yo rodaba los ojos molesta por su discusión.
- No seas paranóico, Damon - dijo Stefan.
- Pues di la verdad, Stefan. ¿Por qué has metido a Klaus? ¿Te ha obligado? - preguntó con desconfianza.
- Te he dicho la verdad, es la mejor forma de sacarlos a todos - contestó Stefan.
- Vale ya, parad. Los dos - dije poniéndome entre los dos.
- Tiene razón, a la mierda el plan. Mataré a Connor yo mismo - dijo Damon andando hacia la puerta.
De pronto Stefan con su velocidad vampírica cogió una estaca de verbena y se la clavó en la espalda.
- Vale, se acabó - dije separándolos para inmovilizarlos con mi mente aunque Damon ya estaba inconsciente.
Dejé a Damon tumbado en la cama y me acerqué a él para acomodarlo encima de la cama como si fuera la hermana mayor. Le besé cariñosamente y dije.
- No entiendo qué te pasa, Stefan, pero espero que sea importante - dije liberándolo de mi control.
Se acercó a nuestro hermano para cogerle el móvil y mirar el mapa explicando.
- Ha tenido una buena idea con los túneles. Pero no entraré si no cuento con él para hacerlo a mi manera - explicó.
- Pero si le has dado verbena - me quejé entre lágrimas. Odiaba enfadarme con él.
- ¿Crees que le importan April, Matt o Jeremy? Sacará a Emma y a Alura, pero después irá a por Connor aunque haya heridos - explicó.
- Pues voy contigo - contesté sentándome encima de la cama al lado de nuestro hermano mayor para acariciarlo.
- Lo siento, hermanita, pero esta vez es diferente - dijo.
- Necesitas mi ayuda - insistí.
- ¿Y si Connor ataca y tienes que defenderte? ¿Y si tienes que matarle? La culpa te hundirá - explicó preocupado por mí.
- Pues me defenderé y le mataré. Soy diosa - contesté.
- Pero no puedo esperar más. Si le pasa algo a Emma y a Alura... - añadí de los nervios parando de acariciar a Damon.
- Sacaré a Emma y a Alura, ¿vale? Te lo prometo, hermanita - me prometió abrazándome.
- Te quiero - le dije algo más tranquila.
- Y yo - contestó besándome.
Al cabo de un rato nos separamos y se fue. Entonces me volví a sentar en la cama.
Durante un rato estaba todo tranquilo pero de pronto escuché una explosión en el Grill y me preocupé pero decidí no llamarlo al notar cómo Damon se despertaba. Me acerqué a su cama y lo llamé.
- Damon - le llamé acariciando sus mejillas para que se despertara.
- ¿Puedes levantarte? - añadí preguntando.
- ¿Dónde está Stefan? Voy a matarle - preguntó furioso levantándose de la cama y quemándose al entrar en contacto con un rayo de sol.
- ¿Te ha quitado el anillo? - pregunté sin creerme lo que estaba viendo.
- Nos la está jugando - contestó molesto.
- No, él nunca nos la jugaría y menos a mí. Tiene que estar pasando algo importante que es mejor que no sepamos - deduje.
- Es mejor que entre ahí - añadí.
- ¡No, Luna, este tío es peligroso! - me dijo preocupado por mí.
- Yo también, Damon - contesté gritando. Esa fue la primera vez que le grité a uno de mis hermanos con enfado.
- Lo siento por gritarte - dije enfadada poniendo mi mano en su mejilla para tranquilizarnos los dos.
- Luna, estás cambiando - dijo al notar mis bigotes de gato, orejas de gato, zarpas de gato y cola de gato.
En cada una de mis zarpas me aparecieron dos mini bolas de energía que eran supernovas a escala reducida.
- Tienes que ser lista. No sabe que eres una vampira y una diosa. Acércate todo lo que puedas y mátale - me explicó.
Asentí y salí a la calle. En cuanto empecé a andar noté como el suelo se agrietaba con cada paso que daba. Caminé hasta el restaurante y decidí entrar por la puerta irrumpiendo la discusión. Al entrar todo el mundo se quedó mirándome con una mezcla de confusión, sorpresa y alivio al verme en mi forma medio humana. Vi que detrás de Stefan estaban Alura y Emma que estaban muy tranquilas. Entonces me acerqué al cazador y le tiré las dos bolas de supernova diciendo con enfado.
- Nadie se mete con mi familia - dije matándole en el acto.
Por suerte redirigí parte de la explosión a mí para que mi cuerpo la absorbiera, así nadie salió herido ni hubo si quiera daños en el restaurante en sí.
- ¿Qué acaba de pasar? - preguntó Jeremy átonito.
- No lo sé, supongo que me he dejado llevar por las hormonas de ser mamá. Lo siento - contesté disculpándome con Stefan.
Nos miramos y él lo dejó estar aunque lo noté algo triste.
- Mamá, mamá - me llamaron Emma y Alura corriendo hacia mí.
- No, esperad, tenemos que hacer un reconocimiento para ver si hay más trampas - dije algo mareada provocando que Emma resoplara con cara de enfado y Alura la copiara sin entender lo que pasaba realmente.
La cola, las orejas, las zarpas y los bigotes de gato me desaparecieron y al acercarme a comprobar un felpudo acabé en el suelo.
No sé cuanto tiempo pasó ni si estuve muerta pero me desperté en la cama de Damon y ellos estaban abajo discutiendo sobre una cura contra el vampirismo que ya no era posible porque había matado a Connor. Cuando bajé Damon estaba intentando sacarle el corazón a Stefan de la rabia y la impotencia que sentía pero yo lo paré con mi mente.
- ¡Ya basta! - grité entre lágrimas.
- Me rompe el corazón ver cómo os peleáis - añadí.
Ellos se miraron y se acercaron a mí para darme su apoyo.
- ¿Y los niños? - pregunté.
- En casa de tu madre - respondieron los dos.
- He oído lo de la cura, pero no pasa nada. Estoy bien así - dije sentándome en el sofá para tranquilizarme.
- Si quieres te lo explicamos todo mañana - propusieron los dos.
- Vale - contesté sin querer escuchar nada más.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro