Al terminar de almorzar Jake dejó a Félix en el hotel que se hospedará durante el tiempo que se quedaría en Corea.

Después de eso, se ofreció a dejar a la pareja de omegas en el apartamento de Jungwon para luego hacer una parada en una gasolinera.

—Al parecer a tu amiguito no le gustó nada que estés interesado en él.—dijo Yeonjun con vacilación.

—Eso no te incumbe.

Jake soltó el humo que tenía en sus pulmones, calando una vez más su cigarrillo.

—Creí que querías que te ayudará a estar con él.—dijo esta vez parándose frente a él.

—Yo también creí lo mismo—respondió al instante—¿Porqué tuviste que decir que estábamos saliendo?

Yeonjun mordió su labio inferior con una sonrisa.—¿Es eso lo que te molesta?

—Por supuesto. No solo mentiste, si no que redujiste mis posibilidades con el, ahora piensa que estamos en algo.

—Deberias agradecerme.

—¿Agradecerte?—inquirió y rió sin gracia—Solo tenías un trabajo, Yeonjun.

—¿Y que planeabas, andar de rogón con Don perfecto? Ese tipo repudia la sola mención de una relación entre ustedes dos, deberías dejar de humillarte.

—Ese no es tu asunto, tú no lo conoces.—respondió fulminando con la mirada al mayor.

—¿Y tu si?—cuestionó frunciendo el ceño.—Solo eres su perro faldero, su segunda opción.

Jake le dio una larga calada a su cigarrillo y lo tiró al suelo para luego pisarlo.

—Vete a la mierda, Choi.

Jake caminó a pasos firmes hacia su auto dejando a Yeonjun a su suerte en medio de la gasolinera.

—Vaya, en serio creí que ese tipo sería bueno para ti, pero solo te terminó usando..—gruñó—cuando lo vea le voy a romper la cara.

—No.. no hace falta, al final de cuentas yo fui el idiota que aceptó su tratado.—respondió soltando un suspiro—No quiero saber nada de amoríos, Hoon.

—El amor es solo para los tontos, es solo una distracción, un juego. Solo los verdaderos idiotas saben cómo aprovecharse de otras personas a través de ello, claramente eso no es para ti..

—Sunghoon, ¿Te das cuenta que te estás llamando idiota a ti mismo?—inquirió burlesco. Su amigo era conocido por ser un playboy en todo el sonido de la palabra.

—Eso qué, yo nunca me enamoro así que, asi sea un idiota nunca pierdo—relató con una sonrisa triunfante.

Jake resopló y acomodó mejor su cabeza en el regazo de Sunghoon.

—Somos tan diferentes.—dijo el castaño a lo que el pelinegro rió.

—Es por eso que somos mejores amigos.—respondió el contrario—Jake, ¿Te puedo preguntar algo sin que te ofendas?

—Ya preguntaste.—respondió el otro.

Sunghoon rodó los ojos y picó su frente.—Ya lo sé, se trata de.. otra pregunta, sé que te la he hecho muchas veces pero en verdad quiero que me respondas con seguridad está vez.

—Claro, pregúntame.

—¿Estás realmente enamorado de Heeseung?

—Por supuesto que sí, Hoon.—contestó en seguida—Desde que éramos unos chiquillos, siempre me ha gustado.

—Es lo que dices siempre, pero no haz pensado que tal vez.. solo estás encaprichado y estancado en los recuerdos del pasado.

—Claro que no.

—Entonces porque sigues insistiendo en intentar algo con Lee cuando claramente él.. no tiene el mismo interés.

Jake cerró los ojos, relajando su cuerpo.

—Porque amo mucho a Heeseung, Hoon. Porque por menos interesado que parezca, sé que en el fondo el siente un apize de cariño por mí.

—¿No haz pensado que solo es un cariño amistoso? Solías ser su mejor amigo cuando eran cachorros.

—Puede que sea así, pero Heeseung nunca ha rechazado mis sentimientos, sólo lo hace indirectamente. Hasta que el me diga "No", no pienso rendirme.

—O simplemente no lo hace porque no quiere lastimarte.

Jake pareció pensarlo unos minutos y luego sonrió con diversión.

—Tambien está esa posibilidad, pero conozco a Heeseung hyung.. hay algo más detrás de ese carácter inquebrantable.

—Pareces conocerlo mucho.—dijo Sunghoon y Jake soltó un suave suspiro recordando los momentos con su amor de la infancia.

Cuando eran pequeños sus madres solían vestirlos igual y pasaban tiempo en la casa del otro a la hora del té.

Iban a la misma escuela, al mismo salón y tenían los mismos amigos. Eran como uña y dedo, siempre juntos de la mano de aquí para allá.

Heeseung era solo unos meses mayor que Jake, así que siempre se veía en necesidad de proteger a su menor. Incluso en ese entonces cuando Jake solo tenía catorce y él quince años.

—Hyung~ olvidé mi almuerzo—puchereó el menor.

—¿Otra vez Jakey?—cuestionó Heeseung con sus manos en la cintura mirándolo fijamente.

El pequeño alfa asintió aún sin deshacer su puchero. El mayor solo negó y tomó uno de los sándwiches que le había preparado su mamá y se lo dió.

—Puedes comer del mío, Jakey.—dijo entregándole el sándwich—Pero que no se vuelva a repetir, eh.

Jake sonrió grandemente y asintió, dándole una mordida.—¡Esta muy rico Hyung, gracias!

Heeseung sonrió en respuesta, comiendo de su almuerzo.

—Hyung, tengo algo para usted.—dijo el pequeño alfa.

Con la curiosidad, Heeseung observó a Jake sacará un papelito doblado de su bolsillo derecho. Al entregárselo sus mejillas se ruborizaron, desviando la mirada.

—¿Qué es esto, Jakey?—preguntó abriendo el papel.

—Es un dibujo.. para ti, lo hice con todo mi amor.

—Para el hyung más lindo..—leyó en la parte superior de la carta. Sus ojos se pasearon en el papel observando el dibujo en él, no tuvo mucho trabajo en saber quién era.—¡Soy yo, wow Jakey eres muy talentoso!

El castañito desvío la mirada a lo que Heeseung tomó sus regordetas mejillas haciendo que lo volviera a ver.

—Muchas gracias, cachorro—dijo con un eye smile—Me encantó tu sorpresa.

—Pero, no es la gran cosa.—respondio apenado.

—Para mi lo es, Jakey—mencionó acariciando las mejillas del menor—Yo también tengo algo para ti.

Los ojos de Jake se abrieron con sorpresa y brillaron ante lo dicho por Heeseung.

—¿De verdad?

Heeseung asintió sonriendo, con las mejillas teñidas de un suave tono carmín.

—Esta aquí..—dijo rebuscando algo en su propio bolsillo. Jake bajó la mirada en dirección de este y Heeseung aprovechó esto para propinarle un suave y torpe beso en los labios para luego echarse a correr. Dejando al pobre de Jake con un torbellino de emociones en su corazón.

De todos los regalos que le pudo haber dado su hyung, jamás creyó que le daría el honor de ser él, el dueño de su primer beso.

( ♡ )

—Y.. así como ese hubieron más, pero eso ya es otro tema.

—Eres un pillo Jake—rió codeando al menor—que bien te lo tenías guardado eh. No creí que alguien como Lee hiciera esas cosas.

Jake de igual manera rió.—No es como si tu no lo hayas hecho—rodó los ojos Jake.

—Osea si, pero no lo creí de alguien como Heeseung.

—El también es humano, pendejo.—dijo Jake como si fuera lo más obvio a lo que el pelinegro le fulminó con la mirada.

Sunghoon le restó importancia a los comentarios de Jake.

—De todas formas, me surgió la duda.. ¿Porqué de la noche a la mañana comenzó a ser tan distante?

—Eso es algo que me cuesta descifrar—respondió soltando un suspiro— pero no importa cómo, haré lo que esté en mis manos para devolver al Heeseung hyung que conozco.

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