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Capítulo 4




BaekHyun cerró los ojos al prepararse para lo que vendría. Alcanzaba a escuchar en esa posición cómo las cosas se iban acomodando, iban moviéndose y colocándose donde debían. Él solo permaneció en un mismo sitio.

Le habían dicho que debía estar tranquilo, relajado, despejar su mente y estabilizar su frecuencia cardíaca. Lo estaba haciendo, suponía que lo hacía, mientras sentía cómo los cables eran conectados, así como algo hacía fricción con su piel, sobre sus sienes, reforzando amarres, y luego...

"Experimento 04, es tiempo de su entrenamiento. Inicia la simulación."

Abrió los ojos.

Sabía que ya no estaba en la cápsula de entrenamiento de antes, aunque sí lo hiciera, su panorama acababa de cambiar. Una simulación no solía ser su usual entrenamiento, pero para eso lo habían preparado esta vez, así que no es que pudiera quejarse. Solo seguir órdenes, como siempre.

Y esperar que eso cambiara pronto. Acabara.

Lo primero que se presentó ante sí fue una ciudad, destruida, completamente en ruinas, como si una guerra sobre ella ya hubiera pasado. Pero, claro, aún no acababa. Por encima de sí pasaron máquinas volando, de descomunal tamaño.

Trajeron consigo bombas, disparos. Y BaekHyun sabía que debía correr si no quería ser eliminado.

Pero se suponía que estaba ahí para entrenar, debía usar su poder-la luz- para defenderse, para evitar que muriera.

Tenía en mente tantas formas que hallaría para protegerse. Con la luz podría destruir las máquinas que le perseguían, podía desmantelar las armas, las bombas, después de todo, ahí cualquier cosa funcionaba eléctricamente. Y había al menos una sola parte de eso que usaba la luz para funcionar.

Sería capaz de incluso protegerse en un campo de fuerza creado por su luz para evitar que algún disparo le afectara. Pero no.

Él no podía mostrarle a ellos las capacidades de su elemento, mucho menos debía dar noción de una evolución, de lo contrario, sería el nuevo centro de su atención. Sería su spotlight, como ChanYeol lo era con el fénix, con sus tantas evoluciones, con el poder que había acumulado, pero que desafortunadamente él no había sabido ocultar. Como BaekHyun se estaba esforzando por hacer.

Quizá fue esa la razón por la que cayó y tropezó en una grieta. Fue inevitable que las máquinas no se posicionaran sobre él, y descargaran todo su armamento. BaekHyun solo cerró los ojos, con fuerza, al no sentir ningún fuerte impacto como esperaba.

Al abrir nuevamente los ojos descubrió la ciudad se había ido. Confundido, se paró de donde estaba.

Esperaba a que, si había 'muerto' en ese escenario, la simulación acabara. Como siempre pasaba. Pero no fue así. Estaba ahora en otro lado.

Un bosque. Eso pudo reconocer por la vegetación, aunque fuera extraño, él tenía tanto tiempo de solo ver las instalaciones de experimentación como para creer afirmar que reconocía el escenario que ahora se le aparecía.

Era de día, eso lo aclaraba la luz a su alrededor, y no se manifestaba nada más ahí que no fueran árboles, plantas y césped. Una extraña paz generada a su alrededor, tan inquietante que cuando los primeros estallidos iniciaron, para él no fue extraño descubrir lo que pasaba.

Debía estar en otra simulación.

De pronto, entre los árboles surgieron máquinas, autómatas, robot, como quiera que les llamara, traían armas cargadas en sus metálicos brazos y apuntaban hacia él. Por suerte, escapó de los primeros intentos en su contra. Pero claro que no serían los únicos, así que volvió a hacer lo de antes: corrió.

Casi como si olvidara por completo que tenía un poder lo suficientemente grande para destruir aquellas máquinas que le perseguían-ahora a pie.

No serían más veloces que él, podía obtener una gran ventaja al distanciarse, pero eso no evitaba que siguieran atacándole, que los disparos pararan en algún momento. No se desharía de ellos, no a menos de que él contraatacara, con su poder, con su elemento. Pero no. Él no debía usarlo. No, porque eso era lo que ellos querían.

No podía dárselos, debía resistir cuanto fuera posible, cuanto se le permitiera.

Aun cuando eso significara...

Fallar, una vez tras otra.

Una roca fue lo que le imposibilitó seguir en su camino. Era como una pared inmensa. Podría escalarla, quizá, pero eso le tomaría tiempo, y seguro que, en su arduo intento de ser alpinista sin equipo, alguna máquina terminaría por apuntarle y terminaría con su vida.

También podría correr a su izquierda. O a su derecha. El bosque era inmenso, habría más salidas. Pero quizá tardó mucho en decidirse, porque cuando se volvió, ya estaba rodeado. Máquinas a su izquierda, a su derecha y de frente, la roca a su espalda. No tendría escapatoria, todas le apuntaban. Si hacía un movimiento de huida, todo terminaría.

Su única salvación sería defenderse con su elemento. Claro, hasta eso lo estaban llevando, a que su única opción de escapatoria fuera desarrollar algo con la luz que le sacara de ahí.

Pero no. Claro que no lo haría. Aun cuando eso significara fallar de nuevo, debía hacerlo.

Quiso correr entonces, solo para terminar con eso, y lo consiguió, pero ante ello disparos fueron en su contra, y luego...

Abrió los ojos y se halló finalmente en la cápsula de entrenamiento. Los cables en su cabeza conectados, sus amarres en cada extremidad de su cuerpo le controlaban y monitores marcaban diferentes niveles de su estado. Pero él sabía que nada le indicaba un cambio en su 'debilitado' elemento.

Había pasado otra de sus pruebas. Fallando. Decepcionando a los científicos, sí, pero resguardando su secreto, y de esa forma se protegía. Protegió algo de ellos. De ChanYeol. De ambos.

El pitido le indicó que alguien acababa de entrar a la cápsula. Vio entonces a la doctora Zhang entrar y llegar hasta donde se hallaba.

Se acercó para retirarle sus sensores y le liberó de las máquinas al dedicarle una sonrisa que sabía demostraba parte de la decepción de otros, de sus simulaciones fallidas, pero que igual intentaba reconciliarle, porque así era Liyin, podría mostrarse algo decaída-como todos los científicos, desesperados por no obtener buenos resultados con sus experimentos-, solo que buscaba que el golpe del reclamo y reprimenda no cayera tan fuerte.

Estaría molesta, sí, quizá, porque esto no le había 'funcionado' de nuevo. Pero no lo demostraría... No realmente.

"Tu simulación ha terminado, 04," le anunció cuando ya estaba libre de cables y lograba levantarse de donde se hallaba al devolverle esa mirada a Liyin. Intentó mostrarse algo decepcionado, quizá avergonzado de sí mismo. "Puedes regresar a tu habitación, tienes tiempo libre antes del toque de queda, si lo deseas hay oportunidad de que vayas a la cafetería por un aperitivo nocturno o a las duchas para refrescarte. Has tenido un resultado fallido, pero no serás castigado por ello. De momento."

BaekHyun se reverenció y agradeció quizá, de alguna manera, al enderezarse para despedirse antes de abandonar la cápsula.

Ciertamente aún no era tarde para volver directamente a su habitación. Pensó que podría ir a la cafetería como se lo habían sugerido, después de todo, sí estaba algo hambriento y quizá era capaz de encontrarse con alguno de sus compañeros en el lugar que le harían sentirse en paz, aun cuando algo en sí le molestara.

Apenas puso un pie fuera de la cápsula, cuando escuchó de pronto un fuerte pitido, nada que asemejaba los que las cápsulas hacían al cerrarse o abrirse, sino que ese pitido parecía una alarma, una intensa y potente alarma retumbando por todas las instalaciones. De pronto, las luces se apagaron y solo se encendió una de emergencia que le dejaba ver las cosas en un tono rojizo.

Su respiración se contuvo sobre eso. Algo aquí no estaba bien, semejante alarma y situación no podría pasar así sin más.

Aunque, de pronto, ChanYeol estaba ahí, con él, y corrió desde el final del pasillo para aparecerse jadeando al sostenerle por ambos brazos para escucharle:

"BaekHyun. BaekHyun, Dios, BaekHyun, estás aquí. Estás aquí, realmente estás... Temía no poder encontrarte," ChanYeol le abrazó entonces, y le hizo envolver en un agarre inesperado que le llevó a sentir la desesperada respiración contra sí, sus manos estrujarlo y dejarle en una incertidumbre que no pudo evitar soltar de sus labios.

"ChanYeol, ¿qué...? ¿Qué está pasando?"

El más alto se separó de él, y le miró directamente, aún al tomarle de los brazos, cuando se lo dijo, claro y sin trabas.

"Kris acaba de explotar el núcleo central de las instalaciones. Los chicos se están encargando de tirar todo el sistema y el arma defensiva abajo. Estamos escapando, BaekHyun, saldremos de aquí. Ahora."

Y sus ojos se abrieron, de sobremanera, al intentar evaluar cada una de sus palabras, pero al no ser capaz de entenderlo, debió repetírselo, porque asimilar algo así, de pronto, era demasiado para sí mismo.

"¿Qué?"

"Estamos tirando todo esto abajo, BaekHyun. No más encierro, no más ser experimentos. Seremos libres."

"P-Pero... ¿Por qué...? ¿Por qué estás aquí en lugar de estar ayudando a los chicos con lo que has dicho que están haciendo?" y quizás fue estúpido, pero realmente hubo una parte de sí que deseó decir eso, saber la respuesta directa de ChanYeol, ya que algo en él aún no estaba conforme con lo que pasaba.

ChanYeol se acercó a él y posó su frente contra la suya. Como ayer, justo como ayer, al soportar uno el peso del otro, y crear un balance entre ambos sobre ese estado.

"Estoy aquí por ti, BaekHyun. No pienso dejar este lugar sin ti. No sin la persona que amo."

Y BaekHyun juró que perdía el aliento ante eso. Por un segundo miró en la oscuridad los labios del más alto que le tentaban al estar tan cerca como para no dejarse tocar, en un mínimo roce, casto, y quiso...

Realmente deseó poder compartir el gesto, pero cuando estuvo tan cerca del otro, ChanYeol se alejó y se separó, por lo que le tomó solo la mano para evitar una separación completa.

"No hay tiempo, Baek, hay que salir de aquí. Ahora. Sígueme."

Y tiró de sí al hacerle correr para no perderle de vista por tener sus manos sujetas. ChanYeol era muy rápido, demasiado, sus piernas eran más largas, corrían en pasos más amplios, BaekHyun apenas podía mantener el ritmo, pero no pensaba soltar a ChanYeol por nada en el mundo, no ahora. Nunca.

Pasaron por pasillos apenas iluminados por la luz roja, con la alarma pitando incesantemente. Recorrieron diversos lugares, BaekHyun no sabía por qué o cómo se estaba guiando ChanYeol para seguir su camino, no sabía siquiera hacia dónde iba, se sentía perdido y algo mareado por tantas vueltas que habían dado.

Sin embargo, llegaron pronto a otra zona, estaba iluminada y mostraba las paredes blancas y pisos relucientes que tan bien conocía, solo que el panorama que veía ahora era diferente.

Las luces colgaban parpadeando del techo, había manchas negras en las paredes, como si algo les hubiera atacado, estrellado, o como si hubieran estallado llamas sobre ellas.

Pensar en lo que ChanYeol le dijo solo le hizo traer la imagen del Dragón. Kris, en su forma más pura, el fuego atacando defensivamente.

Y en el suelo había sangre. Charcos de sangre cubrían las baldosas, con cuerpos. Cuerpos de ellos. Científicos, doctores que si bien no conocía por nombre sí recordaba de vista. Eran tantos.

Tantos.

Pero ChanYeol no se había preocupado de atravesar el pasillo por encima de ellos. Ni por un segundo. El tirón en su mano le obligó a actuar en un mismo sentido, aunque el shock siguiera palpable, sabía que no era razón para parar, tenía que seguir tal como ChanYeol se lo estaba pidiendo.

Encontró de pronto más que el pitido de la alarma como sonido. Cuando lograron abandonar la zona anterior, ante sus ojos, surgió un nuevo panorama, tan destruido y destrozado. Pero en él sus amigos se hallaban.

Y peleaban. Contra máquinas, contra cientos de máquinas y guardias uniformados en trajes especiales que sabía si bien no eran inmunes al daño que provocaban sus 'dones' sí tenían cierta inmunidad momentánea.

Y lo vio todo tan bien.

Kris volaba por el área y atacaba con el fuego contra las máquinas, las mismas que bloqueaban su salida-salida a la libertad-, las mismas que disparaban sus letales armas contra SeHun, quien se hallaba creando remolinos, y hacía esquivar ataques de balas humanas, al tiempo que LuHan, a su lado, redirigía los ataques contra los guardias, telepáticamente, con una mano estirada para redireccionar lo que apuntaba.

Así como Kai luchaba mano a mano contra guardias, al aparecer y desaparecer cuando le fuera necesario, KyungSoo le seguía el rastro para destrozar con sus propias manos las máquinas, Xiumin a su lado congelaba los ataques con láseres, y les quebraba con el trueno que Chen lanzaba sobre ellos antes de que siquiera tocara a sus amigos.

SuHo usaba avalanchas de agua para detener el continuo flujo de más máquinas que de todas partes aparecían. Lay aprovechaba ser cubierto por él para sanar heridas que un cuerpo inconsciente de Tao necesitaba.

BaekHyun lo vio. Todo eso lo vio apenas en un parpadeo, y aunque pareciera que tenían las de ganar... el contraataque no terminaba, parecía casi invencible.

ChanYeol de pronto le apretó la mano y le trajo de nuevo a su lado con una sonrisa al mirar y respirar hondo apenas cuando le escuchó:

"Tenemos que pelear, Baek. Para salir, para escapar, hay que ayudar."

"ChanYeol, espera," le llamó al notar que el más alto se iría, y afianzó su mano con la otra al susurrar: "No te separes de mí, ¿quieres?"

"Nunca, bebé."

Recibió una palmada a su cabeza luego de eso, lo que le dejó confundido, porque si bien el gesto había sido reconfortante, aquel apelativo era inesperado. ChanYeol nunca le había llamado de esa forma. Nunca. Pero quizá fuera solo la apariencia de lo que ante sí veía.

Corrió entonces a su lado, y se adentró en el centro de la batalla al ver cómo ChanYeol soltaba finalmente su mano, solo con intenciones de atacar con mismos niveles de fuego contra las máquinas y los guardias al frente.

BaekHyun supo que este era el momento. Aquí era cuando su elemento debía salir a la luz. Finalmente. Sin reservas.

Pero... ¿por qué no sentía que fuera aún lo adecuado?

Miró sus manos y creó una pequeña fuente de luz, la misma bola de luz que siempre había generado antes en sus entrenamientos, sin manifestar amenaza alguna sobre sus contrincantes. Era ahora cuando sabía que podía mostrar todo el potencial que tenía, que cargaba. Pero es que no...

Aún había algo en sí que no deseaba manifestarlo. Algo en su interior que le decía no debía.

No era el momento.

"¡BaekHyun! ¡BaekHyun!" de pronto ese grito le hizo despegar sus ojos de la luz, y vio a SuHo frente a sí, sorpresivamente tan herido. Sangre brotaba de su frente, sudor se mezclaba entre los fluidos, calor y suciedad, y un cuerpo inmóvil, inconsciente, quizá incluso muerto... de Lay estaba entre sus brazos, que aun así le hacía gritar a su mayor para llamarle: "BaekHyun, ¡haz algo! ¡Contraataca! ¡Haz contraataque!"

Sus labios apenas se separaron para decirle de alguna manera la inseguridad que conllevaba el actuar de su elemento en ese momento, cuando vio, de repente, cómo una máquina disparaba directamente uno de sus láseres al pecho del mayor, no logrando que él dijera nada más cuando tres cuerpos ya caerían al suelo.

Lay, SuHo y Tao, sin haberse recuperado, a pesar de los intentos de Lay, quizá fallidos cuando algo más a sí le atacó.

Desfallecidos.

Y la máquina ahora miraba a él.

Sin embargo, fue golpeada, aventada contra una pared y destrozada por la minúscula de KyungSoo que sin más había aparecido al gritar precisamente lo que él no había podido hacer. Un extraño pavor de pronto se hizo de su cuerpo. Por completo.

Pero aun con ese grito, KyungSoo no fue capaz de prevenir el siguiente ataque, una bala contra sí, que nunca había impactado en su cuerpo, quizá porque el cuerpo de Kai había interferido en ese momento. Y sus prendas blancas comenzaron a mancharse de un tono escarlata, que le haría al más alto perder su equilibrio.

KyungSoo solo gritó sobre la figura ahora en el suelo.

"¡Kai!"

No se dejó pasar aquello por alto, la fuerza se había reducido, y de pronto otro disparo había impactado. KyungSoo acababa de ser derrumbado.

KyungSoo, Kai, SuHo, Lay y Tao. Caídos en un mismo sitio. Y él... aún parado ahí, sin ser capaz de moverse. Sin ser capaz de actuar.

De contraatacar.

"¡BaekHyun! ¡BaekHyun! ¡BaekHyun, cuidado!" fue inesperado el choque que tuvo para ese momento, SeHun le había empujado, y lo dejó en el suelo. Él había recibido lo que fue un ataque de otra de las máquinas y al caer ambos quedaron en diferentes estados.

Él a salvo. SeHun...

"¡No! ¡No, SeHun! ¡SeHun!" LuHan gritaba, lloraba y movía todo lo que frente a sí se atravesaba solo para llegar hasta donde estaba. Tomó entre sus brazos al menor, desesperadamente intentando verle, pero SeHun no pudo devolverse esa mirada. Y los ojos enrojecidos de LuHan ahora estaba sobre los suyos, reclamando. "¿Por qué no hiciste nada para evitar esto, BaekHyun? ¡¿Por qué?! ¡¿Por qué dejaste que le mataran?! ¡BaekHyun!"

"Yo... Yo... LuHan, no... Yo no..."

"¡Mataste a SeHun, BaekHyun!"

Aquello le hizo perder el aliento. Vio cómo LuHan se inclinó sobre la figura de SeHun, pero inesperadamente...

"¡LuHan!" su advertencia no llegó en el tiempo suficiente cuando una estructura había caído sobre el cuerpo de sus dos amigos.

Había deseado acercarse, quizá teniendo la oportunidad de sacar o evitar que LuHan permaneciera ahí, pero manos le arrastraron lejos de ello. Cuando había vuelto a mirar, la estructura ya cubría por completo los cuerpos de LuHan y SeHun. Y encima de la misma Kris estaba sangrando, debilitado, a un borde del colapso.

"Kris..." susurró, como si esperara él fuera a escucharle entre todo ese escándalo. Aunque sí, le miró por unos segundos, y luego sus ojos se elevaron hacia otra dirección. Hacia otra figura.

"¡Chen!"

Escuchó ese grito, sin embargo, ya no quiso mirar. Ya no deseó hacerlo, porque era desgarrador como los gritos de Xiumin eran expulsados de una manera feroz, y luego cortados...

<<No, por favor, no. Ya no más. No más pérdidas. No más. Basta. No más muertes.>>

Ya no sabía cómo respirar adecuadamente. Sus ojos ya no veían tampoco, no como antes, y sabía que su corazón estaba bombeando, pero se sentía tan presionado. Que no sabía si pronto se detendría.

Y todo terminaría. Como todos ahí.

Desfalleciendo.

"Ch-Chan-Yeol," Kris habló, sin embargo, le hizo enfocar la vista a su figura, aún moribunda sobre la estructura, y cuando dijo algo de pronto para él había llamado su atención. "S-Sa-sácalo. Sácalo de aquí. Corran. Salgan. A-Ambos. Sal-"

Pero no hubo más que escuchar cuando había escupido sangre en un tosido. Y de pronto sus ojos dejaron de enfocar el punto para perderse totalmente en nada.

Quiso gritar, llorar, decir algo, aunque sea su nombre, pero no lo hizo, porque sin más manos volvieron a tomarle, a levantarle y luego...

ChanYeol, frente a él apareció, junto a sí, sudado, sucio, quemado y herido. Pero aún ahí... con él. Vivo.

"BaekHyun, tenemos que salir de aquí. Ahora."

"C-ChanYeol, no, espera," él exclamó, pero el más alto estalló y gritó en su cara.

"¡No hay más espera, BaekHyun! Lo escuchaste, Kris quiere que salgamos. ¡Hay que hacerlo! ¡Ahora!"

Nunca había visto a ChanYeol en tal aspecto. No había esperado nunca que así le gritara, mucho menos que le alzara la voz de manera enfadada, pero de alguna forma lo entendió. No pudo cuestionarle, no con todo lo que había pasado. Con todo lo que habían perdido.

ChanYeol no podía arriesgarse a perderlo a él también.

Ambos corrieron entonces, ChanYeol les abrió el paso y creó un camino de fuego que lograría hacerles salir. Pero solo de esa zona.

La salida seguía muy lejos de donde se hallaban. Tuvieron que correr por pasillos desiertos, por pasillos interminables, puertas y salidas que no los llevaban a ningún lado. Y lo peor de todo es que estaban siendo arrinconados.

Si daban vuelta en alguna esquina de pronto salían guardias, salían máquinas y les dejaban solo dar media vuelta y tomar otra ruta.

Pero ruta tras ruta todo era lo mismo.

Estaban atrapados. Solo ellos dos.

Y BaekHyun no sabía cuánto más podría resistir corriendo.

"ChanYeol. ChanYeol, detente, espera. Ya no puedo... no puedo..." sabía que no sería mucho.

Tuvo que parar entonces, ChanYeol a su lado le vio hiperventilar y al reconocer él ya no era capaz de continuar, se detuvo.

Pero el riesgo en ese punto era palpable.

Entonces, ChanYeol sobreactuó impulsivamente.

"Ok, no ocultaremos. Nos ocultaremos, hasta que logres recuperarte."

Entraron así a una cápsula, la más cercana a su posición.

No había luz ahí. Estaban a oscuras. ChanYeol encendió ante eso una llama en su mano.

BaekHyun aún intentaba recuperar el aliento, desesperadamente, hasta dejarse caer contra la puerta, y lloró finalmente, cuando lo dijo:

"No hay escapatoria, ChanYeol. No podremos salir de aquí. Nunca. Estamos perdidos. Y vamos a morir. A morir como todos, todos los demás... Dios mío, ChanYeol, todos... todos están muertos. Kris, Tao, SuHo, LuHan, Lay, SeHun, Xiumin, Kai, Chen, KyungSoo..."

"No, no, claro que no, BaekHyun, ellos..." ChanYeol intentó consolarle y se agachó a su lado, pero él gritó, sin piedad alguna.

"¡Están muertos, ChanYeol! ¡Muertos! Y no hicimos nada para evitarlo. No hicimos nada. Yo no hice..."

"No es tu culpa, BaekHyun. No lo es. Nadie pudo evitarlo. Nadie."

"Pero es que no... Es que yo no..."

"Tú sigues vivo, BaekHyun. Estás vivo y estás conmigo," y ChanYeol le hizo mirarle al acariciar con su mano libre su mejilla, y limpió los rastros de lágrimas que no paraban en su derrame. "Y vamos a salir juntos de esto."

"ChanYeol..."

"Juntos."

Eso fue lo que dijo, antes de que se inclinara hacia sí y enmarcara su rostro al aproximarse tanto para sentir su calor, para sentir el roce de labios tan fugaz, porque antes de que se concretara...

ChanYeol había sido separado de sí, rudamente, y él abrió los ojos al ver cómo una máquina despiadadamente clavaba uno de sus brazos por su espalda para atravesarle. La piel se desgarró y le quitó ese calor en los ojos de ChanYeol al retener un último aliento, antes de dejarle caer, inerte, en un charco de sangre.

Sin vida.

Los ojos de BaekHyun no daban con lo que estaban viendo. ChanYeol, muerto, frente a sí, tirado como si nada fuera. Como si para él...

No lo hubiera significado... todo.

Su última esperanza.

<<Juntos.>>

"Ríndete, 04," la máquina habló, sin embargo, y le apuntó con su arma con el mismo brazo metálico que había atravesado a ChanYeol al gotear con su sangre. Su último pedazo de esencia, de vida. Como si ello no fuera suficiente tortura para él. Suficiente razón para acrecentar algo dentro de sí. Algo inestable. Poderoso. Y potencialmente dañino. "Ríndete ahora, eres el último, si te entregas, podrás conservar tu vida, a diferencia de todos los demás experimentos. Decide, entregarte ahora y recibir tu castigo o... enfrentarte al final de tu vida."

BaekHyun respiró. Una, dos veces. Luego le dio una última mirada a ChanYeol y tragó duro. Se puso en pie y levantó sus manos.

La máquina debió captar su estado indefenso y su posición rendida. Se estaba entregando.

O eso era lo que ellos creerían.

Ver cómo aquella máquina poco a poco se acercaba a él, quizá para tomarlo, para esposarlo y hacerle ir hacia su 'castigo' le hizo a BaekHyun pensar en todas esas formas que sus amigos habían ido cayendo a manos suyas. Con los láseres, las balas, los ataques, el derrumbe. Luego cómo esas mismas manos habían matado a ChanYeol, le habían arrebatado a su ChanYeol.

No era cuestión de redención, era cuestión de venganza.

Generó entre sus manos el elemento de una manera tan rápida que, sin esperarlo, ya había atacado con una máxima potencia a la máquina. Y acababa de hacerle romperse en dos. Pero eso no fue suficiente.

Tuvo que hacerle polvo para sentirse liberado.

Por sí mismo.

Luego iba por sus amigos. La luz en sí destrozó las paredes que le rodeaban.

Máquinas, guardias y personas aún en las instalaciones que estaban ahí, todos culpables de las muertes de sus amigos. Todos al borde de causar su colapso. Todos merecían un castigo.

Y luego pensó en ChanYeol.

Por ChanYeol tenía que hacer lo necesario.

Sus manos tocaron el suelo y dejó fluir en todos los niveles su elemento y gritó.

Estaba desgarrando cada parte del lugar, desvaneciendo a cada persona aún existente en este, y absorbía toda la luz de cada cosa al causar una explosión que terminó por matar todo.

Todo a su alrededor.

Y luego...

"Deténgalo, deténganlo, basta, ¡es suficiente! Se sale de control."

Estaba dando todo de sí en ese acto. Estaba dejando salir su máximo poder y mostraba lo que era ahora la luz. Lo que había estado guardando por tanto tiempo-

"¡Desconéctenlo, es suficiente!"

"No, doctor, ¡espere! No puede entrar ahí, está fuera de su alcance. Puede hacerle daño."

"¡Pero no pueden permitir que continúe! ¡Lo está destruyendo todo! Alguien tiene que sacarlo."

Pero ya no más, iba a mostrarles lo que era el poder de la luz. Iba a enseñarles la evolución de su elemento. Iba a dejarles saber lo que hasta ahora habían creado. El monstruo que ellos habían formado.

"¡Ahhh!"

"¡Despiértenlo ahora mismo!"

"Sus niveles están fuera de control."

"Sigue en balance, no es inestable."

"¿Qué significa eso?"

"Significa..."

"Significa que tiene control total bajo el elemento. Que ha evolucionado."

Sabía la explosión debió entonces haberse ejecutado, pero cuando abrió los ojos, en lugar de hallarse con las ruinas de la instalación, vio...

Blanco.

No, no era el blanco de lo que su luz había generado. No era el blanco de las nubes, de un cielo o quizá de un paraíso si es que su vida propia hubiera arrebatado.

Era blanco. Blanco... como las paredes de la cápsula de simulación en la que le habían metido.

Parpadeó, inquieto ante lo que veía, hasta que intentó incorporarse y una mano en su pecho le detuvo.

Lay... Lay estaba ahí, junto a sí, sin heridas, pero... ¿Acaso esto significaría que él estaba ahora muerto? Aunque... ¿Por qué Lay estaría aún usando su bata y uniforme que como experimento le habían designado? Un número 10 grabado en el cuello de su camisa.

Algo no estaba bien con eso.

"L-Lay..."

"04, bienvenido de vuelta. Es bueno ver que has despertado," BaekHyun frunció el ceño, sin entenderlo, quiere decir... ¿despertar? ¿De qué o cómo es que habría despertado?

"¿Está despierto?" escuchó de pronto, otra voz se acercó y apareció en su campo de visión. Encontró así con sorpresa a la Dra. Zhang Liyin. Totalmente confundido por recordar su imagen de ahora y la que había visto antes de que todo hubiera pasado. Pero ¿qué...? ¿Qué demonios realmente había pasado? "Oh, gracias a Dios, has despertado, 04. Nos tenías muy, muy preocupados."

"¿Qué...? ¿Cómo es que...? Tú..." BaekHyun entrecerró los ojos y miró a Liyin, y luego a Lay. "Y tú..."

"Hay una explicación para todo, pequeño. Tranquilo, sé que estás ahora muy confundido. Pero tal vez sea mejor que descanses ahora, te has... extenuado con todo lo que has hecho."

"¿Con todo lo que...? ¿Qué?"

"Así es, 04, nos alegra que hayas despertado, pero tus niveles siguen algo altos. Necesitas algo de reposo para estabilizarte. No queremos que vuelvas a descontrolarte, te crees un desbalance o destruyas alguna otra cápsula de las instalaciones... de nuevo."

"No, esperen, ¿a qué se refieren con...?"

"Duerme un poco, BaekHyun. Te lo diremos todo cuando hayas despertado."

"Lay, espera, ¿qué? No, espera, Lay, no..."

Era tarde, sus ojos habían sido cerrados de nuevo, y así como él generaba luz, de pronto...

Se había apagado.

¿Se esperaban eso? 👀

Bueno, ahora las cosas están dichas... Algunas de ellas. Probablemente tengan todavía unas dudas, pero al menos ya saben el tipo de poder que tiene BaekHyun, o hasta qué alcance llega.

Tengo curiosidad, después de este capítulo, ¿exactamente qué están pensando?

Dejen sus dudas en este espacio, sus comentarios y todo lo que les hizo sentir este capítulo 📭

Probablemente no pueda resolver algunas de sus inquietudes, porque puede que sea un spoiler, pero al menos pueden sacar sus molestias y/o estrés que les generó todo 😅

En el siguiente capítulo veremos más sobre lo que aquí se dejó inconcluso...

Gracias por leer hasta aquí, ¡nos leeremos en el siguiente capítulo! Se les quiere 💙

Pd: para quienes creían que este capítulo quitaba la advertencia de muertes de personajes del inicio, no es así. Siguen advertidos~

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