Hola~

Agradezco a Iann97_ por comentar pidiéndome otro capítulo.
Y gracias a todas esas personas bellas que han votado hasta aquí.
Bueno, disfruten de su capítulo y recuerden que:
Comentarios + votos = actualización de mañana.
🔥🔥🔥🔥

13:44 p.m..

La estábamos siguiendo, los chicos no lo sabían pero yo sí. JiEun no dejaba de molestar, mientras yo solo estaba tratando de guardar la poca paciencia que me quedaba. Los chicos cantaban y reían pero para mí eso sonaba como murmullos porque estaba concentrado en ella que comenzaba a desaparecer.

—¡Chicos, chicos! ¡Dense prisa!

Varios minutos después llegamos a la descripción de "Una caja de zapatos con zancos". Jaja por Dios, hay que ver que ocurrencia tiene ella.

Estaba subiendo, la verdad se veía muy pero muy alto, aunque una torre de pacotilla no va a amedrentarme, porque yo no quiero nada más que conocerla, saber si soy su tipo y si no lo soy, intentar intentar serlo.

—¿Es aquí cierto Kook?

—Sí. —dije mirando como ella tenía amarrada una soga a la cintura y al otro extremo iba subiendo la caja y la bolsa con comida. Inteligente.

—¿N-no t-tenem-mos que s-sub-bir v-verd-dad!?

—No gallileta.

—Esa mujer es una salvaje —dijo JiEun asqueada al parecer. Rodé los ojos.

—Y resulta que es la que me gusta —susurré.

—Vaya, miren un hacha. —dijo JiMin al pasar por a lado de la escalera, los chicos y yo corrimos a ver.

—Se ve afilada —dijo Tae pasando su dedo por la hoja.

—Sí y mucho —dijo Jin—. Así que suéltenla.

—No sean miedicas, pendejos. —dijo Suga al ver como JiMin y Tae soltaron el hacha cuando Jin dijo que estaba muy afilada.

—Chicos vamos a organizarnos para ir al río que está cerca de aquí.

—Sí! —dijo Tae aplaudiendo.

—Hagamos un picnic! —dijo JiMin.

Y así pasaron dos días, ella no bajaba de ahí y yo no tenía ninguna excusa para ir hasta allá arriba y menos cuando los chicos no decían nada de ella, como por ejemplo, invitarla a pasar la noche en la fogata.

.....
Narra TN.
15:47 p.m..

—Aquí loto a base. —dije por la radio mientras observaba una enorme nube negra.

—Copio loto, ¿Ves humo? —dijo el chico encargado de la radio de la base.

—Esa tormenta que se encuentra a las 12 en punto de la torre, vientos 50 km/h ¿a dónde se dirige?

—Loto, eso no es una emergencia, si no ves humo no contactes con la base, interfieres en la línea.

—Copio —dije y corté la comunicacion con base en seguida—. Malditos hijos de perra —me levanté y tomé mis binoculares para seguir viendo al horizonte y de paso la tormenta que se acercaba.

.....
17:59 p.m..

—Desvíate perra... —le dije a la tormenta, desde aquí se podía escuchar los fuertes truenos, no era una una tormenta que traería agua sino rayos.

En ese momento escuché como se acercaban algunos rayos, el ruido provenía desde atrás, corrí por el borde hasta llegar a la esquina donde se encontraba la antena y ahí me di cuenta de que ésta estaba atrayendo los rayos y que estos se acercaban a la torre.

Rápidamente corrí a la cuerda del otro lado para salir de ahí antes de convertirme en un pollo frito. Me tiré pero la cuerda ya no daba más así que ese fuerte tirón que me hizo provocó que sin querer soltara la cuerda y caí de la altura de al menos unos 10 o 9 metros.

—Ah...

—¡Oh Dios mío!! —exclamó una voz masculina.

—Ayúdenla rápido. —dijo otra voz y luego oí pasos que corrían hasta mí.

—¿Te encuentras bien? —preguntó el de los bonitos ojos de ciervo.

Este chico... no sé, siento algo raro detrás de él, me safé de su agarre.

—JungKook.. te cayó una mujer del cielo —dijo en jarana el de piel pálida. Escuché cuatro reír excepto el de piel morena, el de linda cara y el chico frente a mí.

Pero me enojó que se dieran cuando yo me había caído de una altura muy alta, quizás me hubiera muerto y ellos estaban riendo.

—Aléjense!! Ah... —me quejé, miré mis manos y estaban llenas de restos de cuerda y sangre, me levanté como pude y comencé a caminar con cuidado mientras cogeaba.

Me dolía la espalda y la cabeza y claro, mis manos.

—¿No quieres que te ayude? —preguntó él.

—Bag!! —bufé y seguí caminando.

—Kookye déjala, es una-

—Cállate JiEun. —dijo el chico de ojos de ciervo.

—Pero que mal carácter —dijo el que parece de azúcar refiriéndose a mi. Me volví para mirarlo amenazante.

—Sí —lo apoyó el rubio bajito y se cruzó de brazos. Puse los ojos en blanco—. Se parece alguien —levantó una ceja y respondió refiriéndose al chico que había hablado anteriormente, el azucarado.

—JiMin, ¿me apoyas o estás en mi contra?

Dijo el de azúcar indignado y otros dos comenzaron a reír, vi como el de linda cara me miraba preocupado al igual que el más moreno de todos y el chico ojos de ciervo, les di una última mirada y me fui.

19:14 p.m..

Estaba en el río, toman dos horas llegar aquí.

En el borde estaba mojado al parecer ellos se bañaron justo aquí, así que camine un poco más para allá donde el agua venía limpia, ahí me puse de cuclillas y saqué mi cuchillo para comenzar a raspar mis heridas de la mano, unas ganas inmensas de llorar me invadieron porque me llegó el recuerdo del pasado, la última vez que hubo un incendio del otro lado de Montana, por mi maldita culpa perdí a un compañero y a tres jóvenes de mi edad en aquel entonces, ahora tuviesen unos 22, no pude salvarlos por eso me mandan a la torre, porque ya no me dejan estar en acción, además de que me enviaron al otro lado del bosque.

Una sombra me sacó de mi pequeño flashback, me volteé y lo amenacé con el cuchillo que tenía en mi mano.

—Oye oye tranquila —levantó sus manos en son de paz.

Era él.

—¿Por qué me sigues? —me puse de pie, aún sin dejarlo de amenazar con enterrarle el arma—. ¿Por qué viniste de tan lejos? ¿Acaso te gusté? —dije esto último cuando ya lo tenía acorralado entre el árbol y yo.

—Sí me gustaste —dijo seguro y se acercó a mí aún con las manos en forma de paz—, y me gustas.

—¡¿Por qué?!

—Mmh...—fingió que lo pensaba, colocando su mano sobre su barbilla y con el otro brazo sostenía el que estaba en su barbilla. Me miro bajando sus brazos y se acercó colocando el arma en su pecho—... me estas amenazando con una navaja. —miró el arma.

—¿Y eso te gusta? —confundida bajé el cuchillo y coloqué mi mano libre en mi cintura.

—Sí y si ahora mismo por tu cabeza pasa que soy masoquista pues supongo que contigo lo soy, —dijo poniendo los brazos en forma de "no sé"—, pero solo contigo nena. —susurró lo otro.

—¿Estás filteando conmigo? —levantó sus hombros y los dejó caer y en sus labios apareció una sonrisa—, no puedo creerlo —puse los ojos en blanco—. A ver niño Jeon....

—Soy mayor que usted señorita TN

—Aquí en América eso de los modales no se usa, ¿lo sabías? —volvió a levantar los hombros y los dejó caer seguido de eso. Me estaba enojando—. Chico mira, dile a tus amiguitos y a tu novia que no deben estar aquí, se aproxima una tormenta eléctrica desde el noreste —señalé con la navaja—, comenzó un incendio y en pocas horas llegará aquí, asi que si no quieren morir será mejor que se vayan ahora, él me miró con asombro y me tomó de la mano para comenzar a correr a no sé donde—. Oye! Suéltame!

Grité pero su mano me tomaba con fuerza, el recorrido que antes duraba una hora, ahora duró media hora ya que estábamos corriendo.

—¡Chicos! —gritó cuando ya nos acercábamos—.¡Chicos! —voovio a llamar.

—¿Qué sucede Jungkook?

—Ella dice que se acerca una tormenta por el noreste y que un rayo incendió el bosque, que en pocas horas llegará aquí el incendio, y que debemos irnos ahora!

—Wow —dije sorprendida, jamás pensé que un novato se aprendiera todo lo que dije a la primera, sorprendente.

—Kooky, ¿Por qué están tomados de la mano?

—No es el momento para eso JiEun. —dijo él, pero al momento que me dí cuenta de que aún estábamos sujetos de la mano me solté.

Lo escuché gruñir y lo ví mirando feo a la muchacha. Sonreí sin que me vieran.

—¿Entonces a que esperan? —todos comenzaron a recoger sus cosas.

—Señorita —dijo el que tiene linda cara, acercándose a mí—. Por favor, ayúdenos a llegar. —pidió.

Todos dejaron lo que hacían para mirarme.

—Es fácil llegar, los arroyos llevan a ríos y los ríos a ciudades, la ciudad queda a unos 20 kilómetros por la divisoria continental —sonreí mientras metía mis manos a los bolsillos de mis jeans, pero todos dejaron caer lo que tenían en la mano y se acercaron, y me miraron con asombro, rápidamente borré mi sonrisa—. ¡¿Qué?!

—¡Eso deberíamos decir nosotros! —dijo el de sonrisa celestial.

—¡¡¿20 kilómetros?!! —inquirió el que tiene sonrisa cuadrada y asentí.

—No llegaré vivo —se tiró al suelo el azucarado.

—No puedo caminar tanto! —exclamó la ridícula. Puse los ojos en blanco.

Yo me comenzaba a apiadar de ellos hasta que habló la... Ash, no la soporto.

—¿Y tú? ¿te quedarás aquí? —levante mis hombros y los deje caer para luego sonreir—. No —me tomó por los hombros y mi corazón latió fuertemente—, debes vanir con nosotros....

—Kookye déjala...

—JiEun cállate —ordenó él con voz grave y autoritaria haciendo que mis bragas se mojaran.

—Nos vamos a perder —dijo el más enano.

—¡¡Nos vamos a morir!! —dijo el de sonrisa bonita. Parecía un sol.

—¡Ay ya! —me safe de las manos del ciervo—, cada vez se pondrá más oscuro, en unas... —miré mi reloj en mi muñeca—.. 3 horas el fuego estará aquí y ya son las 8

—¿Tan tarde es? —inquirió el de sonrisa cuadrada. Asentí.

—Sí niño, se pasaron 4 horas y unos cuantos minutos en el río ¿De qué te asombras?

—Vaya... —dijo el azucarado.

—Subiré a por mi mochila, regresaré y cuando lo haga quiero que todo esté recogido ¿Entendido?

—¡¡Si!! —dijeron todos menos la chica esa.

—Bien. —dije y comencé a subir.

Actualicé!
¿Ustedes se lo esperaban?
¿No? Yo tampoco.
Jaja.

Es que alguien me lo pidió y pues.. yo cumplo.

Gracias por comentar personas bonitas.
(⁠人⁠ ⁠•͈⁠ᴗ⁠•͈⁠)(｡⁠◕⁠‿⁠◕⁠｡)

Espero que les haya gustado el cao de hoy. Nos leemos mañana~

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Love Under The Flames by SenioritaRMDeJeon.
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