《24》
"Momento TodoSeru.
Todos juntos por Serukî,
nuestra familia. "
Serukî se encontraba tirada en el suelo agotada a mas no poder, estando regañando a Luisõ por dejarse llevar por la emoción, quién a su vez se defendía que ella también lo estaba como él.
Entre una de ellas escuchó y sintió demasiado repentino el ambiente tenso, agudizando sus sentidos escuchando como el hijo de un primo de la heroína de Mandalay le había dado un golpe en dónde los chicos alaban y cuidan.
—¡Primo salvaje! —exclama Iida mientras agarra a un pelinegro verde en estado casi muerte.
Haciendo que la pelienrulada se extrañe con carita curiosa de cachorro. No entendía porque el niño era tan gruñon. Aunque ninguno de sus hermanos eran tan dulces o bien saludables en humor. Aquello había ocasionado que le de un sabor amargo en la boca y se deje caer de vergüenza ajena.
Pero tenía curiosidad en llegar a ese niño. Sin embargo, cuando las heroínas profesionales dijeron que iban a comer que llevaran sus cosas en los cuartos fue la primera en irse, tirando su maleta en alguna zona de la habitación y ser la primera que comía sin importarle un comino que se notara como un ser salvaje comiendo, estaba emocionada y feliz de tener tanta comida.
Una vez que sus compañeros llegaron, miraron la escena avergonzados mientras que sus senseis rían con ternura.
—Al parecer Serukî-chan es la mas glotona de todos. Y eso que yo soy el glotón —añade Sato mientras se acerca a ella empieza a comer, pero se maravilla cuando el sabor es increible empezando a comer como bestia tambien.
—Y bueno chicos, a cenar, que nos merecemos —añade Iida, mientras todo empiezan a comer a su ritmo.
—La comida está deliciosa~....—exclama Kirishima y Denki a la vez mientras que Mina ríe ante sus caras graciosas.
Tsuyu iba comiendo tranquila mientras escuchaba a Uraraka que comentaba algo importante con Hagakure. Todoroki había estado observando a Serukî quien una vez que casi terminó la comida de la mesa se dedicó a tomar un poco de jugo, pero se la veía pensativa, observando el bosque. Pero no se le paso por alto que se había tensado por sus hombros. Para luego ver como se despedía de los cercanos para ir al baño.
Todoroki presentía que era una excusa por lo que cuando miró a Aizawa este asiente ante una petición silenciosa de seguirla. Mientras que nadie se daba cuenta de esto, pues todos se encontraban cansados, peleando y comiendo la cena.
[…]
Serukî había llegado cerca del baño, pero tan solo se lavó el rostro y salió para sentarse a mirar el cielo nocturno. Era hermoso poder ver tan al descubierto y en naturaleza. Pero algo parecía molestarla, porque sus manos estaban empuñadas.
—¿Porqué te preocupas tanto Shoto.? ¿Por qué no me dejas sola? Estoy perfectamente bien. —dijo mientras sentía la presencia del bicolor sentarse a su lado.
En la escalera de madera, mirando al frente, para luego observarla.
—Porque siento que solo mientes. Todo desde el enfrentamiento con Stain, además... Algo dentro de mi me advierte e impulsa llegar a un deseo de protegerte. —añade Todoroki confuso y mirando su mano, avergonzado.
—Solo estoy huyendo de algo imposible de escapar... Ya no quiero dañar lo que me importa y esta cerca mío... —contesta suspirando Serukî.
Todoroki la mira sin comprender, de que podía estar escapando, lo único que él sabía era que sus hermanos la dañaron en el pasado con rasguños, pero no que la perseguía algo. Por lo que posa su mano en el hombro de su contraria.
—Somos amigos Itaete, confía en mi, en nuestros compañeros, podemos protegerte juntos. Dime que es lo que sucede, siento como si estamos perdiendo, yo siento que me evades... —añade Todoroki.
Serukî levanta la mirada del suelo al escuchar sus palabras y su mandibula se tensa, enojada consigo misma. Por lo que tan solo se dedica a perderse un momento en sus miradas heterocromicas.
—Todoroki... Me alejo porque no quiero que nadie los dañe, no puedo permitirme perder a gente importante. Tienes razón... Huyo... Escapo como un animal salvaje ante el peligro... Pero es que... —en su garganta aparece la sensación de tener una roca en ella.
No sabía como decir aquello, ya no quería revivir una y otra vez lo sucedido, por lo que se armó de valor, resumió y se lo dijo.
—Tengo seis hermanos mayores, yo soy la séptima Shoto. Ninguno de mis hermanos somos seres normales ni siquiera poseemos de una particularidad en si, somos monstruos. Nuestros antepasados fueron maldecidos por una unión prohibido de entre el cielo y el infierno. —empieza a decir resumidamente la pelienrulada.
—Sé que no son normales, la criatura en la que se transformó Stroessner-san no era nada común a lo ya visto, igual que tu. Pero que es lo que me estás tratando de decir.. ¿que es lo malo en todo eso?
Las manos de Itaete protegidos con esos guantes de cuerina, tiemblan nerviosa y con miedo, frotándose como si estuviera asqueada, pero mas que nada su rostro presentaba la angustia.
—Mis hermanos mayores son criaturas impresionantes, pero los dos anteriores a mi, son... Diferentes en aspecto y personalidad desde que nací hasta que predije la muerte de mi madre. Hasta hace poco me culpaba por la muerte de la misma, porque yo... La había tocado y al día siguiente... Del sueño ya no despertó, la besé, la abrace, le hice cosquillas pero ya no despertó... Ese día fue el primer día oscuro de mi vida... —las lagrimas caían por su mejillas, y sonríe amarga—...Si mi vida era un desastre desde que nací, desde ese momento nació en infierno para mi. Mis hermanos mayores... Representaban por la maldicion al dios de la sexualidad, y el otro es el dios de la fecundidad... Sus instintos lo llevarían tarde o temprano a descontrolarse... Y yo era la unica presa facil y mujer de la familia —traga saliva, mientras las lagrimas caían como cascadas.
Aquello, aquella sensación, sentimientos y situación de verla perdida lo estaba rompiendo, el cariño que Todoroki sentía hacia ella no era el normal que muchos podrían malinterpretar, el cariño que el sentía era sobreprotector, puro, y sincero, como la de un hermano, le había costado comprender aquello. Tuvo largas tardes con su madre para que pudiera comprender lo que le sucedía. Ni con su hermana Fuyumi podía tener ese sentimiento por lo que por eso estaba muy confundido. Pero eso era antes, ya que al verla así tan solo pudo acercarse a cubrirla y protegerla entre sus brazos.
No quería pensar que lo que le estaba confesando era eso. No quería aceptarlo, ¿porqué una persona como ella debía sufrir por todo, sin ser la culpable?
—Se-segun mis hermanos a mis 10 años fui violada por un duo de borrachos.... Pero eso tan solo había sido una coartada de ellos... Ellos me habían golpeada hasta dejar fragil....y-...yo...violada...por ellos terminé. Poco después, me enteré que estaba embarazada... Pero había tenido un aborto natural porque mi cuerpo no podía soportar un bebé ni con los golpes que quería matarme, ni con los intentos de suicidos que tuve —admitió con la voz rota la pelienrulada a Todoroki.
Quien había abierto los ojos sorprendido por la confesion, pero sentía que quería matar a esos que se hacían llamar dioses, no era ninguna excusa perdonable que sus "instintos" los hubiesen impulsado y controlado para hacer aquello, era inaudito. Pero Todoroki tan solo se dedico a protegerla en aquella noche.
—Ellos... Me han encontrado... Por eso se ha mejorado la seguridad... Los villanos y ellos creo que se han unido... Yo... Si mi destino es morir por todo lo que he causado, no me salven Todoroki —suplica sollozando—...yo ya no quiero seguir con la pesadumbre.. Yo...
—No digas eso, tienes a Hitoshi por quien debes luchar, nos tienes a nosotros, que somos como tu familia, junto a los héroes que estan intentando protegerte, no te rindas porque nosotros no los dejaremos llegar a ti —añade firme mientras la separa y limpia las lagrimas, con un hermano consolando a su hermanita pequeña.
Itaete no cabía en la sorpresa y sentimientos encontrados, no podía saber cuan agradecida y perturbada se encontraba, pero estaba segura que estos amigos que habían llegado a su vida, serían los mejores de toda su vida. Por lo que ella los protegería de ellos, intentaría no perder la batalla antes de tiempo.
Después de todo, ella quería ser un héroe como todos ellos.
—Esta bien, pro-procuraré luchar y no decaer mas... Pero no dejaré de protegerlos, no será facil que los deje cuidarme—añade mientras sonríe terca pero algo triste.
—Nunca fuiste algo suave y fácil de comprender, no lo esperábamos... serukî-chan —añade Kirishima, y Denki mientras los dos tenían lagrimean cayendo por sus mejillas.
Sorprendiendo a ambos de la presencia de esos dos, mientras que por detras tres personas se tiraban para abrazarla conmocionados por lo que habían escuchado sobre ella.
—Serukî-chan no dejaremos que te dañen, no mas, tu eres como nuestra hermana, nunca te dejaríamos de lado. —exclama Uraraka, mientras sollozaba.
—¡Les golpearemos y dejaremos sin descendencia a esos idiotas! ¡Con Serukî-chan no! —exclama lloriqueando Hagakure, mientras la abrazaba.
—Mientras que estemos juntos, no podrán volver a dañarte, porque si no dejaré resquebrajado—añade Mina uniéndose a ese abrazo.
Todos los chicos habían podido escuchar la verdadera historia cargada de peso de Itaete, aunque era cierto, unidos jamas serían vencidos.
[…]
Luego de aquella confortante escena las chicas se habian reunido a dormir juntas ya no dejarían sola a su compañera, e Itaete se los agradecía a llanto puro, no podía evitarlo era la primera vez que le sucedía algo tan grande como el apoyo de ellos, de sus compañeros que sin dudar ya se había vuelto uno de ellos apesar de ser extranjera.
—A todo esto, ¿Cuándo es tu cumpleaños Itaete-san? —pregunta curiosa Momo.
Haciendo que todas la mirasen con el mismo sentimiento.
—Eh... El 4 de junio...
Esto de acostumbrarse a ser la atención de todos era difícil, y mas cuando ya no te veían mal, sino que con miradas de amor y amistad. Cosa que solo había recibido de parte de sus cuatro hermanos mayores y su madre, junto al luisõ. Pero nunca de sus compañeros. Y bueno Hitoshi era sin duda una excepción, él era su novio. Siempre al pensar de ello, se sentía avergonzada y feliz. Nunca pensó tener un novio. Y tan dulce pero preocupon.
—¡Eso es en dos días! ¿Cómo te atreves a decirnos con tan poco tiempo? —pregunta indignada Mina.
Mientras que Itaete se sacaba la toalla humeda de su cabello, intentando peinarse para que su cabello realmente no pareciera un nido de pajaros al día siguiente.
—No es mi culpa, que hasta ahora se dediquen a preguntarme además no tenía pensado festejar... No creo que se pueda. —se encoge de hombros.
Todas se habían quedado a cuadritos, tenía razón estaban con esto del entrenamiento y con lo que le había dicho Aizawa sensei no serla facil festejarselo.
—No hay imposibles para nosotros Itaete-san, no te confíes —sonríe emocionada Mina.
Mientras ya empezaban a invertir pensamientos de lo que podrían hacer pero entre justo ese momento, Aizawa y Mandalay los callaron para ya dormir.
Definitivamente mañana sería un día muy largo. Y más por el siguiente objetivos para sus compañeros, relajar itaete con una pequeña fiesta de cumpleaños.
[…]
Comienza el entrenamiento para fortalecer las singularidades, cada uno de los estudiantes trabaja en aumentar sus límites de distintas formas. Shino Sosaki, una integrante de las Wild Wild Pussycats, le cuenta a Midoriya sobre él odio de Kota hacia los Dones y la sociedad superhumana.
Más adelante, durante un ejercicio de entrenamiento nocturno, los villanos se reúnen cerca del campamento para iniciar su ataque contra los estudiantes de la U.A.
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¡Hola! Ya empezamos con una pequeña maraton para el día de hoy! ¿Podrán festejar el cumple de Itaete? ¿Se esperaban esa reacción de la clase 1A? ¿Que todoroki la viera como hermana?
¿Será posible que se reunan a tiempo para protegerla de la Liga de villanos?
¡Todo esto y mas pronto!
¡nos leemos! ¡Salud y mucha lokura!
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