Jennie salió de su asombro y volvía a fruncir los ceños, se acercó con pasos fuertes hasta la pelinegra y se detuvo frente a ella.

_¿Qué haces aquí? - Lisa se puso de pie, quedando una frente a la otra - tú lugar es en el jardín, no ocupar el lugar de mi padre.

_Creame que a mí tampoco me gusta esto - respondió seriamente - no tengo porqué estar cuidando de esta casa y mucho menos de usted. Como lo dice, mi lugar está en el jardín.

_Entonces quitate esa ropa y regresa a donde pertenes - su voz fue dura.

Lisa la miró desafiante y con movimientos rudos fue quitando el saco frente a ella, hasta que la ama de llaves las interrumpió.

_Señorita, Jennie - se detuvo frente a ella - disculpe por mi atrevimiento, pero debo recordarle que ahora mismo, la señorita Lisa tiene más poder que usted en esta casa y por lo tanto, no tiene porqué obedecer sus ordenes, ni usted, hablarle de esa manera.

Jennie la miró extrañada, hasta que soltó un risa burlona, riéndose de lo que acababa de escuchar, pero ninguno de sus empleados parecía causarle gracia.

_¿Están de broma, cierto? - se cruzó de brazos - ¿más poder que yo? ¿no hablarle de esa manera? está bien, hagan lo quieran, jueguen a hacer feliz a la pobre y humilde jardinera - mantenía una sonrisa ladeada - y tú - miró a Lisa - disfruta de estos días de lo que nunca tendrás en esta vida.

Le dio una última mirada de desprecio y se marchó directamente a su habitación, no tenía pensado almorzar con alguien de su clase.

Lisa tenso la mandíbula y apretó los puños para mantenerse tranquila, seguía el recorrido de Jennie con mirada dura, sintiendo impotencia por sentirse humillada por un idiota niña rica.

****

_Hagamos esto fácil - Jeongyeon dejó su casco sobre la moto - ustedes se van, dejan tranquila a la chica y todos somos felices, o se quedan, reciben la golpiza de su vida y salen llorando - relajó su cuello - ¿cual deciden? - estiraba los brazos.

_¿Y tú quien te crees? - Momo salió al frente - ¿Batman? ¿la mujer maravilla? - se cruzó de brazos mientras reía junto a su amiga.

Jeongyeon también rió.

_Oye, eso estuvo bueno - señaló - pero también significa que decisieron por la segunda opción - se quitaba su chaqueta de cuero, quedando con un top negro - bueno, ¿quien comienza?

Sana mostró una sonrisa ladeada.

_Momo - pronunció el nombre de su amiga y la pelinegra también se quitó su saco, entregándoselo y colocándose frente a ella para colocar los puños en alto, lista para pelear.

_¿Seguras que quieren pelear? - Jeogyeon también levantaba los puños - soy alguien muy pacifica y no quisiera hacerles daño.

_Tú solo pelea - respondió Momo seriamente.

_Bueno, tú lo quisiste - Jeongyeon lanzó el primer golpe con su puño derecho, cuando Momo la esquivo y dando una vuelta en el aire le propinó una fuerte patada en la cara, mandándola al suelo.

Jeongyeon quedó perpleja con su mirada al cielo, ni cuenta se había dado de lo que había pasado.

Nayeon miraba todo asustada mientras era vigilada por Sana.

_Dale, ponte de pie - demandó Momo.

_Oye - Jeongyeon se levantó entre quejidos - espera...¿sí? - pronunció en un hilo de voz - eso no me lo esperaba, fue una buena patada - se sujetó la cintura y se curvó un poco hacia atrás, escuchando como sus huesos tronaron - oush.

_Dale, no tengo todo el tiempo - pronunció con impaciencia.

_Ok, ok - volvía a levantar los puños - ok, no - volvía a bajarlos - mira, les daré una última oportunidad, ustedes la dejan ir y todos contentos, ¿no les parece lo más indicado?

_Solo dale su merecido por entrometida - mandó Sana.

_Oye, estamos hablando ella y yo - se quejó Jeongyeon, pero tuvo que retroceder cuando casi recibe un puño por parte de la pelinegra.

Iba retrocediendo a cada intento de golpe hasta que chocó con su moto y tomando su casco se cubrió, logrando que Momo chillara al escuchar tronar los dedos de su mano.

_Uuu - Jeongyeon también pudo sentir el dolor - digo - le estrelló el casco en la cabeza y la dejó inconsciente en el suelo - muy karateca pero no puedes con un casco.

Sana enfureció por esa chica y olvidando a Nayeon, se dirigió a la extraña para darle lo que merece. Jeongyeon la esperó con casco en mano cuando Nayeon aprovechó que Sana no estaba pendiente de ella, y tomando el pequeño tacho de basura que estaba de lado, se lo lanzó a la espalda para que Sana cayera por el peso.

Nayeon quedó perpleja por su acto, ¿qué había hecho?

Jeongyeon corrió a su lado y tomando su mano se apresuró a llevarla hasta su moto.

_¡Sube! - ordenó ya en la moto y colancandole el casco, Sana se levantaba entre quejidos.

_Pero...yo...las motos provocan accidentes - respondía Nayeon con temor.

_¡Solo sube! - tomó su mano y la haló a ella, Nayeon subió rápidamente y tuvo que sujetarse con fuerza cuando la motó aceleró con todo lo que daba.

****

Jisoo comía de su taper mientras se encontraba sentada sobre el capó de un viejo auto, observaba a la rubia adinerada correr detrás de una rueda intentando detenerla, esta ya se le había escapado cuatro veces.

¿por qué tenía que ser tan torpe?

Claro, seguro era la primera vez que trabajaba en serio.

_¡ruedita, ven aquí! - Rosé junto a la rueda salieron fuera del taller.

Jisoo seguía comiendo como si nada estuviera pasando.

****

Ya era tarde y Lisa se mantenía sentada en el sillón de la sala principal, mantenía su puño sobre su mejilla y suspiraba con aburrimiento al llevar al rededor de tres horas sentada, nadie le permitia hacer algo.

_¿En serio no hay nada que pueda hacer? - preguntó sin borrar su expresión.

_Usted no tiene porqué preocuparse, todo está en nuestras manos. La casa se encuentra completamente limpia y no hay ningún problema.

_¿Entonces tengo que estar aquí todo el día? - la señora asintió - No - se puso de pie - lo siento, pero no, yo me voy a hacer mi trabajo, para eso me contrataron - solo dio un paso cuando tenía a una fila de los sirvientes frente a ella, impidiéndole el paso - ¿en serio?

_Ordenes del jefe - pronunció el ama de llaves.

_Pero no puedo estar aquí todo el día, necesito hacer algo - se quejó.

_Entonces salga.

_¿Perdón? - se mostró sorprendida - ¿puedo hacer eso? Se supone que estoy en horario de trabajo.

_Le dije que no hay problema, y si la hubiera, nosotros la llamaremos. Vaya a divertirse o hacer lo que le plazca.

_Me hubieran dicho eso antes - frunció los ceños y llevó sus manos a la cintura.

_No irás a ningún lado - Jennie bajaba las escaleras, al parecer se había cambiado - necesito que me acompañe a algún lugar.

_Señorita, le recuerdo que...

_No estoy hablando contigo - pronunció con voz dura y la mayor bajó la mirada - dime - se cruzó de brazos - ¿lo harás?

_¿Qué es lo que pretende? - preguntó Lisa con total desconfianza.

_Tengo entendido que no te gusta recibir dinero sin algún tipo de trabajo - la observaba de pies a cabeza, ¿por qué se veía tan bien? ¿era la ropa?

_Entiende usted bien, me gusta conseguir las cosas con mi propio esfuerzo.

_Entonces no tendrá problema en trabajar para mí en estos tres días - ofreció - será mi asistente personal, así estaría trabajando por su sueldo.

_Señorita...- la mayor quiso interrumpir, pero Lisa le pidió con un gesto que no dijera nada, miraba fijamente a Jennie, tratando de adivinar qué era lo que tenía en mente, eso le resultaba muy extraño.

Aunque viéndolo desde otro punto, Jennie le estaría ofreciendo ese trabajo para no estar regalandole dinero sin hacer nada.

_¿Qué dices? ¿aceptas? - se mantenía serena.

Lisa bajó la mirada, pensándolo seriamente, seguro que Jennie la haría trabajar demasiado, pero eso era mejor que estar de haragana, Lisa estaba tan acostumbrada a trabajar durante horas, que estar sin hacer nada era algo extraño para ella.

_Está bien - asintió - acepto.

Jennie mostró una sonrisa ladeada.

_Sabía que aceptarías - le lanzó unas llaves y se lo lanzó en el aire, donde Lisa lo atrapó - ponte el uniforme que te darán y esperame en el auto de fuera - le dio la espalda y se dirigió a las escaleras.

****

Jeongyeon se fue deteniendo en una calle comercial, habían estado huyendo por cinco por cinco minutos para que no las alcanzaran.

Nayeon se quitó el casco y se entregó en las manos, su cuerpo aun temblaba por la adrenalina que había pasado por la situación.

_Muchas gracias - hacía reverencia - si no hubieras llegado...- temió decir las palabras - pero ahora no importa, igualmente gracias.

_No es nada - revisaba si su casco no había recibido nada.

_Para serte sincera, pensé que ibas a golpearlas - pronunció con voz baja.

_Sí, yo también lo pensé - rió y se puso el casco - ya tengo que irme, espero que no tengas más problemas - giró a verla - adiós, linda - se guiñó de una manera tan encantadora, que dejó emboboda a la pelinegra.

Jeogyeon aceleró su motocicleta mientras Nayeon no quitaba su mirada de ella.

_¿Me...me dijo linda? - sonreía sin poder creerlo - soy linda para ella - sus mejillas se volvieron rojas.

Sonreía ilusionada cuando se percató de un detalle, tenía la chaqueta de la motociclista en su mano.

****

_¿la jardinera ya está fuera? - Jennie bajaba vistiendo alegante.

_Sí, señorita. Lleva esperando hace minutos.

_Está bien - se ridigia a la salida, pero antes giró a verla - si mi padre llama, digale que todo está yendo bien en la casa, y si desea hablar con Lisa, digale que a salido por temas personales pero que ella sigue estando a cargo, ¿de acuerdo?

_Como usted ordene - se inclinó hacia ella.

_Bien - dio media vuelta y siguió hasta salir de la mansión, bajaba las cortas escaleras cuando tuvo que disimular al ver a Lisa distraida, vistiendo el uniforme que Jennie había pedido para ella, se veía demasiado bien.

Sí, está segura que es la ropa.

Jennie carraspeó y Lisa se enderezó en su lugar, apresurandose en abrir la puerta para ella.

La castaña ignoró la mano que Lisa ofrecia e ingresó sin ayuda, la pelinegra no le quedó de otra que fingir que nada había pasado y cerrar la puerta.

_Como verás - Jennie comenzó a pronunciar cuando Lisa ingresó en el asiento del piloto - por ahora serás mi chofer, necesito que me lleves a una muy importante conferencia de la revista Vogue, es por eso que te pedí que vinieras conmigo, eres la más presentable de entre todos los mayordonos y sirvientas, y la familia Kim debe resaltar en todo.

Lisa no sabía si sentirse halagada. ¿le había dicho que era guapa? ¿o que era la única opción que había?

_La localización está en el gps, solo guiate - Jennie se realajó en su asiento.

_Entendido - puso en marcha el auto.

_Y no quiero que pronuncies nada al menos que yo te lo diga, el resto de periodistas que no son de la agencia, tratarán de sacarte alguna clase de información para llenar sus portadas.

_Lo entiendo - asintió, estaba siendo seria en su trabajo.

****

Rosé intentaba sujetar la mangera que se había salido de control, serpentiaba por el suelo con fuerza y rapidez que Rosé estaba paranoica y soltaba pequeños gritos.

Jisoo se encontraba debajo de un auto y trabajaba seriamente, le daba cualquier trabajo a la chica adinerada para mantenerla ocupada y que no interfiera en su trabajo.

_¡lo tengo! - Rosé batallaba con la manguera - ¡¿como se apaga?! - ambos caian al suelo.

_Con el mango que está en el final - respondió con tranquilidad.

_¡No alcanzo!

_Sí lo alcanzas - Jisoo viró los ojos y siguió trabajando.

Rosé batallaba en el suelo con la manguera, como si de una serpierte gigante se tratara. Su cuerpo estaba empañado y la mayoría de su cabello sobre su cara, constantemente botaba el agua que se tragaba de casualidad.

Estiró su mano con esfuerzo mientras se mantenía abrazada a la manguera y cerró la llave rápidamente, dejando finalmente de pelear.

Respiraba exhausta y se dejó caer de extremidades abierta, su pecho subía y bajaba notoriamente.

_Lo hice...- pronunció cansada.

_¿ves? No era tan difícil - respondió sin interes alguno.

Voten ❤