Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 12

(...)

Pov's Lucifer.

Algo andaba mal de eso estaba seguro, ella jamás me había temido y que su corazón latiera tan fuerte cuando me acerque a ella me extraño en demasiado, hoy lo había confirmado. Estaba empezando a recordar hechos del pasado, estaba empezando a recordarme a mí y aunque quisiera ya no podría borrarle la memoria, no de nuevo.

-Con su respeto lucifer, es realmente hermosa la chica- habló Asmodeo, más conocido en el infierno como el demonio de la lujuria.

Ambos estábamos en el bar donde trabajaba Annia, era raro porque llevábamos unas horas aquí y hasta ahora no se percataba de nuestra presencia, se sentía observada eso lo sabía por la manera en la que actuaba. Hable con Constantino después de que ella salió de la iglesia y fue algo muy frustrante, tal vez ya era hora de que me alejará, pronto me iría al infierno al lugar donde siempre he pertenecido.

-Lo es- contesté dando un sorbo de whiskey.

-¿Qué cree qué suceda si los de arriba se llegan a dar cuenta?- pregunto atrapando mi atención- Es decir, me refiero a que jamás había sucedido esto.

-Prefiero no pensar en eso.

Asmodeo era el demonio de la lujuria, uno de mis más fieles sirvientes, podía hacer que la personas a más orgullosa y arrogante cayera a sus pies, lo más cercano que he tenido a lo que llaman amigo. Vi como se acercaba a nosotros con su uniforme habitual el cual la hacía ver supremamente sexy, aunque eso sólo estuviera en mi mentemi historia giró en torno a la traición la verdad del porque me han desterrado del cielo.

Solté un suspiro cuando sus ojos se posaron con los míos y frenó en seco, se quedó mirándome unos segundos, dio media vuelta y se marchó por donde había venido. Eso me enfureció, sentí mi corazón latir a mil parecía un motor, pero no, no estaba enojado por que ella no quiso atenderme estaba enojado conmigo mismo. Tantos años, tantos días, tantas horas y aún no me explicaba porque ella no lograba temerme. Pero no, después de casi haber muerto dos veces en mis manos y ¿hasta ahora empieza a temer? Yo no le haría daño ni aunque quisiera.

-El amor es algo peligroso.

- de eso- Respondí.

Pov's Annia

Recorrí el bar a toda velocidad, rogando al cielo que no me hubiera visto, aunque eso, claro, lo dudaba. Lo había evitado en el colegio, me sentía incómoda junto a él, no tenía cabeza para soportarlo, pero Luc estaba allí sentado en una de las mesas que por obligación tenía que atender, solté un suspiro y vi aproximarse a Vivian una de mis compañeras. Tenía mis brazos apoyados en la barra y mi corazón parecía haber corrido una olimpiada.

-Oye Nía ¿te encuentras bien?- negué- ¿Pasa algo? Estás pálida tía- dijo con preocupación.

-Vivian sólo necesito irme- contesté en un susurro.

-Si vete, yo te cubriré.

-Muchas gracias.

Salí por la puerta trasera que guiaba a un callejón, era ridículo la manera en la que huía de él pero... ¿qué se suponía que debía hacer? ¿cómo reaccionar respecto a lo que pasaba en mis adentros? Era tanto sentimientos encontrados, frustración, ira, miedo, curiosidad. Sentía que mi cabeza iba a estallar, maldije por lo bajo en el momento en el que recordé que había olvidado mis cosas adentro, de eso me encargaría luego. Tome mi cien con mis manos como si éste acto detuviera un poco el dolor de cabeza.

Metí mis manos en el bolsillo del delantal del uniforme, maldije de nuevo, mi celular estaba junto a mis cosas en el casillero lo necesitaba por lo menos para llamar un maldito taxi. Gire en mis talones para entrar por la misma puerta en la había salido y hay estaba él de pie detrás de mí, me sobresalte por la sorpresa, tenía su ceño fruncido y parecía molesto.  

-Annia, de nuevo no me quisiste atender- su voz era muy calmada, pero sus ojos irradiaban algo que desconocía por el momento.

-Yo... Ya me iba- conteste muy nerviosa.

-Si me permite...

-No le permito- lo interrumpí sorprendiéndome a mí misma, ya que con él no lograba pensar con claridad- ¿Por qué no me dice de una maldita vez qué es lo que quiere conmigo?- pregunté muy molesta, éste hombre no me dejaba en paz.

-Annia, yo no quiero nada con usted- ahora el que estaba nervioso era él.

-¿Está seguro? ¿por qué no me deja en paz? ¿por qué no se aleja de mí? Yo que usted elegiría muy bien las respuestas, porque no soy una niña y no me voy a creer cualquier estupidez.

Por alguna extraña razón quería llorar, no sabía porque, él me desconcertaba mucho se comportaba como si ya me conociera. Me trataba como una niña y lo más raro de todo esto, es que toda mi vida cambió después de haber visitado esa estúpida mansión, después de las palabras de aquel extraño que aún no recordaba y que no sabía si era parte de un sueño.

-¿Quién eres Luc Watson? ¿Qué quieres conmigo?- le pregunté al borde de un colapso.

-¿Me tienes miedo?- su pregunta me tomó por sorpresa- ¿Me temes Annia?- preguntó al ver mi silencio, nos miramos a los ojos, el intenso azul de los suyos estaba más oscuro- Besame- me ordenó.

No sé porque no lo pensé, estábamos a una distancia prudente, camino hacia mí me tomó del rostro y me beso. Sus labios se movían al compás de los míos, cerré mis ojos y por un momento todo pareció no tener importancia, sus labios eran fríos, como el hielo y jamás pensé que me gustará tanto el frío. Lo más jodido de esta situación era que me beso y le devolví el beso con hambre atrasada. Me separe de él y no sabía lo que había sucedido, me sentía bien pero no hice más nada que darle un bofetada y salí corriendo.

Pov's Lucifer.

Sabía que sí ella se enteraba me mataría, pero ver lo enojada que estaba me frustro grandemente, le ordene que me besará, jamás pensé que me obedecería, nunca llegué a imaginar que el control mental sirviera con ella. Sin embargo, fue lo mejor, se dejo besar y por primera vez no temí ponerla en peligro, era tan tierna, sus labios eran cálidos y suaves a comparación de los míos. Podía escuchar perfectamente los latidos de su corazón que se sincronizaron con los míos y parecía que siguieran algún patrón, era la mejor melodía que había escuchado en años.

Me separé de ella, me miró unos microsegundos y me dio una bofetada, escuche sus pasos mientras salía corriendo. Luche contra esas ganas incontrolables de salir corriendo tras ella, pero no lo hice, no quería asustarla más, sabía que me buscaría y que tendría muchas preguntas las cuales seguramente no tendrían respuesta, mi cuerpo se llenó de ira, una ira abundante que quemaba mi cuerpo, que no me dejaba pensar con claridad. Había un cesto de basura cerca el cual patee lanzándolo unos metros lejos.

Pase mis manos por mi cabello despeinándolo un poco, me puse en cuclillas apoyando mis brazos en las piernas, ¿cómo se suponía que lograría qué se acercara a mí? Cada vez que lo intentaba reaccionaba de maneras diferentes, a veces con burla, otras con arrogancia y muchas veces con miedo. No quería que me temiera, ¿cómo lograría qué se enamorará de mí? Si soy un demonio enamorado de un hermoso ángel.

-Vaya que chica tan hermosa- si mi rabia en ese momento era incontrolable, ahora con aquella voz sería imparable.

Con una velocidad sobrehumana corrí hacia él, el cual estaba en mi costado izquierdo, lo tome de la garganta y estrelle su espalda contra la pared. Sus ojos eran amarillo intenso, en su rostro se había formado una sonrisa socarrona, mí pecho subía y baja y mi respiración acelerada.

-Así recibes a tu hermano, lucifer- volvió hablar burlón.

-Que tú estés aquí Shamsiel no es nada bueno y lo sabes, déjate de hipocresías- conteste con la quijada apretada.

-Tal vez tengas razón, luciferhas hecho enojar a nuestros hermanos- apreté más mi agarre-  es una hermosa chica, lástima que tenga que deshacerme de ella- lo tome del brazo y lo lance por los aire haciendo que se estrellara contra la pared y cayera al suelo- Aush eso dolió la verdad- dijo poniéndose de pie.

-Te juro que si le tocas un solo cabello Annia, te mataré yo mismo, así todo el cielo se me venga encima- lo amenacéchasqueo su lengua tres veces seguidas.

-¡Dios!... Lucifer, vosotros sois el hermano más temido de todos, el más frío y despiadado, aquel que no tiene alma y venís a desarmarte por una mortal ¿qué crees qué hará cuándo se entere que eres un demonio? Date cuenta hermano.

-Largate Shamsiel, aquí no estás en el cieloestás en territorio- ambos nos miramos desafiantes.

-Alejate de la mortal, Lucifer, vuestros hermanos te han mandado un ultimátum- sentenció.






Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro