Un nuevo día, eso era lo que hoy comenzaba.  Admiro el bello paisaje desde la terraza de su habitación y aspiro el aroma del mar.   De nuevo entro a la habitación y escogió entre los múltiples biquinis que se había comprado  escogió un biquini negro con el filo bordado en gris.

Cuando atravesó la recepción del hotel le sorprendió no ver allí a Abigail, Abi.

Siguió su camino hacia la playa con una gran sonrisa, hoy disfrutaría de un hermoso día de playa, tomar el sol y disfrutar del agua del mar en aquel hermoso lugar paradisíaco.

La playa estaba muy cerca del hotel, de hecho estaba al lado.  Se podría decir que este se había construido justo en ella.  Salio al jardin trasero donde estaba la piscina y las tumbonas y después de atravesarlo llego a la blanca y suave arena.  Disfruto de la sensación en sus pies y camino despacio inundándose del aroma el mar.

-Hola –Un chico moreno bastante guapo la miro sonriente -¿Puedo ayudarte en algo? ¿Sombrilla? ¿Tumbona?

-Una tumbona por favor –Aurora le sonrió y observo como el chico le colocaba la tumbona en la arena frente al agua, le dio algo de dinero –Gracias

-A ti preciosa –el guiño un ojo –Estoy aquí para lo que necesites

Aguantando la risa Aurora extendió la toalla en su tumbona y se relajo en ella.  Nunca se había sentido tan bien, le gustaba como la había mirado ese chico, es mas, le gustaba como la miraban la mayoría  ¿Por qué antes no la miraban así?  O quizás ella no se daba cuenta porque solo tenia ojos para Cristian  ¿Qué estaría haciendo el ahora?

La curiosidad la invadió, busco en su bolso y saco el teléfono móvil.  Se atrevió a encenderlo y en seguida llegaron los avisos, 123 llamadas perdidas, 30 mensajes, 13 mensajes de voz.   Llamadas de, su madre, su amiga, Cristian, su suegra, incluso de su suegro.  Lo que mas le sorprendió fue ver las dos ultimas ¿Su hermana? ¿Cómo se atrevía tan siquiera a llamarla?  comenzó a leer algunos mensajes de texto, los tres primeros eran de su amiga,  Fátima.

Cariño, estoy preocupada ¿Dónde estas? Por favor devuélveme la llamada, necesito saber que es exactamente lo que paso.

Nadie quiere contarme nada

Aurora, háblame, contesta, da señales de vida por lo que mas quieras

¿Qué esta pasando? ¿Por qué has desaparecido?

¿Por qué no contestas? ¿Dónde estas metida? ¿Por qué todos estan tan nerviosos? ¿Qué es lo que pasa Aurora?  Tu hermana y tu madre no se hablan, Cristian esta como loco buscándote por la ciudad y sus padres le han echado de la casa.  Por favor llámame

Aurora suspiro, su hermana y su madre no se hablaban, Cristian echado de casa por sus padres.   Pero seguro que trataba de ocultar todo lo que estaba pasando.  Desgraciado.

Los dos siguientes mensajes eran de su madre

Aurora hija por favor, vuelve.  No puedes desaparecer así, tienes que arreglar las cosas, tienes que hablar con Cristian.  Te lo suplico.   Por favor, regresa.

Cielo dime donde estas, contesta las llamadas.  No puedes ignorar lo que esta pasando.  Tienes que volver, tienes que enfrentar la situación.  Habla con Cristian, con tu hermana.  Ellos estan muy arrepentidos

¿Arrepentidos? ¡Y una mierda! ¡Se habian estado acostando durante cinco meses! ¿Y ahora resulta que estaban arrepentidos? Mientras ella preparaba las cosas para su boda ellos se divertían juntos.

Los siguientes eran de el, de Cristian

Aurora mi amor por favor no hagas esto, te quiero, te necesito.  Se que estas enfadada pero se te pasara.  Te prometo que todo estará bien, seremos felices pero tienes que regresar.  Te estoy esperando.

Cariño por favor, reflexiona, piensa.  Todo fue un error, yo no pude controlarme, pero te amo a ti . Quiero pasar el resto de mi vida contigo, solo contigo.  Eres mi mujer, ahora estamos casados.  Regresa.

Maldita sea, no puedes huir de esto.  Deja de esconderte, vuelve a casa, a tu casa.  Porque esta es tu casa y yo tu marido, no puedes irte así y dejarlo todo ¿Qué va a pensar la gente? Tenemos que hablar

No me hagas esto, yo te quiero.  Lo he dado todo por ti, ¿no has sido feliz todo este tiempo? Tienes que comprenderme soy un hombre y quería respetarte.  Tenemos que aclarar las cosas.  Contesta mis llamadas.

Te encontrare, tarde lo que tarde Aurora.  Y entonces no podrás escapar de mi, eres mi mujer y yo tu marido.   No puedes dejar las cosas así, ahora somos una familia y afrontaremos todo esto.

Sin poder aguantar las lagrimas apago el teléfono inmediatamente, no tenia fuerzas para seguir leyendo ¿Feliz? ¿De verdad le preguntaba que si había sido feliz todo este tiempo? ¡Fue una mentira! ¿Su mujer? ¡No! ¡No se había entregado a el y jamás lo haría! ¿El era un hombre? ¡Era un maldito desgraciado!  ¿Y la buscaría?¿La encontraría? Bien, cuando llegara el momento le enfrentaría, le mandaría al diablo

-¿Aurora? ¿Estas bien? –Abi estaba parada junto a ella mirándola preocupada -¿Todo bien? ¿Necesitas algo?

-Estoy bien –Aurora limpio las lagrimas –No te preocupes

-Lo siento, no debí preguntar –Abi suspiro

-No, no pasa nada –Aurora le sonrió –No te vi en la recepción

-Son mis vacaciones –Abi sonrió feliz, después levanto la mano -¡Toni! Tráeme una

-¡Enseguida preciosa! –El chico de las hamacas se acerco y coloco una junto a Aurora, miro a Abi sonriente mientras señalaba a Aurora -¿Conoces a esta preciosidad?

-Si, pero no es tu tipo –Abi levanto una ceja

-Vale, vale –El levanto las manos y se marcho riendo

-¿No soy su tipo? –Aurora miro a Abi de reojo sonriendo

-No, el solo quiere divertirse, pasar un rato –Abi negó con la cabeza –Mujeres de usar y tirar

-Usar y tirar –ella se quedo pensativa ¿Tambien habian hombres de usar y tirar? No le parecía tan mala idea, conocer a algún chico con el que divertirse, que la atrajera  ¿Se atrevería a entregarse a otro hombre que no fuera su marido? Después de todo se había mantenido casta para el

-¿Esta bien? –Abi la trajo de vuelta

-Si ¿Has dicho que estas de vacaciones? –Aurora frunció el ceño -¿Aquí? ¿No te marchas?

-Los que trabajamos aquí, podemos disfrutar de quince días de vacaciones en el complejo hotelero –Ella sonrió, después se quedo pensativa –Es mejor estar aquí que con mi familia

-Te entiendo –Aurora asintió, la familia  Ella no tenia familia

Pasaron un buen rato charlando animadamente, Aurora le contó lo ocurrido en el chiringuito con los dos tipos a los que tiro la bebida   Abi no paraba de reír ante eso y le dijo que rezara para no volver a encontrárselos  Si rezo, sus rezos no fueron escuchados

-¡Mario! ¡Darío! –Abi se levanto de la tumbona moviendo las manos, después miro a Aurora sonriente –Voy a presentarte a unos amigos

-Vale –Aurora se levanto y fijo la vista en los chicos que salían del agua  ¡Guau! No estaban nada mal.   Aunque si tuviera que escoger se quedaría con el moreno de pelo medio largo, que tenia un abdomen bien formado.  Cuando los chicos estaban mas cerca se arrepintió de lo que estaba pensando –No puede ser

-¿Qué pasa? –Abi frunció el ceño mirando a los chicos que se habian quedado parados mirándola

-¡El huracán! –Darío la señalo y comenzó a reír

-Tu –Aurora miro a Mario fijamente ¿En serio? ¿Tenia que encontrarse con el de nuevo?

-Yo –el asintió sonriente -¿No tendrás ninguna copa a mano no?

-Muy gracioso –Aurora sonrió falsamente –Pero puedo pedir una enseguida

-¡No me lo puedo creer! –Abi comenzó a reír y señalo a Mario y Darío -¿Ellos son los del chiringuitos? ¿a los que tiraste la copa?

-Si –Aurora asintió, miro fijamente a Mario –El es quien me robo el taxi y que me llamo amargada en el bar

-Por lo del taxi ya me disculpe –Mario frunció el ceño –Y en el bar no iba tan mal encaminado

-¿Cómo dices? –Aurora camino hacia el

-Ey haya paz –Abi se interpuso entre ambos

-Esto se pone divertido –Darío rió mirando la situación

-Creo que me voy a dar un baño –Aurora miro de reojo a Darío y Mario y camino hacia el agua ignorándoles.   Necesitaba calmarse y estaba claro que con ellos cerca no podría

-Tiene un buen culo –Darío la observaba atento mientras iba hacia el agua –Y la delantera tampoco esta mal

-Ehh –Abi empujo a Darío rengándole y después se dio cuenta de que Mario estaba mirándola atento, le dio una colleja -¿Y tu que miras? ¿No decías que es una amargada?

-¿Cómo se llama? –Mario sonrió a Abi

-Aurora –Ella frunció el ceño -¿Por qué? ¡Eh! ¿A dónde vas?

-A refrescarme –Y con una sonrisa Mario se dirigió al agua

-Le gusta –Darío asentía sonriente –Si, señor  Le gusta esa mujer

-Pues se esta equivocando –Abi observo a Aurora fijamente, ya lo había pasado bastante mal y no quería que le hicieran daño 

-Esta buena el agua –Mario la observaba sonriente mientras ella nadaba -¿No crees Aurora?

-¿Quién te ha dicho mi nombre? –Ella le miro fijamente

-Eso no importa –Esbozo una media sonrisa mirándola fijamente –Podemos empezar de nuevo y olvidar lo que paso ¿no crees?

-¿y como piensas que hagamos eso? –Aurora le miro de arriba abajo, ¿Por qué tenia que estar tan bueno?

-Hola preciosa, soy Mario –el extendió la mano -¿Y tu?

-Aurora –sonrió y tomo la mano de el –Y no me llames preciosa

-¿te molesta? –Mario esbozo una sonrisa –Si te llamo amargada porque te llamo amargada, si te llamo preciosa porque te llamo preciosa ¿Entonces?

-Entonces es muy simple –Aurora le miro suspicaz –no me llames –y sin que el lo esperar tiro de su mano haciéndole caer al agua

-¡Eh! –Mario salio del agua con el ceño fruncido

-Encantada de conocerte Mario –Camino unos pasos y se paro para volverle a mirar -¿Pero que digo? No me gusta mentir

Aurora salio del agua y se acerco a su tumbona, cogio la toalla y comenzó a secarse, Darío le sonrió y se despidió con un asentimiento de cabeza antes de marcharse

-No os lleváis muy bien ¿no? –Abi le sonrió –Es buen chico créeme

-Ya –se sentó en la tumbona mirándola -¿Buen chico como un niño de papa mimado?

-Todo lo contrario, trabaja aquí  Es profesor de surf, de hecho su vida es el surf, le encanta –Abi miro el agua, después frunció el ceño -¿Niño de papa mimado?

-Supongo que pienso que todos los hombres son así –Aurora suspiro –Como mi marido

Realmente no sabia muy bien porque había dicho eso, ella tambien se podía considerar una niña mimada de papa, o mas bien de mama.   Aunque su familia no tenia tanto dinero como la de Cristian, estaban en una buena situación económica.  Su padre siempre le había dado todo lo que quería, porque podía.  Cuando el murió, la situación de su familia cambio, aun seguía siendo buena, pero no tanto como con su padre.  Aun así ella siempre había sido la niña consentida, pero tambien la que estudio, al contrario que su hermana que decidió disfrutar del dinero y vivir la vida.  Aunque ahora que lo pensaba no sabia exactamente de que había estado trabajando Bárbara, solo sabia que ganaba bastante

 ¿CASUALIDAD? PARECE QUE ENTRE ELLOS HAY FUEGO PERO ¿DE QUE TIPO? AURORA NO SABE AUN TODO LO QUE LA ESPERA EN ESTE VIAJE  EL PARAISO PUEDE LLEGAR A SER MUY LOCO

   OS DEJO UNA FOTO DE MARIO,  ¿QUE OPINAIS DEL CHICO?