Al día siguiente llegué a clase como siempre, siguiendo a Senpai, él se fue a la fuente del patio interior y el club de las chicas del pelo de colores estaban preocupadas, notaban un aura oscura cuando yo me acercaba

Miyu: no sé qué me pasa pero tengo una sensación muy extraña desde que murió Kokona Haruka...

Ayano: ¿y eso?

Miyu: no lo sé, pero es como una sensación de...miedo, escalofrío...

Ayano: qué extraño, ¿no?

Miyu: pues sí...

Yui: yo también lo noto...

Miyu: tú es que eres muy débil...

Yui: bueno, cállate

Koharu: bueno yaa vale, como sigamos charlando vamos a llegar tarde a clase!

Yui: ¡¡pero si son las 8:00!!

Koharu: anda, es verdad... xD

Miyu: ¿y estas ganas de entrar en clase?

Koharu: es que cuando antes entremos antes saldremos, y cuando antes salgamos ¡¡antes nos prepara Kokona Haruka la merienda!!

Yui: eh...

Miyu: Kokona...

Ayano: Haruka tuvo un accidente y ya no está...#lo dije disimulando que había sido yo#

Koharu: ¿qué...? Dios mío... no lo sabía... no sabía que había muerto y yo aquí pensando en comer... ¿y alguien sabe qué le pasó?

Ayano: yo oí decir que tuvo un accidente y se electrocutó, pero no entiendo cómo ha podido pasar...

Koharu: vaya...

Mei: pues sí, tranquila que ya te hago yo la merienda... te haré las salchichas en forma de pulpito que ella sabía hacer

Koharu: gracias Mei...

En ese momento sonó el timbre y nos fuimos todas a clase, aprendí química para que me ayudara con mi plan de envenenar a Oka Ruto.

A la hora de comer, me salté la comida y fui directamente al laboratorio de ciencias, no había nadie, entré y cogí los productos necesarios para poder hacer el veneno, lo hice en un momento y lo metí en un botecito que llevaba encima; y cuando acabé, me fui rápidamente.

Cuando salí vi la enfermería, y aprovechando que la enfermera no estaba, cogí un tranquilizante y una jeringa, ya que ella tiene muchas y las tenía a mano, tenía pensado en utilizarlas en un futuro.

Pasé por el Club de ocultismo y ahí estaba, entré y hablé con ella

Oka: ¿qui-quién está ahí...?

Ayano: hola, perdón no quería asustarte, sólo venía a verte pero no pretendía asustarte

Oka: bueno, ¿y qué es lo que quieres?

Ayano: ¡quiero enseñarte algo que te va a gustar! ¡Ven conmigo!

Oka: vale, muéstrame el camino

La llevé a la azotea del instituto, ya que nadie estaba allí y es el lugar perfecto para acabar con ella

Oka: ¿qué se supone que tengo que ver?

Tuve que pensar rápidamente y di en el clavo

Ayano: ¿sabes que han puesto un lavabo aquí?

Oka: ¿ah sí?

Ayano: síi, y el agua de aquí es más pura que la de los baños

Oka: ¿en serio?

Ayano: sí, mira, te traigo un poco y la pruebas

Fui a llenarle el vaso y le eché unas gotitas de veneno, procurando que no me viese, y se lo di

Ayano: toma, pruébala, no te arrepentirás

Oka: va-vale...

Se la bebió y el efecto del veneno fue rápido, al terminarse el vaso, cayó al suelo pidiendo ayuda pero murió al instante y nadie se dio cuenta.

Ayano: JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA...

La bajé tirándola por la azotea, para que nadie me viera con el cádaver y si la ven muerta, pues que parezca que se haya suicidado.

Por desgracia mi Senpai vió el cadáver, yo ya estaba bajando e hice como que pasaba por ahí "de casualidad"

Taro: ¡DIOS MIO!

Ayano: ¿qué pasa? #la vi y exclamé# ¡DIOS! ... ¿está muerta...?

Taro: sí... está muerta... Ayano, ¿crees que puede haberse suicidado?

Ayano: es lo más probable, porque no parece que la hayan empujado...

Taro: ayúdame, debemos llamar a la policía

Ayano: sí, pero no es más correcto llamar a sus padres primero? Es que no sé... creo que merecen saberlo...

Taro: sí, tienes razón

Fuimos a conserjería y preguntamos a la conserje por el número de la casa de los Ruto, llamamos y se lo contamos; me sentía... mal pero solo un poco, al parecer no era tan malo que alguien me hubiera visto, sobre todo si ese alguien era mi Senpai...