12; Divertido.
❝DIVERTIDO❞
En el salón Sooah leyó el mensaje de como fue rechazada Jugyeong, lo que no sabían era que todos estaban atentos a lo que leía. Seojun comenzó burlarse junto a su grupo al escuchar eso, por lo que Sohyun lo miró molesta.
Sentía ganas de enseñarle esa foto a Mihyang porque su amiga ya se sentía lo suficientemente humillada, pero estaba demasiado cansada y sabía que eso no haría que se detuviera con sus bromas, sólo terminaría enseñando su foto también para así humillarla.
Luego cuando estaban en el comedor lo vio sentado en una mesa, mientras reía con sus demás amigos de algo que mostraba en su celular.
Al recordar la foto comiendo comenzó a sentir los latidos de su corazón acelerándose, hasta que vio la llave de la moto en el bolsillo de la chaqueta.
Por lo que se acercó rápidamente y una vez que la sacó se la enseñó por un segundo, por lo que la miró completamente desconcertado.
— ¡Oye! —gritó molesto.
Quiso correr hacía ella pero fue empujado por dos chicos lo que provocó que casi cayera chocando esta vez con chicas. Al estar todos amontonados fue imposible que pudiera seguirla a tiempo.
— ¡Sohyun! —grita empujando a los demás para poder salir.
Comenzó a seguirla por todo el instituto, pues su motocicleta era lo más preciado para él y eso ella lo sabía muy bien.
Ya se encontraban en el patio, pero ninguno se detenía, menos la pelinegra por más agotada que se encontrara.
— ¡Sohyun, dámelo mientras estoy siendo bueno! —grita estirando su brazo para tratar de alcanzarla—. ¡Lo vi todo! Vamos, dámela...
Logró tomarla del brazo, pero eso eso casi provoca que ella caiga al suelo si no fuese porque la tomó rápidamente de la cintura.
— Dámela —murmura mirándola fijamente.
Trataba de no caer en la tentación de mirar detenidamente cada centímetro de su rostro, pero se dio cuenta que falló cuando ella se alejó bajando la mirada tímida, mientras escondía su mano detrás de su espalda, pues nunca antes había estado tan cerca de un chico.
— ¿A qué te refieres? —titubea nerviosa.
— Lo vi todo —mira su brazo.
Quiso contestar pero fue tomada del brazo, haciendo que voltee encontrándose con Haejin, que tenía sus facciones endurecidas dejando notar que se encontraba molesto.
— ¿Qué estás haciendo? —pregunta el castaño, confundido por la reacción de su amigo al verlos juntos.
— ¿Tú qué estás haciendo? —cuestiona Haejin.
Sohyun miró a Seojun y luego a Haejin, estaba confundida por sus formas de mirarse, pues no parecían para nada amigos. En ese momento deseaba desaparecer, estar junto a su amiga y que le hablara de Suho.
— ¿Qué les sucede? Actúan muy extraño —habla nerviosa— ¡Basta! —ninguno de los dos dijo una palabra, sólo se miraban fijamente como si pudieran leer sus pensamientos y eso provocaba que ella se alterara más—. ¿Sabes qué? Ten tus llaves —toma la mano de Seojun y le deja las llaves—. Ahora quiten esas miradas y conversen como deberían estar haciendo —los mira por otro momento esperando que alguno hablara, pero ninguno lo hizo lo que la irritó—. ¡Adiós!
Decidió comenzar a correr hacia el instituto mientras ellos seguían mirándose de la misma manera, por más que hayan desviado su mirada un instante para ver como la pelinegra se iba. Seojun quiso hablar, pero Haejin decidió también entrar al instituto, ignorándolo completamente. Eso lo había desconcertado de gran manera, no lograba entender qué le sucedía, aunque lo conociera a la perfección.
A la noche Sohyun decidió unirse al grupo de estudio ya que su madre llegaría temprano por lo que la había dejado ir. Iba caminando con su brazo entrelazado al de su mejor amiga mientras los demás conversaban.
Se sentía extraña, no entendía porqué, pero el hecho de no haber cruzado palabras con Haejin la hacía sentir así, pero luego recordaba como habían corrido con Seojun y eso le daba ganas de reír. Se había divertido demasiado aunque le costara admitirlo ya que no era demasiado agradable con ella.
Los novios entraron cantando lo que la desconcertó pero aún así siguió a las demás y entró. Pero se desconcertó nuevamente al ver a Haejin sentado en la mesa que se encontraba a un lado de la que estaba sentado Suho, al cual comenzaron a preguntarle porqué el cambió de su decisión.
Aún así decidió tomar asiento a su lado lo que lo hizo sonreír.
— Por si te lo preguntas Sooah me preguntó si quería estar y le dije que sí —murmura sabiendo que se preguntaba eso.
Todos estaban concentrados en sus cuadernos, pero ella no dejaba de mirarlo ya que este parecía realmente concentrado en los ejercicios física.
— ¿Por qué me miras? —murmura con el ceño fruncido.
— ¿Cómo haces para entender? —apoya su mentón en su mano.
— Lo hago un poco —hace una mueca—. No es que sea realmente bueno.
— Pues, yo no soy para nada buena...
— Mira...—levanta su libreta por lo que se acerca a él apoyando su mano en su hombro, lo que provocó que se pusiera nervioso por su cercanía que lo dejaba aspirar su dulce aroma, aunque trataba de disimular sus nervios.— esta formula debes recordarla.
— Realmente, no entiendo cómo haces para recordar eso —este no dejaba de mirarla por lo que volteó a verlo creando una tensión entre ambos.
— Es muy fácil en realidad —le regala una sonrisa que hace que ella también lo haga—. Te explicaré.
Le había explicado por unos minutos, pues le había costado un poco entenderlo, pero resultó bien.
Y una vez ya cansados decidieron hacer karaoke, los novios estaban emocionados por eso y lograban contagiar un poco a Jugyeong y a Sohyun.
Una vez que llegaron Sohyun y Jugyeong eligieron una canción, bailaban torpemente mientras cantaban emocionadas provocando las risas de los demás.
Luego comenzaron a cantar todos a excepción de Haejin que por momentos reía por las payasadas de los demas y Suho parecía estar pasándola realmente mal.
Cuando la pareja se encontraba cantando tiernamente, la pelinegra se sentó a un lado de Haejin, mientras movía los brazos al ritmo de la canción. Aquel día se había divertido demasiado y se encontraba algo cansada.
— Vaya, cantas muy bien —admite.
— ¡Lo sé! —le guiña el ojo y este la mira sorprendido por su gran ego—. Claro que no. No bromees —ríe.
— Hablo en serio —se acerca más a ella—. Aunque no lo hayas hecho en serio, me gusta como cantas.
Este apoyó su mano en el sillón haciendo que sus meñiques se rozaran, causando aún más el sonrojo de ella.
Suho se levantó llamando su atención, por lo que volteó a verlo.
— ¿Te irás? —pregunta curiosa y busca con su mirada a su amiga, pero se da cuenta que no está—. ¿Y Jugyeong?
— La buscaré —asiente antes de salir de la habitación.
— ¿En qué momento salió? —pregunta confundida volteando a ver a Haejin.
— No lo sé. Estaba concentrado en ti —admite con una sonrisa.
EDIT
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