ACLARACIÓN.
Este prólogo fue desechado porque no me gustó el como quedó, pero me gustó escribirlo, por lo cual decidí subirlo para que ustedes puedan verlo y tener su propia opinión de este apartado.
Cómo tal, no está terminado porque no me convenció, ni tampoco está corregido.

Descripción original:

Dónde un ángel caído llega al hotel con tal de regresar a su hogar, ante esto no habrá ni una sola ocasión en donde la princesa del infierno intenté saber la razón por la que ha caído en las tinieblas, al no haber ninguna respuesta todos piensan tener un caso perdido muy lejano de la redención, pero no podemos culparte por el misterio.

A cualquiera le daría vergüenza tener que decirle a un grupo de personas que la razón por la que estás ahí es porque pisaste dónde no debías y caíste del cielo de forma demasiado literal.

( . . . )

Prólogo original:

La libertad era un sentimiento maravilloso al cual habías estado acostumbrado toda la vida y eso parecía rejuvenecer tu actitud ante el mundo y aquellos que habían estado también junto a tí.

Según algunas almas que descansaban en felicidades eras la viva imagen de lo que se creía de un ángel. Un ser amable y protector, que se encaminaba a la luz con una presencia fuerte y determinada, pero al mismo tiempo tierna y alegre.

Y eso eras. Ese pensamiento no estaba nada lejos de la realidad, eres un ser que había nacido para amar y ser amado, para entender y defender a los que no podían defenderse, para tener los brazos abiertos por si alguien corrían en busca de salvación.

Había muchas cosas que sabías, un ser que había dejado toda su vida en aprender de los humanos, su cultural, su actitud, el como todos ellos eran tan únicos y que nadie podía ser reemplazado, aún cuando las almas se carcomían pensando en ello como su fuera una verdad.

Eras una criatura de gran altura que en su espalda cargaba una hilera de alas de un color celeste cenizo, quienes las veían por mucho tiempo aseguraban que ojos amorosos aparecían en ellas y los observaban cuidadosamente, traías un largo traje blanco con suaves detalles celestes, simple pero completamente a tu gusto, en algún momento pensaste en agregar un sombrero de copa pero el fanatismo en grandes escalas es algo cercano al pecado así que evitabas el pensamiento.

En tu mano llevabas un lindo bastón con una curva para poder sostenerlo mejor, no lo usaba para caminar pero si para sostener tu cuerpo, tus pies llevaban pequeñas botas de tacón bajo.

Y ahora el tierno detalle final, bajo tus ojos tenías descansado dos de tus ojos, al igual que el que se encontraba de forma vertical en tu frente y se ocultaba perfectamente por tu cabello, no podías evitar adorar tu cabello con esos lindos brillos que quedaban dando vueltas a tu alrededor, en realidad, habían Sido regalos de una encantadora mujer.

Solían darte regalos muy seguidos, probablemente porque eras un unos de los más altos en bajar a saludar a cualquier recién llegado, explicarles el lugar y darles un hogar.

Sabías cada detalles de sus vidas, cada movimiento y trazo, cada mirada, sueño y destino. Por lo cual siempre eras muy amable, lo que los hizo encariñarse rápidamente contigo, tampoco dudabas en acercarte a ellos y preguntar sobre su día a día.

Eras genuinamente un amor a vista de todos, tal vez a veces demasiado.

Así que realmente no tenías ningún problema.

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Bien, te sorprendía la cantidad de ojos que tenías y lo mucho que no te dabas cuenta de las cosas hasta que que pisaste mal.
No fue una caída dolorosa, pero si sorpresiva.

Caíste cerca de una ciudad en oscuras, rápidamente te ocultaste en las sombras, en un silencio total, debías pasar desaparecido en todos los casos.

Te sentaste con la espalda contra la pared para pensar.

¿Cómo es que habías caído aquí? ¿Cómo fue tan extraño? ¿Cómo te las arreglarías?

Pensaste con cuidado en alguna respuesta decente, mientras veías en cielo rojo, te gustaba el color, no tardaste en pensar en la sensación de peligro que podía significar ese tono sobre tu cabeza, que de alguna forma era una advertencia.

Pero no lo sentías así, con calma sonreírte al darte cuenta que probablemente habías caído así debido a la reciente matanza en el infierno. No te ibas a culpar por no haberte levantado tan rápido, te había sorprendido el caer y eso afecto completamente todo.

Te levantaste en la oscuridad e hiciste todo lo posible para pasar desapercibido, tu aspecto angelical sería casi imposible de ocultar, pero no creías en lo imposible.

Tu ropa estaba sucia y eso te puso triste, ni siquiera evitarías ocultarlo, habías trabajado por ese vestuario, pero rápidamente pensaste que al final solo era material y que podías hacer algo más lindo.

Pegaste tu cuerpo a la pared y observaste a la gente con cuidado, todos era muy bajitos, bastante bajitos, demasiado bajitos.

Y tú no eras bajito, medias siete metros de algo y eso iba a ser problemático aquí. Viste a un hombre pasar, era alto, no tan alto pero funcionaba. Era un hombre con aspecto similar a un lobo, seguramente medía unos tres metros, vestía un saco largo, eso necesitabas, un saco.

Desde la oscuridad hablaste━━ Mil disculpas, señor. ━━tu voz aterciopelada hizo que el se detuviera tan pronto como te escuchó, joder le gustaba ese tono.

━━ ¿Quién está ahí? Muestrate y seré amable. ━━pudiste sentir la mentira en su lengua, él no quería ser amable.

━━ Oh señor, soy nuevo en este lugar y necesito algo de ayuda ¿Podría usted hacer algo por mi? ━━parecía tan satisfecho con tu tono lastimero.

Sentiste una gran incomodidad correr por tu cuerpo cuando acercó su manos a su pantalón, sobre su miembro y su rostro demostraba su creciente excitación.

━━ Joder lo que quieras mientras me sigas hablando y me digas señor. ━━no podía verte, estaba seguro que mientras más se adentraba al callejón, dabas un paso atrás, me hizo sentir como un depredador y eso le gustó.

━━ ¿Es eso un trato? ━━tu voz estaba cada vez más cerca y no había lugar donde esconderte, no había casi luz, estaba en el infierno y necesitaba desestresarse, hoy era su puto día de suerte.

Su jodida estrella porno favorita había desaparecido y estaba molestó, pero aquí estabas tú, su salvación.

━━ Si, lo que sea. ━━soltó restándole importancia.

━━ Muchas gracias señor, ahora... ━━pudo escuchar un silencio y en el momento en que estaba a punto de dar otro paso, todo se oscureció y cayó rendido.

Caminaste al cuerpo en el piso, con sumo cuidado sacaste la prenda que querías y comenzaste a mirarla, no te quedaría, triste pensaste en como arreglartelas, sonreíste al darte cuenta: ¡Solo necesitabas ser más bajo!

El tamaño de tu cuerpo se hizo menos, eras notablemente más pequeño que antes, te sentías algo incómodo por eso, pero no le buscarias la quinta para al gato, con cuidado pasaste la prenda por tu cuerpo, pasando los brazos y acomodaste bien contra tu espalda y pecho, aún te quedaba un poco pequeña, pero no dejaste que eso te afectara, tus alas se estrujaron lo mejor que pudieron y no dejaron ver nada más allá.

¡Oh cielos tenía capucha! Tus ojos brillaron ante ese descubrimiento y no dudaste en pasarlo sobre tus cabeza para ocultar todo lo que pudieras, diste un vistazo al cuerpo tirado, cambiaste hasta él y lo pusiste contra la pared, como si se hubiera dormido así y te marchaste sin pensarlo más.

Tal vez si te miraban, tal vez solo pasaban sin hacerlo, pero algo te confiabas, jamás habías escuchado a un sujeto frente a ti decir "vení y chúpame el pito" de forma tan rara, pero le restaste importancia.

Caminabas pensando seriamente en que hacer para poder en- Oh.

La caminata se detuvo drásticamente al sentir una necesidad, te diste la vuelta para ver una televisión en dónde aparecía un vídeo mal filmado, malos diálogos y escenas extrañas ¡Fue cómico e hilarante! Te gustó mucho, pero no perdiste el punto final del vídeo.

Hazbin Hotel. Si, ahora irías hacía allá.

━━ Es una cagada. ━━hablo una voz masculina a tu lado, era un hombre de aspecto viejo, pudiste notar unas antenas pero no sabías de que criatura del mundo era.

━━ Tal vez ¿Y eso dónde queda? ━━traste que tu voz sonará curiosa, pero no interesada, el demonio a tu lado primero paso su vista a ti y luego con su mano levantada apunto a una dirección, asentiste como agradecimiento y caminaste por la misma dirección.

Ibas en silencio, encorvado y con pasos ligeros, observando a las personas gritarse, manosearse y golpearse, algunos al mismo tiempo otros no necesariamente en ese orden, casi te daba risa lo ingeniosos que eran para autodestruirse.

Mientras seguías caminando notaste a alguien cerca tuyo, dando una mirada corta viste a una chica de cabellos rubios de piel pálida que eran adornadas por mejillas rojas y llevaba puesto un traje rojo (muy lindo a tu parecer), ella iba con la cabeza agacha notablemente deprimida, no era algo de incumbencia, pero no pudiste evitar hablarle.

━━ Pequeña ¿Por qué tan triste? ━━tu voz cariñosa asustó a la muchacha, que miro a dónde había sentido la voz, joder, una demonio de gran altura la miraba, escondido entre su saco, sintiéndose algo incómoda trato de responder.

━━ Oh, es amm... Nada, solo tuve un mal día. ━━paso su vista a otro lado, buscando casi escapar de lo que podría decir el otro.

━━ Oh ¿Y qué haces cuando tienes un mal día? Yo suelo investigar cosas, eso me pone de buen humor. ━━tarareaste ahora mirando hacía adelante, tu reacción tan normal saco a la chica de lugar, hasta ahora, en esos tres segundos de conversación no habías saltado y dicho anda relacionado a sexo, drogas, fetiches, alcohol o cualquier otra cosa.

━━ Eso es... lindo, ━━sonrió al sentirse sorprendida━━ ¿sobre qué investigas cuando te sientes así? ━━con una nueva puerta abierta llena curiosidad, no dudaste en darle paso.

━━ Sobre todo, la cultura, la humanidad, sus ideales, las criaturas en general, me gusta leer sobre los animales, todo se puede investigar y eso me encanta. ━━tu voz la abrumó, sonaba apasionada y honesta.

━━ ¡Bueno! ¡Eso es genial! A mí me gusta pasar tiempo con mis amigos. ━━hablo ella, contando ahora lo que hacía.

━━ Creo que yo no tengo muchos amigos, pero me gusta pasear con la gente, la última vez fuí a la casa de una mujer y su familia y me regalaron un collar muy bonito, está guardado en mi alajero. ━━contaste con voz entrañable, mostrando tu cariño a tal acto y lo importante que te resultó.

━━ Eso suena súper lindo ¡A propósito me llamo Charlie! ━━se presento, ya era hora, había hablado lo suficiente contigo, era momento de hacer su movimiento e invitarte al hotel, tal vez tendría suerte.

━━ Ay corazón, lo sé, te vi en el comercial del hotel hazbin. ━━explicaste y allí se fue toda pareció irse a la mierda tan rápido como llego.

━━ Ah ¿Así que ya lo viste? Bueno, no estamos tan mal como parece. ━━trato de explicarse, a lo que vio una pequeño brillo en tu mirada.

━━ Me alegra saber eso, me dirigía hacía allá ahora mismo. ━━confesaste.

La reacción de la chica tardo, tardo mucho, pero al final llegó, casi brillante por eso.

━━ ¿¡Vas al hotel!? ¡Eso es genial! ¡Creo que es la mejor noticia que he recibido hoy! ━━ahora caminaba recta, mirando hacía adelante con los hombros hacia atrás y la frente en alto.

━━ Aunque no soy un demonio. ━━ya cerca del hotel, más lejos de la gente habías decidido soltar ese dato bastante significativo que hizo que la chica se detuviera casi de golpe y te mirará con ojos saltones.

━━ Pero, oh cielos ¿¡Qué eres!? ━━te apunto casi saltando lejos.

━━ Suelen tratarme de ángel. ━━moviste la cabeza, saliendo de la capucha mostrando tu apariencia angelical que casi hizo que la chica volará del susto, otra vez.

━━ ¿¡Qué haces aquí!?

━━ Me caí.

━━ ¡¿Te echaron?!

━━ No, me caí.

Tal vez no era una muy buena forma de presentarte pero te gustaba decir las cosas lo más temprano posible y evitarte molestias. La chica parecía al borde de un ataque, a lo cual avanzaste hasta ella y con cuidado tocaste su hombro como muestra de apoyo, ella aterrada por todo te miro a los ojos.

Ella nunca había estado en la tierra, no era una alma humana que había vivido bajo creencias como las que ellos estaban acostumbrados, pero pudo entender porque veían de tal forma a los ángeles, ella había visto a los de esa especie venir a su reino y matar a su gente como si no fueran nada, su conversación con Adam le resultó tan mala, todo relacionado con ángeles la dejo tan ansiosa.

Pero ahí estaba tú, que la mirabas con preocupación e interés, que por primera vez entendió porque hablaban los humanos de forma tan divina de ellos.

━━ Está bien cariño, nada aquí te hará daño, yo me encargaré de eso. ━━acariciabas tiernamente su hombro y te agachabas quedando sentado en tu talón. Bien, eso le jodió todo y le pegó en su problemas paternales.

Después de un rato, Charlie se recompensó y te miro directamente a los ojos.

━━ Eres un ángel caído. ━━hablo segura, mirándote con ojos decididos como si ya hubiera pasado la sorpresa.

━━ No, pero si. ━━hablaste con ciertos tintes bromistas, esa frase la dejo confundida, pero igual siguió.

━━ ¿Quieres venir al hotel para volver al cielo? ━━pregunto, pensando que ese sería tu objetivo, pero fue recibido por una risa.

━━ En realidad es más del tipo "quiero al hotel para conocer más allá del cielo". Quiero ver este hotel para conocer a las próximas almas en el cielo.

━━ ¡¿Eso significa que apoyas la idea del hotel?! ━━salto hacía adelante.

━━ Se podría decir que si━━