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Lovely~

La lluvia caía suavemente, era tan cálida pero tan fría al mismo tiempo, ese paseo nocturno fue una buena opción, las personas a su alrededor lucían un poco tristes y otros se le notaban lo irritados que estaban. ¿Lluvia? ¿Otra vez? Pero... ¿Qué tenía de malo ese paisaje tan frio? Las frías gotas de agua que descendían del cielo, siempre pensó que se debía de un regalo del cielo. Quería que alguien lo admirara porque siempre estaba así...

Tan solo su felicidad venia de esa acción del cielo. Los latidos de su corazón los escuchaba tan cerca y a la vez tan lejos, entonces ¿Por qué la gente se queja tanto? Nadie sabía que esa era su felicidad y por nada del mundo la dejaría ir...

Abrió su paraguas y se levantó de donde estaba sentado, admirando el cielo y las delicadas gotas de agua cayendo, no quería regresar a su departamento quería seguir viendo ese espectáculo tan consolador y la vez tan frio.

Una sonrisa se formó en sus labios, las luces de los semáforos, los postes de luz y las calles casi sin gente transitando, era como un espectáculo, una imagen tan dulce y solitaria.

Amaba ese escenario en donde él era el protagonista. Extendió su mano para poder sentir esas gotas resbalar de sus manos, como lagrimas que desbordaban sin cesar de un corazón marchito y desolado. Una ventisca helada acompañaba esas lágrimas solitarias. La tenue luz del semáforo en rojo y sin ningún automóvil enfrente. Definitivamente la ciudad era hermosa de todos los puntos de vista de este escenario.

-¿te gusta? –Pregunto una voz suave y relajada a sus espaldas, se giró para ver al dueño de esa voz el cual lo veía con sus ojos llenos de ese brillo especial que tanto amaba en secreto-

-analizo levemente esa mirada, y con este paisaje se veía aún mejor que muchas veces, le regalo una sonrisa muy sincera con una mirada llena de vida- me encanta... -musito-

Ese rubio lo traía muy loco desde ese entonces, después le preguntaría si lo estaba siguiendo aunque eso no importaba en ese momento, quería seguir disfrutando de esa hermosa y digna imagen.

-cerro su paraguas acto que llamo la atención de nuestro albino y miro con sorpresa como el rubio se acercaba a él y tomaba el mando del paraguas, un sonrojo recorrió sus mejillas pero que adorable- ¿q-que haces...? –tartamudeo un poco al ver como esos orbes negros se posicionaron encima de sus labios ¿acaso era su imaginación?-

-parecía que querías compañía –sonrió levemente mientras veía esos tentadores labios en esa ciudad tan solitaria-

No respondió porque sintió como sus manos se unían y como sus dedos se entrelazaban, estaba sin palabras al parecer el si lo veía. Sabía que estaba en Blue & Grey. Pasearon suavemente entre esa hermosa lluvia y las calles de esa ciudad vacía. Bajo un paraguas la cual sería testigo de sus actos.

-podías verlo –el albino lo miro curioso- podías verlo en tu departamento entonces... ¿Por qué saliste?

El albino se lo pensó unos momentos, tiene razón en lo que decía pero la verdadera pregunta era ¿Cómo podría desperdiciar la oportunidad de ver esto? Rio levemente, esa pregunta la consideraba un poco estúpida en ese momento tan especial.

-me sentía un poco... perdido o un poco deprimido, la verdad no se ¿Cómo describirlo? Pero lo llamo "un sentimiento distinto" –vio las pocas estrellas que se podían apreciar a pesar de esas grandes nubes-

-¿sentimiento distinto? –pregunto desorientado, ¿sería verdad?-

-bueno no sé cómo explicarlo... pero es como si, te sintieras perdido, como si estuvieras buscando algo lo cual te cuesta mucho y sientes que te asfixia, es un sentimiento te hace sentir frio pero a la vez tan cálido, eso me recuerda a la lluvia, sus gotas trasparentes serian como esas personas que están tan dañadas pero son tan transparentes que tan solo desean una gota más de felicidad pero no saben que tienen esa posibilidad de aprender a amarse a sí mismos –sintió como Free se detenía, deteniéndolo a él también en el proceso- ¿Qué suce-

En un movimiento rápido pero delicado, se acercó sin permiso a su contrario para besar esos labios, los cuales resultaron ser tan dulces como se los imaginaban, suaves, ni tan pequeños o grandes, del tamaño ideal y la mejor parte era que encajaban perfectamente con los suyos, paseo su mano alrededor de la cintura del albino, el cual al sentir como se despegaban sus labios decidió volverá unirlos en ese hermoso acto de amor.

Lo había tomado con la guardia baja pero no le importo, ni se inmuto en los siguientes segundos los cuales parecían eternos, sus labios no querían separarse, profundizaron el beso lo cual provoco un leve gemido de los labios del albino. El rubio al escuchar ese sonido, tiro el paraguas y se apegó con total libertad con el cuerpo del otro.

El aire era escaso, y se separó con recelo de esos labios. Quería más.

-respiraba agitado, de verdad que necesitaba aire, esos ojos cual carbón lo veía con deseo, quería más y lo sabía, se le notaba el deseo y él también quería eso- nos vamos resfriar –se excusó y sonrió ladinamente-

-capto esa indirecta, y le regresó la sonrisa, apego sus frentes y cerró los ojos- pensé que preguntarías que ¿Por qué hice eso?

-tienes frio ¿no? –Coqueto-

Departamento de Shu.

-ten –le entrego la taza de chocolate caliente, después de todo necesitaban calentarse- está caliente te puedes quemar –advirtió mientras tomaba asiento a su lado-

-gracias –todo era tan silencioso, que juraría que ese iba a ser su segundo lugar favorito-

La lluvia seguía cayendo pero esta vez tomo un poco más de fuerza, el viento helado les quitaba las ganas de usar el aire acondicionado, hacía mucho más frio que de costumbre, el mundo roto era como la perfección misma. Sonrió levemente, parecía un sueño el cual no quería despertar y entonces sintió un peso en su regazo.

-¿puedo besarte? –pregunto sin ninguna pizca de vergüenza, descarado, el descarado que le encantaba-

-pero que caballeroso de tu parte, preguntar primero –irónico, sentía la mirada del rubio viéndolo fijamente, ya era de costumbre que siempre lo hiciera, dirigió su mano a los labios del rubio, acariciándolos suavemente- ven...

Le arrebato la taza que tenía en su mano y la coloco rápido en la mesa del frente, lo tomo de la corbata y lo beso desesperadamente, fuego. Ese sentimiento caluroso le recordaba el fuego, siempre le ocurría con esa persona en específico. Desde que Lui había jugado con él se alejaba y se aferraba a esa lluvia de emociones en su interior, desolación, tristeza, enojo, ira, decepción, traición todo junto. Recordaba ese evento a pesar de haber pasado ya unos 6 meses. Cada vez que sentía interés por alguien, huía de ese sentimiento.

Suave como el aire, denso como el humo, era como nosotros pero no era como ninguno. Sueño de un mañana recuerdo de un ayer de un aroma a tabaco o aroma de mujer. Una nube inmensa que cuando se siente lejos se siente cerca o viceversa. Todos lo conocemos pero no lo sabes, es tu mejor amigo aunque mal te pague. Así es el amor.

Los besos desesperados de Free eran su perdición, cada vez eran más candentes, más demandantes, les faltaba aire pero la desesperación por los labios del otro era interminable. Ese calor que emanaba el rubio era lo que tanto buscaba pero nunca lo dijo en voz alta. A veces el frio de la lluvia era tanta que se acostumbraba y pensaba que eso era lo que necesitaba para volver a ser humano.

Las caricias, los besos no eran suficientes.

-vamos a tu cuarto –susurro en oído como si fuera un mandato-

El albino agitado y un poco sonrojado asintió, solo eso fue lo que necesitaba para sentir como lo levantaban del sofá y se aferró al rubio como un gato asustadizo. Mientras que caminaba con dirección al cuarto pego contra el muro a su presa. Si iban a hacerlo tenía que marcarlo.

-ah~ Free –los besos en su cuello lo hacía temblar un poco, ese tipo de tactos era de los que lo descontrolaban, hasta que sintió como lo mordían en esa sonó ahogo un gemido, como si de un animal se tratase- mmm~

-miro a oji-rubí a los ojos- creo que ya es hora de que la lluvia tenga una tormenta

Dicho esto termino por llevarlo completamente al cuarto, en cuanto lo arrojo a la cama, se quitó su camisa bajo a la atenta mirada de su amante. Bonito secreto que tendrían. Tomo posición arriba del albino y abriéndose paso entre sus piernas pegando en el acto sus pelvis. Las manos de Free recorrían todo su cuerpo poco a poco fue levantando su camisa, los jadeos de su presa eran una gran sinfonía.

Nuestro albino no sabía qué hacer, solo se disponía a disfrutar de las diferentes sensaciones, los pequeños espasmos de su cuerpo por cada zona inexplorada a la cual el rubio estaba tomando mandato por toda su piel. Cuando le despojo de su camiseta miro como el rubio alzaba su mirada encontrándose con la suya y su respiración agitada.

-¿quieres que vaya más lento? –Susurro con un tono seductor-

-respiraba agitado y sonrió- creí que esto era sexo –irónico, esa cosa de amor no era de su interés-

Sintió como lo tomaban del cuello apegándolo bruscamente contra la almohada en su nuca, Free no tenía expresión alguna en su rostro. Otra vez ese estúpido cuento.

-deja... de pensar en él, lo detesto, lo odio –dijo con un poco de rabia pero era tan suave que se sentían tal y como el filo de un cuchillo afilado, si lo estaba tomando del cuello pero no ejercía fuerza para que le faltara el aire-

La mirada expectante del de ojos carmesís empezó a nublarse un poco. Respuesta: lagrimas.

Desbordaron delicadamente de sus ojos a su mejilla, llevo una de sus manos a la mejilla de este que se le notaba que estaba irritado y la acaricio suavemente tomándolo por sorpresa y despertando de su resentimiento hacia la persona la cual le había hecho daño su futura pareja de boda. Por alguna extraña razón Shu tenía el poder de debilitarlo cuando quisiese y eso que él era como un tigre salvaje. Soltó su agarre en el cuello del menor y en cuanto lo hizo lo jalo hacia el abrazándolo protectoramente. Sentó y recostó su espalda de la pared.

-lo siento –se apegó más al pecho desnudo del menor- pero me pone celoso pensar que él te toco primero... y además... quiero que te sientas cómodo

-se rio levemente, limpio las lágrimas y el rastro de ellas, escucho el latido del corazón del rubio, parecía un niño nervioso después de romper un vaso de vidrio- tu eres el primero –sonrió con un leve sonrojo-

-¿el primero? –Cuestiono si entender su respuesta, pensó unos momentos y vio sus camisas tiradas al borde de la cama, la cabellera desordenada que se encontrase en su pecho, entonces el primero...-

Tomo del mentón al de apellido Kurenai, levantando su mirada y acercándose a su rostro. Deposito un suave beso en esos labios, correspondido fue al instante en una velocidad ni tan alta ni tan baja, sus lenguas danzaban y las manos de ambos recorrían el cuerpo del otro, adiós al estúpido sexo duro que estabas esperando. Hola a esa cálida sensación tan delicada en sus corazones.

Fueron acortándose los besos para pasar a unos más demandantes pero delicados, los brazos de Shu rodearon del cuello de su contrario y se posiciono mejor encima de la entre pierna de este. El rubio abrió levemente sus ojos en el beso para verificar la ubicación exacta del cinturón de su amante. Desabrochó sin mucho apuro y bajo la bragueta del pantalón. Si el sentía ese cosquilleo intenso en entre sus piernas significaba que el albino también o al menos esa era su hipótesis.

El albino decidió tomar cartas en el asunto y acorto el beso en el cual estaban involucrados. Bajo sus labios al blanco cuello de Free y lo besaba se le notaba que estaba necesitado. Tenía que admitir que cuando lo tomo del cuello se excito un poco por eso lamia y mordía levemente el cuello escuchando la suave lluvia y sus corazones acelerados...

A la mañana siguiente, el sol dejaba ver su brillo natural, los rayos de luz despertaron al rubio. Abrió sus ojos con somnoliento y ahí lo vio.

Su cabello como la nieve, su piel blanca con unos leves mordiscos y chupetones en diferentes partes distintas, fue bajando su mirada recorriendo cada parte del como si hubiera sido la primera vez que lo veía. Los besos de ayer y esa bella sinfonía.

Parecía mentira pero si era un sueño, jamásquisiera que dejara de llover.

Notas finales.

*se seca las lágrimas*

Ok esta es la primera vez que hago un One-shot, no les negare que esta mini historia fue creada mientras escuchaba la lluvia y escuchaba Blue & Grey de BTS y después que dejo de llover deje de escribir porque tenía que entrar en personaje.

Esto se iba a publicar el 14 de febrero pero como ese día no estaba lloviendo no lo publique.

En la parte del acto, cambien de canción a una llamada Escenery de V of BTS.

Me sorprendí mucho escribiendo este One-shot ya que no suelo escribir esta clase de historias por un paisaje y el sonido de la música.

Sin más nada que agregar me despido.

Bye Pajaritos. 

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