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III

Un bostezo salio de su boca al caminar aburrido por los pasillos, ya era hora de regresar a su casa, la vigilancia había terminado por fin.

Le había dicho a yuki que se vaya a dormir y él la cubría, asi que como zero de seguro se había escapado nuevamente de sus labores yue había quedado solo para hacer la vigilancia, cuando estuvo a punto a ir hacia su casa paro de golpe.

-qué necesita aido san? -pregunto mirando reojo y con una sonrisa falsa al rubio oji celeste.

El cual salio de las sombras con su ropa normal y miro al cross con fastidio.

-por culpa de tu hermana kaname sama se enojo conmigo -se cruzo de brazos con enojo.

-es en serio? -pregunto con incredulidad.

Aido hizo un puchero ofendido al ver la mirada burlona de yue.

-escucha eso paso por tú culpa, no se si eres masoquista o qué pero sabes que no debes de meterte con yuki, sabes que kaname siempre la protege...

-es kaname sama!, no lo llames con tanta confianza -chillo el rubio haciendo que el peli marrón lo mire con fastidio.

-ahg eres irritable igual que una gallina, me voy -le dio la espalda a punto de irse pero el rubio apareció frente a él.

-oye no me dejes hablando solo, además no sabia que tu sangre era tan...

Su sonrisa coqueta desapareció en segundos al percibir un aura oscura que rondaba su nuca como tentáculos.

-aido. -

El rubio chillo asustada alejándose unos metros al ver a kaname sonriendo amable mente y mirando al rubio como si fuera un asesino serial.

-"wow si que da miedo, pobre aido....sera mejor irme"- miro para otro lado ignorando la escena de un asesinato muy próximo.

-cross!! -chasqueo la lengua al sentir que el rubio se aferro a su brazo como garrapata usándolo de escudo.

-mmm...bueno tengo cosas que hacer asi que...nos vemos! -sonrio alegre intentando soltarse pero el rubio lo abrazo con fuerza -ya suéltame gallina rubia!.-

-no me me dejes y no soy una gallina! -se aferro a su cintura pegando su mejilla con la de él.

-ya suéltame!!. -

El aura oscura del sangre pura iba creciendo mas y mas ocasionando que algunos pájaros huyeran asustados del lugar mientras que era ignorado por esos dos.

-aido...vete -ordenó estrechando sus ojos haciendo que el árbol tras yue y aido exploté.

El rubio chillo de miedo y en segundos desapareció.

-maldito rubio traidor -susurro yue con enojo para luego mirar de reojo a kaname que lo miraba fijamente -qué tal...kaname....senpai -fue susurrando poco a poco para luego sonreír nervioso.

El kuran sonrió divertido y se acerco a él acariciando su cabello rebelde, yue cerro sus ojos sorprendido para luego mirarlo curioso.

Parpadeo curioso al ver la mirada suave y feliz que surgió en los ojos borgoña del vampiro. Al notar esa mirada intensa trago saliva y bajo la cabeza sonrojado.

-"q-qué rayos...por qué me avergüenzo con él antes esto no sucedía... Yo no soy así!, yo hago sonrojar a las personas no ellos a mi! "- frunció el ceño aún sonrojado.

-yue -miro al kuran al escuchar su llamado, ahora lo estaba mirando con preocupación -qué te esta sucediendo? -poso su mano en su mejilla haciendo que se exalte.

-de...de qué hablas? -sonrio con los ojos cerrados sabiendo que él estaba sospechando de su secreto.

-al pasar los años te has alejado aún mas de mi, yuki y tú se han alejado -susurro con una mirada solitaria para luego cerrar los ojos y sentir el viento peinar su cabello -puedes contar conmigo con lo que sea -le sonrio levemente.

Los ojos del menor fueron tapados por su flequillo para luego alejar la mano del vampiro de su mejilla, suspiro y se alejo unos pasos.

-no te preocupes, tanto para yuki como para mi eres importante, eres alguien que forma parte de nuestra familia y no oculto nada solo.....digamos que tengo algunos secretos que prefiero no decir -sonrió divertido y empezó a caminar hacia su casa -nos vemos!, por cierto ten por seguro que yuki confía en ti mas que nadie en el mundo -le sonrio levemente antes de irse dejando al vampiro solo.

Miro la espalda del cross alejarse poco a poco para luego cerrar sus ojos.

-te equivocas....quiero que tú confíes en mi -su susurro se lo llevo el viento y recordó el abrazo de los gemelos de hace unas horas.

Ese abrazo era como ver a juuri y haruka en yuki y yue.

Apareció en su cuarto y miro la foto de él con los gemelos cuando cumplieron los 8 años, yuki siempre fue cercana a él pero yue era muy reservado.

Desde su nacimiento fue así.

Flashback.

Los gemelos ya tenían 8 años, yuki quiso ir a un festival en un templo que estaba cerca del pueblo asi que ella tenia un kimono rosa con su cabello a dos coletas bajas, Kaien y kaname no dudaban de que se veía adorable.

-esto es patético -pero esa vestimenta era un fastidio para el menor de los gemelos.

Él portaba una vestimenta china color bordo con detalles negros que yuki eligió con emoción, a ella desde niña le encantaba combinar la ropa para su hermano menor, era como su muñeco de vestir.

Esa vestimenta hacia resaltar sus fracciones adorables y al mismo tiempo atractivas.

-kya~ yue que lindo eres -chillo sin poder evitarlo la cross mayor abrazando con fuerza a su hermanito, yue bufo aburrido.

-mis pequeños bebés son tan lindos, kya~ -chillo Kaien sacando fotos a los gemelos.

Kaname solo miro a sus hermanos con una sonrisa pero su mirada paro en yue, siempre tan sereno, tan rebelde y reservado.

Esa mirada solitaria y neutral le dolía al kuran mayor, era igual que su mirada y eso al vampiro le molestaba, no quería que uno de sus hermanos se sienta así.

.

.

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Cuando llegaron al festival recorrieron varios puestos de comida y juegos, Yuki arrastro a su hermano por todo el festival. En verdad estaba emocionada.

Kaien no paraba de sacarle fotos a sus hijos y kaname solo los observaba con felicidad y escuchaba atento las cosas que su preciada hermana decía.

Cuando llegaron al templo, Kaien y Yuki estaban rezando mientras que yue miraba a su alrededor aburrido.

Todo siempre le pareció tan monótono, tan vacío, tan aburrido.

No había nada que lo divirtiera y tenia que vivir en una farsa.

Kaname noto el desinterés del pequeño y apretó sus labios con tristeza en verdad odiaba esa mirada en yue.

Se acerco a él y estiro su mano con suavidad haciendo que el niño lo mire curioso.

-ven, habrá un lanzamiento de luces cerca de aquí -sonrió amable el adolescente haciendo sonrojar levemente al pequeño.

Asintió en silencio y tomo su mano bajando la cabeza sonrojado.

-"es adorable"- el vampiro sonrió de lado al ver el sonrojo en el pequeño y los dos fueron directo al lago tomados de la mano.

Kaien los vio pero decidió dejarlos solos, yue necesitaba de su hermano mas que nadie y kaname necesitaba de ese pequeño tan parecido a un eclipse.

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La mayoría de las personas del festival estaban al borde del lago con una linterna flotante en manos.

Algunos estaban con los ojos cerrados rezando.

Yue ladeó la cabeza confuso, él pensó que eso solo se hacia en china.

-yue -miro al vampiro que tenia una linterna ya prendida en las manos, ni siquiera se dio cuenta cuando el vampiro se separo de su lado.

-...por qué están rezando? -miro a las personas que rezaban mientras el kuran se poso a su lado.

-en este pueblo hay una tradición, todos los 26 de octubre las personas del pueblo vienen con una linterna a este lago que es sagrado y rezan con toda sinceridad para que se cumplan sus deseos...dicen que es un lago sagrado ya que kaguya la princesa de la luna descendió en este lago para ayudar a una pareja que rezaba todos los días para poder tener hijos, ella cumplió su deseo y desde ahí las personas lo convirtieron en tradición -relato el vampiro con una sonrisa.

El pequeño miro al vampiro para luego mirar a la luna con curiosidad, no entendía la esperanza de las personas en dichas leyendas.

Los dos quedaron al borde del lago y arrodillados sostuvieron la linterna con suavidad.

-pide un deseo -susurro kaname con los ojos cerrados.

Acaso él creía en esa leyenda?.

Yue cerro sus ojos y luego de unos minutos los dos dejaron la interna en el lago.

Vieron embelesados todas las linternas flotando en el agua, un viento fuerte hizo bailar las hojas de los arboles y con sorpresa vieron como todas las linternas se llevaron al cielo yendo poco a poco hacia la luna.

-....era cierto -susurro en shok el pequeño cross haciendo reír a kaname, jamas pensó ver tanga esperanza en esos ojos borgoña.

-no se debe de preguntar pero...qué deseaste? -miro curioso al pequeño que aún miraba la linterna en el cielo.

-no se si sea cierto pero....quiero ser libre. -

Ante esa respuesta quedo en shok.

Por qué pidió eso?.

Yue qué escondía?, kaname no lo entendía.

El pequeño era rebelde, podía hacer lo que quería, era un humano que podía sentir el sol en su piel y demostrar todos los sentimientos que quisiera.

Entonces, por qué quería ser libre?.

Fin flashblack.

Luego del festival Kaien había tomado una foto a los tres pequeños, kaname estaba en medio de los gemelos, Yuki abrazaba el brazo de su salvador con una sonrisa alegre, yue tenia una leve sonrisa y sus ojos tenían un brillo de esperanza, por último. Kaname estaba sonriendo con suavidad y tenia una mano en el hombro de yue atrayendo lo a él para así los tres quedar juntos casi en un abrazo.

Sonrió con nostalgia al recordar a los gemelos.

Ya eran adolescentes y cuando se quisiera dar cuenta ya iban a ser adultos.

Adultos...que debían de formar una familia.

Miro atento el rostro de sus hermanos y suspiro cerrando sus ojos.

-....Yuki a quién elegirás? -sus ojos se tornaron oscuros y vacíos.

La sangre de los kuran debía de seguir, así que...a quién elegirá Yuki?.

Acaso su historia iba a terminar como la de sus padres?.

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Se escucho una fuerte tos en el baño para luego escuchar algunos quejidos de dolor y enojo.

Era zero.

Yue estaba con un pantalón y su camisa desabrochada escuchando toser al albino con fuerza. Apretó sus puños con impotencia y chasqueo la lengua.

-no pongas esa mirada -se exalto cuando escucho la voz del oji amatista.

Hace segundos zero había salido del baño y ahora los dos estaban cara a cara.

-...tch, no se de que hablas -susurro con el ceño fruncido el cross empezando a caminar hacia su cuarto seguido de zero.

-otra vez con pesadillas? -pregunto deteniendo el caminar de yue.

El amanecer ya estaba en lo alto y yue no había dormido ni siquiera dos horas.

Se notaba en su mirada, si seguía asi muy pronto se notaria en su rostro.

-...algo asi, es molesto -suspiro cansado y miro de reojo al albino, se acerco a él y agarro su mano dejando algo en ella.

-chocolate? -miro curioso la barra de chocolate envuelta en un papel gris con un lazo azul.

-h-hmp, tómalo como presente por nuestra amistad no mal pienses las cosas -miro para otro lado sonrojado haciendo que zero lo mire divertido.

-no me digas que te estas confesando?, no me gustan los hombres pero debo de admitir que eres muy atractivo -se burlo haciendo sonrojar de golpe a yue.

-baka!, yo no me estoy confesando! -chillo sonrojado para luego caminar rápido hacia su cuarto haciendo reír a zero.

El albino miro a su amigo que detuvo su caminar y lo miro de reojo aun sonrojado.

-....feliz san valentin aho -su voz fue casi inaudible pero gracias a que era un vampiro lo escucho.

El peli marrón desapareció de su vista al irse casi corriendo haciendo sonreír al kiryuu, miro el chocolate con serenidad y cuando estuvo en su cuarto rompió el papel con cuidado.

Al oler el chocolate sonrió con felicidad y tristeza.

Era chocolate amargo con sangre.

La sangre de yue estaba en ese chocolate.

Con los ojos cerrados probo el chocolate y al tragarlo sonrió divertido.

-en verdad lo único que sabes hacer es ramen instantáneo y postres -susurro divertido al recordar las veces que yue intento hacer otras comidas pero siempre terminaba incendiando la cocina.

El chocolate era amargo pero a la vez un tanto dulce, se complementaba con la sangre de yue, la cual era perfecta.

Zero debía de aceptar que amaba los postres amargos que yue preparaba y mas....si tenia su sangre.

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Maldición!

*crash!*

Tembló con fuerza marcando sus uñas en el escritorio de su habitación mientras trataba de controlar su respiración.

Miro con dolor la foto que tiro al debilitarse, el cuadro estaba roto, trago con dificultad y se agacho a recogerla.

Miro su rostro de 8 años y sus ojos se nublaron.

-ojala fuera un niño asi no tendría que sufrir por esto -su susurro solitario rompió el silencio de su cuarto.

Dejo la foto en su escritorio y se puso nuevamente los zapatos.

Nuevamente esa noche volvía a escapar de la academia para ir al pueblo a recargar energías.

En verdad lo odiaba pero era necesario.

Necesitaba de eso para mantener sellado a esa persona en su interior.

Pero, por cuánto tiempo podría aguantar?.

I'll also show you a sweet dream, next night.......

Lo se, un asco de capitulo en verdad siento que no haya quedado como algunos querían pero no ando muy bien y mi imaginación esta en bajo cero, aún asi gracias x leer y les aviso que no se cuándo volveré a escribir ya que tengo muchas cosas en la cabeza. Espero recuperarme asi puedo seguir con mis historias.

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