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Tal vez esté exagerando, o tal vez ella tenga razón, no quería estresarla más de la cuenta, pero cada día se sentía más sola y deprimida que no sabía si ella se daba cuenta.
Otra vez se encontraba esperando a que Lisa llegara a su cita y parecía ser que no iba a ser así, Jennie bajó la mirada a su celular cuando recibió un mensaje y sus ojos entristecieron al leer lo que ya suponía iba a pasar.
"Cariño, lo siento, no podré llegar, salió una reunión importante y no puedo faltar, pero prometo que te lo recompensaré, ¿Sí? Adiós, te amo"
Jennie guardó el celular sin responder y salió del restaurante que había reservado solo para ellas, no le dió explicación a los empleados pero ellos supieron entender, sabían por su expresión decaída que algo había pasado y comenzaron a guardar todo para poder cerrar.
La castaña llegó a su hogar y cuando ingresó a su cuarto, no tardó en quitarse el vestido rojo que había comprado para ese día y tirarlo a un extremo, regresó los pendientes y collar a sus cajones con molestia y decidió solo recostarse en ropa interior, comenzando a recordar porque es que odiaba a esa empresa.
Lisa veía su celular a escondidas mientras uno de sus empleados le presentaba un nuevo proyecto, otra vez solo la había dejado en visto, sabía que la había lastimado otra vez pero es que ella debe entender, debe mantener la empresa en el número uno, como lo había hecho desde hace un año en la cuál logró superar a los que estaban en la cima, y eso dependía de mucho tiempo y trabajo.
Lisa volvió a prestar atención al proyecto, hablaría con Jennie al volver a casa.
_Jennie - la ahora rubia, subía las escaleras junto a un ramo de rosas en sus manos, Lana logró escucharla y se acercó a la escalera antes de que subiera por completo.
_Señorita, Lisa - la rubia se detuvo a verla - la señorita Jennie no se encuentra.
_¿A dónde fue? - preguntó curiosa.
_A salido a celebrar su cumpleaños junto a sus amigas, me informó que llegará en la madrugada.
_¿Su cumpleaños? - se mostró sorprendida, sacó su celular rápidamente y observó la fecha, suspirando con frustración, se había olvidado - gracias, Lana - subió rápidamente las escaleras.
Lisa llegó a su habitación y se quitó de inmediato el abrigo, el pequeño objeto plateado salió despedido del bolsillo y terminó rodando hasta terminar en el rincón del cuarto.
La rubia se quitó el traje negro que llevaba y comenzó a ponerse ropa más cómoda para ella, se vió la espejo rápidamente y asintiendo, tomó nuevamente el abrigo y se lo llevó con ella, no se había percatado del anillo en una esquina.
_Hola, Rosé - conducía su automóvil por la oscura noche - ¿Jennie está contigo? - esperó respuesta - está bien, gracias, voy para allá.
_Está en camino - Rosé veía a su amiga, Jennie sostenía en su mano una copa de vino y veía a la nada, pensativa. Se encontraban en una discoteca en el segundo piso, en la zona vip sin que nadie pueda molestarlas - vamos, Jennie, debe tener mucho trabajo y entiendo que te moleste, pero se nota que te ama mucho.
_Para mi reina - Jisoo llegaba con dos copas y le entregaba una a Rosé, ambas se besaron cortamente y la pelinegra se sentó a su lado, abrazandola por los hombros, Jennie solo observaba entristecida.
_Te entiendo, Jennie - comentó Suga en el sillón de enfrente - Jimin sigue trabajando hasta esta hora, está más emocionado por la inauguración de su propio bar que no a dormido desde ayer, ah pero cuando llega cansado pide mimos.
_Sigo sin entender su relación, ¿Están saliendo o no? - preguntó Jisoo.
_Sabes que él es orgulloso y no lo va aceptar - respondió Suga con frustración.
_Es cierto - interfirio Rosé - han estado saliendo mucho pero mi hermano es un terco, ya hasta se mudaron juntos y sigue diciendo que no.
_Y ni hablar de sus celos - siguió el rubio riendo - es tan lindo - suspiró risueño.
Rosé lo veía extrañada, ¿Como le podía gustar su hermano? Él es un amargado egocéntrico.
En fin, hombres.
_Cariño - Lisa llegaba corriendo y Jennie la ignoró - en verdad lo siento, lo siento - se sentó a su lado pero la castaña solo mantenía silencio - sé que estos días no he estado mucho pero todo tiene una explicación, me han presentado nuevos proyectos, proyectos que nos beneficiarán-
_¡Deja de hablar de tu trabajo! - todos se tensaron por el grito de Jennie - estoy harta que lo primero que hagas al llegar a casa sea hablar de trabajo, ya no te interesas por nosotras, por nuestra relación, ni siquiera te acordaste de mi cumpleaños - su voz se quebró, dejó la copa sobre la mesa y se puso de pie, dirigiéndose a la salida.
_Jennie, espera - se apresuró a ponerse de pie y buscar en su bolsillo, pero el anillo no estaba - Jennie - comenzó a seguirla siguiendo buscando desesperada en todos los bolsillos.
Todos los amigos se miraron entre sí, era lamentable que siendo la pareja más dulce, pasaran a esto.
En la carretera, Jeongyeon manejaba su motocicleta con total libertad, sus ojos se mostraban tristes a través de la luna del caso.
Ya habían pasado seis meses desde que Nayeon se había ido a Canadá, le habían ofrecido una beca para la mejor universidad de aquel país y no la había desaprovechado, a los pocos días se había ido y su única despedida fue una sonrisa a lo lejos, Jeongyeon había llegado segundos antes de que Nayeon ingresara al avión y solo pudo verla a través del ventanal que daba vista a las afueras.
Ha estado viendo por sus historias en redes sociales que le está yendo muy bien, tiene muchos amigos allá, algo que no tenía mucho aquí, tiene viajes que la hacen felíz y sobre todo, es la número uno en su clase, pero había algo con lo que ambas no contaban, que Jeongyeon comenzara a extrañarla demasiado, al punto de ya no querer salir con ninguna mujer, antes que a ella le encantaba, y tenía una ligera sospecha del porqué.
Jennie ingresó a su cuarto y le cerró la puerta en la cara de Lisa, dejó su bolso sobre la cama pero vió extrañada a la rata morder algo.
_Cariño - Lisa se sobaba la nariz por el golpe, hasta que vió que Jennie no se movía, parecía ver algo en su mano - ¿Pasa algo?
Jennie giró mirándola, en su mano sostenía el anillo de compromiso.
_¿Esto...es lo que estoy pensando, Lisa? - preguntaba con los ojos cristalinos.
La rubia suspiró asintiendo, no era la manera en la que se lo quería pedir, ella merecía más.
_Sí...yo, te lo quería pedir esta noche, pero no recordaba...que también era tu cumpleaños, lo siento - pidió apenada.
Jennie bajó la mirada al anillo y sus lágrimas comenzaron a caer, Lisa la veía entristecida y antes de que se acercara, la castaña lo hizo y tomó su mano, la rubia la observó extrañada y dolida cuando Jennie dejó el anillo en su mano y se dirigió a la salida.
_¿Jennie? - llamó, pero Jennie no se detuvo y salió del cuarto.
Al día siguiente Lisa nuevamente no estaba en todo el día, solo llegó en la noche cansada, besó su mejilla y sin decirle nada más, se dió media vuelta en la cama para poder dormir, cuando Jennie despertó al día siguiente, Lisa ya se había ido a la empresa.
Nuevamente estaba en una reunión muy importante y no podría faltar, no había hablado con Jennie sobre el anillo, solo la esperó en la cama y cuando la castaña volvió pensando que estaba dormida, Lisa escuchó sus silenciosos sollozos a su lado, algo que le había dolido oír.
Esto ya podía seguir así, y menos si Lisa quería formar una familia con ella.
Jennie casi no le decía nada, sentía que debía apoyarla como su pareja y que para eso debía estar, pero Lisa sabía lo que estaba sintiendo y debía tomar una decisión ahora, por eso estaba en esa reunión con un conocido.
_Está hecho - estrecharon manos y él sonrió agradecido, esperaba esa oportunidad desde hace mucho - bienvenido a la empresa Kim-Manobal.
Esa tarde Jennie no se esperó encontrar a Lisa leyendo en la sala y usando ropa casual, la castaña regresaba de una sesión de fotos con una revista y tenía planeado ir a casa de Rosé a pasar la tarde.
_¿Pasó algo? - preguntó curiosa. Lisa levantó la mirada y al verla, sonrió con cariño, dejó el periódico sobre el sillón y se encaminó a ella sin responderle, Jennie no comprendió cuando la atrajo a ella en un abrazo y se escondió en su cuello, sin embargo correspondió - amor...¿Que pasa? - preguntó preocupada.
Lisa se separó y se quedó admirandola, acarició su cabello y sus ojos brillaron de felicidad por tener a alguien como ella a su lado.
_Te amo - pronunció Lisa - y no quiero pasar más tiempo en la oficina, quiero estar junto a ti y para nuestra futura familia, desde hoy solo iré cuando lo necesiten, ya no vendré solo a dormir.
_¿Qué quieres decir?
_Estos días he buscado a alguien quien pueda dirigir la empresa como lo hemos estado haciendo, alguien que se sepa lo que hace y que mantenga a la empresa en lo alto, así que contraté a un nuevo gerente - sonrió - él se encargará de todo.
La sonrisa nostálgica de Jennie alegró el corazón de Lisa.
_¿A quién contrataste? ¿Lo conozco? - preguntó sonriente.
_Oh, claro que lo conoces - sonrió.
_¡HE VUELTO, HIJOS DE SU PUTA MADRE! ¡HE VUELTO! - Jimin entraba saltando emocionado a la mansión Park - ¡EL GERENTE JIMIN PARK A VUELTO! ¡WUJUUUU! - festejó de rodillas como si de un gol se tratase.
Rosé y Suga detuvieron su reunión de té y se miraron extrañados.
¿Qué le había picado?
_Así que...- Lisa retrocedió un paso, sintiéndose nerviosa pero segura de lo que iba a hacer. Se arrodilló ante la sonrisa emocionada de Jennie, y de su bolsillo sacó...esperen, ¿Y el anillo? - espera - sonrió nerviosa, ¡¿Dónde estaba el anillo?!, La pequeña rata trepó a su espalda y se colocó en su hombro, sostenía el anillo en su boca y Jennie rió ante la escena - gracias Lady - Lisa también rió tomando el anillo - Jennie - levantó la mirada a ella y enseñó el anillo, sentía su corazón latir con más fuerza ante cada palabra - ¿Quieres ser mi compañera de vida? - sonreía con los ojos cristalinos - ¿Quieres casarte conmigo?
Jennie sonrió.
_¿Solo eso? Yo esperaba más detalles - ambas rieron al recordar las palabras de Lisa cuando Jennie le pidió ser su novia. La castaña se arrodilló también con ambas rodillas y Lisa copió su acción, quedando de frente, sintiéndose nuevamente tímidas - sí - Jennie tomó sus mejillas - quiero casarme contigo.
_¡Sí! - Lisa festejó levantando las manos - ¡me voy a casar con Jennie Kim!
Jennie rió y la abrazó del cuello, atrayendola a un beso en medio de sonrisas y varios:
"te amo"
Nueva actualización (◕ᴗ◕✿)
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