Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

이십오. real life

▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂






Chan estaba agotado, más de lo normal en él, y eso ya era mucho decir.

Irse de gira antes de tiempo no entraba en sus planes, no porque no quisiera ir, adoraba hacerlo y poder conocer mejor a los fans internacionales, era solo que no creía que fuese el mejor momento para hacerlo.

Con todo lo del tema de Jiyong tan reciente, le apetecía estar a su lado, apoyarla, hacerle ver que podía seguir contando con él, que la cuidaría y protegería si se dejaba. Quería estar con ella hasta que todo se solucionase de manera definitiva, hasta que ese individuo dejase de amargarle la vida a la actriz y recibiera su merecido.

Pero habían tenido que irse de gira para evitar rumores antes de tiempo, en el caso de que empezasen ya que por el momento solo mencionaban que tenían una bonita amistad, al igual que muchos otros idol, y que la cláusula anticitas quedase obsoleta.

Antes de debutar, y poco después de hacerlo, nunca le había importado la cláusula, tenía muy claro que no iba a fallar en ese sentido, que no les iba a fallar a sus miembros con una, tontería así, estaba por completo centrado en su trabajo, era lo único que le importaba junto al bienestar de los que ya consideraba su propia familia.

Con el tiempo había empezado a ver las cosas con una perspectiva un poco distinta, no creía que por estar enamorado y tener pareja dejase de estar centrado en el trabajo, lo hacía incluso más que al principio para no decepcionar a los fans que llevaban años acompañándolos y apoyándolos.

No se arrepentía de estar con Jiyong, ya ni tenía dudas, no como al principio que no había podido dejar de darle vueltas a si estaba haciendo lo correcto, a si era un riesgo demasiado grande que estaba corriendo por ser egoísta. Estaba muy muy seguro de lo que tenía con ella, y si para evitar un escándalo había tenido que irse de gira antes de tiempo, lo aceptaba.

Una vez que regresase a Corea no tendría que preocuparse tanto, seguiría yendo con mucho cuidado para que no los pillasen, porque no estaba preparado para que lo hicieran, porque si eso ocurría... No quería imaginárselo.

La presión a la que se verían sometidos, sobre todo Jiyong, sería demasiada. La culparían de todo, se inventarían cualquier excusa para achacarle a ella de un mal rendimiento en una actuación, que no estaba centrado como debería o que había dejado de lado a sus fans cuando nada de eso sería cierto.

Y lo último que necesitaba Jiyong, con todo lo que tenía encima, era algo así, no quería que tuviera más presión porque no sabía cómo reaccionaría y él quería protegerla de todo lo que pudiera. Por eso seguirían yendo con mucho cuidado siendo igual de discretos que siempre.

Él solo quería seguir tal y como estaba con ella, igual de bien, sin más preocupaciones.

No quería tener que preocuparse por algo tan simple como disfrutar de su vida privada, porque era eso, su vida privada. Si los descubrían, estarían invadiendo su intimidad solo por más visitas en sus webs. Tampoco quería tener que disculparse por algo tan simple como estar enamorado y ser feliz.

—Hola, babygirl —la saludó Chan al verla en la videollamada—. Buenos días para ti.

Hola, Channie, ¿cómo estás? —Jiyong sonrió y lo observó bien, fijándose en los máximos detalles posibles—. Tienes cara de cansado, ¿ya estás durmiendo bien?

El aludido rio, siempre le preguntaba lo mismo, se preocupaba por si estaba descansando bien y si lo hacía, al igual que si estaba comiendo lo suficiente.

—Estoy durmiendo bien, no tienes que preocuparte.

¿Seguro? —insistió y lo señaló con un dedo—. No me hagas preguntárselo a los demás, ellos seguro que son sinceros.

—¿Tienes los números de todos?

Sí, ¿te sorprende?

Al principio solo había tenido los de Hyunjin y Felix, que era con los que mejor se llevaba del grupo además de Chan. Con ellos dos había empezado a hablar por instagram y a raíz de eso, y de ser MC con el primero, habían acabado por darse el número de teléfono. Con el paso de las semanas, y al relacionarse y verse cada vez más con los demás miembros ya los consideraba también sus amigos y tenía sus números.

—No, para nada, a todos les caes muy bien. —Chan aprovechó también para mirarla bien—. Tú también tienes cara de cansada, ¿has dormido mal?

No, he dormido bien, pero poco —reconoció para luego bostezar—. Perdón, es que acabo de despertarme.

Babygirl, te he dicho más de una vez que si no te van bien los horarios, no pasa nada, quizá quieres dormir más.

Ambos estaban haciendo un gran esfuerzo para intentar sacar tiempo para hablar pese a la gran diferencia horaria. Al estar Chan en Estados Unidos la mayor parte de veces ni estaban en el mismo día, por lo que era aún más complicado, por no mencionar que los dos estaban hasta arriba de trabajo y obligaciones.

Tenía que levantarme dentro de poco igualmente, hoy ruedo durante todo el día —confesó haciendo un pequeño mohín que a Chan le pareció adorable—. Cada vez queda menos para que se acabe el drama...

—¿Y cómo te sientes?

Por lo que habían hablado con anterioridad, cada vez que estaba a punto de acabarse un proyecto, a Jiyong le entraba la nostalgia. Al conocerla como lo hacía, y sabiendo lo bien que había conectado con el resto del reparto, esta vez no iba a ser la excepción.

Es una sensación rara, siempre es así, es como que te da pena pero te alegras al mismo tiempo. Aunque bueno, luego quedará algunas promociones con ellos, entrevistas y esas cosas antes del estreno...

Chan asintió y volvió a mirarla, haciendo que ambos se rieran sin saber bien la razón.

—Jiyong.

Dime.

—Feliz San Valentín, babygirl —murmuró y acabó por sonreír de nuevo al ver cómo a ella le brillaba la mirada al escucharlo, tanto que se veía incluso a través de la pantalla—. Me sabe muy mal no poder estar ahí contigo para celebrarlo.

Pero donde estás tú aún es día 13, Channie, ¿para qué me felicitas antes de tiempo? —dijo intentando restarle importancia y disimular su reacción.

—Porque en Corea ya es 14 —comentó con naturalidad—, y mi corazón está ahí también, así que, feliz San Valentín.

¿Tu corazón? —repitió Jiyong con el ceño fruncido—. Como digas que soy yo me voy a reír mucho.

—¿Por qué vas a reírte?

¡Es demasiado cursi! —admitió entre risas, incapaz de controlarse—. No hace falta que me digas este tipo de cosas, no son necesarias.

—Yo que intentaba ser romántico... —Se hizo el molesto, apretando un poco los labios sin dejar de mirarla. Se notaba que se acababa de despertar, aún tenía un poco de cara de dormida. Se habían despertado juntos varias veces, reconocía bien esa expresión, y al hacerlo se había dado cuenta de que adoraba que  Jiyong fuese lo primero que veía por las mañanas—. Eres preciosa.

Te dije que no me piropeases —protestó ella—. Si yo no puedo hacerlo, tú tampoco. Igualdad de condiciones.

—No es lo mismo.

Para mí lo es —rebatió de inmediato—. Además, ¿cómo puedes decir que soy preciosa con esta cara? Acabo de despertarme, estoy hinchada.

—De mis looks preferidos en ti, me encanta verte así —admitió con mucha sinceridad—. No me cansaría nunca de por verte así todas las mañanas.

Jiyong se sonrojó al escucharlo, eso sí le había parecido muy romántico. Chan siempre que podía le recordaba lo guapa que era incluso cuando no se arreglaba o se acababa de despertar. No había día que no se lo dijera.

Y a Jiyong le encantaba.

Bobo —bisbiseó—. No me digas esas cosas.

—¿Por qué no?

Porque es injusto. —Se incorporó un poco en la cama—. A mí no me dejas decirte lo guapo que eres o lo que pienso, pero tú sí lo haces. —Dalgom ladró y se acurrucó al lado de Jiyong—. ¿Ves? Dalgomie está de acuerdo conmigo.

—¿Eso de ahí es uno de los muñecos de merch que te di de los skzoo? —preguntó y empezó a reírse.

No cambies de tema —gruñó poniéndose seria—. No es justo, Channie.

—Jiyong...

No voy a cambiar de opinión —aseguró—. Yo también quiero poder decirte lo guapo que eres siempre que pueda.

Chan suspiró, esa conversación era más que habitual entre los dos, pero es que parecía que no entendía que no se podía comparar. Mientras que ella junto a su gemela, porque eran iguales, estaban consideradas de los personalidades más bellas del país, ya que cumplían con casi todos los estándares coreanos, él...

Él no se podía comparar con ella.

—¿Me vas a responder lo del skzoo?

¿Por qué no te ves cómo el resto del mundo hacemos, Christopher? —Jiyong negó con la cabeza, sabiendo que no conseguiría nada, que nunca lo hacía, que hasta que él no se lo creyera, por mucho que le dijera la verdad no se la creería—. Y sí, Dalgom lo agarró de mi cama cuando lo estaba organizando y no puedo sacárselo, le encanta.

—Hyunjin estará contento —se rio Chan—. Es justo el suyo.

Dalgom ha elegido a su bias —siguió la broma Jiyong.

—No soy ni el bias de tu perro... —Chan hizo un pequeño puchero—. Yo creía que le caía bien.

Pobre Dalgomie —lo defendió—. Además, a tu skzoo no le hubiera dejado, me encanta. No duermo con él porque ya lo hago con el peluche que me regalaste. —Y más después de haberle pedido que lo rociase con su perfume para no echarlo tanto de menos—. Y piensa algo, Channie, tú eres mi bias.

—No eres objetiva, babygirl.

Sí lo soy —argumentó muy convencida—. Mi bias es el mejor líder de la industria, atento, trabajador, un genio musical, con una gran voz...

—Jiyong... —la interrumpió para que no siguiera porque ya se estaba empezando a sonrojar con tantos elogios.

Hoy tenéis un concierto, ¿no?

—Sí, tengo muchas ganas, todos los chicos estamos emocionados.

Quiero que me pases fotos de todo lo que puedas —pidió con una gran sonrisa—. A ver qué look llevas, vuestros estilistas llevan muchos meses luciéndose contigo.

—¿Por qué dices eso?

Sabes muy bien por lo que lo digo —rio Jiyong—. Tu ropa da muchas alegrías a STAY últimamente... —Chan se sonrojó aún más y le entró la timidez. No era ajeno a según qué comentarios que hacía STAY por la ropa que llevaba, pero que Jiyong lo dijera se le hacía extraño—. ¿Cómo va esa canción de la que aún no puedo saber nada?

Chan negó con la cabeza, Jiyong se lo preguntaba mucho, casi a diario. Ella no entendía ese misterio alrededor de una canción, no cuando le había enseñado más de una vez bases que empezaba, melodías que se le ocurrían de repente y grababa para no olvidarlas y que luego no usaba, entre otras ideas que no acababa de finalizar.

—Jiyong...

¿Qué? —se hizo la inocente—. Al final me pensaré que me estás escribiendo una canción a mí y que por eso te haces tanto el interesante.

Chan disimuló lo mejor que pudo su reacción, aunque lo hubiera dicho en broma acababa de adivinarlo. Sí, estaba haciéndole una canción para ella, o mejor dicho, siendo ella su musa e inspiración.

Estaba aprovechando todo lo que había grabado de su voz mientras le enseñaba ciertas cosas en sus citas en el estudio. Lo había guardado todo, no había borrado ni una pista de audio de ella riéndose, ella tarareando alguna melodía, ella cantando alguna parte de una canción que le gustaba, ya fuese de ellos o de algún otro grupo.

Lo estaba usando todo para crear una buena base y que no se la reconociera, distorsionando lo máximo posible su voz pero sin perder la esencia de lo que era.

Cuando se lo había comentado a Jisung y Changbin, primero se rieron de él, porque si no lo hubieran hecho no serían ellos, pero había sido solo unos segundos, luego se habían puesto en su faceta más profesional, sugiriéndole cambios, aportando ideas y ayudándolo con la letra para que expresase todo lo que quería. Sería un proceso largo, porque quería que quedase perfecta.

—¿Te gustaría que te escribiera una canción? —preguntó con diversión en un intento para desviar la atención.

Jiyong apretó los labios y acabó por asentir.

Sí, me gustaría —confesó—, sé que sería una muy bonita y que no me decepcionaría. Además, lo más probable es que me acabase emocionando.

—Hagamos una cosa —sugirió el idol—. Cuando vuelva a Corea, haremos una canción los dos juntos.

Channie, yo no sé componer.

—Pero aportas grandes ideas, la haremos juntos y si sale bien...

Si es una canción tuya va a salir bien, eres un genio —lo interrumpió.

—A lo que me refiero es que quieren que saques más canciones, ¿no? —explicó él muy serio—. Una vez que con JYP saquéis el dueto de forma oficial quieren que tú debutes en solitario.

—Aún no he aceptado eso, y para eso no me han obligado. No aún. Quizá no ocurre, nunca se sabe.

—A mí me encantaría ser el que compusiera tu primera canción en solitario —comentó sabiendo que lo que acababa de decir Jiyong era más fruto de las inseguridades que tenía con respecto a lo que podía suponer, que lo que pensaba—, o al menos ayudar con la creación.

Sabes que si dependiera de mí...

—Todo es hablarlo —finalizó él, convencido de que le dejarían, o les dejarían si contaba a los otros dos miembros de 3RACHA—. Hablando de JYP, ¿alguna novedad con respecto a lo que me contaste?

Jiyong le había contado todas sus preocupaciones con respeto a ese tema, sincerándose con él y confesándole sus temores.

Tal y como habían dicho sus amigas, JYP le había dicho que actuarían juntos en unos premios, que ahí haría su debut oficial, y que si había una respuesta positiva, seguramente también hicieran una semana de promociones en los shows en los que ella solía ser la MC.

No había podido negarse, no cuando él era quién era, solo era el dueto, ni siquiera tenía recorrido en el mundo ni experiencia y todo lo que le proponía era una gran oportunidad.

Además, por fechas todo cuadraba a la perfección, sería poco después de que el MV saliera, habría mucha expectación e interés.

Estoy muy nerviosa con eso...

Babygirl, no lo estés, seguro que todo irá bien.

¿Y si no es así? —verbalizó sus dudas—. ¿Y si no estoy a la altura de lo que se espera de mí?

Había estado ensayando a altas horas de la madrugada, intentando perfeccionar al máximo la coreografía, cantando mientras la bailaba para no ahogarse ni desafinar, le había pedido ayuda a sus amigas que eran Main Dancer en sus grupos para que los pasos de baile se viesen fluidos y naturales...

—Jiyong, no te exijas tanto a ti misma —comentó con dulzura, deseando poder abrazarla para tranquilizarla—. Sí vas a estar a la altura, si no fuera así, JYP te lo hubiera dicho, o se hubiese echado atrás. Es una persona muy clara con lo que quiere y cómo lo quiere, si algo no le gusta, lo dice.

No era lo que esperaba para mí, ¿sabes? —se sinceró—. O al menos no en los últimos años, no me imaginaba acabar siendo idol, no después de todo lo que pasó. —Cerró los ojo unos segundos—. Era mi sueño hace unos años, y ahora solo puedo pensar en que no quiero decepcionar a nadie, no lo estoy disfrutando.

Chan la miró fijamente, intentando transmitirle con la mirada, y a través de una pantalla, lo que pensaba, que él confiaba en ella, que todo saldría bien y que su debut sería un éxito. En este momento odiaba estar tan lejos de ella.

—Todo irá bien.

¿Tan seguro estás?

—Sí, porque sé cómo eres y el talento que tienes, babygirl. Soy tu mayor fan.

Jisoo se va a enfadar si te escucha decir eso —se rio un poco más animada—. Ella dice que lo es, al igual que yo de ella.

—Entonces diré que soy uno de tus mayores fans —corrigió—. Hoy mis padres me han mandado un vídeo de Berry, ¿querrás que te lo pase? Es muy divertido.

¡Sí! —pidió con una gran sonrisa—. Me pareció adorable, me dieron muchas ganas de achucharla.

Antes de marcharse de gira, Chan había hecho una videollamada con su familia para que así conocieran un poco a Jiyong.

No le habían presionado ni insistido para ello, pero sabía que su madre iba a agradecer el gesto, ella lo echaba mucho de menos y no se acostumbraba a no tenerlo cerca, por lo que presentarle a su pareja, aunque fuese por videollamada, era un buen intento de normalizar la situación.

Jiyong al principio había estado muy nerviosa, se lo había notado y había intentado calmarla de forma disimulada, entrelazando su mano con la suya. Al final, había ido todo muy bien, sus padres habían quedado encantados con ella, se lo habían dicho cuando habían vuelto a hablar, y se alegraban mucho de que fuera feliz y hubiera encontrado a una persona que lo entendía y comprendía.

—Es que lo es, tengo muchas ganas de verla, espero que se siga acordando de mí.

Jiyong miró el reloj y esbozó una sonrisa triste al darse cuenta de la hora que era.

Channie, tengo que colgar —dijo sin muchas ganas—. Tengo que adecentarme un poco, en media hora llegará un coche para llevarme a rodar.

—Lo entiendo, no te preocupes —concedió—. Gracias por haberte levantado antes para que pudiéramos hablar.

No las des, yo encantada de hacerlo.

—Te echo de menos, babygirl.

Y yo a ti, lo sabes —murmuró y sonrió sin que se le vieran los dientes. Aún quedaba mucho para que se vieran y ya le estaba costando saberse sobreponer—. Te echo mucho de menos, Channie.

—Feliz San Valentín —volvió a decir para acabar la conversación—. Ten un muy buen día.

Y tú también, que vaya muy bien el concierto. Aunque bueno, iremos hablando por mensajes, ¿no?

—Por supuesto. —Chan sonrió también un poco triste de tener que despedirse, se le había hecho la conversación muy corta—. Te quiero.

Jiyong le lanzó un beso, no hacía falta que dijera que ella también lo quería, ambos lo sabían.

Una vez que colgó, Chan le mandó varios menajes a Sana. Había acordado con su mejor amiga que sería su ayuda para que Jiyong recibiese sus regalos de San Valentín, porque si se pensaba que por estar en la otra parte del mundo no iba a darle algo, se equivocaba.

Una vez que lo hizo, se centró en seguir el horario que tenía, preocupándose de que los demás estuvieran bien, que no faltase nada y comprobando que nada se saliera de su control para el concierto.

Después de hacer el ensayo general, hacerse una fotografía y subirla a instagram, y mientras estaban comiendo algo para poder afrontar el concierto con fuerza, Chan se sentó para mirar el móvil y saber si Sana había cumplido su parte.

—Y en breve va a tener esa sonrisa de bobo enamorado cuando entre al chat de cierta persona—se burló Jisung al verlo.

Pero no era así, Chan frunció el ceño y entrecerró los ojos.

—Hyung, ¿qué pasa? —se preocupó de inmediato Changbin—. ¿Alguna mala noticia?

Chan no supo qué decir, no encontraba las palabras, solo le enseñó el móvil para que viera la noticia que acababa de salir de Jiyong.

















Uff, menuda semana más dura esta, ¿no? Solo espero que todo salga bien, de verdad lo espero, y no diré nada más del tema porque estoy muy muy cabreada.

Espero que el capítulo os anime un poco con la situación y os distraiga aunque sea unos minutos.

Y sí, os dejo con la intriga hahahaha.

Muchos besos, nos leemos el martes/miércoles :)

Por cierto, el edit, como siempre, está hecho por mi querida Eclxqze


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro