Taehyung estuvo toda la mañana al pendiente de Yeontan e investigando en internet los cuidados que tenía que tener con el cachorro, además, ya había agendado una cita con el veterinario para el día de mañana. Robó una almohada de Jungkook, ya que tenía muchas y estaba seguro que una faltante no haría daño, esa sería la nueva cama de Yeontan hasta que le comprara una de verdad.

Después de que lo establecería con su nueva cama, un pequeño plato con agua y otro con comida, Taehyung hizo un ligero almuerzo para él y para Jungkook, ya que en el bar sólo había platillos fuertes. Yeontan estuvo caminando alrededor del apartamento todo ese tiempo, familiarizándose con él y su aroma.

Jungkook se había ido a la lavandería poco después de que habían llegado a casa, tenía toneladas de ropa que no había lavado desde hace dos semanas y entre esas prendas estaba lo que usaría en la fiesta de Jungha. Taehyung dejó la comida que le había preparado en el microondas y pasó a sentarse al sofá para ver un drama acompañado del pequeño Yeontan, sólo vería un episodio, ya que tenía que ducharse y cambiarse para irse a trabajar. Le explicaba a Yeontan cada uno de los personajes de Vincenzo como si el pequeño cachorro le entendiera.

— ¿Dónde está?— Preguntó una voz desde la puerta y no era la de Kook. Era Hyeji.— ¿Y el pequeño Yeontan?

Taehyung se giró a verla y cogió al cachorro con una de sus manos, procedió a elevarlo y tararear la canción del Rey León cuando presentan a Simba ante el reino animal.

Jungkook empezó a reír y Hyeji le siguió la corriente a Tae, tarareando también la canción y se acercó a ellos. Tomó a Yeontan en sus manos y lo miró con una gran sonrisa.

— Eres el cachorrito más tierno y bonito del mundo.— Dijo.

— Lo es.— Corroboró Taehyung. Le fue inevitable no notar la vestimenta de Hyeji.— ¿Vienes en pijama?

Hyeji se sonrojó y asintió. Había sido culpa de Jungkook, él había llegado a su casa sin avisar y le comentó el nuevo plan de ir los tres juntos a la fiesta de Jungha, pero antes acompañar a Taehyung a su turno en el bar, ahí comerían y se cambiarían para la fiesta. Hyeji estaba en pijama y no iba a tener tiempo de ducharse, así que metió todo lo que necesitaba en una maleta.

— Se duchará aquí.— Comentó Jungkook y alzó la maleta de la chica para que Taehyung la viera.— Seré el primero en ducharme, ustedes sigan pasando el rato con Yeontan.

No les tuvo que rogar dos veces, Taehyung y Hyeji se tumbaron en el sofá y empezaron a hacerle cariñitos a Yeontan. Tae recordó que una vez Hyeji mencionó que siempre quiso un perrito como mascota, pero su hermano era alérgico a casi todo y por eso su sueño se había visto arruinado. Por una parte sentía alivio de contar con Hyeji, si alguna vez ocurría un inconveniente, Taehyung podría dejar a Yeontan a su cuidado.

Hyeji sería una excelente tía.

La chica se percató que Taehyung estaba viendo el mismo drama que ella y Seokjin.

— Vi ese episodio ayer con Seokjin.— Comentó la pelinegra.

— Ni se te ocurra decirme qué pasará.

— Claro que no lo haré.— Dijo ella como si fuera obvio.— Pero se besan.

— ¡Hyeji!— Gritó Taehyung enojado y ella sólo sonrió traviesa.— Sabes, a veces dejas de lado tu faceta tierna y te vuelves igual de jodona que tu novio.

Hyeji rió.

— No me puedo controlar.

*

Hace poco habían remodelado el bar y habían construido una nueva zona V.I.P, eran tan sólo unas mesas con más seguridad, teniendo paredes a sus costados y cómodos sillones donde sentarse, se encontraban situadas en el fondo del establecimiento, brindando una vista panorámica del bar y del escenario.

Jungkook y Hyeji disfrutaban de una hamburguesa y papas en una de estas mesas, Taehyung estaba a punto de presentar su última canción.

— Sé que no es un restaurante de hamburguesas, ni siquiera es un restaurante, es un bar.— Dijo Hyeji.— Pero son las mejores hamburguesas que he probado.

— Pienso lo mismo.— Jungkook se metía una papa a la boca.— Y las papas fritas también.

Hyeji dio su último bocado de su comida y se acomodó en el asiento para prestarle total atención a la canción final de Tae. Jungkook hizo lo mismo, pero él seguía comiendo sus papas a la francesa.

— ¿Qué canción es esa?— Preguntó Hyeji cuando el instrumental empezó. No la reconocía, no la había escuchado en el repertorio de Taehyung antes.

— Creo que es Khalid.

La pelinegra asintió. No lo conocía y no era un cantante que escuchara muy seguido, así que estaba emocionada por escuchar una nueva canción por parte de Taehyung.

Taehyung se encontraba sentado en el taburete alto y tomaba su micrófono verde con ambas manos. Siempre presentaba la canción antes, esta vez se había brincado ese paso, Hyeji se preguntaba por qué. Tae mantenía los ojos cerrados, eso significaba que estaba sintiendo la melodía. Entonces empezó a cantar con su tersa voz, Hyeji y Kook sonrieron al escucharlo.

Cuando Kim Taehyung cantaba todo el mundo se detenía para apreciarlo totalmente. Su voz era única y transmitía algo único que hasta la fecha no se podía explicar con palabras.

The hard part always seems to last forever
Sometimes I forget that we aren't together
Deep down in my heart, I hope you're doing alright
But from time to time I often think of why you aren't mine

— Uh, qué buena canción...— Jungkook susurró. Movía su cabeza al compás del ritmo.

Hyeji abrió los ojos sorprendida al escuchar la letra. Pero eso pasó a segundo plano, pues la voz de Taehyung era lo espectacular. Siempre encontraba canciones muy buenas y las cantaba con su propio estilo.

But I'll keep your number saved
'Cause I hope one day you'll get the sense to call me
I'm hoping that you'll say
You're missing me the way I'm missing you

— Ahora que lo recuerdo...— Jungkook la miró.— La canción se llama Saved.— Hyeji asintió y siguió con sus ojos en Tae.

So I'll keep your number saved
'Cause I hope one day I'll get the pride to call you
To tell you that no one else
Is gonna hold you down the way that I do

— Esto me está preocupando.— Murmuró Hyeji, Jungkook apenas la escuchó por estar disfrutando la presentación de su mejor amigo.

— ¿Por qué?— Le preguntó y la miró confundido. Taehyung estaba arriba cantando muy bien, estaba interpretando la canción de maravilla.

I hope you think of all the times we shared
I hope you'll finally realize I was the only one who cared

— Porque es sábado y es su última canción.— Dijo como si fuera obvio.

Jungkook recapacitó en ese momento y se giró a ver a Taehyung rápido, después volvió su mirada a su novia. Hyeji se encontraba seria.

— No creo que lo esté haciendo.

— Siempre lo hace.— Aseguró Hyeji. Sus ojos se clavaron en Taehyung.— Y si es el caso, Taehyung está sufriendo...

Jungkook suspiró y negó con la cabeza.

— Tal vez estamos exagerando y se le pasó.— Le sonrió a Hyeji.— No te preocupes, hay que seguir disfrutando la presentación.— Sugirió.— Hace mucho no lo escuchaba interpretar una canción de esta manera.

Hyeji lo miró con ironía.

— Exacto.

It's crazy how this love thing seems unfair
You won't find a love like mine anywhere

La canción había terminado y la ronda de aplausos que recibió Taehyung fue extraordinaria, hasta los chicos que atendían la barra se habían detenido de lo que hacían para brindarle un fuerte aplauso al castaño. Taehyung mostró su característica sonrisa rectangular e hizo un par de reverencias al público.

— Gracias por haberme escuchado esta noche. Nos vemos luego.

Y justo después de eso bajó del escenario.

— Debemos admitir que fue una buena canción.— Dijo Jungkook.

Hyeji asintió y sonrió levemente.

— Lo fue.— Aseguró.— Taehyung realmente la sintió.

El castaño se acercó a la mesa de sus amigos, él venía sonriendo. Jungkook y Hyeji le devolvieron la sonrisa.

— ¿Cómo estuve?

Jungkook se puso de pie y abrazó a Taehyung por los hombros, lo sacudió un poco.

— Genial.— Le dijo su mejor amigo.— Cantaste como nunca antes. Muy buenas canciones las que escogiste esta noche y esa última...

Taehyung sonrió agradecido por lo que le había dicho Kook.

— ¿Entonces?— Preguntó Hyeji aún sentada, Taehyung la miró confundido.— Es sábado y fue la última canción, ¿para quién fue esta vez?

El chico se quedó pasmado y su brillante sonrisa se transformó en una nerviosa sino es que incómoda. Taehyung tenía una tradición; todos los sábados, desde el primer día que empezó a trabajar en el bar, la última canción la escogía para alguien y se la dedicaba al cantar. Muchas veces eran canciones para su padre o su madre, hermanos, amigos e incluso una vez le cantó a un oso de peluche que tenía de pequeño.

Era una tradición que nunca pasaba desapercibida.

Nunca.

Taehyung soltó una risa vacía y negó con la cabeza.

— Ah eso... Para nadie.— Dijo rápido.— Se me pasó, no lo pensé cuando hice el repertorio.

Jungkook conocía a su mejor amigo y sabía que él estaba mintiendo y en ese momento los nervios se lo estaban comiendo. Comprendía la intención de su chica al querer sacarle la sopa a Tae para ayudarlo, pero también sabía que Taehyung necesitaba salir de ese aprieto ahora mismo.

Después lo cuestionaría y lo haría confesar; pero eso sería cuando estuvieran solos en casa.

— ¡Bien! Como sea...— Kook le tendió su mano a Hyeji para que ella se pusiera de pie.— Debemos irnos ya. Jini me ha estado llamando y dice que Hoseok está como loco porque la fiesta ya ha empezado y nos quiere ahí.

— Bien...

— Yo iré a ponerme la ropa rockera.— Anunció Tae.— Los veo en el auto.

Sin esperar más, Jungkook y Hyeji se adelantaron y Taehyung corrió por sus cosas.

*

Las fiestas de Hoseok y Jungha siempre eran las más grandes y locas de todas y esta no se estaba quedando atrás. Los tres todavía no bajaban del auto y desde los asientos de cuero podían sentir el alboroto de la casa de los Bae. Habían pasado tres veces por la acera de la casa del padre de Jungha y seguían sin poder encontrar un lugar cercano dónde estacionar el carro. Fue entonces que Hyeji le llamó a la única persona que no se desconectaba por completo cuando estaba en una fiesta y esa era Sunmi.

— Nos abrirán la cochera.— Anunció Hyeji después de cortar la llamada.— Amo tener amigos gánster.

Esperaron a que la puerta eléctrica de la cochera se abriera, dentro de esta se encontraba la pelinegra que los había sacado del aprieto y a su lado estaba Yoongi. La cochera era tan grande que estaban estacionados los autos de los amigos más cercanos y los del padre de Jungha.

— Cada vez me acostumbro menos a la cantidad de dinero que tiene la familia de Jungha.— Comentó Taehyung.

Jungkook y Hyeji asintieron en acuerdo pues ni ellos que la frecuentaban más seguido lo hacían. Y eso era porque la castaña no lo hacía notar.

Bajaron del auto y pronto sus oídos fueron atacados por la fuerte música que provenía del interior de la casa. Era tan alta que los cristales de los autos vibraban al ritmo de la canción de fondo. Thunderstruck de AC/DC era la canción del momento, casualmente Sunmi y Yoongi portaban camisetas de esa banda. Mientras Hyeji de Aerosmith y Kook de Guns n' Roses.

— ¡Por fin llegaron!— Gritó Sunmi y fue casi audible. La música era realmente alta.

A Taehyung le gustaba. Iba a terminar sordo al final de la noche pero era un riesgo que no temía correr al tener tan buena música como ambiente. Además estaba emocionado por el tema de la fiesta, que cada persona portara una camiseta de una banda de rock fue la mejor regla de etiqueta que se le pudo haber ocurrido a Jungha.

— ¡Estaba en el bar trabajando!— Gritó el castaño de vuelta, Sunmi sonrió y asintió.

No esperaron más, Yoongi les indicó que lo mejor sería adentrarse al caos. Pasaban de las 10 de la noche y parecía que esto llegaría a su fin hasta el amanecer. En el interior de la casa se encontraban al menos 100 personas, todas con su respectiva vestimenta obligatoria, aunque la música era alta se podían escuchar los murmullos. Gente riendo y pasando el rato, muchas otras bailando o cantando, había mucho tráfico en la cocina que es donde estaba la fuente de alcohol y aperitivos; en la sala de estar se encontraba una mesa de billar y unos chicos estaban teniendo una partida mientras otros individuos eran los espectadores, seguramente esperando su turno para jugar. Las escaleras también eran una zona de tránsito, subían y bajaban personas de la planta alta como locas. Además la iluminación no era normal, las bombillas habían sido cambiadas por focos rojos.

Que la música fuera sólo rock sin duda tenía alterados a los invitados un poco más de lo normal.

— Esto no es nada.— Sunmi comentó.— El patio trasero es el verdadero pandemónium.

Y efectivamente así era. Por la gran extensión de terreno se encontraban repartidas más personas que en el interior de la vivienda, pero aquí las cosas estaban más locas. Al escuchar la música, Taehyung no imaginó que estuviera siendo tocada en vivo y al ver a la banda en un escenario que montaron, se emocionó más. La música en vivo era mil veces mejor. Además del escenario, el cual tenía colgado a lo largo un gran cartel que decía "Welcome to Hell" y la piscina como principales puntos de multitud, se había instalado una zona decorada con la temática de rock donde las personas se podían tomar su foto del recuerdo, habían de esos globos metálicos gigantes y letra por letra decían "Jungha Fest", también estaba el pastel de cinco pisos en esa área.

— ¡Genial!— Taehyung expresó al verlo.— Hay pastel.

Hyeji y Jungkook rieron a su lado al escucharlo.

Taehyung estaba más que sorprendido, además del pastel, no podía creer que la fiesta de Jungha era también prácticamente un concierto de rock.

— ¡Iré por algo de beber!— El castaño anunció, Jungkook y Hyeji ya estaban disfrutando de la música mientras esperaban sacarse unas fotos.

— ¡No bebas tanto!— Pidió Kook.— La noche apenas empieza, no quiero que te la pierdas.

Taehyung asintió sin darle mucha importancia, este ambiente lo hacía tener ganas de emborracharse aunque su tolerancia al alcohol fuera nula. Se dio la vuelta y con I Love Rock 'N Roll de Joan Jett & The Blackhearts de fondo, se dirigió a la cocina.

Su plan era explorar todo el lugar.

Entró a la casa de nuevo y entre leves empujones logró llegar a la cocina, la cual estaba atiborrada de personas pero entre todas ellas, una personita destacaba y lo hacía porque estaba de pie en la barra donde estaban todas las botellas. Esa persona era Jinyoung y aunque algunas personas le gritaban que se bajara de ahí, ella los mandaba a callar con sus gestos de las manos. Estaba muy concentrada buscando algo.

Taehyung sonrió divertido y después procedió a buscar a Jimin con la mirada y en vista de no encontrarlo, se acercó a la barra.

— Jini, ¿necesitas ayuda?

Y justo en ese momento la castaña expresó:

— ¡Lo encontré!

Se agachó para tomar un pendiente plateado situado entre las botellas de vodka y tequila, Taehyung lo analizó y sin duda eso no era de ella, pero sí de Jimin. Era un colgante de cruz que casi siempre traía puesto.

— ¿Se le había perdido?— Preguntó el chico.

— Sí y está llorando en el baño por ello.— Comentó ella.— Es muy especial para él, no sé por qué.

— Así que viniste a buscarlo sin importarte nada.

— Así es.— Jini asintió.— Ven aquí, ayúdame a bajar.

Taehyung se acercó, Jini tomó sus hombros y saltó al piso como si nada. Le agradeció y sonrió, las personas alrededor se acercaron a la barra a tomar lo que querían. Jini había estado deteniendo el tráfico.

— ¿Hay algún alcohol más leve que esto?— Le preguntó Taehyug mientras veía las botellas.

Sólo había botellas de vodka, ron, whiskey y tequila... Si tomaba un sorbo de eso no duraría ni un segundo de pie y si bebía cerveza le daría sueño y se querría ir.

— Tal vez no más leve, pero sí más amigable.— Le comentó ella.— Sígueme.

Salieron de la cocina y Jinyoung tomó de su brazo, haciéndolo caminar en contra de la corriente de personas. Subieron las escaleras hasta llegar a la planta alta, la cuál sólo estaba un poco más tranquila que el resto de la casa, pero no del todo. Lo primero que hicieron fue entrar a una habitación, Taehyung supo que era la de Jungha por los posters de Green Day colgados en la pared.

Jini cerró la puerta de la habitación y ambos sintieron cómo sus oídos descansaban un poco de tanto ruido.

— ¿Jiminnie?— La chica llamó.

— Aquí estoy, linda.— Gritaron desde el baño.

— ¡Lo encontré!

La cabeza de Jimin se asomó por la puerta del baño y Taehyung rió por su rostro, parecía como si acabara de ver un ángel en persona. El pelinegro salió de aquel pequeño cuarto y corrió a abrazar a su novia.

— ¡Te amo, te amo, te amo!— Decía mientras le repartía besos por todo el rostro.

— ¡Yo más!— Dijo ella y lo alejó entre risas.— ¡Basta, mi maquillaje!

Jimin rió burlón.

— Hola, Tae.— Lo saludó.

Taehyung quien en ese momento miraba por la ventana que tenía vista al patio, se giró a verlo y le sonrió.

— Hey, Jimin.— Sacudió su mano.— Pero que música tan buena está tocando la banda.— En ese momento Song 2 de Blur era lo que presentaban.

— ¡Lo sé!— Jini estaba de acuerdo.— Jungha y Hobi son los mejores.— Dijo.— Como sea, cariño te veo abajo.— Le dijo a Jimin.— Le daré a Taehyung algo de mi reserva especial e iré a buscar a mi amiga, ¿de acuerdo?

— Sí.— Jimin le dio un beso en la cabeza.— Pero, ¿podrías hacerme un favor?— Jini asintió.— Kangmin está en la habitación de enseguida buscando mi pendiente, ¿podrías decirle que ya lo tengo?— Pidió con un puchero y Jini asintió.— Andando Taehyung.

Jimin volvió al baño para lavarse la cara y los castaños salieron de ahí. Taehyung fue el que tomó esta vez la delantera y sin pevio aviso abrió la puerta de la habitación de al lado.

— ¡Lo siento!— Gritó apenado y Jinyoung rápido asomó su cabeza tras la espalda de Tae.

— Oh Dios... ¡Lo sabía!

Ese cuarto era una habitación para invitados y sentado en la cama estaba Kangmin y arriba de él se encontraba Ryumi, la mejor amiga de la infancia de Jungha. Taehyung al abrir la puerta había interrumpido la sesión de besos candentes de aquellos dos.

— ¡Te dije que cerraras con llave!— Ryumi alegó.

Kangmin sonrió apenado y dejó caer el peso de su cabeza sobre el pecho de ella.

— Lo siento, la emoción hizo que lo olvidara.— Dijo.— ¡Pero es Jini, ella no le dirá a nadie!

— Así es.— Jinyoung corroboró.— Ustedes pueden seguir con lo suyo sin preocuparse, Kangmin dice Jimin que ya no te preocupes por su arete.

— Dejé de buscarlos hace como 20 minutos.— Confesó él.

— Lo imaginé. Como sea,— Jini tomó el pomo de la puerta.— nos vemos luego, adíós.

— Gracias, Jini.— Dijo Ryunmi antes de lanzarse a los labios del chico otra vez.

Cerraron la puerta y Taehyung se quedó pasmado.

— ¿Qué diablos fue eso?

En su camino a la reserva especial, Jinyoung le explicó a Taehyung que Ryumi y Kangmin se gustaban desde hace tiempo, pero no habían formalizado una relación o siquiera algunos términos. Todo mundo sabía que había tensión entre ellos, pero nadie sabía que tenían sus encuentros secretos, a excepción de Jini que los pilló una vez y le pidieron que no los delatara. Les gustaba la adrenalina de sus encuentros, sentían que era más emocionante así que así era como trabajaban.

Jini no los juzgaba, los dejaba disfrutar.

— ¡Y estamos aquí!

Después de recorrer casi toda la planta alta, la cual era igual de inmensa que la planta baja y con mil habitaciones. Llegaron a un bar que era donde el padre de Jungha tenía sus noches de juegos, hasta había una mesa de póquer y tiro de dardos en la pared, además de otra mesa de billar.

Jini rodeó la barra y se puso de rodillas para sacar del pequeño refrigerador secreto dos botellas de vino tinto.

— No hay copas, Jungha las guardó por seguridad, así que te cedo toda la botella.— Le sonrió.— ¿El vino sí te gusta, no?

A Taehyung le brillaron los ojitos.

— ¡Eres mi heroína!

Taehyung amaba el vino tinto, era el único alcohol que no temía por beber. Nunca imaginó que Jini trajera vino a este tipo de fiestas pero no le importaba. Le agradecía.

Ahora sí, la fiesta realmente empezaba.

••••
y a continuación una demostración del outfit de taehyung y su aesthetic:

yo me imagino a taehyung en esta historia con este look de pelinegro/castaño pero con cabello larguito, así como in the soop o en la era on <3

en la continuación de la fiesta les mostraré otro collage del aesthetic de la fiesta en general

espero les esté gustando, nos leemos pronto <3