El abuelo Song, sentado en los asientos traseros del ahora Bugatti Chiron color blanco, observa con asco la forma en la que el gran porton negro se abre frente a ellos.

Jimin no puede creer que realmente esta entrando en esta maldita casa de nuevo, se quiere morir.

Jungkook conduce el vehículo al interior, y estaciona el auto como el culo una vez más.

Así es como los tres se bajan del lujoso auto en completo silencio, esta vez ni siquiera llegan a la puerta, el señor y la señora Jeon salen de la enorme mansión para recibirlos con sonrisas radiantes en los labios.

—¡Jiminnie!

Griya Yeji corriendo hacía el omega con los brazos abiertos, y finalmente abrazarlo estrechamente.

Ella fue quíen lo ayudo cuando había perdido el control, es justo decir que era la más cercana a él, lo abrazo y peino su cabello con delicadeza, pidiéndole por favor que recobre la cordura.

—¡Al fin esta toda la familia reunida!

Exclama Yoo con felicidad, causando que el abuelo Song los mire sorprendido.

Esas personas parecían realmente querer a Jimin, no se esperaba eso para nada, es más, estaba listo para ser menospreciado ¿Pero ser recibido como parte de la familia de forma casi inmediata?

Empieza a plantearse todo, tal vez no sean malas personas, tal vez Jimin podría ser feliz, pero entonces recuerda esas palabras que leyo en las capturas de pantalla que su nieto le había enviado.

"Quiero ver sí sos sexy" ×40

"Tengamos sexo" ×20

Lo sabe, no puede aceptar todo eso, simplemente no puede.

Aunque tal vez, no es que Jungkook le desagrade, tal vez simplemente tiene miedo de que sí su nieto se casa se va a olvidar de él.

Durante muchos años fueron sólo ellos dos contra el mundo, Jimin es lo único que tiene, no puede perderlo a él también.

Cuando perdió a su esposo, el único mótivo por el cuál no murió de la tristeza fue por su hija, y cuando la perdió a ella, encontro su fuerza en Jimin.

No podía perderlo a Jimin y menos a manos de alguíen cuya primera palabra parece haber sido "Precios".

—Vayamos adentro, la cena ya esta lista.

Propone Yeji, causando que todos ingresen en la lujosa mansión, Jungkook no puede borrar la sonrisa de su rostro en cuanto ve a su omega entrando con confianza mientras ríe y habla con sus padres.

De a poco parecía estar más cómodo y relajado a su alrededor, y entonces el alfa puro se pregunta ¿Cómo es que no se da cuenta? Porque para ser honesto no es como sí algo hubiese cambiado, él se sigue comportando de la misma forma, es Jimin, quíen parece empezar a reconocerlo de a poco.

¿Jungkook? Casí lo supo de inmediato, en cuango lo vío bajar de ese uber, algo dentro suyo hizo click y sólo fue capaz de decirse a sí mismo "Aaah, así que todo el tiempo fuiste vos", sólo necesito mirarlo a los ojos un par de segundos y sentir su aroma para que su lobo que parecía odiar al mundo entero se convirtiera en un perrito dómestico.

—Hijo, ya nos dimos cuenta de que amas a Jimin, pero no te quedes ahí parado mirándolo, y vení a sentarte.

Pide Yeji, observando fascinada la forma en la que su único y amado hijo se acaba de quedar parado en el medio del comedor mirando a su futuro esposo. Lo sabe, esa forma de mirar a alguíen sólo puede significar devoción absoluta.

Jimin no dice nada, se limita a agachar la mirada avergonzado, se pregunta cuál es el maldito problema de Jungkook ¿Por qué lo miraba así? ¿Acaso estaba buscando pelea? Porque si así era entonces la iba a encontrar ¿Pero y sí no? Algo dentro suyo le dice que no lo esta mirando mal, porque no puede evitar notar la gentileza con la que es observado por esos ojos negros.

Finalmente todos se sientan en la gran mesa blanca inmaculada.

El abuelo Song sonríe de inmediato al notar el colo de la mesa, sería una lástima que a alguíen se le cayera una copa de vino tinto carisimo sobre ella ¿Verdad?

Casí como un gatito jugando a tirar la taza favorita de su dueño, el anciano vuelca la copa de vino poniendo esta expresión en su rostro:

Es increíble, ya ni siquiera se molesta en disimular.

Y hablando de disimular, justo ahora Oreo le esta meando la cama a Jungkook.

Jimin no dice nada, sabía lo que su abuelo intentaba hacer, y él hasta había estado completamente de acuerdo con su actuar.

Pero dios siente un inmenso sentimiento de culpabilidad instalado en su pecho, osea si, es cierto, Jeon Jungkook le aterraba un poquito, pero jamás fue especialmente malo con él, nunca le dijo nada ni lo trato mal, es más, hasta lo trato bien, aunque hizo cosas muy cuestionables como seguirlo, acosarlo, hacer que lo echen de su departamento, etc, etc. Pero eso no era todo, no puede evitar sentirse culpable al ver los rostros del señor y la señora Jeon, que lo aceptaron como miembro de su familia a pesar de creer que él fue el amante de Jungkook durante 8 meses, fueron amables con él, por dios, Yeji hasta se quedo con él encerrada cuando había perdido el control, para cuidarlo y que no vaya corriendo a saltarle encima a Jungkook.

Lo observa en sus ojos, si se acerca un poco sabe que va a poder leer palabras como "Boda", "Cachorros", "Nietos", y para empezar él ni siquiera estaba comprometido con Jungkook, aunque el lujoso y carisimo anillo decorando su dedo anular izquierdo decía todo lo contrario.

—¿Se encuentra bien, señor Song? ¿No se lastimo?

Pregunta Yeji con preocupación, parándose de inmediato para ayudar al anciano que, en cuanto vío los rostros cargados de preocupación de los padres del loquito de mierda, puso su mejor cara de pelotudo.

—Es la edad.

Responde el abuelo Song ríendo falsamente, observando la expresión amarga en el rostro de su nieto.

—No se preocupe, esto se limpia rápidamente.

Afirma Yoo, yendo a la cocina para volver con varias servilletas y limpiar la mesa, que ni siquiera queda manchada causando que el abuelo Song se quiera matar, finge ser un viejo pelotudo y ni eso funciona, que horror.

–La verdad estamos emocionados de conocerlo, Jiminnie nos contó que usted fue quíen lo crío, nos gustaría saber todo ¿Qué clase de niño era? ¿Cómo lo educo para que sea una persona tan inteligente y buena?

Pregunta Yeji con una enorme y honesta sonrisa en el rostro, observando con admiración al anciano, y es que bajo su crianza, Park Jimin se convirtió en el tipo de persona que ella quería que su propio hijo llegue a ser algún día.

—¿Buena persona? ¿Jimin? El mocoso me escondió mi maldita dentadura todos los días sin falta durante 18 años, cada mañana era más amarga que la anterior. Una vez mis dientes aparecieron en la cabeza de la estatua del parque.

Afirma el abuelo Song, causando que el omega sonría con orgullo recordando ese día, mientras el señor y la señora Jeon ríen a carcajadas, y Jungkook mira a Jimin simplemente fascinado.

—Era revoltoso, quejoso, vivía haciéndome bromas, una vez me metió una vaca en la habitación. Otro día no llegaba a casa y empezo a preocuparme, salí a buscarlo y me lo encontre atorado en la pared de un vecino, había intentado saltar para robarse al perro y se quedo atascado...

El abuelo Song se pone a recordar esos días que ahora parecen estar demasiado lejos para su gusto.

—...otra vuelta, fuímos a visitar a su madre y padre al cementerio, y al muy idiota se le ocurrió mostarle un truco raro que había aprendido, y casi se rompe la cabeza con una lápida, cinco puntos le tuvieron que hacer en la nuca. Me vivían llamando de la escuela, porque cuando no se pelaba con alguíen, se estaba besando en los baños del colegio. Lo llamaban de los clubes deportivos a participar de las prácticas, sólo para que de el ejemplo de como NO se juega en equipo, le sacaba la pelota a sus propios compañeros, los empujaba...

Jimin se encoje en su lugar de la vergüenza al escuchar todas las cosas que su abuelo se encuentra diciendo como sí estuviera diciendo la maldita hora, y siente su rostro arder en cuanto es capaz de oír al alfa puro sentado a su lado ahogando una carcajada.

—...corría a los autos como sí fuese un perrito. Cuando salíamos a algún lugar, tenía que atarlo con una soga a la cintura porque sí no se iba a la mierda Todavía sigo encontrando por mi casa las verduras que escondía para no comerlas. Teníamos varios loros y a todos les enseño a insultar, cada vez que alguíen pasaba por nuestra casa se escuchaba "Inútil de mierda", "Ni tu mamá te quiere fracasado", "Hijo de puta", "Trolo de mierda". Una vez cúando el tenía 8 años, fuí a revisar que estuviera dormido y no lo encontre en su cama, revise toda la casa y no estaba, cuando salgo al patio lo ví, se había bajado los pantalones y le estaba enseñando el culo a la luna llena y me dijo "Abu, vos también, dicen que da buena suerte".

En cuanto Jungkook escucha esas palabras, finalmente estalla en carcajadas que hasta el momento había logrado retener, cuando Jimin le conto todas las cosas vergonzosas que había hecho, definitivamente se había salteado varias.

—Abuelo...tengo la leve sospecha de que cuando el señor y la señora Jeon dijeron que querían conocerme mejor, no se referían a eso.

Afirma Jimin sintiendo su rostro hervir de la vergüenza, estaba listo para agarrar una pala, cavar un pozo, y enterrarse vivo en él.

—Ay, Jiminnie, por favor, me encanta lo que estoy escuchando, Jungkook siempre fue un niño serio, su mayor "Travesura" fue escribir la pared con cálculos matemáticos porque ya no tenía lugar en su pizarra y ventanas.

Asegura el Yoo causando que Jimin lo mire con incredulidad.

—Ojála Jimin hubiese escrito las paredes con cálculos matemáticos, todavía tengo un culo dibujado en la puerta de mi habitación.

Ahí esta de nuevo, esa carcajada que esta vez Jimin se digna a observar, las arrujas en las esquinas de sus ojos y labios, el sónido, parece un niño pequeño riendo, no es el Jeon Jungkook serio que conoce, le resulta increíblemente atractivo justo ahora.

Yeji y Yoo no lo pueden creer, hace más de 10 años que no veían reír a su hijo a carcajadas, realmente es un milagro.

El abuelo Song se quiere matar, había hablado para manchar la imagen de Jimin ¿Por qué mierda las personas frente a él parecen tan encantados con sus anécdotas?

Así es como pasa la cena, sin un sólo segundo de silenció, el abuelo dejando la imagen de Jimin por el suelo, y mientras más sucia mejor para el señor y la señora Jeon que parecían estar cada vez más y más encantados con la pareja de su único hijo.

—Jiminnie ¿Qué te parece sí vos y Jungkook van a recorrer la casa un poco? La última vez no pudiste verla.

Propone Yeji, sabiendo que su marido y ella querían hablar a solas con el señor Jeon.

—¿Tens fotos de cuando eras chiquito? No me molestaría ver un vos miniatura con la misma cara de culo.

Admite Jimin causando que el alfa puro niegue con la cabeza con una sonrisa en el rostro.

—Vamos, te las voy a mostrar.

Responde Jungkook parándose de su silla, finalmente la "Pareja" se excusa y desaparece por una de las escaleras de la gran mansión, al mismo tiempo que Yoo y Yeji se paran de la mesa e invitan al abuelo Song a salir al enorme patio.

—Jiminnie nos contó que usted tiene una casa en el campo, imagino que cualquier patio trasero debe verse pequeño en comparación.

Pronuncia Yoo, rompiendo el silenció que se había instalado entre los tres.

El abuelo Song sonríe con nostalgia, al recordar como Jimin lo hacía correr por todo el campo, hasta que ambos se cansaban, o el caía al suelo al borde de un paro cardíaco.

—Imagina bien.

Se limita a responder el anciano con un sabor amargo en la boca, quería cualquier excusa para llevarse a Jimin lejos de esa familia, y no encontraba ninguna que no sea "Jungkook es un loquito de mierda".

—Pudimos darnos cuenta de lo cercano que es con Jimin, aunque para ser honestos ya lo habíamos imaginado, ni siquiera puedo imaginarme lo que debe estar sintiendo ahora que él creció y se va a casar, incluso creo que esta aterrado de que le arrebatemos a su nieto.

Afirma Yeji con una cálida y dulce sonrisa en el rostro, que causa que el anciano la mire sorprendida.

—No podemos mentirle, con nuestro hijo no somos tan cercanos como nos gustaría, de hecho nos enteramos de la existencia de Jimin hace menos de dos semanas.

"Y con razón, sí fue cuando se conocieron pero ustedes están mas ciegos que yo, y mira que tengo miopía hace 50 años ya"

Eso es lo que piensa el abuelo Song al escuchar las palabras de Yoo.

—Con mi esposa lo pensamos mucho, como regalo de bodas, queremos regalarles una casa a Jimin y Jungkook, un hermoso lugar dónde puedan comenzar su vida juntos, formar una familia. Sabemos que usted vive en Busán y por ese mótivo queríamos hablarlo con usted primero y preguntar ¿Le gustaría mudarse a Seúl? Se nos ocurrieron tres opciones, puede elegir la que más le guste, o por supuesto, ninguna.

El anciano observa con una curiosidad y sorpresa palpable a la pareja de alfas frente a él, puede notar lo enamorados que están, y eso sólo lo hace recordar a su hija y yerno, que se amaban con locura, se miraban como sí sólo existieran ellos y nadie más, se traga esas lágrimas amargas que le ocasionan el recuerdo.

El recuerdo del amor de su vida que falleció de una enfermedad contra la cual no pudieron luchar, el recuerdo de su hija y yerno que fallecieron en accidente que nadie pudo evitar.

—La primera opción es que se mude al departamento donde Jimin y Jungkook están viviendo ahora, es un buen edificio en una buena zona, no tiene que pagar absolutamente nada porque de eso se encarga nuestro hijo. La segunda opción es que nosotros le compremos una casa que quede cerca de la casa que vamos a comprar para ellos, para que pueda ver a Jimin siempre que quiera.

Es Yeji quíen se encarga de explicar cada opción que se le ocurrío junto a su esposo, luego de horas y horas de conversaciones.

—¿Y la tercera?

Pregunta el anciano, sabiendo perfectamente que las personas frente a él son de las mejores que conocío en toda su vida, y que es afortunado de que Jimin se este uniendo a su familia sí es que decide hacerlo.

—No quiero ofenderlo, pero usted ya es una persona grande, no es lo mejor que viva sólo, pero nuevamente, Jiminnie y Jungkook van a ser recíen casados, van a necesitar tener privacidad por un largo tiempo. A mi esposo y a mi se nos ocurrió, que sólo sí usted esta de acuerdo, se siente cómodo, y le caemos bien...¿Por qué no viene a vivir acá con nosotros? Jiminnie es un amor que vendría a visitarlo siempre, nosotros estaríamos encantados con su compañia, le juro que amaríamos escucharlo hablar de las cientos de anécdotas que debe tener sobre su vida, estaría acompañado, y al mismo tiempo nos haría compañía a nosotros. Nuevamente sólo sí a usted le parece bien, de hecho estaríamos encantados sí decide mudarse mañana mismo.

Asegura Yeji con nerviosismo, sin tener idea de que justo ahora, el abuelo Song se encuentra aguantando con fuerza las ganas de llorar y abrazarla con todas sus fuerzas.

¿Cómo se le pudo ocurrir tirar la copa de vino para arruinarles la mesa? Son las mejores personas que conoció en su vida, se siente como un adefesio.

—En ese caso, voy a confiar en sus palabras y voy a aceptar esa tercera opción.

Asegura el abuelo Song causando que los adultos enseguida sonrían y lo abracen con fuerza, sin tener idea de que algunas lágrimas rebeldes escaparon de los ojos del anciano.

Había llegado a esa casa convencido de que trataban de arrebatarle a su nieto, y en realidad era todo lo contrario, realmente son personas que, al igual que él, sólo quieren lo mejor para su pequeño Jiminnie.

Tal vez, no sería lo peor del mundo sí su nieto y Jungkook se casan.

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En unos minutos subo el siguiente de hoy 👀💛