Esa boca, esa terrible boquita.

Jadeó sonoramente y por puro instinto llevó sus manos al cabello de Wonho.

Sus piernas luchaban por cerrarse ante la oleada de sensaciones que Wonho estaba provocandole, pero los fuertes brazos de Wonho no se lo permitían.

Gimió una vez más al sentir la lengua de Wonho pasearse con libertad por su miembro y arqueó su espalda.

— W-wonho... —Jadeó — la... La cita medica...

Y aunque su intención era detener a Wonho para darse prisa, lo único que consiguió a cambio fue una erótica mirada y unas dulces caricias en sus pezones.

Wonho no tenía planeado parar y tampoco era que él quería que lo hiciera.

Y es que casi se había vuelto rutina el hecho de despertarse y tener algún tipo de encuentro sexual antes de comenzar el día.

El menú de ese día, habían sido las cosquillas que Wonho tanto amaba hacerle.

Y aunque Hyungwon odiaba ser despertado con cosquillas, no podía contenerse de ese tortuoso placer combinado con las caricias dulces y eróticas de Wonho.

Así que terminó cediendo ante el tortuoso placer y terminó recibiendo un jodidamente delicioso oral por parte de Wonho.

Uno que lo estaba volviendo loco.

Sintió su orgasmo acercarse y no pudo evitar moverse contra la boca de Wonho, mientras gemía sin vergüenza alguna.

Y cuando aquellas conocidas corrientes eléctricas le recorrieron el cuerpo entero, se quedó paralizado, solo manteniendo sus miradas conectadas.

Sus piernas estaban temblorosas por la fuerte sensación, en cambio Wonho apartó su boca tranquilamente y le dejó un rastro de suaves besos en todo el abdomen para finalmente mirarlo con una inocente sonrisa.

— Buenos días Hyungwonnie... Hora de levantarse, tenemos cita médica, date prisa... — le lanzó un beso y un guiño dirigiéndose tranquilamente al cuarto de baño, mientras él lo seguía con la mirada.

— Maldito Wonho y su forma de despertarme... — dijo para si mismo — me encanta... — se mordió el labio con una sonrisa y se levantó rápidamente siguiendo a Wonho.

Quizá también debía agradecerle...

...

Estaba poniendo la mano sobre su abdomen para sentir el bebé y su mano libre estaba sosteniendo la mano de Wonho mientras entrecerrraba los ojos mirando a la oscura pantalla.

El doctor pasaba el aparato por el abultado vientre de Evonnie en silencio.

Sin embargo, Wonho estaba inexpresivo, solo expectante esperando algún comentario o una respuesta a alguna de las mil preguntas que había hecho desde que llegó al lugar.

— Mmm... — fue lo único que soltó el doctor sin dejar de ver a la pantalla.

Wonho frunció el ceño.

— ¿“Mmm" que? ¿Qué pasa? — nuevamente no recibió una respuesta verbal, el doctor simplemente levantó una mano hacia Wonho en señal de espera.

Después de unos largos y tortuosos minutos de silencio para Wonho, el doctor se detuvo, se giró y los miró a ambos.

— Y... ¿Ya tienen preparada la habitación para el nuevo integrante de la familia? — el hombre les sonrió y Wonho se desesperó.

— Disculpe doc... ¿El bebé está bien o no? — su tono de voz claramente tenía una mezcla de irritación, entonces Hyungwon soltó una risita al ver a su esposo de esa manera.

— Ansioso ¿Eh, señor Shin? — el hombre soltó una risita y negó al tiempo que volvía a clavar su mirada en la pantalla — recuerdo cuando tuve a mi primer hijo, no pude dormir en semanas...

Hyungwon se enterneció.

— ¿Por la emoción? — él hombre se rió y negó.

— No, porque lloraba mucho... — todos lo acompañaron en su carcajada, dándole toda la razón, sabiendo a lo que se enfrentarían — pero la emoción también jugó una parte muy importante en ese insomnio... — de repente el ambiente se puso nostálgico y todos miraron al sonriente hombre — cada vez que lo miraba, siempre me quedaba pensando “¿De verdad eso tan bonito lo engendré yo?” — suspiró y miró a ambos muchachos, quienes tenían un hermoso brillo de ilusión en sus ojos — el bebé está bien, de hecho está muy bien... Han hecho un gran trabajo los tres juntos.

Evonnie, Wonho y Hyungwon se miraron entre sí, muy agradecidos por poder llevar tan importante proceso a cabo.

Entonces Wonho suspiró.

— Me alegra saberlo... — dijo en un tono nostálgico que solo Hyungwon notó al instante.

Acunó la cara de Wonho y lo miró fijamente, intentando descifrar esa expresión.

— ¿Estas bien? — le dejó un suave besito en los labios — ¿Paso algo? — Wonho levantó su mirada hacia el doctor pero él estaba hablando con Evonnie sobre algunos asuntos del embarazo.

Entonces suspiró y agachó la cabeza.

— Es que... — susurró y volvió a suspirar — yo estaba pensando... — Hyungwon lo miró expectante cuando Wonho llevó una mano a su cuello y la metió por dentro de su camisa sacando un pequeño collar que conocía muy bien.

Entonces ambos se quedaron viendo el pequeño colgante con tristeza.

— Estas pensando en que pudo ser así con el bichito ¿no? — Hyungwon suspiró y miró a Wonho, entonces él asintió — de verdad que lo lamento Wonho... Sigo pensando en que todo es mi culpa.

Wonho rápidamente le acarició el rostro y le dio un beso suave en los labios.

— No lo pienses de esa manera... —levantó el rostro de Hyungwon y le sonrió — Es decir... Siempre voy a recordarlo y lo sabes, fue mi primer hijo... — Hyungwon asintió triste — pero el pasado es pasado y a estas alturas no hay necesidad de buscar culpables o sentirnos mal... Debemos disfrutar de esta etapa, juntos.

Acarició la mejilla de Hyungwon y él asintió nuevamente con una sonrisa triste.

Cuando se quedaron en silencio, escucharon que el doctor carraspeó para llamar su atención y entonces ambos dirigieron su atención al viejo hombre.

— Lamento interrumpirlos, pero tengo un anuncio importante que hacerles... — ambos fruncieron el ceño y se quedaron expectantes mientras el hombre imprimía la ecografía — anteriormente les pregunté si ya habían preparado la habitación para el nuevo integrante...

Hyungwon suspiró nostálgico por la reciente conversación.

— Eh... Si, ya estaba casi totalmente preparada con anterioridad, así que... — suspiró intentando evitar más detalles, hablar del pasado aún dolía.

El hombre sonrió viendo a los muchachos y luego le lanzó una mirada cómplice a Evonnie.

— Pues felicidades... — extendió el sobre con las fotos de la ecografía hacia Wonho — será una hermosa bebé.

Y los rostros de ambos se iluminaron.