Mire mi reloj, tan solo faltaba una hora para la primera sesión de mi juicio, Veira se había preparado adecuadamente y Kaela siempre estuvo sujetando mi mano, tenía un mal presentimiento.

—Todo va a salir bien Byron. —aseguro Veira.

Ya estaban preparados en sala los testigos y familiares de Miguel, quienes al cruzar por mi lado sonrieron con malicia, uno de ellos miro ladeando su cabeza a Kaela y le guiño un ojo, apreté mis puños, el muy maldito se atrevía a provocarme.

—Tranquilo, sabes que soy tuya. —dijo Kaela apretando más mi mano.

Veira nos indicó que debíamos de entrar, pude ver como estaban allí Alexa, la prima de Miguel quien recibía miradas de odio de su propia familia, entre otras personas más que testificarían a mi favor otras en contra.

El abogado de la familia de Miguel comenzó su acusación basado en sus falsas conclusiones.

—El doctor Velarde practico la operación a Miguel sin haber terminado sus problemas personales, por lo que alegamos que su muerte está justificada en sus manos, tenemos como prueba algunos testigos, incluyendo sus familiares que saben la historia tras lo sucedido. —explico el abogado.

—Me gustaría escuchar a la abogada del señor Velarde, lo que usted me acaba de decir señor Gerald no tiene ningún alegato ni pruebas contundentes. —pidió el juez.

— ¿No le es suficiente con lo que dije? —pregunto Gerald

La sala se escandalizo, el alboroto estaba siendo ocasionado por los familiares de Miguel, sonreí a medias mientras Veira se ponía de pies, caminaba con ligereza, aun con sus altos tacones no hacia ruido, su seguridad era percibida en toda la sala, de hecho su rostro denotaba las palabras ''Gane el caso''.

—Como saben estoy en representación del señor Velarde, quien es acusado injustamente de la muerte de Miguel, primero el ya mencionado era un drogadicto y aquí sus analíticas lo demuestran, su causa de muerte no fue dada a la operación que realizo mi cliente, asistió a la cirugía una enfermera que es familiar del fallecido, quien testificara diciendo la verdad, nada ha sido manipulado, la cirugía fue exitosa en todos sus ámbitos y hasta la entrega de guardia el paciente estuvo bien. —alego Veira

El juez procedió a analizar las analíticas junto a un médico legista.

—Que pase la testigo que estuvo en la cirugía. —solicito el juez.

La enfermera se puso de pies y camino al estrado, se sentó en la silla de testigos mirando al frente, le dio una mirada dura a su familia y procedió a dar su declaración.

—Mi primo no llevaba un estilo de vida bueno, es lo primero que diré, abusaba del alcohol y narcóticos, el día que llego a emergencias el doctor Byron era el único cirujano disponible, si el paciente hubiera sido transferido hubiese muerto al instante... —Pero como quiera murió—La interrumpió alguien de atrás.

—Favor de sacar a la persona que acaba de hablar, nadie abre su boca si yo no lo mando, así que compórtense, ya me han hecho perder tiempo en este caso. —dijo el juez enojado. —prosiga. —añadió.

—Byron tomo una decisión, operar a alguien que en su pasado le hizo daño, pudo haberse negado, estaba en su derecho, le escuché decir que el estudio medicina para salvar vidas, sin importar quien sea, Dios le había entregado agilidad para ayudar, que Miguel dejaba de ser quien era desde que entro al hospital para convertirse en su paciente, yo también estaba de turno por lo que asistí en la cirugía, todo salió bien, no hubo ninguna mala praxis en ningún momento. —concluyo.

—Tomaremos quince minutos de receso, el caso estará resuelto para cuando regresemos. —comento el juez.

Salimos de la sala, me sentía calmado aunque no ganara el caso sé que no había hecho nada para que Miguel muriera.

—Veira gracias, se te da bien el derecho, parecías otra cuando subiste al estrado, si hubieras estado defendiendo el otro bando yo hubiese corrido de allí. —bromeé.

Todos reímos, fui hacia Kaela y le abrace mientras besaba su frente, mi pequeña, mi tierna Kaela siempre estaba para mí.

—Nos quedan solo cinco minutos, prepárense, aunque este caso esta ganado. —explico Veira.

Nos anunciaron que debíamos volver a entrar a sesión, el juez estaba de pies mirándonos a todos.

—Bien hemos decidido que el acusado quede absuelto de todo cargo, tanto las analíticas como los testigos tienen fundamento, los familiares de Miguel están juzgando sin fundamento, dejándose llevar por una venganza infalible por lo que tienen una orden de alejamiento tanto de Byron como de toda su familia u amistades. —Dio unos golpes a la mesa. —Se levanta la sesión. —añadió.

—No puede hacernos esto, está usando favoritismo él lo mato. —acuso Alejandro, primo de Miguel.

El juez salió de la sala y fuimos escoltados por policías hasta afuera, Alejandro y otros más intentaban acercarse a nosotros. Salimos a la calle y Veira salto, coloco sus manos en su cintura balanceándose de un lado a otro.

—Se los dije, aunque era un caso muy fácil. —manifestó.

—Vamos a brindar, debemos de celebrar esto. —sugerí.

—Nosotros nos vamos a casa. —dijo Liam tomando la mano de su esposa.

Se dirigían a su auto cuando escuchamos un estruendo, mire hacia donde había venido el sonido, Alejandro y otros más se dirigían corriendo hacia a nosotros mientras disparaban al azar, por instinto tome a Kaela y la cubrí con mi cuerpo mientras Liam hacia lo mismo con Alexa lanzándose fuera del área de la balacera.

No me deje aturdir, tome la mano de Kaela y corrí tratando de evitar estuviese en contacto con alguna bala, sentí un inmenso dolor y ardor en mi brazo izquierdo seguido por una humedad caliente, Alejandro se acercó rápido a mi mientras me apuntaba, empuje a Kaela a un lado.

—No hagas esto Alejandro, no te dejes llevar por la venganza. —pedí temiendo por Kaela, quien estaba mirándonos mientras temblaba.

Un disparo sonó seguido de un grito de Kaela, ella corrió hacia mientras lagrimas rodaban por su mejilla, sangre goteaba de mi brazo, mientras el cuerpo de Alejandro se iba al suelo.

—Te hirieron Dios mío Byron no te mueras. —suplico Kaela.

Un policía le había disparado a Alejandro, inmovilizándolo mientras otros dos se acervan a esposarlo, pude escuchar a lo lejos el sonido de ambulancia, intente moverme pero el dolor era muy fuerte, hice una muesca mientras tomaba aire.

Mire hasta la zona del atentado y quede petrificado, habían cuerpos en el suelo, uno de ellos era el de Veira, Kaela también dirigió su vista a donde yo miraba, ella corrió mientras gritaba el nombre de su amiga, sin importarme el dolor corrí tras ella, las piernas de Kaela la hicieron caer al suelo, le ayude a levantarse.

—Amor tranquila, Liam esta con ella y yo también le ayudaré. —Trate de calmarla pero fue en vano.

Busque con la vista a Alexa, ella estaba ayudando a otras víctimas, Liam colocaba un torniquete en Veira quien respiraba con dificultad. Kaela se acercó a ella mientras la movía para que le hablara.

—Kaela no hagas eso, estoy tratando de parar la hemorragia, muévete por favor. —ordeno Liam.

Ella no escuchó, me acerque a ella pero no pude hacer mucho, caí de rodillas sintiéndome mareado, mire al suelo percatándome que también había perdido mucha sangre. Alexa abrazo a Kaela alejándola de Veira, mientras mi vista se iba tornando borrosa, sentí que me estrellaría al suelo pero mi cabeza quedo en las piernas de mi novia, sus lágrimas cayeron sobre mí. Me deje ir sintiéndome como movían mi cuerpo.

—Lleven a Veira al hospital primero. —articule

—Pero señor usted es uno de nuestros mejores médicos, es nuestra prioridad. —dijo uno de los que llevaba mi camilla.

—Se le da prioridad a los pacientes que la necesitan les ordeno que la lleven primero, a mí me llevaran en auto—dije volviendo a sentir mi cabeza pesada.

Dejaron de mover mi camilla mientras levantaban a Veira y la introducían a la camilla, Liam había enviado a Alexa a su casa, mientras que con su ayuda y la de Kaela subí a mi auto, el condujo mientras Kaela me abrazaba, deje mi cuerpo recostarse sobre ella, mientras temblaba, me deje sumir en un sueño profundo, en mi memoria  quedaron los movimientos que ella hacia  para  acunarme en sus brazos.