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Chan estaba muy preocupado, como pocas veces lo había estado en toda su carrera, solo comparándose con momentos muy puntuales que no quería recordar.

Las noticias que reunían todos los rumores, indicios y pistas de su relación no le había tomado por sorpresa, se la esperaba más pronto que tarde, sobre todo porque llevaba varias semanas viéndolo por redes sociales, porque él lo miraba todo, se aseguraba de saber lo que ocurría, de lo que hablaban sus fans y si se metían en polémicas, y ese era un tema bastante popular y que se comentaba bastante en redes.

Al principio se había agobiado al verlo, aunque lo había disimulado lo mejor que había podido porque ni él ni Jiyong habían hecho nada fuera de lo normal, o nada que no estuvieran haciendo hasta el momento, para que los rumores cobrasen tanta fuerza y tan de repente. Sí, desde que había salido el MV había algunos casos puntuales que los había shippeado, como les había ocurrido en el pasado con otras idols en su caso, o en el caso de Jiyong con idols y actores, pero nada que ver con lo se había generado en tan poco tiempo. Muchas de las evidencias de las que hablaban ni lo eran, y otras que sí lo eran ni se habían dado cuenta, porque se dejaban llevar o no pensaban por lo cómodos que estaban.

Lo del reloj siempre había sido un poco sospechoso, eso era cierto, pero era un riesgo que había tomado queriendo, porque había sido una de las formas con las que se había sentido más conectado con Jiyong pese a estar en la otra punta del mundo mientras estaba de gira, al tocarlo, mirarlo y llevarlo se sentía cerca de ella, como si la distancia no fuese tanta. Además, se podía disimular en cierta forma, no serían ni los primeros ni los últimos personajes conocidos que tenían un accesorio similar de una marca popular.

Pero había otras cosas con las que deberían haber sido más cuidadosos, como lo de la película, ahí se habían equivocado por completo. Esos detalles no podían pasarlos por alto porque, tal y como había pasado, la gente los interpretaba como lo que eran, evidencias de que la habían visto juntos en una de sus citas. En el momento, ni se había dado cuenta, se sentía tan cómodo hablando con STAY en el Chan's Room que le salió de forma natural. No fue hasta que recibió un mensaje de parte de los demás chicos en los que vio que había metido la pata por completo, que eso generaría muchos comentarios porque Jiyong había hablado de la misma película hacía nada. Así había sido, y aunque lo hubieran intentado arreglar los demás, más o menos, no había surtido el efecto que pretendía, creían que la habían visto todos juntos y era justo lo que había pasado.

Su agobio, en realidad, no era por él. A Chan le daba bastante igual lo que le pasase, o si los comentarios que recibía no eran muy buenos. No le importaba. Ya estaba acostumbrado a que lo juzgasen por cosas de las que no tenía la culpa, que lo criticasen y juzgasen sin motivos lógicos, y sabía cómo gestionarlo, en cierto modo, para que no le afectase mucho o más de lo que debería. Su agobio era por las posibles consecuencias que podía tener para Stray Kids, a veces cuando se confirmaban relaciones entre idols y sus parejas se les exigía a esos miembros que se fueran del grupo, se hacían campañas para eso, se criticaba cualquier decisión, se les reprochaba que no estaban al cien por cien, y él era el líder... No podía permitir que eso sucediera, no quería más polémicas que lo envolvieran.

También su agobio era por Jiyong y por cómo se lo estaba tomando, porque también había comentarios de odio hacia ella, aún sin haber confirmado su relación, algunas netiziens la tachaban de aprovechada, de que no era adecuada para él y otras cosas así que eran mentiras y que odio sin razón alguna.

Chan se negaba a que ella tuviese esa carga, no quería que por su culpa, porque de forma indirecta lo era, Jiyong pasase un mal momento o empezase a recibir acoso en redes sociales. Ya había tenido suficiente con el tema del sasaeng, aún seguía sufriendo las secuelas de eso y seguía yendo a terapia para superarlo, no quería que tuviese más cargas.

Al verlo todo, se había dado cuenta de que la mayoría de comentarios no eran malos, mucha gente los apoyaba en el caso de que fuesen pareja, y habían hecho varios hashtag de apoyo hacia ambos, no solo hacia él, en los que se habían unido varios fandom, no solo STAY, también ONCE y BLINK (influenciados en parte por la buena relación que tenía Jiyong con las miembros) pidiendo respeto y dándoles amor y cariño-

Pero quizá eso no era suficiente.

Sus managers no les habían reñido, tampoco podían hacerlo, eran libres de hacer lo que quisieran en ese sentido, no tenían prohibido tener citas ni pareja, solo que tuviesen cuidado. Tampoco lo había hecho JY Park, ni otros directivos de la empresa, más que acostumbrados a que surgieran teorías locas sin fundamento ni pruebas reales entre idols de la empresa.

Estaban siendo unos días duros, y no ayudaba que en sus últimos Chan's Room algunos comentarios fueran preguntas relacionadas con eso, preguntándole si estaba con Jiyong, que si el Jiychan era real hiciera tal cosa u otra: como tocar la mesa, tocarse la gorra... Gestos que se hacían de forma involuntaria pero que esas personas lo veían como pruebas irrefutables que confirmaban sus preguntas cuando eran solo simples casualidades.

Pese a todo eso, no podía flaquear, tenía que ser fuerte, sobre todo para Jiyong, para que si ella lo necesitaba, ser su apoyo y que pudiese desahogarse si le hacía falta.

—Babygirl, ¿cómo ha ido? —Chan se levantó para poder abrazarla solo verla. Habían quedado en su estudio una vez que ella acabase con lo que tenía que hacer. Era mucho más seguro para ambos tener citas en el edificio de la empresa, ahí no había ojos curiosos—. ¿Te has quedado más tranquila?

Gracias a Nayeon, que conocía a mucha gente del mundo del espectáculo, Jiyong se había reunido con Hyunah para que pudiese aconsejarla para poder afrontar bien la situación y que su salud mental no se viese afectada en el proceso. La idol había sufrido las consecuencias de tener pareja cuando se había destapado su relación, ella y Dawn llevaban años antes de que se hiciera público, y su empresa acabó por rescindir su contrato por el supuesto escándalo. Tuvieron suerte, PSYnation los había fichado y tenían mucha más libertad en ese sentido, disfrutaban de su amor y lo hacían también en redes sociales, normalizando la situación y allanando el camino para los que vinieran detrás de ellos.

Eran lo que cualquier idol esperaba poder conseguir con su pareja si todo fuera mucho más fácil de lo que era.

—Me ha dado muy buenos conejos —admitió y sonrió al ver la forma con la que la estaba mirando, como si fuera imprescindible para él y una de las cosas más bonitas que había visto jamás—. Iremos hablando por mensajes, me ha dicho que puedo preguntarle a cualquier hora, que ella me ayudará en todo lo que pueda y que no me lo calle, que a ella le hubiera gustado tener a alguien que la comprendiera cuando todo salió y quiere ser esa persona para mí. Sé que va a ser una buena unnie y amiga.

—Eso es bueno, ¿te ha tranquilizado?

—No, Channie, no —admitió y frunció el ceño al pensar en ello—. Mi guardaespaldas me ha dicho que nos seguían varios reporteros, esperando para hacer una foto que no iba a llegar porque no había quedado contigo. Menos mal que Nayeon y Jihyo venían conmigo, y se podía interpretar como una quedada de amigas, que si no...

—Se pasará, Jiyong. Es solo la atención del momento porque hay rumores y noticias.

—¿Seguro que se pasará? —Bufó y se apartó el cabello de la cara en un gesto nervioso—. Estoy más que convencida de que Dispatch nos va a seguir durante muchísimo tiempo, quizá hasta que consiga lo que quiere.

—Entonces seremos mucho más cuidadosos, babygirl. —La abrazó y le besó la mejilla para darle apoyo—. Si hemos podido hacerlo estos meses, podemos seguir haciéndolo.

—Ojalá poder ser tan optimista como tú. —Cerró los ojos y se dejó acariciar la espalda por él—. No me gusta la situación.

—A mí tampoco —reconoció—, pero no podemos hacer nada para cambiarla, ¿o crees que sí?

Chan la examinó con mucha atención, buscando en la mirada de Jiyong algún tipo de duda o remordimiento. Por muy enamorado que estuviera de ella, si veía algo de eso en su mirada, se lo preguntaría, si no lo tenía claro, no la obligaría a que siguieran juntos. Chan solo quería que Jiyong fuera feliz, y si para eso tenían que separarse, lo entendería.

—No, no podemos —afirmó en voz más baja—. Solo es que a veces pienso que me gustaría...

—¿Qué te gustaría, babygirl? —insistió al ver que se había callado.

—Poder ser como las parejas normales —bisbiseó en voz tan baja que Chan casi no la escuchó—. Si queremos ir al cine poder ir, pasear por las calles, tener citas en el exterior... —Suspiró—. Ese tipo de cosas.

—Seguro que con tiempo podremos hacerlo, es solo tener paciencia.

—Sí, paciencia. —Jiyong esbozó una sonrisa sin muchas ganas, de esas en las que no se veían los dientes, y fue a sentarse a una de las sillas del estudio—. No quiero molestarte, sigue trabajando en lo que hacías, intentaré no hacer ruido y...

Antes de que pudiera hacerlo, Chan la volvió a abrazar con fuerza intentando reconfortarla de algún modo. Odiaba verla así, tan decaída, tan poco ella. Si fuera por él, haría lo que estuviese en su mano para poder verla como siempre, con esa sonrisa tan contagiosa y ese carácter tan extrovertido.

—Jiyong, te quiero.

Eso le sacó una sonrisa a la aludida, una que hizo que los ojos le brillasen un poco durante unos segundos. Podía habérselo dicho muchas veces, pero nunca se cansaba de escuchar esas palabras de Chan.

—Sé que lo haces, Channie —dijo aún con un poco de tristeza en la voz. Si fuera otra persona la que estuviera delante, lo ocultaría, pero con él ya no tenía secretos—. Es solo que estoy... agobiada. Hoy no es un buen día para mí —resumió—. Dejémoslo ahí.

—Yo también lo estoy, pero agobiarnos no va a servirnos de nada. Es solo lo que he dicho, tener paciencia y pensar que se pasará. Todo acaba pasando. —Como aún la estaba abrazando, la llevó hacia la silla en la que él estaba sentado para sentarse primero él, y luego ella encima—. Ya lo sabes, babygirl, me gusta que estés encima.

—¡Christopher! —protestó y le dio un pequeño golpe en el hombro—. Eso suena terriblemente mal, no puedes decir esas cosas.

—Ha sido queriendo —reconoció entre risas—, pero ya has entendido a lo que me refería, ¿o no?

—Sí, según tus propias palabras, así te concentras mejor... —Puso los ojos en blanco unos instantes—. Lo que es falso, solo te gusta tenerme cerca.

—Exacto, me ayuda a concentrarme mejor, y también me gusta tenerte cerca —afirmó muy seguro y le besó el cuello. Era incapaz de resistirse a hacerlo—. Aunque si soy sincero...

—Sorpréndeme —pidió—. Aunque por el comentario que has hecho antes me espero cualquier cosa.

—En realidad no me apetece mucho trabajar. —Al escucharlo, Jiyong alzo una ceja, eso era nuevo, pocas veces él reconocía algo así y de forma tan abierta—. He estado pensando en que podríamos hacer otra cosa.

—¿El qué? —preguntó mientras giraba la cabeza para poder mirarlo a los ojos.

—¿Me prestas tu voz? —preguntó con una gran sonrisa en la que se le veían muy bien los hoyuelos.

—¿Para qué?

—Quiero que grabes varias canciones que tengo en borradores, para así hacer las demos, si a ti te parece bien, claro.

Una de las pocas cosas con las que Jiyong conseguía desconectar, además de la cocina y los videojuegos, era con la música, ya que aún quedaba mucho para que se rodase el drama en el que había obtenido el papel y sería la protagonista femenina. Desde que había salido la noticia había pasado aún más tiempo ensayando para su debut, pasando muchas más horas practicando los bailes, yendo a salas de música para perfeccionar las canciones y acabar por cantar otras, como muchas de las bandas sonoras de dramas que había hecho, o míticas que todo el mundo conocía.

—Chan... —Jiyong no supo qué decir, se limitó a acariciarle la mejilla con cariño—. No es necesario.

—Hazlo por mí, ¿por favor? —preguntó e hizo un pequeño puchero con los labios—. Necesito saber cómo van a quedar estas bases con la letra y saber si podrán ser canciones para sacar o no.

—Claro, porque no has podido pedírselo a otra persona, o a alguno de los niños que...

—¿He dicho alguna vez que adoro que también los llames así? —la interrumpió y le besó levemente los labios—. Me encanta que para ti también sean los niños.

—Nayeon se ríe de ello cuando me escucha, pero es culpa tuya, me lo has pegado, siempre los llamas así cuando hablamos y es inevitable.

—Nayeon aprovecha cualquier oportunidad para chinchar —le restó importancia Chan—. Te quiero.

—Lo has dicho antes, Channie.

—¿No puedo decirlo las veces que quiera? Porque es verdad.

—Va, te ayudaré —acabó por concluir después de volver a besarlo—, pero que sepas que estoy más que convencida de que seguro que quedaría mejor con la voz de Seungmin, por poner un ejemplo, él tiene una voz preciosa.

Durante la siguientes horas, Jiyong hizo todo lo que Chan le pidió musicalmente. Le puso voz a varias canciones que él tenía guardadas en sus memorias externas, aceptando las sugerencias que él le daba, volviendo a grabarlas cuando se cambiaba algo...

También, como tenían tiempo, y aprovechando que había una guitarra, Chan le enseñó algunos acordes y melodías, cumpliendo con su regalo de cumpleaños.

Y Jiyong desconectó, no pensó en nada que no fuera en lo bien que se lo estaba pasando y lo fácil que era todo junto a su pareja.

Eso no le pasó por alto a Chan, que estuvo muy pendiente de cómo le cambió la expresión a Jiyong, como se reía se forma más habitual, como sus ojos brillaban más... Y sonrió sin que ella lo viera, más que contento de haber conseguido lo que quería.

—¿Te vienes a dormir a nuestro dorm? —propuso mientras lo estaba recogiendo todo—. A los niños no les importa y mañana es día libre para todos. Podemos pedir cena, ver una película y...

—¿Estás seguro de eso? No sé yo si...

—Podemos ir por separado —intentó convencerla—. Tú con tu guardaespaldas con el coche de la empresa, los niños si saben que vas, te abrirán. Luego ya llegaré yo, intentaré tardar un poco por si acaso, para evitar especulaciones. Si te pones una sudadera no se te tiene que reconocer.

—Channie...

—¿Por favor? —volvió a pedir con su mejor mirada.

No se quedaría tranquilo si no lo hacía. En las últimas veces que se habían visto ya había estado preocupado, Jiyong ya le había dicho que estaba agobiada y que no le gustaba lo que estaba pasando, pero hoy había algo más, algo que no sabía bien cómo descifrar, y no quería dejarla sola, quería estar a su lado el máximo tiempo posible para que se sintiera mejor. Había reconocido que no era un buen día, quería estar ahí para ella, animarla, hacer todo lo posible para que se animase.

—¿Y si vienes tú a mi apartamento? —rebatió—. Es mucho más cómodo y...

—Va, babygirl, a los niños les encanta tenerte en casa —siguió intentando convencerla—. Podemos pasar todo el día de mañana juntos si así lo quieres, organizar algo entre todos y...

—Chan, ¿por qué estás tan insistente? —preguntó de forma directa Jiyong—. Normalmente no eres así.

—Estoy muy preocupado por ti —reconoció de forma simple—. No estás bien hoy, no me lo niegues porque lo has dicho. —Ella asintió—. Solo quiero ayudarte de la única forma que sé y... —Jiyong lo calló con un beso—. Estaba hablando, babygirl, no puedes callarme con un beso, es de mala educación —bromeó.

—Bobo —se quejó ella—. Muchas gracias.

—¿Eso es que vas a venir?

—Si así lo quieres, sí. Me apetece mucho estar contigo y con los niños —admitió—. Además, Hyunjin y yo estamos viendo un drama juntos, tenemos que seguirlo, se quedó en lo más interesante y como lo haya seguido sin mí...

—¿Solo vas a ir por Hyunjin?

—Y por Felix y sus brownies. ¿Por qué más?

Y esta vez el que la calló fue Chan con un beso, más que consciente de que lo estaba chinchando.

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Jiyong no supo cómo se había dejado convencer de forma tan fácil por Chan. Tal y como le había dicho no estaba teniendo un buen día, o de forma más concreta, no estaba teniendo unas buenas semanas.

Por mucho que haber hablado con Hyunah le hubiese servido, y le hubiera agradecido mucho su ayuda, la presión y el agobio que sentía no se iba de forma tan fácil.

No quería que, de nuevo, se le escapase de las manos el poder debutar por algo tan simple como ser feliz y estar enamorada. Años atrás no le había dolido tanto, sí, había sido duro, pero había acabado sobreponiéndose porque no lo había probado, no sabía bien lo que era estar en los escenarios con público delante. Esta vez era distinto, sí lo había hecho, aunque fuese con el dueto con JYP, y quería tener la oportunidad por ella misma y disfrutarla en solitario.

Agradecía todo lo que Chan estaba haciendo por ella para que estuviera mejor, pero no podía olvidar que él también tenía lo suyo, sus obligaciones como líder y no estaba dispuesta a que se centrase tanto en ella que no viese que, quizá, estar juntos también le perjudicaba.

Era una suerte que aún estuviera yendo al terapeuta para tratarse sobre lo del sasaeng y cómo le había influido en su vida y cómo superarlo. Se sentía cómoda y confiada para abrirse con otros temas, y era lo que había hecho, no guardándoselo para sí misma como en otras ocasiones.

—La semana que viene ya vas a empezar a rodar el MV delas canciones, ¿no? —preguntó Minho mientras estaban haciendo la cena.

Jiyong había llegado antes que Chan, tal y como lo habían hablado en el estudio, y los chicos al saber que iba a ir la habían recibido de forma disimulada y discreta para que nadie supiese que estaba ahí.

Como necesitaba desconectar, se había ofrecido para hacer la cena para todos, ya que era una de las formas con las que se desestresaba. A todos les había parecido una gran idea, pero se negaron a que lo hiciera ella sola, por lo que Minho la estaba ayudando, ya que era de los pocos que sabía cocinar sin quemar todo, y Hyunjin, que también se apañaba bastante en ese aspecto.

—Si no lo cambian, sí —murmuró en voz baja.

—¿Por qué deberían cambiarlo?

Jiyong no contestó, prefirió reservarse para sí que tenía dudas de que quizá lo posponían con todos los rumores que había. Quizá no querían que hubiese más, sobre todo porque las canciones estaban compuestas por 3RACHA. Sí, en cierto modo era publicidad, pero no era del todo la adecuada.

—¿Podremos venir a visitarte al set? —preguntó Hyunjin—. Yo quiero ir a darte apoyo, mandarte un coffetruck, casi siempre subes los que te mandan cuando estás rodando un drama, quiero que subas uno mío, o nuestro, podemos enviarlo entre todos.

—No lo sé, aunque no creo que sea lo mejor —dijo Jiyong prestando atención al fuego para que nada se quemase.

—Seguro que Chan hyung va, es decir, es uno de los compositores del tema, por norma los compositores están ahí por si no se ajusta a lo que la canción es —argumentó con mucha lógica—. Y si va él, iremos todos.

—¡Yo iré! —gritó Jisung desde el sofá—. Ya se lo hemos confirmado a nuestro manager y al director de los MV.

—¿Irá él y no yo? Eso es una traición muy grave, me duele el corazón. —Hizo un gesto muy dramático—. Además, nosotros. —Señaló con el cuchillo a Minho y a él—. Te hemos ayudado con toda la coreografía, también Yongbok, no puedes excluirnos.

—No lo sé —volvió a repetir—. Ya preguntaré.

Minho miró a Hyunjin, y pareció entenderlo, ya que se marchó a buscar algo que Jiyong no sabía.

—¿Estás bien? —preguntó en voz baja Minho para que solo la escuchase ella.

Jiyong hizo un leve gesto de asentimiento con la cabeza y siguió centrada en la comida. No solía cocinar para tanta gente y no quería que no saliese bien.

—Es solo un mal día —comentó como si nada—. Solo eso, un mal día.

—¿Chan lo sabe?

—¿Por qué crees que estoy aquí? —rio sin ganas y volvió a hacerlo cuando los demás empezaron a gritar sin razón alguna, esta vez de verdad—. No es que no quiera que vengáis —se explicó—, es solo que no sé si es lo adecuado. Seríais una gran compañía, siempre lo sois —afirmó—. Ya he conseguido que una de mis mejores amigas, mi maquilladora de confianza, sea la que me maquille para los MV, lo que para mí es mucho.

Minho asintió, entendiéndola sin que tuviera que explicarse tanto, y siguieron cocinado en silencio, acompañados por Hyunjin que volvió al poco tiempo y no paró de intentar hacer reír a Jiyong en todo momento.

Cuando la comida estaba casi lista, llegó Chan, que había tardado más de lo que creía Jiyong que haría, lo más probable era que se hubiera quedado acabando algo de trabajo. Al verla tan bien integrada, como siempre pasaba cuando estaba con los chicos, no pudo evitar sonreír. Le encantaba verla así, como una más entre ellos, como si estuviera destinado a que fuese así.

—No sé qué estáis cocinado, pero huele de maravilla.

—Y sabrá de maravilla —aseguró Minho.

Ninguno puso pegas ni quejas al probarlo, todo lo contrario, empezaron a hacer bromas de que Jiyong tenía que ir más veces al dorm porque cocinaba de maravilla, nada que ver con lo que solían comer de forma normal, que eso sí era comida de la que tendrían que tener a diario.

Después de recoger, y de que Changbin fregase, porque siempre perdía, se sentaron en el sofá después de ponerse todos ropa más cómoda, Jiyong incluida ya que Chan le había dejado de la suya, para ver un drama entre todos mientras hablaban de cualquier cosa. Jiyong estaba más callada de lo normal, algo que no pasó por alto para nadie, pero no la presionaron, solo intentaron que se sintiera cómoda y a gusto.

—¿Tenéis alguna idea de algo que podamos hacer mañana para animarla? —preguntó Chan en voz baja. Jiyong se había dormido acurrucada entre sus brazos mientras veían el drama y no quería despertarla. Estaba preciosa, aunque para él siempre lo era—. Acepto cualquier sugerencia, incluso locuras de las vuestras.

—Algo se nos ocurrirá —lo tranquilizó Felix—. Ha estado muy callada para lo extrovertida que es...

—Está muy agobiada por todas las noticias que hay y los rumores —admitió. Con los chicos no tenía secretos—, a eso se le tiene que sumar la presión del debut, lo que se exige ella misma porque es muy perfeccionista, el cansancio... —Tragó saliva y suspiró—. Yo no sé qué más hacer para ayudarla, no es suficiente y...

—Justo lo que haces —habló Minho muy seguro—. No puedes hacer más, la estás apoyando y ella lo sabe. No te tortures a ti mismo con qué más puedes hacer, porque no es así.

—Estás haciendo todo lo que puedes, con ella y con nosotros —siguió Changbin—. No intentes abarcar más de lo que puedes. Te lo dijimos el otro día, no tienes que preocuparte por nosotros en ese aspecto.

—En momentos así odio todo esto —reconoció Chan muy frustrado—. Me encantaría poder decir que sí, que estamos juntos y muy felices, y que a nadie le importase, que no hubiera noticias, ni rumores, ni fans enfadadas porque estoy enamorado, que pudiésemos hacer nuestra vida como si nada.

—Pase lo que pase, te apoyaremos, os apoyaremos —se corrigió Seungmin de inmediato—. No estáis solos en esto.

—Exacto, apoyaremos a nuestra madre —bromeó Jisung—. Somos una buena familia.

Todos empezaron reír y Chan tuvo que hacer un gesto con la mano para que bajasen la voz y no la despertasen.

—Llévala a la cama, hyung —murmuró Hyunjin—. Si no se ha molestado conmigo por haber visto algún capítulo del drama sin ella, no creo que lo haga por no acabar lo que estamos viendo.

Chan suspiró y con mucho cuidado, se levantó con Jiyong en brazos para llevarla a la cama.

—¿Channie? —bisbiseó con la voz adormilada entre sus brazos—. ¿Qué pasa? ¿A dónde vamos?

—Te has quedado dormida, babygirl —habló con una sonrisa—. Te estoy llevando a la cama.

—No me he despedido de los chicos, y estaba muy interesante lo que estábamos viendo...

—Los niños saben que en sueños les has deseado buenas noches —rio y le besó la frente—. Saben que estás muy cansada. Y sí, se te notaba muy interesada mientras dormías y balbuceabas cosas

—Ya, pero es de maleducada, no dejo de ser una invitada y... —Apretó los labios al darse cuenta de todo lo que había dicho—. No balbuceo mientras duermo.

—¿Estás segura?

—Mucho.

—Tendré que grabarte entonces —la chinchó—. Y no te preocupes por no haberte despedido de los niños. —Con suavidad, la dejó en el suelo para que pudiera cambiarse con la ropa que había usado la otra vez que se había quedado a dormir, y para que pudiera subirse a la cama. Cuando lo había hecho, él hizo lo mismo y la rodeó entre sus brazos para abrazarla con fuerza—. Me encanta tenerte en mi casa y en mi cama.

—¿Siempre dirás cosas así para que mal piense?

—Esta vez no es por eso —afirmó Chan—, es porque me gusta despertarme a tu lado, dormir contigo, hacer una vida tan... normal.

Él quería esa normalidad con Jiyong, esas cosas tan usuales entre las parejas.

—A mí también —admitió Jiyong y bostezó para acurrucarse mejor en Chan—. Gracias por todo lo de hoy.

—No las des, babygirl. Somos un equipo, tú estás para mí y yo estoy para ti.

—Sí lo hago. —Lo besó—. Eres una de las mejores cosas que me han pasado nunca.

—Y tú una de las mías.

Holiii, ¿cómo ha ido la semana?  Pido perdón de nuevo por lo largo del capítulo haha.

Este es un capítulo importante porque se ve lo bien que se entiende Jiyong con los niños también, las buenas dinámicas que hay y es que LOS ADORO TODOS. Y Chan, siendo el novio perfecto, si es que MIS NIÑOS.

Ya aviso, quizá no puedo subir el martes/miércoles porque tengo que hacer otras cosas...

Btw, en este cap hay un dato muy muy muy importante jejeje, lo veréis pronto, ya veréis :)

Muchos besos xx