—¿Mantequilla o mayonesa?— indaga Mica, poniéndole atención a las rebanadas de pan.

Yo observaba perdidamente la meseta, posando mi mirada en un punto fijo, distraída.

—Sí..

Ella me observó confundida y agitó sus manos frente a mí rostro haciéndome reaccionar. Inmediatamente la miré.

—Dime.

Negó con la cabeza.

—Bebé, sé que te sientes desanimada por cierta persona que conocemos y por eso no mencionaré su nombre— comenta— pero no puedes estar así todo el rato, ¿okay?— sonríe y asiento— Sabes que cualquier cosa que necesites estoy acá, ¿verdad?

—Lo sé, Micaela— río levemente— y yo las amo a todas.

—Eso suena mejor— asiente complacida— ahora dime, ¿con qué quieres la tostada?

Me quedé pensando unos segundos, e imaginé una respuesta que podría frustrarla un poco, por lo cual decidí escoger ésa.

—Mermelada— contuve la risa, sabiendo que ella no tenía de ésto en su casa.

Inmediatamente su rostro cambió, como era de esperarse, y no pude evitar reír, ella en cambio quería retirarse de la cocina, pero no se lo permití.

Estamos en presencia del drama sin sentido, pero gracioso, de mi mejor amiga, Micaela. Drama que adoraba ver, dicho sea de paso.

—¡Mantequilla, mantequilla!— exclamé riendo pero ella me ignoró— vale, ya lo prepararé yo, al tuyo también le pondré mantequilla— grité para que pudiera escucharme.

| 사랑 증상 |

Ya habíamos concluido nuestras primeras clases y el timbre ya había indicado que era hora de descanso. La mayoría de los alumnos ya habían salido del salón.
Recogía tranquilamente mis materiales, hasta que alguien puso sus manos sobre mi pupitre, obligándome a observarla.

—¿Qué cuenta la chica más bonita?— halaga mi princesita, Lia, haciéndome sonreír.

—Todo normal, supongo— la observé detalladamente, viendo cómo esa sonrisita no desaparecía, entrecerré mis ojos— ¿Y tú por qué tan feliz?— indago sonriendo pícaramente.

Giró un poco su boca, pero otra gran sonrisa apareció. Posteriormente jugó con sus dedos.

—¿Ya te mencioné que Jimin es un chico espectacular?

Abrí los ojos como par de platos.

—¿Qué ha pasado entre ustedes dos, señorita?

—¿Te cuento en el almuerzo? También quisiera contárselo a Gén y Mica— pide, asiento.

—Sin problemas— ya con todos los libros cerrados, me levanto— dejaré esto en el casillero y nos vamos, ¿Va?

—Te acompaño— sonríe.

Salimos del salón para así dirigirnos a mí casillero a dejar mis pertenencias.

| 사랑 증상 |

—¡Aquí!— hace un ademán con sus manos Génesis, quien ya se encontraba sentada con Mica, en una mesa arrinconada, justo como nos gustaba. Llamar la atención no era un pasatiempo agradable para nosotras.

Inmediatamente nos dirigimos hacia ellas, con nuestros almuerzos en las manos.

—¿Cómo están, lindas?— saluda dulcemente, Mica— demoraron un poco.

—Lara fue a dejar sus cosas en el casillero y demoramos un poquito al elegir la comida también— responde Lia— pero todo bien, demasiado, de hecho— vuelve a sonreír, bajando la mirada.

Mica y Génesis la observaron inmediatamente, y con un rostro que desbordaba asombro.

—Ya me hizo spoiler, pero aún no me ha dicho nada— la observo.

Lia suspira y vuelve a sonreír, me pregunto si no le duele el rostro, pero nada de eso importa cuando el corazón está feliz.

—Jimin es muy..— toma aire y se deja caer en el asiento— es tan diferente— mira hacia el vacío, con una mirada llena de ilusión y alegría.

—¿Pero qué ha pasado?

—Siendo honesta, no ha pasado demasiado como para estar enamorada, pero ya saben como soy.

—Tienes el drama de Mica— comento divertida, haciendo que esta me observe fulminante y Génesis ría.

—Te vas a tragar mi manzana— amenaza, haciéndome reír más.

—Pues, sí, Lia..— interviene Gén, chismosa.

—Él y yo nos hemos estado hablando, él hay veces que coincide conmigo cuando estoy en mi casillero y me saluda, me pregunta cómo estoy.. es muy dulce— ríe levemente— me dió su número y me escribe, y yo a él, todo muy sano— ladea su cabeza— es más tímido de lo que creía ¡Ay, no sé! Siento que estoy soñando— cubre su rostro, el cual ya se encontraba teñido de rojo.

No pudimos hacer sonidos tiernos en respuesta a su actitud de bebé enamorada. Me sentía muy feliz por ver a Lia sonreír, ella siempre ha gustado de Jimin, y la entiendo, debía sentirse como un sueño del cual nunca quisiera despertar, y me alegra muchísimo que Jimin esté siendo un caballero dulce con ella, Lia siempre será nuestra princesita, y queremos verla alegre.

—Bebé, me alegro por tí— acepta Génesis, acariciando su pelo.

Mica sonríe ampliamente, mientras asiente en acuerdo con Gén.

—Jimin parece muy buen chico, ojalá que todo se mantenga sobre ruedas— comento yo, y Lia asiente.

Repentinamente, el celular de Gén suena, y ella lo levanta, fue una notificación.

—Hablando de chicos dulces— comenta ella y una sonrisa aparece en su rostro, antes de comenzar a teclear.

—¿Jungkook?— indaga Mica.

—¿Quién más crees que merece a Génesis?— contesto yo y ella sonríe— ¿Qué dice?

—Que me espera en el patio escolar— nos observa a todas, esperando un permiso.

—¿Lo harás esperar? Vete— autorizo y ésta sonríe antes de levantarse.

—Chicas las amo, Lia, estoy muy feliz por ti, amor. Cuídense y nos vemos ahorita— habla rápidamente antes de salir del comedor.

—Dos niñas enamoradas era lo último que me faltaba— comenta en broma, Micaela, haciéndonos reír.

Aunque yo sonreí algo débil luego, recordando que yo también soy una enamorada, pero que a diferencia de ellas dos, yo sí no avanzaba, ni avanzaría con Kim Taehyung.

| 사랑 증상 |

Ya era la hora de la salida.

Una vez lista para irme, salí del salón y caminé hasta llegar a la puerta principal de la institución educativa, con mi mente totalmente enfocada en llegar a casa luego de una extensa jornada escolar.

Pero un agarre sobre mi brazo detuvo mi paso.

Inmediatamente giré el rostro para ver de quién se trataba, y–

Quedé anonadada.

—Hola, ¿podemos hablar?