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Reproduzcan la nueva canción de Yixing, Flying Apsaras. 🛐
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Paso las páginas lentamente mirando cada detalle de información de estas. Mientras más leo, más mi enojo va cada vez aumentando en mi interior.
Estaba en la sala de reuniones reunida con casi todos los gerentes de mi empresa. No digo todos por que da la casualidad que tres de ellos faltaron hoy precisamente por que tenían asuntos familiares.
Tch. Como si no supiera que lo hacen a propósito y en realidad están en sus casas poniéndose al día con sus reportes.
Estoy revisando algunos reportes de los gerentes presentes y veo que varias áreas están progresando y eso es bueno. Pero otras me tienen en mucha pero que mucha duda.
Cierro la carpeta y suspiro, acomodándome en mi asiento. Subo la mirada y me encuentro con todas las personas de la sala mirándome, incluso mi secretaria. Analizando mi rostro a ver si podían captar alguna reacción mía para que estén preparados a los actos que haga. En otros tiempos me hubiese incomodado ser el centro de atención, pero esta vez no. Quiero que sepan mi estatus después de los reportes que he leído.
Coloco mis manos entrelazadas encima de la mesa poniendo mi mejor postura. -- ¿Por qué no veo mucho progreso en algunas áreas?
Ahí todos dejaron de mirarme para conectar su vista con todo menos con mis ojos. El silencio empieza a sentirse pesado y con un ambiente algo tímido y avergonzado.
Alzo las cejas cuando nadie me quiere contestar. Mi día no ha sido para esto.
Oh bueno, será mejor escoger.
Volteo mi rostro al señor que estaba al lado de Yujin. -- Señor Choi.
Su postura se coloca rígida y veo como casi se levanta de su asiento al llamar su nombre. -- Señorita Kim.
-- ¿Qué ha pasado que no hay mucho progreso en el área de contratación?
Antes de hablar, se escucha el ruido de un bolígrafo y sé que es Yujin, lista para escribir lo que él tenga que decir.
-- B-Bueno señorita Kim. Lo que ha sucedido es... h-hay unos leves problemas en piso que.... no han sido arreglados hasta el sol de hoy-...
-- En el piso cuatro están cortos de empleados señor Choi.
Sus manos empiezan a jugar con el final de su corbata. Estaba bastante nervioso. -- Sí me dijeron eso, son pocos-...
-- ¿Siete empleados en un piso donde la capacidad máxima es quince personas le parece poco señor Choi?
-- ¡No! ¡No, claro que no señorita Kim!
-- Están faltando casi la mitad señor Choi. ¿Y me está diciendo que no faltan muchos? ¿Por qué no veo empleados nuevos en el piso cuatro?
-- Los tendrá señorita Kim. No he podido arreglar eso. -- Me dice casi en un susurro pero lo pude escuchar claramente.
-- Bien, quiero que abras plazas, que coloque anuncios en las redes si es necesario. Necesitamos que el piso cuatro me produzca.
Él asiente con una leve reverencia. -- Entendido señorita Kim.
Rodeo los ojos con algo de molestia. Sé por qué todavía no hay empleados, aveces se pasa todo el día hablando de cómo es gerente y de cómo es el orgullo de mi empresa. Cuando aveces no hace nada. Lo he escuchado mientras paso por los pasillos.
De verdad no sé ni por qué no lo he despedido.
Abro la carpeta de nuevo y veo la información. -- Bomin. -- Lo llamo al notar algo en su área.
El mencionado coloca una postura profesional al escuchar su nombre. -- ¿Digame señorita Kim?
-- Lo felicito. Me gusta como va llevando el departamento. -- Vi como puso una gran sonrisa haciendo que sus ojos casi desaparezcan. -- Muchas gracias señorita Kim. No se decepcionará de mi.
-- Eso espero. -- Digo pasando las páginas de la carpeta.
-- Perdón la molestia señorita Kim... -- Alzo la mirada al gerente de promociones quien estaba a un lado de Bomin. -- Tengo entendido que la señorita Choi le informó que pronto tendremos una reunión sobre el producto que se lanzó.
Miro a Yujin por un pequeño segundo y luego miro al gerente de promociones. -- En efecto.
-- Le he avisado al señor Lee y me contactó diciendo que va a ir también a la reunión.
-- Estoy algo perdida señor Kang. -- Digo acomodandome el cuello largo de mi camisón. -- ¿Hay algún problema con el producto?
Antes de él decirlo, se quedó mirando a los otros gerentes, como algo incómodo de que ellos estuviesen presentes.
-- Me gustaría decirlo en privado... o en la reunión que vamos a tener pronto.
Asiento en desgano apartando mi vista de él, y alzo los papeles para darles unos golpes en la mesa y que estos se acomoden. -- Bien, en la reunión será. -- Miro a todos los que están en la mesa. -- Haremos otra reunión pronto, para ver sus progresos y espero, que el progreso sea mejor que lo que llevan ahora, o vendrán consecuencias. Ya están avisados.
Me levanto y todos ellos se levantan haciendome una reverendo algo nerviosos. -- Esta reunión se ha acabado, se pueden ir.
Todos salen de la sala de reuniones no sin antes decirme un buen día y yo devolviéndole con una sonrisa a cada uno.
Suspiro cuando todos se van y miro a Yujin quien se acercó a mí. -- Apuesto que quieres una copa de vino luego de ver los reportes de cada gerente. -- Me dice en un tono burlón.
-- No te miento, me entraron las ganas. ¿Por qué no hay muchos progresos en algunas áreas?
Ella se alza de los hombros y empieza a recoger los documentos en donde yo estaba sentada. -- No lo sé, supongo que se creen que se pueden recostar del trabajo.
Una mueca de evidente disgusto se forma en mi rostro. -- De verdad que son unos irresponsables algunos de ellos. No sé ni por qué no los he despedido.
Ella se ríe y niega con la cabeza.
-- Bueno, voy a estar en mi oficina. -- Ella asiente mientras guarda unas cosas. -- Yo voy a terminar aquí y voy a entregarle unos documentos en algunos pisos. Si necesitas algo me dices.
-- Está bien.
Salgo de la sala de reuniones para dirigirme rápidamente a mi oficina no sin antes dirigirle una rápida mirada a algunos empleados que me pasaban por el lado y me daban una pequeña reverencia en forma de cortesía.
Abro la puerta entrando a la oficina, lista para sentarme en mi silla y verificar unos cuantos documentos que vi sobre algunos pagos de algunas empresas que no me convencen. Pero eso se esfumó rápidamente cuando vi a una persona familiar en la silla que queda frente a mi escritorio. Enseguida ese fuerte olor colonia cara y única aparece en mi nariz.
Oh mierda. No me lo esperaba.
Estaba de espaldas y no se movió así que imagino que no me escuchó llegar.
Suspiro cerrando los ojos por unos segundos y cierro la puerta algo fuerte para llamar su atención, cosa que lo logro. Él se levanta y se voltea. Hoy llevaba un suit de color azul marino y le contrasta bien con su piel blanquecina.
Demasiado de bien.
-- Ha llegado más temprano de lo usual señor Zhang. -- Le digo pasándole por el lado yendo directamente a mi escritorio.
-- Le notifiqué a su secretaria que iba a llegar un poco más temprano, señorita Kim. -- Dejo de mirar los papeles que había tomado en las manos para mirarlo a él. No es cierto, Yujin no me dijo que-...
Un momento...
Ahora que recuerdo... Yujin sí me había comentado algo de eso esta mañana.
Mierda se me olvidó por estar pendiente a la reunión de la empresa.
Le doy una sonrisa —que de verdad no presentaba nada de amabilidad— y luego abro un archivo para guardar los papeles. -- Es verdad, ella me lo había comentado pero se me olvidó.
Él sólo me mira con su sonrisa.
-- Bien, entrando a otro tema, quería comentarle sobre los productos que queremos lanzar.
-- ¿Qué sucede?
-- Es que... creo que la cantidad que habíamos mencionado era un poco... excedida. Considero que deberíamos bajar la cantidad a cuatro productos.
Lo había estado pensando dese hace un tiempo y aunque las dos empresas sean exitosas y los productos se vayan a vender, creo que no es lo apropiado. Con cuatro productos está bien.
Él se queda pensativo recostandose en su asiento. Después de unos cuantos segundos vuelve hablar. -- Mmm... creo que tienes razón. Aunque somos empresas exitosas, puede que sea exagerado o no nos puede favorecer.
Casi mis pensamientos.
-- Está bien, entonces serán cuatro productos... Tenemos planeado ir a una empresa hoy ¿no es cierto? -- Digo mientras verifico los documentos de las empresas. Escucho un papeleo desde su lado así que supongo que está viendo lo mismo que yo. -- Sí... Podemos empezar por la empresa Chang.
-- Buena idea, he escuchado que son buenos en negocios.
-- Lo mismo me han dicho. -- Me quedo unos segundos mirando los nombres. -- Bueno, entonces vayamos.
Me levanto de mi asiento y tomo mi bolso junto con el maletín que Yujin me había preparado esta mañana. Me dirijo hacia la puerta y la abro, esperando a que él salga.
Me pasa por el lado con una pequeña sonrisa enseguida dándome otra bofetada con su perfume. Maldita sea.
Carraspeo un poco y cierro la puerta detrás mío. Empezamos a caminar pero me encontré a Yujin caminando hacia nosotros. -- Oh Señorita Kim... ¿Va para algún lado? -- Ella le hace una pequeña reverencia al hombre al lado mío junto con un saludo.
-- Iremos a una reunión con la empresa Chang. Regreso más tarde.
-- ¿No necesita que vaya?
--Te necesito en la empresa. Dejé mi puerta sin seguro para que verifiques unos documentos que dejé encima del escritorio. Estarás a cargo por unos minutos. Oh y también archiva unos contratos que había sacado para cotejar alguna información en la que tenía duda.
Yujin asiente y me da una reverencia. -- Entendido señorita Kim. Que tenga un buen viaje en el camino.
-- Gracias.
Me volteo al señor Zhang pero me encuentro con su mirada ya posada en mí. Alzo una ceja y él sólo aparta la mirada algo extraño.
¿Está nervioso?
-- Bien señor Zhang. Nos vemos allí. -- Me volteo lista para irme a mi auto pero lo escucho decir algo.
-- ¿Disculpa? -- Lo miro y noto que tiene una cara de confusión. ¿Pensaba que íbamos irnos en el mismo auto?
-- Ya que nos iremos en diferentes autos, me estoy despidiendo. -- Digo parpadeando varias veces.
Él se coloca una mano en el bolsillo mientras suelta una sonrisa. -- Iremos al mismo lugar señorita Kim. Podemos ir en un auto.
-- No es necesario señor Zhang. Usted y yo no somos tan cercanos para ir en un mismo auto. Además, usted llegó en su auto, así que no le veo el por qué de no usarlo. -- Le doy una mirada de arriba a abajo sin ninguna emoción en mi rostro. -- Lo veo allá.
Me volteo sin dejar que él me contradiga alguna palabra y me dirijo al auto. De ninguna manera voy a ir en el mismo espacio que él.
•••
Me bajo del auto con el maletín en la mano justo alfrente de la empresa. Miro el gran edificio con el logo de la empresa de letras rojas y blancas. Me volteo cuando veo a Zhang al lado mío mirando el edificio también. -- ¿Vamos señor Zhang?
Él me mira y me da una sonrisa mostrando como siempre sus hoyuelos. -- Entremos.
Los dos entramos al edificio y caminamos hasta la recepción. Sabia del nombre de la empresa pero no sabía sobre su edificio ya que no he hecho negocios con el dueño, pero es bastante sofisticado el interior. Me gusta la decoración.
-- Buenos días. ¿Se les ofrece algo? -- Dice la recepcionista con una sonrisa amable.
-- Tenemos una reunión con él señor Chang. -- Dice Zhang. Veo cómo la recepcionista asiente y se levanta de su asiento con una carpeta en su mano. -- Iré a informarle al señor Chang que está en una reunión con sus empleados, por favor esperen aquí por un momento. -- Los dos asentimos y ella desapareció por detrás de unas puertas que quedaban al lado del escritorio de la recepción dejándonos a nosotros dos.
Pasan unos largos segundos mientras yo sigo mirando los alrededores.
Bien, esto es silencioso.
Carraspeo colocandome la mano en mis labios y luego la bajo, pero escucho como el sonido de una prenda cae al suelo. Y al parecer Zhang lo escuchó también por que volteó a verme.
Miro al suelo y veo mi pulsera justo a unos pequeños pasos al lado mío. --Oh...
Lo que me faltaba.
Me iba agachar a tomarla pero él es más rápido y la toma. -- Gracias yo-...
-- Déjeme colocarsela.
Parpadeo varias veces. -- Oh no se preocupe, yo puedo sola.
Mentira. Pasé un infierno colocandome la pulsera esta mañana. Puede que esa sea la razón por la que se me cayó ahora mismo.
-- No se preocupe de verdad yo-...
Detengo mis palabras de golpe al sentir cómo su mano toma de mi muñeca y la atrae a su cuerpo mientras que él se acerca a mí. Oh no.
-- Vi como estaba mal puesta ahorita. No se alarme, señorita Kim.
Otro golpe de su colonia me choca en la nariz. Trago saliva algo desconcertada mientras miro como sus dedos pasan la pulsera por alrededor de mi muñeca. Alzo la vista y su flequillo está tapándole algo de su rostro que estaba en un semblante concentrado en tratar de cerrar la pulsera.
Esto es un maldito Deja vu a propósito. El destino está en mi contra a propósito.
-- Ya está. -- Salgo de mis pensamientos y veo como él acomoda la pulsera en mi muñeca. La aparto algo rápido y yo misma me arreglo la pulsera con mi otra mano mientras me alejo unos pasos de él. -- Gracias señor Zhang. -- Le digo con una pequeña reverencia tratando de no mirarlo a los ojos. ¿Por qué demonios me siento así?
Él me da una sonrisa pero presentía que había un motivo detrás de ella. -- No hay de qué Señorita Kim.
-- Pueden pasar. -- Cambio la vista a la recepcionista quien estaba cambiando la vista de Zhang a mí y viceversa. Sabía cuál era esa mirada. Y no me gusta para nada.
Yo sólo me adelanto para ir detrás de ella sin importarme si él está detrás mío o no. Mierda por qué dejé bajar mi guardia de esa manera.
Llegamos a la oficina del señor Chang y yo suspiro levemente, colocando mi postura y semblante más profesional que tenga. Bien, tu puedes Hana.
La recepcionista nos deja solos enfrente de la puerta y yo miro levemente por mi hombro, viendo que él está detrás mío.
Tomo la perilla de la puerta y la abro sin pensarlo mucho.
Veo al señor Chang sentado detrás de un gran escritorio repleto de papeles por doquier. Él alza su vista y nos ofrece una sonrisa mientras se levanta de su asiento. -- Bienvenidos. Vengan pasen, sientense aquí.
-- Un placer conocerlo señor Chang. -- Dice Zhang al lado mío.
Los dos hacemos una reverencia y nos sentamos en donde nos dijo, él se sienta de nuevo en su silla. -- Unas disculpas por que me encontraran en este estado. -- Dice mirando los papeles en su escritorio. -- He tenido una situación de imprevisto y como ven, he estado buscando y firmando documentos entre otras cosas.
-- Tranquilo señor Chang, somos empresarios también, sabemos lo que es eso. -- Le digo con una pequeña sonrisa en mi rostro. Su atención cambia a mí y me señala. -- Se quien es el señor Zhang. Pero usted es la...
Le hago otra reverencia al señor sin borrar mi sonrisa. -- Un gusto, soy la señorita Kim. Dueña de las empresas Kim.
Sus pobladas cejas se levantan a la misma vez que en su rostro se le aparece una expresión de sorpresa. -- Oh usted es la verdadera dueña de... Pensaba que era como lo decían las noticias y redes sociales.
-- No. He tratado de cuidar mi imagen de la prensa y los reporteros señor Chang, no quiero que nadie sepa quien soy. Así que le agradecería si usted no dice quien verdaderamente es el dueño de las empresas Kim.
Él niega con la cabeza repetidas veces. -- No, no se preocupe. De esta oficina nada va a salir. Se lo prometo señorita Kim.
-- Gracias. -- Miro a Zhang pero me encuentro que su vista ya estaba fijada en mí. Parpadeo varias veces y miro al señor Chang mientras me acomodo en mi asiento.
-- Bien. -- Dice el señor colocando sus manos en su escritorio. -- ¿Qué tienen cómo propuestas?
•••
Salimos por la puerta de la entrada de la empresa con una sonrisa en nuestros rostros. Nos fue mejor de lo que imaginé. Pensé que iba a ver algún punto en el que no íbamos a coincidir, pero todo salió de maravilla. Me volteo a Zhang y le extiendo mi mano. -- Lo felicito señor Zhang. Me ha gustado hacer propuestas con usted.
Él conecta su mano con la mía sin apartar la vista de mis ojos. -- Yo soy el que le tengo que felicitar. Me gustó esa estrategia de incluir nuestros empleados en las actividades públicas que hace la empresa de él.
Yo niego repetidas veces. -- No es nada.
Iba alejar mi mano pero siento como él la aprieta levemente. Mi sonrisa se borra y mi corazón late algo rápido por un segundo. -- Lo hizo bien, señorita Kim.
Nos quedamos un pequeño tiempo mirándonos. Quiero saber qué demonios está pensando ahora por que siento que esas palabras tienen otro significado.
Pero yo alejo mi mano y cambio la vista a mi auto que está frente a mí. -- Gracias señor Zhang. Usted lo hizo bien también. -- Abro la puerta pero antes de entrar le doy una última mirada rápida. -- Nos vemos después.
Y con eso cierro la puerta sin mirarlo por la ventana. -- Llévame a la empresa.
El auto se pone en marcha y yo suelto un suspiro, sintiendo mi cuerpo relajarse.
Maldito seas Yixing.
REGRESÉ.
Los extrañé un mundo de verdad. Lo siento por no poder actualizar más temprano. Desde la última actualización, mi vida personal ha sido un estado de emociones difíciles y la escolar tenía que ver con eso. Pero estoy aquí y no saben cuanto lloro de la alegría por eso. :")
Les quería dar una feliz Navidad y este capítulo como regalo. <3
No sé si pudieron notar los cambios de Hana. Pero espero que lo puedan entender como yo misma lo visualizo. :")
Sé que dije que no iba a publicar más historias de Yixing... pero bueno aquí estoy, he publicado otra:
Hice hasta un edit para visualizar como sería la historia en una serie:
Bueno, eso era todo por ahora, espero que les guste el capítulo y no se olviden de votar y comentar sobre este. <3
¡Nos vemos!
•Perdón por errores•
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