Jeon pasó sus brazos por debajo de los muslos del platinado y lo alzó, dejando que este enterrara su nariz en su cuello para que siguiera aspirando su aroma.

Comenzó a caminar a su cabaña con el cuerpo del omega en manos, apretando los dientes por la furia de su lobo, este quería salir en busca de ese alfa y clavarle los dientes para que dejara de acosar a su omega.

Pero había algo que no lograba entender, a pesar de la neblina que opacaba sus sentidos, recordaba y todavía siente aquella desesperación que sabe no es suya.

— No permitas que tu juicio se nuble, Kook, por favor, no vale la pena que manches tus manos por alguien que no lo vale — Sintió la voz de JiMin ser amortiguada por su cuello, suspiró y besó como pudo su sien para seguir caminando hacia la cabaña.

Al llegar subió a su habitación y dejó al platinado entre las almohadas de su colchón, donde el omega busco inmediatamente el aroma del azabache en ellas.

— Iré a prepararte un té, para que puedas recuperarte — acarició y besó sus hebras platinadas antes de salir de su habitación. Y bajar a la cocina para preparar todo. No quería decirle nada a JiMin de lo que les pasaba, pero estaba seguro de algo, que él también sentía lo mismo que él sentía.

Dejó el agua calentarse y sirvió las galletas que el platinado traía antes de que se aferrara a su cuerpo. Fue cuando vio aquella invitación de color platinado con detalles turquesa, la tomó entre sus dedos y suspiro al ver la fecha. Levantó su mirada hacia la pared que estaba a su costado viendo el calendario que tenía, dándose cuenta que el festival sería dentro de seis días. La dejó nuevamente en la encimera y subió nuevamente para poder mimar a su pareja destinada.

Al entrar vio al platinado aferrado a una de sus almohadas y sería tonto de su parte sentir celos por esa almohada, pero realmente es un tonto. Se acercó al colchón y dejó la charola en la mesa de noche para poder acomodarse sobre la cama.

— JiMin, toma esto para que puedas sentirte mejor — lo tomó de los hombros y lo posicionó a un lado suyo, sujetó la charola y la colocó en sus piernas para luego pasarle la taza con el té al platinado. Quien la sujetó gustoso y le dio un sorbo.

— Gracias, Kookie — le sonrió. El alfa acarició su mejilla con una sonrisa. — ¿Cómo es que te diste cuenta?

— ¿De qué, Minnie? — JiMin sonrió por el mote que había usado el chico, pero no debía desviar su atención.

— De qué te necesitaba.

El alfa solo asintió y se encogió de hombros — Escuche a tu lobo llamar al mio, al igual que pude sentir miedo y  desesperación, el cual no era mío — respondió.

— Yo también sentía desesperación y ansiedad, pero no era mío, no era algo que provenía de mí — respondió y entonces Kook lo entendió.

— ¿Crees en los lazos sin necesidad de marca?

— ¿Te refieres a los lazos que se crean por medio de los lobos? — El azabache asintió.

— Nuestros lobos ya se marcaron, creo que por eso nosotros sentimos lo que el otro siente, y tu usaste la voz de tu omega para llamarme, esa voz que solo yo puedo escuchar.

— ¿Mi voz de omega? No sabía que tenía una voz para mi lobo.

— Es como la voz de mando, pero los omega la usan solo para que su alfa pueda escucharlos e ir a su encuentro en alguna situación en que se sientan en peligro o cuando están en sus ciclos.

El omega asintió y sonrió — ¡Tengo voz de mando! — bailo levemente mientras estaba sentado sacándole una risa al azabache quien lo observaba con cariño.

— Sonríe siempre, por favor, luna mía — JiMin se detuvo y lo miró sin entender — Tú sonrisa me da vida, pero si lloras, dime la razón, dime lo que te atormente, lo que te hace feliz, todo, todo quiero saber.

JiMin asintió y solo pudo reaccionar de forma en que se sentó sobre los muslos del azabache y lo abrazó de su cuello, ocultando su rostro en la curvatura de este, sintiendo como JungKook hacia la misma acción.

El aroma del alfa estaba mucho más intenso, algo que le gustaba y mucho, jadeo gustoso al percibir tanto de sus feromonas, algo que nunca había hecho.  Mientras que el azabache respiraba profundo sintiendo como el aroma del omega fuera un catalizador para su lobo.

Jeon se deslizó por la cama, dejando al omega sobre su cuerpo mientras que él estaba con su espalda pegada al colchón y sus manos aprisionaron la cintura del platinado.

A la mañana siguiente el omega se despertó con las emociones a flor de piel, ese día tenía que ir a la plaza a ver como montaban la tarima para el festival, el cual sería dentro de cinco días.

Se alistó y esperó a su padre omega, ya que este le había dicho que lo acompañaría. Ambos caminaron entrelazados de sus manos, siendo el centro de atención de los lobos de aquel pueblo.

— Omega líder, que grato es verlo por la plaza — el omega mayor asintió y sonrió por aquello. El platinado miró a su padre y el como este era querido en el pueblo.

— Cuando sea tu sucesor, quiero ser como tú, lo deseo mucho, papá — el mayor sonrió cálidamente a su hijo.

Ambos llegaron al centro de la plaza y vieron a los lobos alfas que estaban trabajando en el armado.

— Omega líder — uno de ellos se detuvo y se acercó a ambos — Ya estamos preparando todo para comenzar, nos gustó mucho el sitio en donde estará este año. La sombra con la luz natural será magnífica en este festival.

— Es bueno saber que el sitio será el adecuado, hay que reconocerselo a mi hijo, quien se ha encargado de los preparativos.

El menor sonrió tímido y se separó de su padre para ver cómo armaban todo.

Dentro del bosque un alfa acababa de despertar, pero con cierto problema el cual se había olvidado.

— Joder, aún no era el tiempo — gruño y se removió con el sudor recorriendo su rostro.

Se levantó y se quitó la camisa que tenía puesta, sintiéndose menos sofocado con ella.

En sus pantalones era otro cuento, la presión dentro de su pijama era molesta, quería deshacerse de ese dolor pronto.

— Ahgr — se dio la vuelta y se sostuvo del respaldo de su cama mientras sus caderas embestian una de sus almohadas, sintiendo el roce de su miembro aún dentro de su ropa con la almohada de su habitación.

Solo esperaba que cierto omega no lo visitará ese día, porque su celo no podría soportarlo estando a su lado. El ritmo que mantenía entre sus embestidas era variado. La fricción de la almohada la sentía tan apaciguadora para su necesitado miembro que no para de pedir a gritos el ser enterrado en algo; su lobo estaba llamando fuertemente al omega que necesitaba en esos momento. Y aunque él también quiere que el omega lo ayude con su ciclo de calor prefiria que este quedara fuera de esto para no lastimarlo.

— Joder. Mhmg — arremetió contra la almohada sintiendo como su parte baja se inflamaba más alertando de que su eyaculación está próxima. No soportó más y aumentó el ritmo haciéndolo esta vez mucho más rápido y desordenado.

Sus colmillos estaban creciendo y le picaba mucho, queriendo clavar sus caninos en algo, queriendo que ese algo fuera el cuello del platinado.

— ¡Aah, JiMin! — clamó el nombre de su omega mientras se aferraba mucho más fuerte al respaldo de su cama, el cual se movía y golpeaba la pared bruscamente — JiMin — Se abalanzó a la almohada que estaba más cerca de él y clavó sus colmillos justo en el momento en que su semen fue derramado dentro de su chándal.

Se dio la vuelta y se quedó viendo hacia el techo, se sentía muy pegajoso a causa de su eyaculación — Qué desastre eres, Jeon, pareces un animal — se puso de pie y miró su cama, en la cual podía encontrar dos de sus almohadas completamente destruidas.

Suspiro cansado y se encerró en su baño para darse un baño de agua helada y ver si su pene cooperaba para bajar su inflamación.

En la plaza del pueblo ambos omegas miraban con asombro como ya la tarima estaba ensamblada — Esto se verá hermoso en el festival, lobito — el omega mayor no podía creer lo que veía, nunca se hubiera imaginado ver la tarima a ese lado de la plaza. Cuando siempre la ponían frente a la fuente que se encontraba en medio, pero ahora podía ver que de esta nueva forma adquirieron mucho más espacio para la pista.

— Las decoraciones son lo único que hace falta, estoy muy emocionado, esto lo he planeado con ayuda de Tae y de HoSeok y está quedando hermoso. Aunque quiera llevarme todo el crédito no puedo — sonrió y suspiro.

— ¿Irás a ver a JungKook? — su padre le cambió de tema al verlo tan impaciente.

— Siento que me necesita, mi lobo me lo ha estado repitiendo desde hace dos horas — le respondió — ¿Puedo ir?

— ¿Qué es lo que te dice tu lobo? — le pregunto, era extraño que su hijo sintiera un llamado de parte de su destinado aún sin una marca.

— Que nuestro alfa nos necesita, que tenemos que ir a ayudarlo — le respondió a su padre. Quien ya se había hecho una idea de lo que ocurría, pero... ¿le diría a su hijo lo que pasaba?

— Ve, y no te preocupes, regresa mañana o pasado a  casa. Quédate a dormir con él, eso sí, por favor no me hagas abuelo — suplico en broma haciendo reír al platinado quien solo lo abraza para recoger sus cosas y salir en busca de su lugar seguro.

Caminó durante un rato por el bosque recorriendo el camino que ya tan familiar le era, donde encontró justo detrás de aquellos árboles la cabaña la cual ahora le parecía aterradora, pero a la vez le recorría una corriente que lo hacía querer correr en busca del alfa.

Camino hasta acercarse al pórtico donde se detuvo ante el aroma que salía detrás de la puerta, el aroma a chocolate y coco lo estaba embriagado, hasta el punto de casi perder la visión.

Tocó la puerta suavemente, y esperó a que el alfa abriera, pero no podía pasar por alto las ansias que le recorrían el cuerpo.

Unos segundos bastaron para que la puerta fuera abierta por un azabache de cabellos desordenados. JiMin observó su rostro notando el leve sonrojo que este tenía, al igual que la apariencia tan acalorada que este se cargaba, bajo su mirada recorriendo toda la corpulatura del alfa quien respiraba erráticamente al sentir el delicioso aroma del omega frente suyo.

El sudor que recorría por el pecho desnudo de quién era su alfa ocasionó que quisiera llamarlo, su respiración se aceleró al igual que su pulso solo con sentir las feromonas del azabache.

— JiMin — El platinado levantó su mirada encontrándose con aquellos ojos bañados en lujuria, pero lo que más le llamaba la atención eran los destellos de rojo que querían bañar sus iris cafés — Vete, no debes de estar aquí — le pidió entre con su respiración acelerada, forzando a que las palabras fueran coherentes.

— Pero... — Él omega trató de hablar, a lo que le fue casi imposible de llevar a cabo ante la nueva ola de feromonas que soltó su alfa.

— JiMin, por favor vete — se alejó de la puerta, pero el omega no permitía que hubiera más de medio metro entre sus cuerpos — No te acerques — le pidió extendiendo sus manos mientras caminaba hacia atrás.

— Quiero ayudar a mi alfa en su celo, permíteme, ayudarte por favor — se acercó sintiendo como entre sus piernas escurría su lubricante natural causado por la excitación y estimulación que  le causaba el aroma a chocolate con aquel coco tan fresco.

— ¡No te acerques! — Jeon había usado su voz de mando para detener al omega, quien se detuvo y bajó su rostro mostrando sumisión ante su alfa.

Jeon se arrepentía de haberlo hecho, pero no quería perder la cordura ante su destinado, no quería hacerle daño. Pero al ver como este soltaba lágrimas sin verlo, hizo que se odiará por ser el causante de esas lágrimas.

— Veo que mi alfa no me desea como pensé — Soltó aun con su mirada hacia el piso — Está bien me iré.

Se dio la vuelta para salir de la cabaña, pero unos brazos fuertes lo sujetaron de la cintura. El aroma del alfa ahora lo podía sentir mucho mejor, haciendo que casi soltara un gemido por lo estimulante que fue y por sentir como este acariciaba su cuello, escarbando en este para poder sentir más su aroma a dulce de leche.

— Joder — El alfa gruño, realmente no podía dejar ir a su omega con el pensar que el no lo desea — No sabes cuanto te deseo, no sabes cuanto deseo ver una marca aquí — restrego su nariz en su cuello — Pero tengo miedo de lastimarte, no me reconozco en este estado y ahora que te he encontrado no quiero hacerte daño.

JiMin se dio la vuelta y se aferró a la cintura del más alto quien siguió con su nariz enterrada en el cuello del platinado.

— Yo quiero cuidarte, Kookie, no importa si no estamos listos, solo quiero pasar tu celo junto a ti — le pidió mientras que acaricia entre medio de su pecho con su nariz.

El alfa asintió y tomó de los muslos al omega para cargarlo, logrando que el más bajo enredara sus piernas en la cadera del azabache.

Ambos subieron hacia la recámara del alfa, quien repartía pequeños besos sobre el blanquecino cuello del omega. Quien suspiraba y acariciaba las hebras azabaches, enredándose entre sus dedos.

Al llegar a la habitación Jeon dejó sobre el colchón al más bajo mientras que este se acomodaba un poco más arriba y el alfa se posiciona entre medio de sus piernas, dejando su cabeza sobre el pecho del platinado.

— Solo dame caricias, mi lobo necesita las caricias de nuestro omega — le pidió mientras posaba sus manos en el torso del omega.

JiMin asintió y comenzó a acariciar el cabello del azabache. Suspiro porque sentía la humedad de sus piernas más la viscosidad que estas tenían a causa de sus fluidos. Y no ayudaba mucho tener una vista de la espalda desnuda del azabache que estaba sobre su cuerpo; pero, no podía hacer nada, su alfa aún no quería dar ese paso con él.

Jeon logró quedarse dormido solo con el aroma del omega y sus caricias, realmente agradece a su lobo porque éste cooperaba con su racionalidad para no lanzarse y hacer suyo al omega bajo su cuerpo. Más cuanto sintió aquella humedad debajo de los pantalones del platinado.

JiMin sintio la respiración más calmada del azabache, este se había quedado dormido sobre su cuerpo. Sintió una calidez en su pecho al verlo dormir tan tranquilo. Le gustaba sentir la respiración del más alto cerca de su cuerpo.

— Mi alfa — sonrió y se permitió que los brazos de morfeo lo envolvieron también.

2532 palabras contiene este capítulo, jejes, esta algo largo, pero espero que valga la pena para ustedes. Yo me siento satisfecha con este capítulo.

Esto solo es el comienzo, lxs estoy preparando para lo que se viene, espero que sea del agrado suyo realmente.

Y decirles que este es el último capitulo que he preparado, no he tenido mucho tiempo para preparar uno más así que espero que me comprendan si no puedo traerles capítulo la otra semana.

¿Que les pareció el capitulo?
Muchos de ustedes me han dicho que les ha gustado la historia y me piden actualizar seguido. Pero como saben para mi es complicado porque trabajo todo el día y solo tengo la noche para escribir y no se, algunas veces prefiero pasar tiempo con mi familia.

Eso es todo, nos leemos pronto.

I Purple U 💜

💙🦋🖤