Encuentros
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Farah E.

Era como un sueño, algo irreal obviamente omitiendo la parte en que Zorel estaba vomitando, Aster y Flegt están perplejos, ni una palabra, ni un movimiento proveniente de ellos, como si fueran un par de estatuas.

— Farah... — dice en un susurro casi inaudible

— ¡Flegt! — Salgo corriendo a los brazos de mi hermano quien sigue sin reaccionar

— ¿Cómo terminaste en este lugar?

— Es una larga historia...

No pude proseguir ya que el sonido del impacto del cuerpo de Aster contra el suelo resonó en todo el lugar, Flegt corre a verla al igual que Zorel mientras yo intento llamar a una ambulancia, pero por obvias razones no hay respuesta.

— Rubia toma mi celular y llama a Agatha — dice Zorel de forma deme

— ¿Dónde se supone qué está tu celular?

— En la mesa.

Comienzo a buscar por todo el lugar intentando encontrarlo ya que habían tres mesas distintas, Flegt estaba limpiando la sangre que salía de la nariz de Aster, mientras Zorel toma sus signos vitales.

— ¡Qué no puedes desayunar pastel luego te hace mal, entiende Zorel! — escucho del otro lado del teléfono

Efectivamente lo menos que me esperaba era un regaño, tal vez un hola o algo parecido.

— eh... no, no habla Zorel.

— ¿qué sucedió, quien habla?

Escucho como su tono cambia de enojo a preocupacion drásticamente.

— Soy Farah, la hermana de Flegt, Aster se desmayó y sangra su nariz... Zorel me dijo que te llamara.

Ella comienza a maldecir fuertemente del otro lado del celular, Zorel toma el celular y comienza a tranquilizarla.

— ¿Qué le sucedió?

— No lo sé, es la primera vez que sucede — Flegt tiene lagrimas en los ojos y toma su mano

— Esto va ayudar, Agatha nos va a matar cuando vuelva me repitió diez veces que la luna llena afectaba a las brujas — Zorel abre un frasco con un líquido dorado — Yo que iba a saber, se supone que son brujas no hombres lobo.

— ¿Conudak?

— Eso dijo ella, solo tres gotas.

Le dan las gotas del líquido amarillo y esperamos unos minutos a que ella reaccione.

— ¿En serio Conudak? Sabe horrible — murmura Aster al levantarse mientras Zorel le da un vaso con agua

— Agatha dijo que era la única manera de que volviera a latir tu corazón era eso o morir.

— ¡Que! — suelto un grito el cual hace que Aster suelte el vaso y se caiga
— ¿Cómo qué morir?

— Fue demasiada energía, hizo que mi corazón se detuviera — limpia los restos del vaso roto — Fa, Fa... ¿Farah?

Levanta la mirada y se acerca a mi. — Auch — me da un golpe en el hombro

— ¿Cómo es qué esto sucedió? — voltea a ver a Zorel y a Flegt quienes se encogen de hombros

— Si se sientan, dejan de golpearme y no te mueres puedo contarles lo que sucedió.

Aster se sienta a la par de Flegt mientras Zorel vuelve de la cocina con un pedazo de pastel y se sienta en la alfombra.

Era diferente, ellos no solían llevarse muy bien en casa supongo que pasar casi más de medio año solos en este tenebroso lugar los había unido.

— Cuando desaparecieron los buscamos durante meses, pero poco a poco las personas iban descartando la posibilidad de que regresaran, pero papá y yo no, hace un mes los fui a buscar nuevamente al bosque en aquella montaña en donde encontraron las cosas de Aster. Conocí a Zorel quien pensaba que era un asesino o un psicópata así que salí huyendo pero antes me pido volver al lugar en la próxima luna llena.

— ¿Cómo es qué lograste ir al bosque?

— No lo sé, fue el día que ambos tuvieron que traerme de regreso, simplemente aparecí en el lugar.

— Una compañera de mi universidad me dijo que su abuela quería hablarme, en realidad no entendía la razón hasta que fui, me habló de otro Sarter un lugar lleno de brujas y otros seres, obviamente no le creí hasta que me describió a Zorel.
Dijo que el me ayudaría a ir con ustedes pero que no iba a poder regresar hasta el próximo veintinueve de febrero, me dio una velas y otras cosas raras dijo que era la única manera de pasar, hablé con papá y él no me creía, le dejé una nota explicando todo lo que había sucedido y diciendo que íbamos a volver. Salí en cuanto oscureció, casi me pierdo un par de veces pero logré encontré a Zorel y ahora estoy aquí.

— Ven aquí te extrañamos mucho.

Ambos me extienden los brazos y me voy con ellos, no se si haber dejado a mi padre estaba bien pero Flegt era todo lo que tenía, era mi hermano y no lo iba a dejar solo.

— Agatha va a matarnos.

— ¿Quién es Agatha? — pregunto mientras limpio mis lagrimas

— La hermana de Gi.

— Zorel, ella no conoció a Gi...— aclara Aster

— Gi era un hada que se encargó de nosotros durante los primeros meses hasta que Magnolia decidió asesinarla por haberme salvado. Agatha ahora nos cuida de lejos, no vive aquí pero siempre viene a verificar que seguimos con vida.

— ¿Por qué tenían que salvarte? — pregunto confundida

— Es una larga historia, en otro momento te la contaré.

— ¿Entonces Agatha también es un hada?

— No, soy una bruja — dice una voz con tono firme

Todos volteamos a ver a la mencionada Agatha parada detrás de nosotros, es muy alta y esbelta, tiene el cabello rizado con un color rojizo intenso, su piel es blanca por no decir pálida y sus ojos son negros como la noche.

— Gi no era mi hermana en realidad, nos volvimos como hermanas hasta el punto de decir que lo éramos desde que ella me salvó de morir a manos de un cazador.

Observo de reojo a Zorel salir corriendo con el pastel en mano pero un fuerte viento cierra la puerta antes que pueda salir.

— Ahora ¿quién me va a explicar qué sucedió aquí? — frunce el ceño y cruza los brazos.

Los tres comienzan a explicarle todo, ella me da la bienvenida y obligo a Zorel a cocinar la cena ya que se había comido el pastel.

Me llevan a una habitación la cual era completamente blanca con detalles negros y unos cuantos plateados, todo era extravagante y minuciosamente organizado.

— Coloque un poco de ropa en el armario espero que te guste — menciona Aster entrando a la habitación

— ¿Cómo conseguiste ropa tan rápido?

— La magia ayuda mucho — se acerca a mi y me abraza — Te extrañe mucho...

— Y yo a ti...

— Creo que deberías descansar — Flegt entra a la habitación

— Todos deberíamos hacerlo — Aster se da la vuelta y Flegt la envuelve en sus brazos

— Esta bien ¿compartimos habitación Aster? — pregunto emocionada pero observo que se ríen un poco, es de suponer que en una casa tan grande hay suficientes habitaciones

— Chicos pido piedad estoy de luto, dejen de darse amor enfrente mía — menciona Zorel mientras entra a la habitación

— No querías a la loca de tu ex novia, dudo que estes de luto — dice Flegt

— ¡Silencio, es una buena excusa!

— ¿Me perdí de algo? Creo que la pregunta es ¿de qué más me perdí?

— Ah si soy Zorel, vivo con ellos, soy su amigo.

— Farah... nosotros.

— Nosotros tuvimos que unirnos para salvar a Flegt ya que es un cazador y si esta unido a una bruja no le pueden hacer daño.

— Eentonces t..tu y el y el y tú y ustedes? — comienzo a tartamudear
— ¡Pero ustedes se odiaban!

— ¿Acaso tu me odiabas pequeña bruja? — dice de forma coqueta mientras juega con su mano

— ¿Acaso no quedo claro? — ella suelta una risa mientras se miran fijamente

Flegt le da un beso a Aster mientras la sigue abrazando.

— Por favor no, no estoy lista para ver esto.