perdí todas los separadores porque cambié de teléfono ;A;

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La primera nevada del año fue a mediados de diciembre, era 12 de diciembre cuando el frío aumento y los cristalinos copos de nieve comenzaron a caer en la ciudad. JinSol por notificaciones de la universidades supo que probablemente una tormenta se vendría por lo que las clases de la tarde se cancelarian para la precaución de todos, fue por ChaeWon a su escuela que también había sido notificada del tiempo y luego por YeRim.

Al llegar al departamento no tardó en encender la calefacción, ChaeWon tenía su chaqueta casi de color blanco por los copos de nieve y YeRim estaba tan abrigada que con suerte podía moverse.

—Vamos, les daré un baño caliente para que tengan menos frío ¿Sí?

ChaeWon asintió y fue al baño, ya sabía encender la llave así que lo hizo sin problemas mientras JinSol le quitaba un poco de abrigo a YeRim y llevaba ropa para ambas para que asi no salieran del baño y no se enfriaran mucho más que ese no era el propósito.

Se dio el tiempo de quitarles un poco más el frío y cuando terminó el baño hizo lo más rápido que pudo el cambio de ropa de ambas, les secó el cabello y dejó un beso en la mejilla de cada una al terminar.

—¿JungEun unnie no está?

—Debe seguir trabajando en sus proyectos.

—Mamá.—YeRim apuntó la puerta.

JinSol sonrió dando un toque en la nariz de YeRim que cerró los ojos y rió. Después de todo, la costumbre de decirle mamá a la rubia no se había ido, y lejos de convertirse en un problema fue bastante cómodo.

—Tal vez en un rato esté aquí.

—¿Y podremos ver la nieve mañana?

—Si la tormenta no es tan fuerte entonces sí, wonnie, ¿Quieren hacer muñecos de nieve?

—¡Sí!—Respondieron las hermanas.

JinSol se dedicó a cocinar una sopa, algo que pudiera hacerlas entrar en calor, estos días eran muy fríos y no podía dejar que las más pequeñas se enfermaran por eso. ChaeWon mientras hacía sus tareas y YeRim hacia su mejor intento dibujando en unas hojas en blanco, debían de tener hojas en blanco porque YeRim agarraba cualquier papel que veía y eso ya le había causado algunos problemas a JinSol.

Tal y como había dicho, JungEun llegó un rato después, la rubia ya tenía hasta su propia llave del departamento donde pasaba bastante días disfrutando con la pequeña familia Jeong.

—Mamá.—YeRim dijo a penas escuchó la puerta corriendo hasta la rubia y levantando sus brazos.

—Déjame quitarme el abrigo.—La rubia de igual forma estaba cubierta de nieve. Al dejar el gran abrigo en el perchero y quitarse los zapatos cargó a YeRim saludando a ChaeWon y luego yendo a la cocina donde estaba JinSol.—Está muy tibio aquí dentro.

—¿Cómo te fue?—JungEun se acercó más a ella besando sus labios castamente, YeRim era bastante celosa con la rubia y no le gustaba ver a sus dos mayores besarse frente a ella por lo que se quejó empujando con todas sus fuerzas a JinSol para que se separara.

—Bien, por fin tuve mi última presentación, soy libre.

—Te dije que lo harías.

JungEun dejó a YeRim en el suelo que volvió a la sala dejando a las dos mayores solas en la cocina.

—Las dos querrán jugar en la nieve mañana.

—Seguro habrá mucha nieve, la tormenta será toda la noche.—JinSol asintió, sabiendo que en significaría una noche compartiendo su cama con sus dos sobrinas.

—¿Saldrás con nosotras?

—Claro que sí, no me puedo perder de nada con tus sobrinas.

—Será nuestra primera nevada juntas—JungEun se ríe al igual que la peliazul y aprovechando que no está la pequeña celosa juntan sus labios en un beso más largo y pausado—. Sabes lo mucho que te quiero ¿Cierto?

—No dejas de decírmelo cada día.

—Te lo mereces, Kim JungEun, has sido la mejor no-niñera del mundo, y también la mejor novia que puedo tener.

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