(En edición)

-Quién...eres?

-Tranquila, no te voy a hacer nada. Hehe, soy Sans el esqueleto, guardia de Snowdin-se presentó el sonriente monstruo brindándole un apretón de manos.

-Yo soy Frisk, mucho gusto-enuncio la chica esta vez mas en confianza mientras le daba la mano.

-Mucho gusto Frisk-expreso con una sonrisa-Sabes, es primera vez que veo a un humano como tú y debería informarlo, pero-le guiña una cuenca-mejor te muestro el lugar.

-No se meterá en problemas?

-Hehe, no, aunque por el momento será mejor que mi hermano no te vea- comienza a caminar y la chica le sigue-Es un fanático de los humanos y quiere capturar uno para volverse parte de la guardia real.

De repente se escucha una voz a lo lejos que llamaba al joven esqueleto.

-Hablando del rey, escóndete detrás de esa lámpara, rápido-le dice a la pelicastaña.

La chica asiente y corre hasta ubicarse detrás de la lámpara con forma conveniente. En seguida apareció un esqueleto alto, vestido de una especie de disfraz que no identificaba de que era.

-Sans, he visto que no has terminado todavía de poner los puzles. ¿Por qué no has acabado?

-Vamos hermano, he puesto la mayoría.

-¡Pero no todas!-le gritó histéricamente-Conoces lo importante que es hacerlo, no seas tan flojo. Se como yo, tu querido hermano, el gran Papyrus.

-Hehe, relájate hermano, estas poniendo algo huesuda la situación-bromeó Sans, a lo que el otro lo mira con decepción.

La chica observa todo, sin poder escuchar bien la charla de aquellos dos. Con curiosidad trata de sobresalir un poco para oírles pero cae junto con la lámpara, ambos esqueletos lo escuchan y justo cuando el más alto se iba a girar, él otro lo detiene.

-Espera hermano-lo toma del brazo.

-Sans, creo que algo se ha caído.

-Si pero tengo que decirte esto, es importante que me atiendas-se agacha y toma una piedra-y me escuches-dice mientras arroja la piedra a un árbol.

Esta empieza a rebotar por muchos árboles hasta golpear las ramas del que se encontraba junto a la humana, haciendo que cayera toda la nieve de estas sobre ella.

-Te quiero mucho Papy-le dijo.

-Ow, yo igual hermano, pero es momento de trabajar. Yo, el gran papyrus se retira-dice dándose la vuelta para irse-Trabaja más Sans.

El esqueleto de sudadera al quedarse solo se aproxima al cumulo de nieve que había caído, mueve la nieve de encima de la chica y la ayuda a salir.

-Estas bien? -le pregunta.

-Sí, con un poco de frio, pero bien-le responde.

-Que bueno, oye, tengo que ir a terminar unas cosas así que no podre acompañarte hacia el pueblo-le quita gentilmente la nieve que le quedaba en el cabello-Pero nos volveremos a encontrar, solo procura no caerte de nuevo-dice guiñándole el ojo.

La chica le asiente y continua su camino, no sabía lo que le depararía y eso la hacía sentir ansiosa. Se encontró a varios monstruos más, pero con ninguno lucho, siempre escogió las opciones pacíficas y los ayudo con sus problemas. También tuvo sus enfrentamientos con los demás guardias del lugar, eran una especie de perros que hablaban y no dudaron en querer apresarla, pero la chica logro salir victoriosa de ello.

En cierto momento se volvió a encontrar con los dos esqueletos, donde se presentó al esqueleto llamado Papyrus. Este con mucha emoción trata de capturarla usando uno puzles creados por él, no la tuvo fácil ya que siempre cometía errores, pero al final extrañamente todo le fue bien.

-Nye hehehe, esta es la prueba definitiva humana. Espero que estés preparada para esto-dijo emocionadamente mientras la activaba.

La chica tenía que pasar un puente lleno de disimiles trampas. Sans observaba junto con su hermano en el final del puente, la expresión de preocupación de la chica era muy notable y con razón, su hermano se había esmerado bastante con este último.

-Sans, crees que la humana podrá pasarlo?-le pregunto sacándole de sus pensamientos.

-No lo sé-lo mira y nota una mirada igual que la de la chica.

El esqueleto alto se inquietaba por la seguridad de la humana, después de varias pruebas comprobó que era agradable y una buena amante del espagueti, como podría hacerle pasar por un puzzle de esta dificultad a alguien así?

Frisk con valentía y determinación empieza a cruzar el puente, intenta de esquivar las trampas pero su mala suerte se lo jugaba. Cuando le quitó dos de vida una de ellas, misteriosamente, algo la guió y ayudo con las demás, una fuerza que evitaba que cayera hasta que terminó al final del puente. Con nervios el esqueleto llamado Papyrus exclama:

-Me has sorprendido humana! Nyehehehe, es increíble que las hayas superado todas con tan solo unos rasguños, digno de alguien que les encantes los espaguetis-trata de poner tono serio-Aunque todavía tengo que capturarte y eso será pronto. Prepárate humana-dijo decidido e inmediatamente se marcha.

-Vaya niña, ha sido impresionante-disimuló el esqueleto con sudadera-Has pasado esos puzzles con mucha agilidad.

-Sí, aunque tuve cierta ayuda de alguien-señaló la chica-Más con este último gracias al cielo.

Sans ríe ligeramente:

-Me has cogido, si te he echado una pequeña ayudita, pero con los del principio-aclaró el esqueleto dejando a la chica confundida-Este último fue obra de mi hermanito, creo que le has agradado mucho.

La chica se sentía calmada y feliz al escuchar eso, no solía agradarle mucho a las personas y todo por la fama que tenia de niña desgraciada.

-Ahora te daré una mano más para tu enfrentamiento con mi hermano, serán unos consejos sanstasticos-le sonríe guiñándole el ojo-Él tiene dos ataques especiales. En el primero tienes que quedarte quieto y en el otro moverte, en el momento sabrás cual es cada uno.

-De acuerdo, pero...no sé si podré hacerlo. Siempre pasa algo que hace que falle y termine lastimandome.

-Vamos, no puedes pensar negativamente, es cierto que tienes cierta cantidad de mala suerte, ¿pero eso importa? Nosotros también tenemos desventuras y no solemos siempre pensar que tendremos la buena suerte de que nos pase algo maravilloso después- da unos pasos-Los humanos tienen cosas fantásticas, tú tienes cosas fantásticas que te hacen sobresalir entre los demás-se agacha por un momento para tomar algo del suelo-Como una moneda de oro en la nieve-dice mostrándole lo que había tomado, una moneda dorada.

A continuación, le lanza la moneda, la cual cae justo sobre su mano.

-Gracias Sans-le dice con una sonrisa.

-No me lo agradezcas, es la verdad. Te he tomado cariño también chica-le respondió el esqueleto.

Ahora ambos se despedían para que Frisk continuara su camino, faltaba muy poco para llegar al pueblo cercano. En unos cuantos pasos vio un cartel grande de bienvenida repleto de luces navideñas.

-Por fin he llegado-expresó aliviada al mirar el pueblo de Snowdin.

Observaba el lugar con curiosidad, compro algunas cosas para el viaje por el resto del subsuelo y habló con algunos monstruos mientras seguía su camino. Había hasta un bar y una biblioteca, todo de lo más interesante. Se quedó unos minutos más explorando hasta que decidió salir de allí, pasó por las ultimas casas y termino en un sitio lleno de niebla donde una silueta le esperaba.

-Nos volvemos a encontrar humana.

Extra #1:

-Por cierto Sans-enuncia Frisk al esqueleto-Quién es el mayor entre tú y tu hermano?

-Yo claramente-respondió muy sonriente.

-A sí? Pero... eres como 7 cm más alto que yo solamente-dijo muy sorprendida.

-Si pero ya sabes lo que dicen:las mejores cosas vienen en pequeño tamaño.

La frase le dejaba todavía pensativa.

-O tal vez sea porque siempre cargo con algo que pesa-agregó Sans.

-Qué cosa?-pregunto interesada.

-Hehe, te gustaría saber? - le preguntó con cierto sonrojo.

-Si! - respondió emocionada.

-Ok, ya que insistes-dice sonriendo con picardía.

La chica le observaba donde ponía su mano buscando entre su ropa hasta que de un bolsillo de la sudadera saca un tarro de.... Mayonesa??

-Mayonesa??? Por qué??

Para saber más, el próximo episodio lo explicará XD