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Mirando la aplicación, Noah vio que la notificación decía que se había encontrado una Fortaleza para él. Esa era la ventaja de las fortalezas de rango E; si fuera una Fortaleza de Rango F, Noé probablemente habría necesitado esperar al menos 3 días en línea para encontrar una Fortaleza debido al número de Fortalezas de Rango Bendito F, pero para las Fortalezas de Rango E, la espera no fue tan larga, ya que el número de Beatos que alcanzaron el Rango E fue mucho menor que el número de Benditos De Rango F.

[El bosque de duendes

Rango: E

Invasores: 10

Información básica: El Bosque de Duendes es una fortaleza ubicada en un bosque generado aleatoriamente. Los duendes son monstruos débiles, pero se debe tener cuidado, ya que viajan en grupos.

La notificación de la aplicación dio solo una descripción básica de cómo se veía la Fortaleza. Si un Bienaventurado quisiera encontrar más información, solo tendría que buscar el nombre de la Fortaleza en la aplicación GBC en sí, pero esto no era algo que muchos Bienaventurados hicieran.

Desafortunadamente, después de recibir sus Bendiciones, muchas personas Bendecidas se volvieron arrogantes debido a lo relativamente fácil que era ganar dinero invadiendo fortalezas, pensando que independientemente del desafío que podrían superar solo usando la gran fuerza que habían recibido de los dioses, y esa fue la mayor causa de muerte entre los beatos.

Por lo general, este tipo de arrogancia desapareció rápidamente entre los Bienaventurados más antiguos, ya que después de varios años invadiendo Fortalezas y pasando por innumerables dificultades, los pocos Beatos que sobrevivieron conocerían el valor de la información previa mejor que nadie. Esta fue la razón por la cual el GBC siempre organizó a las personas mayores bendecidas en invasiones con los bienaventurados más jóvenes, ya que los mayores servirían como buenos líderes para los momentos de necesidad que surgirían dentro de las Fortalezas.

Noé había estudiado previamente casi todas las Fortalezas de Rango E, por lo que tenía muchos consejos de los Beatos que ya habían invadido esta Fortaleza en particular, además de las mejores estrategias para diferentes tipos de situaciones. Lo único que le faltaba en comparación con las fortalezas de rango F era experiencia práctica, ya que nunca había invadido ninguna fortaleza de rango E, a diferencia de las fortalezas de rango F de las cuales probablemente había experimentado cientos.

Al aceptar la llamada, Noé vio que la invasión tendría lugar en unas pocas horas, por lo que se levantó del suelo y fue a tomar otra ducha, ya que no imaginaba que estaría tan sudoroso después de esforzarse tanto para usar su Bendición. Aparentemente, como un músculo, el uso de una Bendición causó una gran cantidad de estrés en el cuerpo además de la fatiga mental.


Después de tomar una ducha, Noah colocó todo el equipo que probablemente necesitaría en esta Fortaleza en su mochila y colocó lo más esencial en una pequeña bolsa que dejó unida a su pierna derecha.

Mirándose en el espejo, Noah vio a un joven de pelo corto y negro, con un rostro delicado que llevaba una expresión desinteresada que había entrenado para no mostrar sus emociones a sus enemigos. En cuanto a su ropa, llevaba una camisa sencilla con textura de camuflaje verde, además de una pequeña mochila táctica solo para lo esencial y una pequeña bolsa atada a su pierna para que mantuviera las cosas más urgentes.

Esto era algo que Noé siempre hacía. Adaptó su propia ropa a la Fortaleza que estaba invadiendo, ya que cualquier ventaja extra era un paso más cerca de derrotar al enemigo. Tales preparaciones no eran muy comunes entre los beatos más jóvenes, pero entre los mayores era prácticamente una regla.

Además de las necesidades básicas que Noah guardaba en la mochila, ya que no sabía cuánto tiempo tardarían en matar al jefe si realmente pudieran, Noah tenía algunas barras energéticas además de utensilios para hacer que la recolección de recursos fuera más práctica si se necesitaba más.

Ya preparado, Noah salió de la casa y caminó hacia GBC Central para tomar el autobús que los transportaría a la Fortaleza. Para las Fortalezas a partir del Rango D, GBC ya no proporcionaba autobuses para los Bienaventurados, ya que en ese momento el dinero que recibían en cada invasión ya era suficiente para que todos tuvieran buenos autos, por lo que solo se les enviaba la ubicación de las Fortalezas y se esperaba que los Beatos llegaran a las Fortalezas por su cuenta.

Para las Fortalezas de Rango E, aquellos altamente bendecidos en ese Rango ya podían comprar su propio automóvil, pero como algunos aún no tenían uno, GBC proporcionó autobuses para todos y todos tuvieron que reunirse en la sede para que todo el grupo pudiera ir juntos a la Fortaleza sin ningún contratiempo que se interpusiera en el camino.

Mirando la aplicación, Noé vio qué autobús los llevaría a la Fortaleza y se dirigió hacia ella.

En la entrada del autobús, el conductor estaba fumando un cigarrillo sin preocupación hasta que instintivamente notó a Noah. Rápidamente enderezó su columna vertebral y sacó un escáner para leer el código de Noé. "Buenas tardes, señor. ¿Puedo leer tu código QR?" Preguntó cortésmente.

Noé, por primera vez, fue tratado bien por uno de los funcionarios del gobierno, ya que ahora era visto como un Bendito Rango E. En la mente del conductor no había ninguna posibilidad de que fuera un Bendito Rango F, ya que para un Rango F ir a una Fortaleza de Rango E sería simplemente un suicidio, por lo que estaba seguro de que Noé era un Bendito Rango E.


"Aquí está", dijo Noah desinteresadamente mientras le mostraba la pantalla del teléfono celular al conductor para usar el escáner y confirmar que realmente fue asignado a esta Fortaleza. Después de la confirmación, Noah se subió al autobús y notó que él era la primera persona en llegar.

No es que le importara, ya que después de elegir un asiento de ventana al azar, Noah se puso sus propios auriculares y escuchó música mientras se reía de la diferencia de actitud que tenían los conductores.

Si bien era constantemente ridiculizado por los conductores que llevaban el Rango F Beato, si pensaban que era el Rango E, inmediatamente comenzaron a tratarlo como un rey. El hombre con cicatrices era el único beato por encima del Rango F que no parecía preocuparse por su propio tratamiento.

Sin que Noah se diera cuenta, alguien se subió al autobús y lo miró con una expresión confusa. Pero como Noé no estaba prestando atención, la persona siguió caminando y se sentó en un asiento en la parte trasera del autobús.

En pocos minutos llegaron en el autobús los 15 beatos que estarían asaltando la Fortaleza y el vehículo se marchó en silencio, ya que con los motores de ese día ya no era necesario utilizar combustible de combustión, haciendo que el autobús se moviera tan silenciosamente como un coche pequeño gracias al motor eléctrico.

Al notar el movimiento del autobús, Noah volvió a prestar atención fuera de la ventana y estudió el paisaje. Esta vez la Fortaleza también estaba fuera de la ciudad, solo que en lugar de la salida este usaron la otra vez, esta vez usaron la salida oeste de la ciudad, llevándolos a un gran bosque con árboles de hojas púrpuras por todas partes en lugar del inmenso desierto.

Noah miró los árboles grandes y coloridos y simplemente disfrutó del paisaje mientras revisaba qué estrategias usaría y qué excusa usaría esta vez para poder alejarse del grupo y matar monstruos solo para no tener que compartir la experiencia con nadie.

Pronto, el autobús se acercó a un gran portal con un borde hecho del desconocido y extremadamente resistente black metal que rodeaba ese extraño plasma púrpura que teletransportaba a los Bienaventurados a la Fortaleza.

Algunos científicos de varios planetas habían tratado de estudiar este extraño metal, aparentemente indestructible, pero esto resultó imposible debido a la colosal resistencia que presentó.


Varios gobiernos en unos pocos planetas incluso habían tratado de destruir los portales más alejados de la civilización con bombas nucleares, pero incluso una explosión de tal magnitud no causó más que un ligero rasguño en el portal. Incluso después de que intentaron sacar toda la tierra que mantenía el portal en pie, el portal se quedó quieto, misteriosamente comenzando a flotar por una fuerza oculta como si siempre estuviera allí y nunca se movería de ese lugar a menos que el jefe de la Fortaleza que albergaba fuera derrotado.

La única vez que uno de estos portales fue dañado fue cuando innumerables beatos de alto rango se unieron para hacer un ataque conjunto masivo contra un portal que había aparecido en un país deshabitado. Después de todos los ataques, una gran parte del planeta fue destruida, incluso alterando la órbita de la gran masa terrestre alrededor de la estrella giratoria, pero el daño al portal fue El daño al portal ascendió a solo un ligero rasguño que extrañamente no arrojó ningún rastro de partículas que pudieran examinarse.

Después de ese incidente, la humanidad descubrió que los portales no eran indestructibles, pero que todavía no poseían la fuerza suficiente para destruirlos.

Al salir del autobús, todos los Bienaventurados se reunieron alrededor del portal y la persona que se enfrentó a Noé cuando subió al autobús finalmente lo reconoció. "Espera un segundo ... ¡¿Eres Noé ?!"

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