—¡Tus calificaciones son demasiado bajas, debes seguir estudiando!

—Pff, que pereza, ¿Porqué haría eso? — el delegado de la clase, Tenya Iida, era mi tutor particular; el profesor Aizawa había insistido en que él me diera lecciones debido a mis bajas calificaciones en las demás materias

—¡Porqué son importantes y debes esforzarte aún más si quieres ser un héroe! — Tenya hizo el típico gesto de agitar las manos que siempre hace y me miró furioso

—¡Solo necesito aprender a luchar y a usar mi quirk, no necesito las demás materias! — dio un paso hacia mi para luego cruzarse de brazos —¿Las matemáticas me harán más fuerte en la batalla? — rodé los ojos y me puse de pie — Terminemos la lección de hoy, ya me aburrí

Mientras caminaba, escuché como Iida avanzaba hacia mi, como si quisiera detenerme pero se quedó a medio camino. Continúe en dirección a la puerta y dejé el lugar de una vez por todas; sus clases eran aburridas y las tomaba a la fuerza, ya que por más que corriera de él, Iida era el doble de veloz y me llevaba a rastras a clases... Siempre era así. Yo huía de él y él siempre me traía de vuelta, no se como ni porqué, pero siempre era así. Para este punto ya era más una costumbre nuestra que otra cosa

Pero eso estaba a punto de cambiar...

—¡Ey~! ¡Iida! — uno de mis compañeros, Denki Kaminari se acercó a mí, con una de sus típicas sonrisas — ¿Cómo van con las clases de ____?

Era hora de descanso, así que no había problema en charlar, o al menos eso sería hasta que la campana sonara. Denki apoyó sus brazos en mi pupitre y alzó ambas cejas, burlándose de mis pocos avances con esa chica

—¿Porqué no... Te ayudo un poco ~? — sonrió de lado y me entregó un papel con el link de lo que parecía ser un video

—¿Ayuda en qué? Perdón si te ofendo pero tus calificaciones no son aptas para que tu me ayudes

—¿¡Qué!? — gritó, como si mis palabras lo ofendieran — Bien, ¡bien! — respiró hondo y volvió a verme — Solo míralo, estoy seguro que te ayudará; a veces... Un castigo es una buena opción para que aprendan ~

El link me llevó directo a un video de una página extraña, ahora es cuando me daba cuenta que no debí hacerle caso a Denki, pero aun así, aquí estaba.

—¿Porqué debería darle un castigo? Solo quiero que aprenda, no asus-

Le di play al video, pero lo primero que vi fue a un... ¿Profesor? Dándole nalgadas a lo que parecía ser una de sus alumnas, podía darme cuenta de esto por su "uniforme", pero igualmente esto era muy extraño. Era la primera vez que veía esta clase de videos, no era indiferente a este tema, recuerdo haberlo oído de parte de otros chicos, el... ¿Porno?

—N-No debería ver estas cosas... — pero pese a mis palabras, no quitaba el video. Había algo en el que me impedía apartar la mirada, ahora es cuando entendía... Porque siempre hablaban de esto ; no era correcto, no debería ver este tipo de cosas, pero...

Mi sonrojo aumentaba hasta el punto en que cubría casi toda mi cara, incluso el calor que emanaba mi cuerpo hacia empañar mis lentes. Por primera vez mi cuerpo reaccionaba así y no sabía muy bien como manejarlo. Me sentía caliente, incómodo y algo...

—M-Mierda... — nuevamente se me hizo un nudo en la garganta, además del problema que tenia con ____, tenía un nuevo problema aquí abajo...

—Esta será la última vez que asista a esta clase; ya hablé con Aizawa y lo convencí de dejar de molestarme con estas tontas clases

—E-Entiendo... — todo el día estuve distraído, esto no era propio para mi pero no podía evitarlo, después de aquel video...

Mis pensamientos iban entre lo cuerdo a lo obsceno; una persona que quiere convertirse en un héroe no debería hacer esto, un héroe siempre debería tener el corazón y la mente... Limpios.

—Hoy estas muy distraído, es raro en ti — justo como si pudiera adivinar mis pensamientos, aquella chica se acercó unos pasos a mi y me observó fijamente

—B-Bueno, si lo estuve todo el día — su mirada al chocar con la mía me hizo sentir realmente ansioso. Me maldecía por dentro por estar pensando de aquella manera tan.. Lujuriosa a mi compañera de clases; siempre que la miraba podía imaginar que era aquella "alumna" del video y yo era el que la castigaba

—Es muy raro en ti, ¿sucedió algo? — aunque la mayoría del tiempo era un constante dolor de cabeza para mi, de vez en cuando ella podría ser demasiado amable

—No, solo... Denki me hizo ver un tonto video y ahora no puedo sacarlo de mi cabeza... — mientras me quejaba, coloqué mi mano sobre mi frente

—¿Qué clase de video? Si es viniendo de Denki, dudo que sea algo bueno — efectivamente tenía mucha razón, ahora por culpa de ese chico... No paraba de pensar en cosas indecentes

—Bueno... No se si debería decirlo — ella frunció el ceño y se me acercó aún más. Aún si era más alto que ella, la chica se puso de puntillas para fulminarme con la mirada — ¡Bien! Lo diré... Era una clase de video.. Nada... Apropiado para... Nosotros...

—¿Nada apropiado? Nada es apropiado para ti, mejor se más claro

Tenía un punto, pero aún así me era muy difícil admitir que clase de video era. No es como si todos los días se hablara de forma casual acerca del porno..

—Bueno... Quizás era algo... ¿+18? — me costó decirlo, pero finalmente lo hice. Mi cara estaba hecha un lío y lo único que pude hacer fue cubrirme la boca y parte de las mejillas con mi mano

—¿Qué..? Oh.. — mientras yo me hundía en la vergüenza, aquella chica comenzó a reír. Su carcajada se escuchó por todo el salón y no hizo más que ponerme incómodo — ¡Lo sabía, nada bueno viene de Denki! ¿Pero porno? ¡Pff! ¡¿Qué se le pasó por la cabeza al decirle eso al jefe de grupo?!

—P-Por favor deja de repetirme esto...

—¿Pero cual es problema? Dudo que lo hayas visto completo, ¿no? — segundos pasaron, pero ella no obtuvo ninguna respuesta —¿No....? No me digas... ¡Lo viste! ¡Claro que lo vistes! ¡Tenya Iida vio por-!

—¡Por favor no lo grites! — antes de que ella terminara, le cubrí la boca para evitar que medio mundo la escuchara decir cosas así de morbosas.

—¿¡Hm!? — ____ frunció el ceño, pero lejos de molestarse, vio esto como un reto. Por la forma en que me miraba, supuse que ahora sonreía

—Q-Quitare mi mano cuando sepa que dejarás de decir cosas así... ¿Si? — ella asintió. Lentamente aparte un poco mi mano de su boca, pero antes de retirarla por completo, ella me tomó de la muñeca — ¿E-Eh...?

—Tengo una idea maravillosa.

—Estás loca... — finalmente el recto Tenya Iida mostraba su otro lado, uno que cada vez me parecía más y más divertido

—¿Y porqué? — reí nuevamente —Solo te estoy diciendo que esa sería una buena manera de hacer las clases interesantes, ¿no crees?

—¡P-Pero esa no es la forma...! — sus mejillas se hacían cada vez más rojas de la vergüenza; que adorable

—Oh vamos, solo pondrás en práctica lo que aprendiste del video que te envío Denki; el sexo es algo natural, y por tu expresión, dudo que algo allá "abajo" no se hubiera emocionado.

—S-Señorita ____... — apretó los puños mientras su cara se volvía un tomate  — N-No diga cosas tan indecentes, un héroe jamás-

—Los héroes también lo hacen, Iida. No es como si fueran vírgenes toda la vida, ¿comprendes?

—E-Eso es cierto pero... — él tragó saliva

—Prometo que asistiré a todas tus clases, mis calificaciones mejorarán y dejaré de ser un dolor en el trasero para ti. Todo a cambio de que hagamos esto como un "premio" o "castigo", cualquiera de los dos suena muy bien.

—Ah... Eso no es... Nada apropiado —sus mejillas coloradas me decían claramente que se había imaginado aquella escena, y quizás... ¿Pensado en aceptar?

—Oh vamos, puedes ser algo "inmoral" una... O unas cuantas veces, ¿qué dices? Te aseguro que me irá mucho mejor en las clases ~

—Ah... Eso es... — él sabía perfectamente que esto era un chantaje, pero también un ganar-ganar. Con eso en mente, el chico finalmente decidió que responder: — Esta... Bien, ¡pero más te vale cumplir tu promesa y no decirle a nadie! Si los profesores se enteran... Será nuestro fin

—Claro, claro. ¡Lo prometo! — levanté mi mano derecha y la izquierda la puse en mi corazón

—Bien... — él soltó un sonoro suspiro y cerró ambos ojos — ¿Qué quieres hacer primero?

—¿Qué tal iniciar con el premio~? — sonreí — Así veré de que eres capaz y podré poner más esfuerzo

—B-Bien... — cuando abrió los ojos y me observó con aquella mirada tan tierna y avergonzada, supe que esto valdría la pena

No sentía nada especial por Iida; si, era un chico agradable y con buenas aspiraciones a ser héroe. Pero por su manera tan aburrida de ser, no me había llamado la atención, pero poniendo eso de lado y mirándolo físicamente... Tenía muchas cosas que decir.

—¿Qué sucedía en el video?

—Bueno... Simplemente la castigaba, ya sea dando nalgadas, insultandola y.. Cosas así.

—Oh~ ¿te gustan esas cosas? — dije en broma. Iida se quedó en shock, cubriéndose la cara y negando varias veces — Tranquilo ~ no es nada malo

—Maldita sea... Si no fuera por Denki.. — murmuró. Para tranquilizarlo, coloqué mis dos manos en sus hombros

—Oh vamos, esto te dará la oportunidad perfecta para quitarte todo el estrés. Únicamente siéntate en el escritorio y déjame todo el trabajo a mi, ¿si?

—N-No se si eso sea... — sin importarme lo que dijera, lo llevé directo al escritorio del profesor y lo hice sentarse en el borde. El nerviosismo de Iida aumentó pero eso no me hizo retroceder, todo lo contrario; me puse de rodillas frente a él y le desabroche el cinturón y luego fui bajando el cierre de su pantalón — ¿¡Q-Qué haces!?

—Te dije que haría el trabajo, así que solo relájate — nuevamente me concentre en su parte baja: pese a la lujuriosa charla de ahora, únicamente se había levantado un poco.

Algo enojada por eso, acaricie por encima de su bóxer su miembro. Al principio, Iida se controló y trató de aguantar los jadeos, pero conforme iba aumentando la velocidad, él ya no podía contenerse. Por más que se mordiera el labio o encajara las uñas en el escritorio, uno que otro jadeo se le escapaba.

—Bien, esto por fin pudo ponerse duro~  — cuando el bulto comenzaba a asomarse, decidí que era tiempo de bajar aquella prenda. Su miembro salió dando un salto mientras palpitaba y escurría ligeramente algo de semen — Vaya~

Iida tragó saliva sonoramente, mostrando su nerviosismo. Creí que para este punto él ya diría que me detuviera, pero ninguna palabra salía de sus labios. Esto era obviamente sorprendente, pero no quería hacer preguntas innecesarias, así que solo me dedique a seguir.

Cuando lo tomé con mi mano, este volvió a palpitar e Iida soltó un gemido, al parecer era realmente sensible cuando alguien lo tocaba, así que aprovecharía eso. Mi mano fue de arriba a abajo, acariciando toda la extensión y enfocándome en la punta, que al parecer era la más sensible

—E-Espera... Agh... — dijo, dejando caer la cabeza hacia atrás. Sus lentes se habían opacado tanto por el calor que emitía su cuerpo que no me permitían ver que tipo de expresión hacia.

—Oh no-no, aún no viene la mejor parte — cuando Iida levantó la cabeza para poder verme y darse una idea de lo que venía, yo ya me había adelantado. Mi boca iba directo a su miembro, primero en forma de lamidas y luego metiendolo dentro

—¡Ahh... ~! — sus ojos se abrieron de par en par conforme aquel gemido salía. No parecía esperar esto, y por su expresión, esta era la primera vez que experimentaba algo así

—Mhg ~ — cerré un ojo y con el otro observé sus expresiones. Él también me miraba fijamente, al parecer le excitaba un poco ver mis expresiones y el como chupaba su miembro.

—Ngh... Ah... N-No necesitabas... Meterlo a tu boca — su mano derecha fue directo a cubrir su boca — Es muy... S-Sucio

—¿Mhg~? — succione aun más de su miembro y reí un poco. La saliva caía de las comisuras de mis labios, pero eso hacía más fácil meterlo en mi boca; lo rodeaba con mi lengua, luego lo llenaba de mi saliva y continuaba metiendo y sacando

—Ah... Para... Me voy a... V-Ve.. ¡M-Me vengo! — inconscientemente llevó sus dos manos a mi cabeza y la empujó. Todo su miembro al igual que su semen entró en mi garganta y me hizo tragarlo.

La expresión de alivio al venirse fue lo que apareció en su rostro; la sensación de haberse venido había sido suficiente como para formar una sonrisa en su rostro, pero cuando la excitación se fue y él se dio cuenta de lo que había hecho, enseguida apartó sus manos y me alejó

—¡L-Lo siento, realmente lo siento! No debí hacerlo, ¡no es para nada apropiado! Lo siento, lo siento.

—Mh.. — me limpié lo que escurría por mis labios, luego miré al chico con una sonrisa traviesa — Se sintió bien, ¿no?

—Eso... — yo alce una ceja, queriendo darle a entender que fuera sincero — Si, fue realmente bueno...

—¡Excelente! Entonces sigamos

—¿Q-Qué? Acaso... ¿Enserio quieres más? — yo asentí en respuesta. El día de hoy, Iida me había mostrado demasiadas facetas suyas: desde una cara avergonzada, una timida, enojada o llena de excitación, y simplemente por eso, él estaba comenzando a interesarme — B-Bien... ¿Ahora que quieres hacer?

Me apoyé en el escritorio, de modo que mi torzo estaba acostado en este y únicamente mi trasero estaba de fuera. Me levanté la falda de la escuela y le mostré lo húmeda que estaba por su culpa

—Ya sabes lo que quiero, así que no me hagas esperar ~

Iida tragó saliva sonoramente cuando vio aquella vista tan... Pervertida. Después de eso se colocó detrás mío y colocó sus manos en mi cadera con algo de temor; su mano derecha se dirigió a mi ropa interior y la apartó un poco, de modo que mi vagina quedara expuesta pero sin quitármelo

—N-No tenemos...Protección.

—No importa, existen pastillas — respondí con una amplia sonrisa — Anda, no tienes que ser gentil ~

—De acuerdo... Entonces... Voy a entrar — Iida me sostuvo con fuerza de las caderas y con la ayuda de su mano para guiar su miembro, entró de una embestida. El sonido de su pelvis golpear contra mí trasero junto a los jadeos que ambos soltamos, llenaron el vacío salón.

— A-Ah.. Mierda... — apoyé mi frente contra el escritorio y me mordí el labio. El haberlo tenido en mi boca no había sido tan problemático como ahora; de una simple estocada sentía que ya había entrado hasta lo más profundo de mi.

—A-Agh... — dejando caer la cabeza, Iida había soltado un nuevo jadeo. Lo más probable -conociendo su actitud- está debía ser su primera vez

—¿Q-Qué sucede? ¿Muy apretado para ti? — dije con tono burlón — Anda, muévete ~

—S-Si.. — justo como le ordené, Iida comenzó a moverse. Primero de manera lenta y profunda, le costaba moverse dentro mío a pesar de que ya estaba muy húmeda.

Al ser su primera vez se movia algo torpe, pero eso no le impedía embestirme de forma profunda; pero conforme tomaba algo de confianza, su velocidad aumentaba. El escritorio comenzaba a rechinar y mis gemidos eran los más audibles ahora

—¡Ahh! Iida.. Ahh... Oh mierda... —esto se sentía cada vez más y más bueno. Sus embestidas y la forma que tocaba cada zona de mi interior me estaba volviendo loca.

—B-Baja la... Voz — sorprendentemente, él fue el que me ordenó algo — Ya es tarde pero.. P-Podría haber algún profesor aún, podrían escucharte

—¿E-Escucharme? — reí un poco, pero rápidamente la sonrisa se borró y se transformó en un gemido — ¿Cómo quieres que no gima? Maldita sea, estas dándome... M-Muy rápido

—Ahhh.... S-Solo... ¡Mhg! Cállate.. — inclinó su cuerpo hacia mi para así poder ejercer más fuerza y velocidad a las embestidas. Desde aquella posición le era más fácil entrar más profundo, volviéndome loca en el proceso

Iida, el aburrido delegado que siempre me regañaba por hacer cosas malas, en este momento estaba haciendo lo más "inmoral" para alguien como nosotros.

Conforme avanzaba el tiempo, él se hacía cada vez más bueno, se podría decir que aprendía muy pero muy rápido, incluso si no supiera como era él realmente, diría que ya tenía mucha experiencia.

—N-No... ¡Ahhh~! Mhg... No puedo ~ — volví a encajar las uñas en el escritorio, en un vago intento de calmar mis gemidos.

Iida me estaba volviendo loca, no quería imaginar como estaría gimiendo cuando estuviera a punto de venirme. Realmente no podía creer lo ruidosa que estaba siendo

—Agh... B-Bien... — su mano derecha que hasta hace poco sostenía mi cadera, se dirigió a mi boca y la cubrió. Justo así, mis gemidos se calmaron un poco y aunque aún hacía eco en la habitación, era mucho mejor que antes

Coloqué mis dos manos sobre la suya, para así hacer más presión y que fuera más efectivo el silencio. La saliva y el calor que emitía mi boca chocaba contra su palma, quizás esto lo había excitado ya que la mano restante se dirigió por dentro de mi blusa y sostén, luego comenzó a acariciar mi pecho con algo de rudeza pero de una forma placentera.

—¡Iida... Iida~! — unas cuantas lágrimas caían de mis ojos, pero eran de placer. Debido a todo esto, estaba por llegar a mi límite, dudaba que pudiera aguantar un minuto más así, Iida era demasiado...

—¡Gh! M-Me vendré... — susurró en mi oído — Que bien que... Puedo hacerlo dentro, no creo poder sacarlo a este paso..

Sus embestidas se volvieron más violentas, también el sonido de los aplausos se intensificó conforme él se movia. Yo estaba llegando a mi limite, apretaba su miembro con mi interior y gritaba contra su mano, rogando para que pudiera venirme pronto. Pero cuando el momento llegó, Iida terminó de apoyarse en mi espalda, apretó mi pezon y volvió a acercarse a mi oído

—M-Me voy a... Venir... Así que solo correte y hazlo en silencio... ¡Mgh~!

Mi pequeño lado sumiso se había vuelto loco completamente, que un chico como él me dijera esas cosas y me dominara así... Me había dado a conocer un lado que ni si quiera yo conocía.

Finalmente mi clímax llegó y comencé a venirme, soltando un fuerte gemido que por suerte fue contenido con su mano

—¡Iida~! — grité de placer conforme me venía. Ambos llegamos al tan preciado clímax después de toda esta aventura...

Iida se apoyó en mi espalda, su respiración agitada y caliente sobre mi cuello me causaba cosquillas, pero sinceramente eso no me preocupaba ahora, mis piernas... Temblaban demasiado y dudaba que pudiera ponerme de pie en este momento. Además, el desastre que habíamos hecho aquí...

—Iida... — jadie, cuando mi respiración se normalizó — Tenemos que... Irnos ya

—Prometes que... ¿Vendrás a todas las clases y... Te esforzaras? — me sorprendería que en esta situación él aún insistiera en eso, pero bueno, se lo había prometido

—Si, lo haré... Pero también tendremos que repetir esto ~ — lo había dicho a modo de broma, justo ahora estaba exhausta y me preguntaba si mi cuerpo podría resistir otra ronda así con él

Sus mejillas se pusieron sonrojadas de nuevo y tras unos segundos él asintió. En el fondo él también deseaba repetir esto, había sido un buen momento y dudaba que cualquier otro ser humano rechazara una oportunidad así, inclusive Iida

—Muy bien, maestro Iida, ¿cuál será nuestra siguiente lección?

—Otro 10, muchas felicidades, ____ — el profesor Aizawa había felicitado a ___  por otro exámen aprobado.

Este era el tercero que aprobaba con calificación perfecta y bueno, Aizawa también me había felicitado por por fin haberla convencido de prestar atención a clases, pero... Esto no era del todo bueno.

Desde aquel día... Lo habíamos vuelto a hacer, unas... Muchas veces; siempre venía a clases, asistía puntual a las clases particulares que le daba e incluso me pedía horas extra. Pero a cambio de eso, ella pedía algún... "premio" que no podía negarle. Una parte de mi decía que estaba mal, pero la otra gritaba con desesperación que lo hiciera.

—¡Iida! — Denki volvió a acercarse a mi justo como la primera vez. El rubio se sentó en el asiento frente a mi y me miró burlón — Si que a cambiado ____, ¿no crees?

—S-Si, en verdad a cambiado mucho — respondí, bajando la mirada. Siempre que la veía, hablaba o pensaba en ella, mis mejillas se ponían rojas, odiaba eso

—Es sorprendente, ¿cómo lo hiciste? — alzó una ceja — ¿Será que pusiste en práctica el video que te envíe?

De repente, me quedé en shock, ¿Denki sabía algo? ¿Lo decía en broma? No sabía cómo reaccionar ante eso, era justo lo que había hecho

—Ah... ¿Iida? — volvió a hablar, esta vez algo más nervioso — No has respondido, ¿tu en verdad...?

—¡Iida! — por suerte, ____ había venido a salvarme. Ella se detuvo a un lado de mi escritorio, me miró con una sonrisa y luego a Denki — Es hora de nuestras clases privadas, Iida, ¿nos vamos?

—S-Si, es hora de irnos — rápidamente tomé mi mochila y me puse de pie. Denki solo nos miró algo incrédulo y con una sonrisa nerviosa

—I-Iida, no me digas que...

—N-Nos vemos mañana Denki, por favor no llegues tardes a las clases — tome la mano de ella y la obligué a rápidamente irnos hacia la puerta y abandonar el salón.

—No puede ser... ¡Iida! — la voz de Denki fue lo último que escuchamos antes de salir por la puerta 

Quizás nos había descubierto pero... Había sido su idea desde el inicio, yo solo seguí su consejo, ¿no?