Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 9


No podía estar más enojada, el muy estúpido de Byron me invita a una cena, pero familiar y no me dice, solo creí que seriamos él y yo en una velada romántica, sueña Kaela. Me avergonzaba totalmente mi atuendo ¿Qué dirían sus familiares?
Para suerte mía había traído mi abrigo, que era bastante largo y cubría mi cuerpo.

A la hora acordaba me había enviado al chófer de su padre, mientras que él se apareció en un enorme moto, de esos que cuando las mujeres se sientan suben sus traseros al cielo. Mi boca se quedó abierta por largo rato, Byron se desmontó, con su estilo único quitándose el casco moviendo su cabeza, su pelo se regó por todo su rostro, no era que lo tenía largo, pero tampoco corto era más bien una medida media, aunque le quedaba hermoso. Se acercó a mí tomando mi barbilla entre sus manos depositando un suave beso en mis mejillas.

—Al menos debiste avisarme que era una cena familiar. —dije mostrando mi atuendo debajo de mi gabardina.

El río quitando la gabardina, intenté no dejar que lo hiciera, fue una pelea corta que el salió ganando.

—Mi familia no es de las que te juzgan por tu vestimenta, tener un tatuaje o por algún defecto que vean en ti, somos de los que sabemos que no hay nadie perfecto, te apuesto que querrán saber dónde compraste ese vestido, que por cierto te queda hermoso. —concluyó.

Entramos al restaurante ☆Five Star From The Universe☆, el cual había sido reservado para su reunión familiar, Byron era hijo único, su madre quedo estéril cuando él nació, pero la familia Rousseff Velarde había adoptado dos niños cuando Byron aún era un bebé, por lo tanto tenía una hermana y un hermano adoptivos.

Cuando entramos todos quedaron viéndonos, mire a Byron ya que esas miradas parecían de personas que si juzgan. Cada uno dejo lo hacía para mirarnos a uno y al otro, se hizo un silencio incomodo, mis pies se enredaron y de no ser por Byron me voy al suelo, pero de repente todos empezaron a aplaudir y reírse, diciendo a unísono bienvenido Byron y Kaela.

Unas chicas se acercaron a mí separándome de Byron, le miré preocupada y el solo me hizo un gesto con sus manos mientras sonreía.

—Hola Kaela, estábamos locas por conocerte, eres hermosa y ese vestido te queda divino. —saludó la más delgada de las chicas.

—Enya vamos a presentarnos. —manifestó la otra.

Ya sabía que Enya era la más delgada y pelirroja no natural, mientras que la más llena era Misella, la hermana de Byron, Enya era su prima, ambas me llenaron de preguntas, me caían bien estas chicas.

—Señoritas, ¿me permiten llevarme está dama unos minutos? —preguntó Byron detrás de mí.

—Eres muy egocéntrico, la tienes todo el tiempo. —afirmó Misella. —pero está bien llévatela, de todos modos lo harás —añadió cruzando los brazos.

Byron puso sus manos en mi espalda y me hizo caminar hacia un hermoso jardín que tenía el restaurante, las flores estaban podadas en forma de estrellas y madre mía la fuente era hermosísima, allí había algunos bancos y pude vislumbrar sentados a los que por sus parentesco eran los padres de mi novio, mis manos comenzaron a temblar ya que no sabía cómo actuar.

—Mamá, Papá ella es Kaela, mi novia. —Me presentó el así sin más.

—Un gusto querida, soy Ángelo Rousseff, y esta es mi esposa Brianna Velarde orgullosamente de Rousseff. —manifestó.

—Gracias un placer. —respondí sintiéndome extraña.

—No seas tímida, aquí no comemos ni matamos, no tengas miedo y sé cómo eres, ten miedo de Byron que sabe cómo usar un bisturí. —dijo susurrando más bajo lo último tratando de bromear.

Resultó porque todos reímos, finalmente los padres de Byron se pusieron de pies y me dieron un fuerte abrazo dándome la bienvenida a su familia, me sentí totalmente a gusto allí.

—uno dos tres, uno dos tres. —escuchamos un conjunto de voces.

Todos miramos, y había dos chicos mirándose a los ojos con sus manos en la cintura, estaban rojos y tenía una extraña expresión.

—Dios Byron van a pelearse. —manifesté asustada.

—No, no lo harán, solo juegan a las miradas chistosas, consiste quedarse viéndose uno a otro, el que ría primero deberá cumplir un reto que imponga el ganador. —explicó riéndose.

Nos dirigimos a los jugadores, los padres de Byron también se unieron entre risas, mi novio empezó también al uno dos tres, y me animo a hacerlo.

—Me encanta tu familia mi moreno de oro. —declaré poniéndole un nuevo apodo.

— ¿Moreno de oro? Hmmm me gusta.

Ya era hora de irnos a nuestros hogares, como siempre Byron me explico que tenía que ver unos pacientes más temprano que nunca por lo que decidió llevarme a su casa, nada más y nada menos que en su moto.

—No pretenderás que me suba allí. —razone.

—No lo pretendo lo digo.

—Pero mi vestido es muy corto. —Me excuse.

Byron tomó mi gabardina y la colocó alrededor de mi cintura, me miró mientras la acomodaba de forma tal que al subir quedará cubierta, también cabe añadir que me robó un beso que me hizo arder.

—Ya está, ahora ven sube te ayudare. —dijo doblando su moto para que yo subiera.

Me subí y de una vez sentí mi trasero alzarse por la posición misma de la moto, estaba totalmente fría, Byron aceleró sin arrancar, el sonido me hizo sobresaltar.

—Tome mi casco bella dama. —Me entrego su casco y me lo coloque con torpeza.

—Sujétate. —pidió.

Y me abracé a él, mis brazos encajaban totalmente con su cuerpo, Byron condujo hasta mi casa, en algunos momentos lo hizo rápido, otros lentos, jamás pensé que podría disfrutar tanto de dejar que la brisa despeine mi cabello, o que mi novio amara las motos, siempre le vi como un médico serio y algo coqueto, pero cada día me sorprendía más, mi amor por él se incrementaba.

Nos detuvimos en una luz roja, yo temblaba, hacía mucho frio, Byron al parecer sintió mis temblores porque se quitó su chaqueta negra y me la tendió.

—Que romántico, pero si es Byron y su chica. —vociferó alguien desde una Jeepeta.

No reconocí a las personas que dijeron esto, pero Byron si, lo sentí tensarse delante de mí, volví a mirar a ver que lo había hecho sentirse nervioso.

—­ ¿Quiénes son ellos? —Pregunté.

No recibí respuestas, el semáforo cambio y Byron retomo su marcha, esta vez el aire se sentía incómodo, la Jeepeta con los extraños nos alcanzó situándose a nuestro lado. Byron giro su cabeza me incline un poco para ver su mirada, y me congele aún más cuando su voz salió.

— ¿Qué diablos quieren? —inquirió

—Nada, solo saludarte querido Byron, ver que tal llevabas la muerte de mi primo Miguel ¿Recuerdas? Tu amigo de infancia que falleció luego que le operaras. —musitó aquel hombre.

Byron detuvo su moto de golpe, juro que casi me voy al suelo, la mano izquierda de él me sujeto y me dio un vistazo, asegurándose que estuviera bien.

—Dairon ese asunto quedo solucionado, mi pasado con Miguel Castro está muy atrás, no tuve nada que ver con su muerte, el mismo se encargó de que hoy este sepultado. —explico Byron con voz de mando.

El hombre al que Byron nombro Dairon me miro estudiándome, me aferre más a Byron, estaba asustada, seguían saliendo temas que yo desconocía de él y me estaba abrumando la parte de su pasado.

—Bonito trasero el de tu acompañante de esta noche, no es la misma con la que te vi en tu auto hace unos días. —saco a colación.

Mi alma salió de mi cuerpo al escuchar eso, podía ser mentiras pero ¿Y si era cierto? Apreté mis dedos sintiéndome frustrada.

—No creas nada de lo que dicen Kaela, solo quieren buscarme problemas. —susurro Byron. Les molesta que yo logre realizarme, hacerme profesional salir del agujero de los malos mientras que ellos no. —añadió.

Me dijo un sujétate en voz baja y acelero dando un giro a su moto en otra dirección muy distinta a mi casa, deduje que quería despistar a esos tipos de mi casa, cuando se aseguró nadie nos seguía me llego a mi destino.

— ¿Quieres explicarme que paso hace un rato? —pedí impaciente.

—Recuerdas a Miguel, el paciente que opere, que te dije que me había hecho mucho daño en el pasado, pues esos son algunos de sus primos, no sé qué hacen por aquí, aunque ya estoy creyendo saberlo, no son buenos tipos, su estilo de vida les llevara a la perdición. —explico.

—Me estás hablando por arriba Byron, quiero detalles de todo de ti de tu pasado. —supliqué.

—Después lo hare, no me siento de ánimos para entablar una charla por la que quizás me juzgues, entra en tu casa, te prometo que te explicare todo. —afirmó.

Me dio un fuerte abrazo y me dio una mirada suplicante, sedienta de tiempo, no pude resistirme a sus ojos intimidantes y tristes.

—Está bien Byron, pero no esperare mucho. —manifesté.

—No te pido que lo hagas, solo sí que me comprendas, nuestros actos sean buenos o malos son propósitos para enmendarnos, rehacernos, reinventarnos y ser mejores personas, sin los tropezones no tendríamos experiencia de nada y seriamos mecánicos pisando por donde otros lo han hecho. —declaró

Me quede toda la noche meditando sus palabras, eran ciertas, pero no me quedaría llena de suspenso, esta vez yo misma buscaría las respuestas que buscaba.


                                                                                *********



Datos: ☆Five Star From The Universe☆ —Restaurante Ficticio.

Como han notado esta vez el reparto no les tengo artistas famosos, son modelos de mi país, junto a ellos pronto le traemos unas sorpresas que se les encantaran,  estar atentos.


Gracias a ti que lees esta historia, que votas y comentas, quiero decirte eres importante para mi.








Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro