이십육. real life
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Bangchan Can I? Or shall I? 🖤
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Jiyong no pudo evitar sonreír al ver la fotografía que había subido Chan a su instagram. Sabía que la frase, aunque tuviese muchas interpretaciones porque esa era la intención del chico porque era lo que se esperaba de un idol y del contenido que subía, era para ella. También se había fijado en que llevaba el reloj que le había regalado, aunque estaba un poco disimulado por la ropa y volvió a sonreír al verlo.
Ella lo llevaba también siempre que podía y más de una vez su mirada se desviaba para mirarlo de forma inconsciente y pensar en todo lo que significaba ese objeto.
Echaba mucho de menos a Chan, más de lo que creía que haría en un primer momento cuando supo que se iría de gira.
No era que necesitase verlo a diario, porque ni cuando estaban ambos en la misma ciudad lo hacían, era más bien el poder hablar sin tener que pensar en la diferencia horaria que había, en que si quería contarle algo pudiera contestar en un lapso corto de tiempo, o viceversa.
A ella le hubiera gustado poder compartir la alegría que tenía Chan cuando le escribía acerca de que algunas promociones, entrevistas, encuentros con los fans y conciertos, al momento. A veces cuando había leído esos mensajes habían pasado horas y sentía que ya no era lo mismo.
Del mismo modo que cuando le ocurría algo bueno, o de lo que sentía orgullosa, a una de las primeras personas que le escribía para que lo supiera era a él.
Quería que Chan supiera que estaba ahí, que podía contar con ella para cualquier cosa, y le daba la sensación de que al estar tan alejados el uno del otro no estaba tan claro, que muchas cosas no se las decían porque no podrían explicarse bien o enseñárselo.
Un ejemplo era la canción en la que estaba trabajando, si hubiera estado en Seul se la hubiera mostrado como había hecho con muchas otras, pero por videollamada era muy complicado.
No era que no confiase en él, ni nada parecido, era solo que era más que consciente de que el tiempo que tenían para hablar era muy limitado, y hablaban de solo las cosas importantes o que necesitaban hablar de inmediato, otras que se podían contar más tarde o que no tenían tanta relevancia quedaban en un segundo plano.
Intentaba no pensar mucho en eso, porque sabía que sería peor y estaría retroalimentándose en la negatividad y en esa dinámica destructiva. Lo mejor era hacer cómo le habían recomendado sus amigas y Jisoo, centrarse en el trabajo y en tener la mente ocupada para no pensar en él.
Pero le costaba.
Los primeros días después de que Chan se marchase de gira habían sido muy difíciles. Al haber intentado aprovechar al máximo el tiempo que tenían, y haber estado durmiendo juntos, casi todo en su apartamento le recordaba a él, incluso las sábanas olían a su perfume que tanto le gustaba.
De forma inconsciente había intentado llenar el vacío que le había quedado usando la ropa que le había prestado de forma indefinida, ya fueran sudaderas y jerséis suyos, que le venían exageradamente grandes ya que lo eran de por sí ya que él solía usarlos de una talla más grande, o la merch que le había regalado.
Y eso no había pasado por alto para JYP, que no había hecho ningún comentario concreto, pero la forma en la que la había mirado y sonreído expresaba mucho más que cualquier cosa que hubiera dicho. Eso la había llevado a intentar disimular durante los siguientes días, porque por mucho que lo sospechase de forma más que clara de lo que había, o eso le había dicho Chan, no quería darle pruebas o más pistas por si acaso.
El dueto que tenía con el antiguo CEO, y la preparación previa con todo lo que incluía, aprenderse la letra, la coreografía, perfeccionar ambas cosas... Había ocupado casi todo su horario y tiempo desde las últimas semanas de enero.
Aunque por mucho que trabajase y diese lo mejor de sí, sentía que no era suficiente, que no cumpliría con las expectativas que había puestas en ella.
JYP se lo había dejado caer de forma sutil, porque pasaban mucho tiempo juntos y le daba consejos, trucos y tenían conversaciones que a Jiyong le habían sorprendido. Su manager también se lo había confirmado un día que estaban hablando de trabajo, muchos directivos de la empresa estaban esperando para ver cómo era la recepción por parte de los netizens a su papel en el dueto y en cómo lo hacía.
Por mucho que alguien tan importante la apadrinase y apostase por ella, si las opiniones no eran favorables y estaban llenas de críticas del tipo que no cantaba bien, que no sabía bailar, que no era lo suficientemente buena... No serviría de nada, su carrera acabaría antes de empezar, tal y como le había ocurrido en el pasado.
Ese era uno de los motivos por los que se exigía tanto a sí misma, porque aunque no estuviera disfrutando del todo el proceso, sabía que no tendría otra oportunidad así, que era una manera de poder sacarse al fin esa espinita clavada y saber si de verdad eso le gustaba de verdad.
También sus amigas y, sobre todo, Jisoo, con la que se desahogaba casi a diario de sus preocupaciones por las noches antes de que se fueran a dormir, se lo habían comentado, que los momentos antes del debut no se disfrutaban, que la presión era excesiva, al igual que los nervios, la incertidumbre y las dudas.
Según le habían dicho, la situación cambiaba cuando ya pasaba ese día, que la presión era la misma, o peor, pero que lo veías todo con un poco de perspectiva.
Todo eso no lo había vivido, no había tenido la ocasión por todo lo que había rodeado su salida de YG y su cambio de profesión, por lo que era como una primera vez para ella y estaba aprendiendo a lidiar con eso de la forma que podía.
Para no perder tiempo, porque tal y como le había dicho a Chan en la videollamada, tenía que adecentarse un poco antes de que el coche de producción del drama fuera a buscarla, hizo varias cosas a la vez mientras veía cómo Dalgom la iba controlando para saber qué hacía antes de marcharse a la habitación de Jisoo para seguir durmiendo.
Se preparó un café rápido, para no dormirse ya que tenía mucho sueño, y contestó algunos mensajes de sus amigas, o en concreto de Nayeon, que la había estado chinchando como hacía siempre y le sugería que podían cenar juntas para no estar solas en un día tan señalado como era San Valentín.
Aunque le hubiera dicho a Chan que no pasaba nada por despertarse un poco antes y así poder hablar, la verdad era que sí le costaba y afectaba más de lo que creía. Jiyong adoraba dormir y las últimas semanas lo estaba haciendo muy poco por la gran carga de trabajo que tenía. Tampoco se lo diría, porque por lo que lo conocía él diría que durmiese y no se preocupase por eso, que ya hablarían cuando pudieran.
Una vez en el coche que la llevaba al lugar del rodaje, siguió contestando mensajes, esta vez de su manager en los que le decía que el guardaespaldas estaba ya ahí y que si necesitaba algo, que le escribiera.
De todas las medidas que la empresa había tomado por todo lo del sasaeng, esa era la que llevaba peor. No se acostumbraba a que alguien estuviera detrás de ella todo el tiempo en el que trabajaba: estaba en las sesiones de fotos, en los platós de televisión en los que era MC, en todas las localizaciones en los que se rodaba el drama, en los eventos públicos en los que presentaba algo...
Y era extraño saber que estaba siendo observada aunque fuera por alguien que la protegía.
—Buenos días —la saludo Minho cuando llegó y se sentó en la silla contigua a la suya con el guion del capítulo en la mano—. ¿Cómo estás? —Jiyong sonrió y asintió con un leve gesto a ese saludo, no podía contestar porque le estaban retocando el maquillaje para las escenas que rodarían a continuación, tenía que parecer que tenía alguna heridas—. ¿Quieres que repasemos alguna escena o comentar algo con lo que te puedas sentir incómoda?
Pese a que Jiyong se había distanciado un poco del actor en un primer momento, debido a los artículos que habían salido que los relacionaban de forma romántica, para así no perjudicarlo por culpa del sasaeng, ya que lo había amenazado de forma indirecta y no quería que lo ocurriese nada, su relación volvía a ser la misma.
Con el paso de las semanas, y una vez que empezaba a estar más relajada de ese tema ya que veía que las medidas que habían tomado parecían funcionar, había decidido que no valía la pena perjudicarse a sí misma de ese modo. Minho y ella se llevaban bien, tenían buena química y era un buen amigo, ¿por qué tenía que alejarlo de su vida por miedo?
Eso sí, no sabía lo de su sasaeng, ninguno de sus compañeros de reparto lo sabían porque así lo había preferido, no quería más miradas tristes o comprensivas por lo que le pasaba. Solo lo sabían los jefes de producción del drama, y porque JYPE se lo había comunicado para que aumentaran un poco la seguridad y que no les extrañase la presencia del guardaespaldas.
—¿Quieres repasar algo tú? —rebatió con una sonrisa—. ¿Es que aún no te has acostumbrado a nuestras escenas juntos? —bromeó.
Minho empezó a reírse a carcajada limpia y negó con la cabeza, estaba más que acostumbrado a ese tipo de comentarios por parte de Jiyong. Cuando estaba de buen humor se notaba y este era uno de esos días.
—Quiero que estés cómoda —comentó con calma—, sé lo complicadas que pueden ser algunas escenas por lo que implican y...
—Minho, no va a ser tampoco nuestras primeras escenas en los que tenemos que estar más... cercanos —dijo para que se entendiera a lo que se refería. Ya habían rodado varias en las que se besaban y no había sido extraño ni forzado—. Puedes estar tranquilo.
Esa era una de las cosas que más le habían gustado del carácter del actor, el que intentase en todo momento que ella se sintiera bien y a gusto con él en ese tipo de escenas, que estuviera lo más cómoda posible y que no estuviera nerviosa. A Jiyong no era que le afectasen mucho, lo intentaba ver desde un punto de vista objetivo, era su trabajo y solo eran besos, simples roces de labios que no significaban nada.
Lo único que le preocupaba era la opinión de su familia, sobre todo de su padre y hermano, y la de Chan. Con los primeros no había hablado al respecto, y con su novio lo había aclarado todo cuando había tenido ocasión, no quería que algo así fuera un problema y por lo que le había dicho, no lo era, él confiaba por completo en ella.
—Bien. —Se levantó algo más tranquilo después de hablarlo—. Pero si quieres repasar algo o comentar, dímelo, lo adaptaremos a lo que te vaya mejor, quizá se puede substituir de algún modo y...
—Todo está bien, de verdad —aseguró Jiyong y le guiñó un ojo para que no se preocupase.
Al estar en las últimas etapas del rodaje de los capítulos finales, lo que les quedaba grabar era en localizaciones de interior y decorados, todo lo exterior ya se había hecho con tiempo.
La preocupación que había tenido Minho era porque la que primero tendrían que rodar eran unas en las que ambos estaban en que era la habitación del personaje de él en el drama y tenían un momento íntimo, pero lo único que sucedía que se grababa en cámara era un beso en el cuello, lo que ya era mucho y podía resultar incómodo si no había una buena relación con el compañero.
Jiyong intentó no reírse y ser lo más profesional posible, pero no pudo evitar hacerlo cuando algo no salía bien en cámara y tenían que volver a empezar, o cuando el cabello de Minho le hacía cosquillas o no caía encima de la cama cómo tenía que hacerlo.
Las siguientes escenas que tuvieron que hacer juntos, solos y con otros actores y actrices, también se le hicieron muy fáciles. Echaría mucho de menos el buen ambiente que había, todo era más sencillo.
—Jiyong, te han traído esto. —El guardaespaldas se acercó a ella con un gran ramo de flores y una caja de chocolates cuando acabaron de rodar una escena—. Me he asegurado su procedencia y he preguntado al repartidor toda la información posible. Es seguro, no hay peligro.
La chica asintió, era por su seguridad y lo entendía.
—¿Has leído la nota? —se interesó al ver las flores y el gran sobre blanco que había entre ellas.
—No ha sido necesario, había otra que sí he leído más informativa. —Se la dio para que la leyera si quería—. Con eso y con las preguntas ha sido suficiente.
Aprovechando que no le tocaba rodar ninguna escena en unos minutos, ya que tocaban unas en las que su personaje no estaba, cogió las flores y las llevó al que era su camerino para poder leer las notas con tranquilidad y en la intimidad.
La curiosidad le pudo, por lo que primero leyó la que el guardaespaldas no había visto para no invadir su privacidad y sonrió sin poder evitarlo.
Aunque estemos a miles de kilómetros de distancia, eso no es un impedimento para no felicitarte por San Valentín, babygirl. Gracias por ser una de las mejores cosas que me han pasado nunca. Espero que esté sea el primero y el último que pasamos separados.
Te quiero y te echo mucho de menos.
Jiyong contuvo las lágrimas de emoción. Aunque estaba sola y nadie la vería llorar, no quería hacerlo cuando en poco debería ir a volver a rodar. No sabía cómo lo había hecho, porque tal y como ponía la nota estaban muy lejos el uno del otro, pero le había enviado un detalle para que se supiera que estaba ahí y que la echaba de menos.
La había sorprendido, no se lo esperaba para nada y él no se lo había comentado en la videollamada, ni siquiera le había dado una pista o lo había insinuado.
Como sabía que estaría muy ocupado con los preparativos antes del concierto, no le dijo nada ni le envió un mensaje, ya hablarían más tarde, porque así habían quedado aunque fuese por mensajes, y ya se lo agradecería, pero sí hizo una fotografía para poder tener el recuerdo.
Antes de marcharse de su camerino leyó la otra nota y alzó una ceja al ver que era de un papel oficial de JYPE conforme se aseguraba que era un regalo permitido y que no había peligro. Eso solo quería decir una cosa, una de sus amigas estaba detrás de eso, lo más probable era que fuese Sana que era la que mejor se llevaba con Chan, ella había sido la que había mediado para que le llegase el regalo y que supiesen dónde enviarlo.
Más tarde hablaría con ella, pero no podía distraerse tenía que centrare en interpretar sus escenas acorde al personaje y que fuese fluido y natural.
Lo consiguió en las siguientes escenas con el resto de sus compañeros, aunque no podía dejar de pensar en Chan y estaba más distraída de lo que debería.
—Flores y chocolate —dijo Minho en la pausa que tenían para comer—, ¿algo que contarnos, Jiyong?
—Eso, ¿algo que debamos saber? —siguió la broma Eunchae—, porque por tu sonrisa...
—Hay confianza, puedes contarnos lo que quieras y si hay alguien que haya ocupado tu corazón —murmuró Dohwan con una gran sonrisa—. No va a salir de aquí.
—No hay nada que contar —mintió. Por mucho que se hubieran convertido en sus amigos, no iba a confesar algo así delante de tanta gente, podría haber gente indiscreta escuchando y eso podía perjudicar a Chan.
—No seas tan misteriosa, ¿es un regalo de San Valentín? —siguió interesándose Minho y le guiñó un ojo.
—No de la forma que creéis —explicó intentando sonar lo más convincente que pudo—. Os comenté que voy a debutar como idol con un dueto. —Los tres asintieron, se habían alegrado mucho cuando se lo había contado —. Es un regalo de mis amigas para desearme suerte con todo lo que viene y seguir apoyándome.
—Siempre hablas de ellas muy bien —remarcó Eunchae—, y me estoy convirtiendo en una gran fan porque siempre pones su música en descansos.
—No voy a disculparme por eso —negó con la cabeza mientras se reía—. Ya os lo, comenté, si queréis un disco firmado, podéis decírmelo y os lo consigo. Al igual que puedo organizar una comida o cena para que os conozcáis. —Miró a Dohwan—. Y hacerlo antes de que te vayas al servicio militar.
—Eso estaría genial.
Siguieron hablando de otras cosas y cuando un miembro del staff se acercó con una botella de agua para Jiyong esta le sonrío como agradecimiento, estaba sedienta.
—¿Tenemos que volver ya? —preguntó al ver que se la quedaba mirando de forma fija para después de beber un largo trago de agua—. ¿Va todo bien?
Empezaba a sentirse incómoda por lo que se levantó para alejarse sin saber bien la razón y ponerse más cerca de Minho y Dohwan.
—¿Es que no te acuerdas de mí? —pronunció en voz muy baja sin dejar de mirarla—. Yo que he estado ahí desde el primer momento apoyándote, ¿es así cómo me lo agradeces? —Eso hizo saltar las alarmas de los dos actores que estaban ahí, poniéndose delante de ella para protegerla en un acto instintivo—. No puedes alejarme para siempre, ¡me necesitas! ¡Me necesitas, Jiyong! —acabó por gritar.
Jiyong empezó a temblar de los nervios, al mirarlo de nuevo lo había reconocido. No sabía cómo había podido llegar hasta ella saltándose todos las medidas de seguridad que había, haciéndose pasar por un miembro del staff.
¿Cuánto tiempo llevaba trabajando ahí sin que se diera cuenta? ¿Y si había estado mucho tiempo y la vigilaba?
—Avisa a seguridad —le ordenó Minho a Eunchae.
Entre Dohwan y él lo retuvieron para que no se marchase, no antes que la situación se aclarase, porque era lo que quería, huir. Se había arriesgado mucho al abordarla delante de otras personas.
—¿Escudándote detrás de alguien? —se mofó el sasaeng—. ¿Es él el que te ha mandado las flores? ¿Es con él con el que me engañas, Jiyong? Porque ya te dije que nada ni nadie va a separarnos, que no lo voy a permitir. ¡Eres mía!
Jiyong estaba bloqueada, no sabía qué hacer o decir, solo podía pensar en que quizá la había estado vigilando desde que habían retomado las grabaciones, que no había estado segura, que solo había sido una falsa sensación.
La botella le cayó de las manos y empezó a notar la visión borrosa, algo no iba bien. No podía centrarse en nada, todo le daba vueltas y se estaba mareando.
—¡Jiyong! —escuchó que gritaba alguien que no supo reconocer.
Porque todo se volvió negro.
Bueno, ya sabéis qué artículo vio Chan de Jiyong, porque sí, este incidente se ha filtrado a la prensa (se verá en el siguiente, las reacciones y eso, también cómo le va a sentar a Chan no poder estar con ella con algo así, etc.).
Por desgracia, este incidente está inspirado en un caso que sucedió en la vida real a Yunho de TVXQ que un anti le dio una bebida que contenía pegamento y pudo haber acabado muy mal.
Nos leemos el domingo, espero que os haya gustado :)
Por cierto, mucha veces hago preguntas en mi tablón de anuncios de aquí, o aviso cuando subiré, así que recomiendo que me sigáis.
Muchos besos xx
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