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삼십삼 . real life

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Kimjiyong Amo la foto y amo a mi bebé ❤️






Sooyaaa__ Querrás decir NUESTRO

Sooyaaa__ Porque es MI hijo 🤨

↪️Kimjiyong ¿No acaba de decir que es nuestro?😋

↪️Rosesarerosie 😂😂

Twicetagram 🐰: Miraos qué bonitoooos

Twicetagram También amo la foto  🥺🥺

SabriMalfoy 🥰🥰

Kingmanen 😍😍😍

Usercoreanitoinsoportable1 Esa foto la ha hecho alguien, ¿os dais cuenta? Es una foto improvisada

↪️Usercoreanitoinsportable2 ¿Son ciertos los rumores de que Jiyong tiene pareja?🤔

↪️Usercoreanitoinsportable1 Yo creo que sí

↪️Userqueshippeacuandonotoca Ojalá el Jiychan sea real, me encantaría, los llevo shippeando desde que salió el MV🥺🥺

↪️Duapinkz Dejad la vida privada de la gente en paz, gracias🔪















Lo que quedaba de fin de semana, Jiyong y Chan lo pasaron juntos en el apartamento de la chica recuperando el tiempo que habían perdido en los meses que él había estado de gira. Se les había hecho muy corto, las horas les pasaron volaron y no les parecieron suficientes. Se rieron mucho juntos, porque esa era una de las cosas que más les gustaba del otro, lo que se divertían y cómo se hacían reír como si no hubiera preocupaciones.

También hubo muchos abrazos, porque les costaba separarse del otro, mimos, besos, palabras bonitas que necesitaban decirse aunque fuera de forma repetida, muchos te quiero, y trabajo, porque tal y como había predicho Jiyong, Chan fue incapaz de no avanzar con algunas canciones que quería tener medio arregladas o algunas demos antes de volver por completo a su rutina.

Ninguno de sus amigos, o gente más cercana a la pareja, los molestaron, porque sabían que necesitaban ese tiempo para ellos dos a solas, que lo necesitaban por lo mal que lo habían pasado al estar separados esas largas semanas.

Sin embargo, aunque no lo quisieran, porque habían sido de los días más felices que recordaban desde hacía mucho tiempo, esa burbuja que habían creado, se reventó; su vida seguía y tenían que volver a lo que hacían con normalidad.

Chan tenía que acabar de perfeccionar todo para el cierre de la gira en el último concierto, que tenía que ser más que perfecto, por no mencionar componer canciones nuevas, coreografías, asunto de líder, como que todos los miembros estuvieran bien y lo hicieran bien, arreglos musicales, producción...

Y Jiyong, por su parte, continuaba con su trabajo de MC, con las campañas publicitarias, los eventos, seguir con todo lo que envolvía a su debut en solitario...

Porque eso seguía su curso, como la mayoría de debuts, o los comebacks dentro de JYPE, y como estaban apostando muchísimo por ella, sería con dos canciones, una que sería la principal, la de su debut en solitario como tal, con la que se centraría la promoción y las presentaciones en el caso que tuviese la recepción que se esperaba, y la segunda sería mucho más tranquila, una balada enfocada a que se viera todo su potencial.

Por lo que sabía, ya que JY Park era muy comunicativo en ese sentido, no solo Chan sería el que ayudaría en la composición y producción de uno de los temas, para el más tranquilo se lo habían propuesto a los otros dos integrantes de 3RACHA y por lo que sabía, la letra la estaba haciendo toda Changbin que era un maestro de las palabras y hacía unas composiciones preciosas tal y como se veía en muchas de las canciones de Stray Kids.

Entendía esa decisión del productor. No era tonto, no llevaba tanto tiempo en la industria por un golpe de suerte, y aunque no se lo hubiera dicho de forma directa, sospechaba de su relación con Chan mucho antes de que la cláusula de él anticitas acabase, por lo que era una forma de disimular la vinculación que tenía con el idol y de promocionar la carrera de productores y compositores de Jisung y Changbin.

—Otro concierto al que vamos juntas —comentó Nayeon entrelazando el brazo con el de Jiyong en un gesto cómplice—. ¿Cuántos van ya?

Esta vez era un poco distinto, no solo quería pasar desapercibida para que los fans no la reconocieran a ella o a sus amigas, también era porque necesitaba hacerlo. Ir al concierto, por mucho que le apeteciera, era un paso importante para seguir superando lo que le había pasado, aunque habría demasiada gente para su gusto y quizá no se sentiría del todo cómoda. Pero quería estar ahí, quería apoyar a Chan y a los demás chicos y disfrutar como una STAY más del concierto.

—Tampoco tantos —respondió Jiyong, queriendo devolverle un poco del chinche que le hacía siempre su mejor amiga—. Por norma, soy yo la que asiste a vuestros conciertos y... Sería raro, ¿no? Que asistieras a uno mientras actúas, ¿sabes desdoblarte a ti misma? ¿Tienes una gemela que nunca me has presentado?

—Jiyong... —Nayeon la cortó al ver que las demás se estaban riendo de lo que había dicho.

—Hemos ido a bastantes sí. —Jiyong sonrió con cariño—. Siempre me has acompañado a los de Blackpink incluso cuando he ido con mi familia, eres mi mejor compañía para estos eventos.

—Y no solo a los de Blackpink, hemos ido a muchos más, ya sabes nos gusta apoyar a la gente. Tú también me has acompañado cuando lo he ncesitado —aseguró Nayeon y le guiñó un ojo—. Nos lo pasaremos bien, como siempre hacemos.

De eso no tenía ninguna duda, se lo pasarían en grande con todas las que habían venido y con el gran concierto que darían Stray Kids, que siempre lo daban todo en el escenario para que STAY disfrutase al máximo.

Chan, tal y como le había dicho, les había conseguido pases para el backstage antes del concierto para todas las que habían ido, y si alguien lo captaba con una cámara de móvil y lo subía a redes sociales, tampoco sería tan extraño, más de una vez se grababan encuentros entre los idols de la misma compañía que iban a apoyar a los otros en conciertos, no era raro ver a las miembros de ITZY en un concierto de TWICE o viceversa, al igual que con otros grupos.

Una vez fuera de la vista de miradas curiosas, entre los miembros del staff y otros trabajadores, ya podrían estar más tranquilas, aunque Jiyong no acababa de fiarse de nadie que no fuese de plena confianza, aún no podía hacerlo porque no le salía.

Seguidas por su guardaespaldas, que no se separaba de Jiyong en ningún momento y menos en un sitio con tanta gente, les enseñaron los pases que les permitían acceder al backstage, aunque algunos trabajadores ya las reconocieron por ser quiénes eran y no pusieron ninguna pega. Fueron por el camino que les dijeron hasta llegar a la sala en la que estaban acabándose de preparar para el concierto.

Los chicos estaban grabando con la cámara lo que seguramente sería un detrás de escenas del concierto o uno de los vídeos que subían de forma usual en su canal de youtube para que los fans los conocieran un poco más y tener más contenido además de su música.

—¡Jiyong, noona! —El que primero la vio fue Hyunjin que sonrió al verla y se alejó del plano de la cámara para acercarse a abrazarla. Era una suerte que esos vídeos fueran editado antes de subirlos, esa familiaridad y tono tan amistoso del chico no hubiera pasado por alto—. Bueno, hola a todas —se corrigió a sí mismo al ver que no estaba sola y que la acompañaban la mayoría de miembros de TWICE. Se llevaba bien con ellas también, no dejaban de ser sus sénior, pero no era tan cercano como podía ser con Jiyong.

Jiyong le devolvió el abrazo y alzó una ceja, guardándose para sí el comentario que iba a hacer, uno que repetía siempre con Hyunjin, que siempre alegaba que no le gustaba el contacto físico pero cuando la veía la abrazaba, o era cariñoso con Jeongin o Felix.

Se llevaba muy bien con todos, eran sus amigos y lo consideraba como tal, y a excepción de Chan, que en ese sentido no contaba porque no podía ser objetiva, sus favoritos y con los que más trataba eran Hyunjin y Felix.

Los chicos se giraron, o dejaron de hacer lo que estaban haciendo, como hablar a la cámara, para poder saludar a las chicas. En el caso de Jiyong, por lo ocupada que había estado, no había podido verlos desde que habían regresado a Corea, a excepción de Chan, que se habían visto cuando habían vuelto en ese fin de semana y el lunes, por lo que los saludos fueron bastante más efusivos de lo habitual, siendo blanco de alguna broma inocente, a la que se unieron sus amigas de inmediato, sobre cómo había llevado ese tiempo y que no hacía falta que mintiese, que sabían que al que más había echado de menos era Jisung de todos ellos.

—¿Nerviosos? —se interesó mientras le sonreía a los demás chicos que ya hablaban con ellas con normalidad.

—Antes de un concierto es normal estarlo, ¿no? —dijo Seungmin que solía ser de los más racionales y de los que cada vez que hablaba, era directo y claro.

—Totalmente, yo lo estoy —secundó Nayeon—. Aunque la que más siempre es Jihyo.

—¡Unnie! —se quejó la aludida.

—¿Os apetecen unos brownies? —ofreció Felix con esa sonrisa tan característica suya que le iluminaba los ojos interrumpiéndolas.

Las chicas asintieron y cogieron un trozo mientras seguían hablando con ellos de cómo se sentían, de las expectativas que tenían para el concierto y en cómo les había ido la gira.

Chan, aprovechando la tranquilidad y el buen ambiente que había, miró de reojo a Jiyong y le hizo un gesto para que se sentase a su lado en el sofá que estaba y sonrió. Lo había echado de menos, aunque hablaban mucho por mensajes y la comunicación era mucho más fácil al estar en la misma zona horaria ya que podían contestar casi a la vez y con la misma hora.

Le hubiera gustado poder pasar más tiempo con él, pero había resultado imposible, no habían podido sacar tiempo para el otro ni por las noches para sus citas en el estudio que tanto extrañaban. Lo poco que habían podido verse el lunes había sido para tener una reunión con sus jefes de división y sus managers, aunque estos ya lo sabían, para decirles que estaban saliendo porque tenían que saberlo. Al haber pasado los 3 años del debut de Stray Kids, ya no había un contrato que le impidiese a Chan tener citas o pareja, por lo que el idol, después de hablarlo con Jiyong, habían decidido comunicárselo lo más pronto posible a los dirigentes para que no hubiera sorpresas de ningún tipo en el caso de que los pillasen o hubieran noticias que los relacionase y supieran cómo actuar.

Así que lo miembros del equipo de más confianza, con los que trabajaban a diario y llevaban años con ellos, también lo sabían y estaban más que dispuestos a ocultarlo y ayudarles en lo posible.

—Toma. —Chan le dio un lightsticker que había encima de una de las mesas junto a varios—. No sé si tienes uno...

—Sí tengo, ¿no lo viste en mi apartamento junto a la colección de todos vuestros miniálbum y álbum? —rio la chica. En su habitación tenía casi un altar con todo lo que se había comprado de Stray Kids—. Pero no lo he traído.

—Pues ahora ya tienes uno para el concierto —Chan sonrió y la miró con cautela, intentando saber qué era lo que le pasaba por la cabeza. La conocía muy bien, y le encantaba, pero Jiyong era una maestra en ocultar sus emociones y lo que le ocurría—. ¿Cómo estás?

Chan sabía, aunque Jiyong no se lo hubiera dicho, porque por mucho que hubiera intentado sacar el tema ella lo había eludido con mucha maestría y haciendo que la conversación se centrase en él y en el concierto, que asistir al concierto era un esfuerzo que estaba haciendo, que intentaba disimular lo nerviosa e inquieta que estaba.

—No te preocupes por eso, ¿tú cómo estás? —cambió de tema—. ¿Has preparado bien la voz? Eso es muy importante antes de un concierto, si no es así, ya tardas.

—Jiyong...

—Estoy bien —se limitó a decir, no queriendo dar más detalles—, nada de lo que preocuparte. Tienes que centrar toda tu atención en el concierto. —Chan asintió no muy convencido, pero ella tenía razón, tenía que estar al cien por cien, no debía distraerse—. Por cierto, me gusta mucho el look que llevas.

—¿Sí?

—Muy guapo, Channie —lo aduló, mirándolo de arriba abajo—. Siempre estás guapo, porque eres guapo —remarcó muy seria y lo apuntó con el dedo para que no la contradijese como siempre hacía—. Vuestros estilistas llevan meses luciéndose con vosotros. Me encanta como vas.

De forma disimulada, Chan le acarició el dorso de la mano en un gesto cariñoso.

—¿Nos vemos más tarde? —preguntó con calma y en voz más baja.

—¿No estarás muy cansado?

—No creo —murmuró y apretó los labios—. Ven al dorm con nosotros y duermes conmigo.

—¿No será eso raro? —Jiyong parpadeó, procesando lo que acababa de escuchar—. Con todos los demás y...

Siempre que habían dormido juntos había sido en el apartamento que Jiyong compartía con su hermana, era mucho más fácil, ya que solo vivían las gemelas, muchas veces Jisoo no estaba lo que les daba privacidad, y la cama de la chica era de tamaño extragrande. Lo que ella no sabía era que Chan ya lo había hablado con los chicos, que ellos entendían que quisieran pasar tiempo juntos y que si la invitaba, ya lo tenían todo organizado para cuando eso sucediera y darles intimidad.

—Cuando acabe el concierto, lo hablamos, ¿te parece? —comentó él y volvió a sonreírle. Jiyong asintió y también sonrió—. Te enviaré un mensaje entonces.

Como no estaban solos no podían ser cariñosos el uno con el otro, porque sería extraño y ella no se sentía del todo cómoda, se unieron a la conversación de los demás y Jiyong se ofreció para ser la que grabase el encuentro entre los miembros de TWICE y Stray Kids para el vídeo de detrás de las escenas del concierto, evitando así salir en plano sin quererlo.

Quince minutos más tarde, las chicas se marcharon para dejarlos tranquilos y que tuvieran el tiempo suficiente para acabar de prepararse, hacer los últimos ejercicios vocales, algunos físicos para preparar los músculos entre otras muchas cosas.

—¿Puedo decirlo ya? —Nayeon no reprimió la risa una vez estaban ya sentadas en sus sitios en el concierto. Era un muy buen sitio, se veía a la perfección el escenario y no había un tumulto de gente—. ¿O tengo que callarme más tiempo?

—¿Siempre vas a hacer un comentario con respecto a nosotros? —bufó Jiyong—. Ya no hace gracia.

—Es que sois muy monos —la que lo dijo fue Sana—. Antes cuando hablabais os habéis aislado entre vosotros, adorables. Os hemos llamado y ni os habéis enterado.

Jiyong miró a la japonesa con una ceja alzada, ese comentario lo esperaba de Nayeon, no de ella.

—Qué contenta me pongo cuando no soy la única que te chincha —se mofó Nayeon—. Y nunca dejarán de hacer gracia.

—¿Estarás así toda la vida?

—¿Eso es que quieres estar toda la vida con él? —A Jihyo no se le pasó por alto y chocó la mano con Nayeon después de decirlo—. Fuertes declaraciones.

—Os odio.


❥❥❥


Jiyong disfrutó y se divirtió como hacía mucho tiempo en el concierto. Cantó y bailó las canciones que se sabía, sin ser muy exagerada para no llamar mucho la atención, bromeó y se rio de los chicos y de algunas cosas que hacían junto a sus amigas, grabándose en vídeo para guardar esos momentos.

Antes de marcharse para volver a su casa, recibió un mensaje de Chan, como le había dicho antes del concierto, en el que le decía que no se fuera, por lo que se despidió de sus amigas no sin antes prometerle a Nayeon que le mandaría un mensaje cuando estuviera en su casa o donde durmiese esa noche y que supiera que estaba bien.

Al reunirse con los chicos, no se sorprendieron de verla ahí, tampoco los managers que la saludaron con mucha educación, y la integraron en la conversación como si fuera una más, haciendo bromas con ellas o pidiéndole que les hiciera fotografías para subirlas a su instagram. Una vez que lo tuvieron todo listo para irse, se dividieron en dos furgonetas, no sin antes comprobar que no había ninguna sasaeng de los chicos para captar alguna imagen de ellos, y aprovecharon que el recinto en el que había sido el concierto tenía parking propio.

También el guardaespaldas de Jiyong comprobó varias veces que todo estaba bien, que no había peligro, antes de irse a su propio coche para seguir la ruta que iban a hacer. No se iba a ir sin más, antes comprobaría que la chica llegaba bien.

En el trayecto de vuelta, de nuevo fue la actriz la que se ofreció para ser la que grabase un poco del post concierto de los chicos, según le habían dicho llevaban grabando toda la semana sus ensayos y lo subirían junto a la serie que ya habían hecho de los conciertos de su gira. Una vez que apagaron la cámara, lo chicos que iban en la misma furgoneta que Chan y Jiyong, le preguntaron qué le había parecido el concierto y si se lo había pasado bien.

—Ponte esto. —Chan le dio una de las sudaderas de merchandasing del grupo a Jiyong para que la cubriese—. Solo por si acaso, también ponte la capucha y camina mirando al suelo cuando lleguemos.

—Lo sé, no te preocupes.

—Intentaremos que se nos vea bien por si hay alguien cerca que nos hagan fotos a nosotros, tú si vas con nuestros managers puedes pasar como una miembro del staff más.

Chan le cogió la mano de nuevo y esta vez, al estar en confianza, le dejó un beso en esta.

—Siento si os genero molestias en ese sentido —se disculpó Jiyong.

—¿Molestias? —repitió Minho y se rio—. Una molestia es aguantarlo cuando te echa de menos, pero esto no lo es.

Ella se lo agradeció con la mirada. Quizá, de los siete, porque Chan no contaba, Minho era de los que menos conocía porque no había tratado mucho con él. Lo que sabía, lo sabía por Chan, aunque no dudaba que era una gran persona y amigo, lo demostraba con estas cosas.

Al llegar, Jiyong hizo justo lo que le había dicho Chan, y al ir entre los managers de los chicos, que eran mucho más altos y corpulentos, sobre todo si se comparaban con los idols, pasó bastante disimulada y era imposible que le hubieran captado en fotos.

El dorm de los chicos era como recordaba de la vez que había estado ahí, lo único era que estaba mucho más desordenado.

—Se nota mucho que la primera vez que estuviste aquí recogimos, ¿no? —comentó Changbin y los demás se rieron.

—Lo siento —se disculpó Chan—, mira que les he dicho a los demás que guardasen sus cosas, que seguramente vendrías y...

—No os preocupéis por eso —Jiyong le restó importancia, no le molestaba lo más mínimo que hubiera desorden—. ¿Tan claro tenías que iba a venir?

—Tenía esa esperanza, sí —admitió Chan, haciendo que sus orejas se sonrojasen un poco—. Te he echado de menos.

—¿Y si hubiera dicho que fuéramos a mi apartamento? —rebatió Jiyong.

—Hubiese intentado convencerte. —Se encogió de hombros—. Me gusta que estés aquí, Jiyong, con todos nosotros.

—Nos gusta tenerte aquí —corrigió Hyunjin.

—A todos —confirmó Felix.

Jiyong sonrió con mucha sinceridad y vio que Chan también lo estaba haciendo, tenía los hoyuelos muy marcados y se le veía emocionado. Una de las razones por las que no le había insistido para ir a su apartamento eran ellos, los chicos. Sabía que eran su familia, que eran de las personas más importantes en la vida de Chan, y que él, aunque no se lo hubiese dicho, quería poder compartir momentos todos juntos.

Ella no sentía fuera de lugar, estaba muy cómoda con ellos, se sentía casi como una más, la hacían partícipe de las conversaciones y de las bromas. Como no tenían sueño, porque según las propias palabras de los chicos, tenían aún la adrenalina a tope por el concierto, decidieron ver una película todos juntos mientras comían algo.

—Ven, siéntate encima de mí —se ofreció Chan cuando iban ocupando el sofá—. Así hay más espacio.

—No sé yo si...

—No tengas vergüenza, babygirl —se rio Chan, agarrándola por la cintura y sentándola encima de él—. A ellos no les molesta. —La miró de forma fija—. Si a ti sí, te dejo mi sitio y me pongo en el suelo.

—No te vas a sentar en el suelo —gruño Jiyong.

—¿Eso es que no te molesta estar así? —Ella negó con la cabeza y Chan aprovechó para abrazarla aún más fuerte y besarla de forma sutil.

—¡Que está IN delante! —chilló Minho interrumpiendo su momento y todos se rieron—. No mal influenciemos al pobre Maknae y sus pobres inocentes ojos.

Hyung, a mí me da igual —dijo el aludido.

Y no pudo decir nada más, porque los que estaban cerca de él empezaron a molestarlo, como siempre hacían, y a no dejar que acabase de hablar, ni para defenderse diciendo que ya era mayor y no tenían que tratarlo como un niño pequeño.

Al acabar la película, cada uno se fue a su habitación, ya que era bastante tarde, y Jiyong agradeció a los chicos, sobre todo con los que Chan compartía cuarto, que les dejasen estar solos y que sentía las molestias.

—Toma. —Chan le ofreció una camiseta suya—. Para que puedas dormir mucho más cómoda.

—¿Cuánta cosas de merchandaising tienes? —comentó entre risas—. Siempre me estás dando cosas.

—Muchísima —reconoció—, pero mira, tiene utilidad.

—Huele a ti —bisbiseó al llevársela a la nariz—. Me gusta, ¿puedo quedármela?

—Puedes quedarte lo que quieras, babygirl

Aprovechando que estaban en el dorm, Chan acabó de enseñarle todos los regalos que le había comprado estando de gira, explicándole el motivo por el que había comprado cada cosa o qué pensaba en ese momento. También, como estaban solos, se besaron varias veces, siendo incapaces de controlarse.

—Channie. —Jiyong giró la cabeza para mirarlo bien. Estaba apoyada en él, Chan la abrazaba por la cintura para estar más cómodos en la cama del chico—. ¿Puedo preguntarte algo?

Como Jiyong al día siguiente tenía que estar todo el día en la empresa, desde bien pronto por la mañana para todo lo que implicaba sus canciones en solitario, ambos se habían acostado ya, lo que era muy extraño en Chan.

—Puedes preguntarme lo que sea, babygirl.

—Mi sobrina Rayul cumplirá cien días* dentro de poco —empezó—, mi hermano va a hacer una pequeña celebración en los que estaremos la familia y... Y quiero que vengas.

—¿Quieres presentarme a tu familia? —Chan tragó saliva mientras la miraba.

Eso era un paso muy importante y que Jiyong quisiera darlo le hizo sentirse importante y especial.

—Sí —confirmó—. ¿Tú quieres conocerla?

La primera respuesta de Chan fue besarla de forma dulce.

—Quiero ir si tú me quieres ahí, Jiyong. Intentaré no tener nada ese día para poder ir, ojalá tenga la agenda libre.

—Si no quisiera, no te lo diría, bobo. —Le dio un pequeño golpe, lo que hizo que Chan aprovechase para volver a besarla—. Quiero que conozcas a toda mi familia, que sepan que tengo novio y que voy muy en serio con él.

—Te quiero muchísimo, ¿lo sabes? —Chan le acarició la mejilla con mucha dulzura.

—Y yo a ti. —Jiyong le besó la nariz y acabó por reírse al ver la cara de circunstancia de él—. No tienes que quedarte en la cama si no quieres, Channie. Puedes trabajar si quieres con tu portátil si no tienes sueño.

—No, prefiero quedarme así —aseguró—. Abrazado a mi novia, dándole cariño y viendo cómo se va durmiendo poco a poco... ¿Y si te hago una foto?

—No lo harás —refunfuñó Jiyong—. Ya me hiciste demasiadas cuando estuvimos en mi apartamento.

Babygirl, no te quejes, te gustaron, ¿no subiste una que te hice con Dalgom? —Cogió su móvil y le enseñó el fondo de pantalla—. Y aquí sales preciosa.

—¡Chris! —protestó al ver la imagen. Era ella, dormida en su cama, con el pelo un poco alborotado, los labios un poco entreabiertos y abrazándolo. A Chan no se le veía la cara, solo el pecho y el brazo con el que le rodeaba la cintura—. ¿Cómo tienes eso de fondo? Es más, ¿cómo la hiciste?

—Me desperté antes que tú y aproveché que tenía el móvil cerca. A mí me encanta. De mis fotos preferidas —afirmó y volvió a besarla—. Duerme, babygirl, que mañana madrugas y tienes que estar a tope.

—Buenas noches, Channie. —Jiyong le pasó las manos por el cabello rizado. Se había duchado antes de acostarse y no se había hecho nada en el pelo—. Te quiero.

—Y yo también a ti, Jiyong. Buenas noches.

















Holiiii, pues aquí un nuevo capítulo que me ha quedado un poquito largo... pido perdón.

¿Pueden ser más monos? Pista, no. Y Jiyong integrándose al completo con Stray Kids, lo normal, ya que no deja de ser su "madre" ya que Chan es el padre hahahaha.

Por cierto, lo de los 100 días es muy común celebrarlo en países asiáticos, en el pasado se decía que si un bebé superaba los 100 días no se moría (antes había mucha muerte infantil).

No sé si nos leeremos el martes/miércoles o el sábado, creo que el martes/miércoles porque quiero hacer unos mensajes y eso pero sea como sea, tened una buena semana :)

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