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Visuales de la boda:

— Recién llegaron las flores, todavía están solucionando lo del pastel, no terminaron de armar la pista de baile. Las luces recién las empezaron a poner. Las flores todavía no llegan, el ministro que los va a casar va a ser tu amigo, tuvieron que salir a comprar más ingredientes porque con lo que había no alcanzaba para comer todos. Estoy entrando en pánico, me voy a tirar abajo de un autobús.

Amenaza Yeji caminando de un lado a otro en la habitación donde se encuentra con Jimin ya vestido con un hermoso traje blanco y un prendedor dorado en su corbata que él mismo eligió ya que le hace recordar al color de ojos que a veces tiene Jungkook.

—Calmate.

Pide el omega causando que la alfa lo mire sin poder creerlo.

—No me puedo calmar está saliendo todo mal.

Afirma la hermosa mujer quien lleva puesto un largo vestido negro.

—¿Por qué decís eso? Lo único importante el día de hoy es que Jungkook y yo nos vamos a casar, el resto es decoración y no importa para nada.

Yeji siente sus ojos llenándose de lágrimas ante esas palabras, no puede creer que realmente su único y amado hijo se va a casar, aún no cae en qué está esperando a su primer nieto. Nunca creyó que algo así iba a suceder, siente que está en las nubes.

La puerta es abierta luego de ser golpeada dos veces, dejando a ver a uno de los coordinadores del gran evento.

—Señora Seo, ya puede ir a llevar a su hijo al altar.

Avisa el beta, causando que la mujer mire a Jimin con emoción, le sonría, dejé un dulce beso en una de sus mejillas y finalmente se retiren de la habitación dejando al omega a solas.

Jimin se para del sillón y camina hacia el espejo para mirarse con curiosidad.

No puede creer lo que cambió su vida en tan solo unos meses. Se enamoró del tipo que juraba odiar. Está embarazado y feliz de estarlo lo cual es extraño porque nunca se imagino siendo padre pero ahora no puede ver un futuro en el que no lo es.

Es incapaz de imaginar una vida sin estar junto a Jeon Jungkook.

Ama incluso lo trastornado que puede llegar a ser.

Nunca pensó en su futuro, solía vivir día a día, improvisando sobre la marcha, viendo hacia donde iba, o que es lo que hacía. Ahora lo sabe perfectamente. Le importa muy poco hacia donde va si lo hace junto a él.

Su abuelo entra en la habitación llamando su atención, el dulce anciano ya se encuentra con el rostro lleno de lágrimas logrando que su nieto se acerque a abrazarlo con fuerzas.

—No seas maricon.

Le pide causando que el señor ría a carcajadas mientras llora sin parar.

—Tu madre y tú padre te están observando, hijo. Están viendo el adulto en el que te convertiste completamente orgullosos al igual que yo.

Asegura causando que Jimin sienta sus ojos llenandose de lágrimas y la emoción envolviéndolo.

Por otro lado, todos los invitados terminan de tomar asiento en el hermoso lugar donde la ceremonia está a punto de iniciar.

Una alfombra color negro con las iniciales de Jungkook y Jimin marcan el pasillo por el cual están a punto de caminar. Al final un hermoso arco decorado por flores, luces y plantas decorando todo el lugar y colgando del techo con elegancia. Flores blancas marcando el inicio de los asientos donde todos los invitados se encuentran vestidos de etiqueta admirando la decoración.

Se nota lo minuciosamente planeado que está todo, la música, el ambiente, absolutamente todo es perfecto.

Sin duda está a la altura de la familia Jeon, todos están acostumbrados a grandes eventos pero nunca habían visto algo así de hermoso.

Namjoon, quien se suponía iba a ser uno de los padrinos de Jimin, se encuentra al final del pasillo, justo atrás del arco esperando a los novios para unirlos en sagrado matrimonio.

Finalmente la música se hace presente un poco más alta, las grandes puertas del lugar se abren y por ella empiezan a entrar los padrinos y la única dama de honor.

Los primeros son Hobi quien a último momento se volvió padrino de Jimin, y fue reemplazado como padrino de Jungkook por el mismo guardaespaldas que se emociono hace unos capítulo porque el alfa puro le dijo "hola" por primera vez en todos los años que lleva trabajando para él. Ambos hombres entran vestidos de trajes grises, con sonrisas en el rostro, parándose cada quien en el lugar marcado para ellos.

Los siguientes son Sun y Jin, quienes entran tomados del brazo, desfilando por el pasillo con elegancia cautivando a absolutamente todos con su belleza inhumana. La hermosa mujer de coloca en el lado de Jimin luego de recibir un beso en la mano de parte de su pareja, quien se coloca del lado de Jungkook con una sonrisa en el rostro.

Finalmente, los últimos en ingresar son Yoongi y Taehyung, ambos llorando sin intención alguna de parar, haciendo reír a varios de los invitados por estado en el que están. Y eso que ni siquiera había iniciado la parte importante.

Todos se paran en cuanto notan que el siguiente en entrar es Jeon Jungkook, la cabeza de la familia Jeon.

Camina por el pasillo siendo acompañado por su madre y padre, ambos con los ojos rojos de llorar debido a la emoción causada por el momento que están viviendo.

Jungkook no es capaz de mirar a nadie, ni siquiera le presta atención a la hermosura del lugar en el que se encuentra, solo quiere ver a Jimin. Es lo único que le interesa de todo esto.

En cuanto el alfa puro llega al altar, la música se detiene en seco.

Todos esperan que la típica marcha nupcial empiece a sonar, la sorpresa se hace presente cuando en lugar de eso empieza a sonar I Hope You Dance de Lee Ann Womack.

Jungkook no puede borrar la sonrisa en su rostro, él sabe lo que esa canción significa para Jimin. Es la canción que sus padres amaban y le solían cantar cuando él era pequeño, es uno de los pocos recuerdos que le quedan de ellos.

Cuando el Alfa puro observa los dos asientos reservados en la primera fila a la derecha, con fotos de los padres de su omega...lo sabe, sin duda están ahí, sonrientes, felices y orgullosos de su único y amado hijo, no tiene ninguna duda de ello.

Y cuando el estribillo empieza a sonar, Jimin entra en el recinto del brazo de su abuelo, robándole el aliento por completo a absolutamente todos los presentes.

Jungkook no llora desde los 15 años, pero viéndolo caminar hacía el con seguridad, con una sonrisa genuina en los labios, con todo ese amor en los ojos, sin un solo ápice de dudas...se quiebra.

Las lágrimas empiezan a caer por sus ojos, la felicidad que siente es tanta que no le entra en el cuerpo y se escapa en forma de pequeñas gotas saladas.

Nadie puede creer que Jeon Jungkook está ahí parado llorando y sonriendo de la emoción, nadie nunca lo había visto de esa forma.

Nunca nadie había visto a alguien tan enamorado.

Nunca nadie había visto a dos personas sonriéndose con tanto amor en las sonrisas.

—Te amo, hijo. Te deseo una vida llena de felicidad, por favor cuidalo mucho, Jungkook. Él es lo único que tengo y lo estoy dejando en tus manos.

Pide el abuelo Song con el rostro bañado en lágrimas, sintiendo sus manos temblar mientras su amado nieto lo mira con todo el cariño y agradecimiento del mundo.

—Te amo abuelo, gracias por amarme tanto toda tu vida.

Agradece Jimin abrazando a su abuelo, causando que Yoo y Yeji, que ya se encontraban sentados en sus lugares lloren aún más fuerte, al igual que Yoongi y Tae, y Nam bueno...se supone que tiene que mantener la compostura pero ya está hecho una magdalena.

—Por supuesto que lo voy a cuidar, señor Song.

Asegura Jungkook tomando la mano de Jimin sin dejar de mirarlo en ningún momento, siendo apenas capaz de contener su llanto.

Finalmente el abuelo Song asiente, mira una ultima vez a su nieto, y se voltea para caminar hacía su asiento, justo al lado de las sillas reservadas para los padres de Jimin, con las fotos de cada uno de ellos.

—¿Ya viste quiénes nos están mirando, amor?

Pregunto Jungkook señalando a las sillas, causando que Jimin se voltee con confusión, sintiendo su corazón hacerse pequeñito al ver los rostros de su madre y padre sonrientes. No puede creer que incluso pensaron en eso, sabe muy bien que fue Jungkook quien lo pidió, no pudo haber sido idea de otra persona.

—Se iban a enojar si no los invitábamos.

Afirma Jimin con lágrimas en los ojos, causando que el alfa puro ría suavemente.

—Disculpen, me emocioné.

Admite Namjoon mientras limpia las lágrimas de su rostro y trata de regular su respiración.

Recordando la forma en la que conoció a Jimin durante la secundaria, son poder creer que ese desastrozo chico de 13 años ahora está parado frente a él a punto de contraer matrimonio, mientras esa canción que marcó su infancia gracias a él resuena en cada rincón.

—Estamos acá para presenciar la sagrada unión en matrimonio de Jeon Jungkook y Park Jimin. Jimin podés decir tus votos.

Esas son las palabras de parte de Nam, que causan que Jimin mire a los ojos a su pareja mientras suspira con nerviosismo.

—Viví toda mi vida improvisando, sin planear absolutamente nada, despertando y diciendo "Bueno veamos que pasa hoy". Hasta que te conocí y me hiciste asustar tanto que me dije a mí mismo "Debería dejar de vivir de esta manera"...

Jungkook ríe recordando su primer encuentro, el que muchas personas creen que fue hace más de un año en Francia cuando en realidad fue hace unos pocos meses por una razón más que estúpida.

—...te dije que mis votos iban a ser graciosos pero me arrepentí a último momento, tengo toda la vida para conquistarte con mi inmaculado sentido del humor. Hoy quiero hablarte desde mi corazón, quiero decirte que sin saberlo te espere toda la vida, quiero que sepas que soy incapaz de imaginar una vida en la que no estoy a tu lado. Quiero decirte que sos la persona que más amó en el mundo, que cada vez que te miro a los ojos, sin importar del color que sean me siento seguro porque se que mientras puedas observarme estoy en mi hogar...

Jungkook vuelve a quebrarse en cuanto escucha esas palabras, todo su cuerpo tiembla íntegramente, pero toma las manos de Jimin con fuerza y seguridad, sabiendo que no quiere soltarlas jamás.

—Muchas personas que me conocen dirán que soy un absoluto desastre y tal vez tienen razón, pero a vos no te importa nada de eso. No te interesa que yo no tenga absolutamente nada más que mi abuelo y mis amigos. Me amas lo suficiente como para mandar a enmarcar fotos de mis padres y colocarlos en primera fila con tal de hacerme sentir que ellos son parte de esto. Prometo cuidarte y amarte toda la vida, Jungkook. Y para finalizar con este largo discurso...quiero citarte a vos "Precio para que te cases conmigo".

Jungkook ríe en medio de sus lágrimas cuando escucha esa última oración, recordando la forma en la que se conocieron y la cantidad de veces que intento comprar al chico, mirando atrás realmente debe haber parecido un idiota, pero sabe muy bien que no cambiaría absolutamente nada, porque todo lo que hizo fue lo que lo trajo a dónde está ahora, casándose con el gran amor de su vida.

Jimin mira a Namjoon, que debería seguir la ceremonia, pero el chico está literalmente así:

Al igual que Sun, Tae, Yoon, Yoo, Yeji, el guardaespaldas y el abuelo Song.

Hobi y Jin por su parte no están tan demacrados, si lloran pero no tan desconsoladamente.

—Perdón...prosigo. Jungkook podés decir tus votos.

El alfa puro, quíen no podía dejar de admirar la belleza del hombre con quien se está casando, toma una profunda respiración sabiendo que sin importar lo que haga va a volver a romper en llanto al decir lo que escribió especialmente para él.

—Hace poco una persona me preguntó por qué vos, por qué nadie más...

Yerim, que se encontraba allí junto a sus esposo, sonríe con genuina felicidad al escuchar esas palabras. No puede creer el hombre gélido que una vez conoció ahora está llorando frente a toda su familia. Es incapaz de reconocerlo.

—...supe cual era la respuesta de inmediato, Jimin. En un mundo donde hasta yo mismo me consideraba un monstruo, sos el único que jamás me miró con miedo. Jamás voy a olvidar la forma en la que viste mis ojos dorados por primera vez y en vez de huir aterrado como cualquier persona razonable haría...té quedaste...

Yoo y Yeji lloran desconsoladamente mientras se abrazan al oír esas palabras, saber que alguien acepta todo de su hijo es una sensación que va más allá de la felicidad.

—...jamás voy a olvidar la forma en la que acaricias mi rostro mientras me aseguraste que jamás haría algo para lastimarte. Me dijiste cosas que ni yo creía de mi mismo. Conoces partes de mi que ni conozco. Ves en mi cosas que ni yo soy capaz de ver. Acá adelante de toda mi familia y de la tuya como testigo lo puedo asegurar con total certeza, Jimin...

El omega finalmente rompe en llanto al escuchar las palabras que son dichas por su destinado, sintiéndose de una forma en la que jamás se había sentido. Sintiendo algo completarse al saber que va a despertar todos los días a su lado, que esos ojos lo van a mirar hasta que se cierren para siempre, que sin importar que van a estar juntos hasta el final.

—...nací con el único propósito de amarte, lo sos todo, mi principio, mi final, mi alma es más tuya que mía, mi corazón te pertenece desde el momento en que naciste. Es mirarte y saber dónde me quiero quedar toda la vida, es escuchar tu risa y saber que jamás voy a cansarme de escucharla, es escuchar tu voz y saber que se trata de mi canción favorita. No importa lo que pase, si dentro de muchos años soy capaz de verte sonreír junto a nuestros hijos entonces voy a saber con certeza que sin dudas hice las cosas bien. No importa si a los ojos del resto del mundo sos un desastre, sos mi perfecto desastre, a mis ojos sos lo único por lo que vale la pena vivir esta vida, Jimin y prometo pasar toda mi vida demostrándotelo.

Hobi y Jin, se suman a Tae, Yoon, el guardaespaldas, Sun, Nam, el abuelo Song, Yeji y Yoo para llorar de forma desconsolada.

Jamás habían escuchado algo tan lindo, Yoongi y Tae hasta sienten vergüenza de los votos que ellos se dijeron en su boda.

—Por favor, traigan los anillos.

Pide Namjoon rindiéndose en eso de no llorar, decide ser él mismo.

Cuando suena un silbato que Yeji se encarga de soplar, Oreo entra corriendo en el recinto con los anillos colgando en una bolsita amarrada a su cuello.

Sun es la encargada de tomar a Oreo y entregarle los anillos a Jungkook, para volver a su lugar sintiendo que en cualquier momento se le empiezan a caer los mocos.

—Jeon Jungkook ¿Aceptas a Park Jimin como tu esposo, para amarlo, respetarlo, y cuidarlo, en la salud y en la enfermedad, en la pobreza y en la riqueza hasta que la muerte los separe?

—Acepto.

Namjoon sonríe mientras asiente con felicidad y ahora mira a Jimin, que parece estar hipnotizado por el hermoso color de los ojos de su casi esposo, que parecen mezclarse con el dorado justo ahora.

—Park Jimin ¿Aceptas a Jeon Jungkook como tu esposo, para amarlo, respetarlo, y cuidarlo, en la salud y en la enfermedad, en la pobreza y en la riqueza hasta que la muerte los separe?

—Por supuesto que acepto.

Afirma Jimin causando que todos el recinto aplauda ante esas palabras.

—Por el poder que me confiere la ley los declaro esposo y esposo, pueden besarse.

Jungkook larga un suspiro de alivio al escuchar esas palabras, toma el rostro de su destinado y lo besa con todo el amor que le tiene, sabiendo muy bien que jamás va a olvidar ninguno de los besos que deja sobre esos labios.

—¡Les presentó por primera vez los recién casados Jeon Jungkook y Park Jimin¡

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4/4 💛

LO PROMETIDO ES DEUDA la maratón llegó a su fin, nos leemos el finde que viene 💛💛💛💛

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