Removiendose entre sueños Lisa se destapó la cara y abrió los ojos minutos antes de que sonara la alarma, observo a la causante de su molestia y miró a Jane con una de sus piernas en su cuello y con su cabeza sobre su estómago.

Había soñado que una fresa gigante la aplastaba, ya veía la razón de ese sueño tan raro que incluso la había hecho sudar.

Sabiendo del sueño pesado de su hija la movió sin mucha gentileza al centro de la cama matrimonial y se levantó para ir en dirección al baño, ya que había apagado la alarma no iba a despertar a Jennie.

Mientras se lavaba los dientes, Lisa observaba a Jennie dormir pacíficamente, uno de los tirantes de su blusa caía suavemente por su hombro mostrando la marca que había renovado en la noche antes de que Jane se metiera a la habitación en la madrugada.

— Tengo mucha hambre —Murmuró Lisa bostezando una vez salió del baño, todavía tenía que cambiarse para ir al trabajo, ese día entraba más temprano—

Quizá de regreso a casa le traería fresas a Jennie, la sentía algo inquieta a través de la marca.

(...)
— ¿Mami tienes un bebé? —preguntó Jane mirando fijamente a Jennie, había dejado de hacer las letras que le habían dejado de tarea para analizar a su mamá—

Descolocando totalmente a Jennie, la omega miró a su hija quien no le quitaba la mirada de encima con seriedad, la nariz de la pequeña se movía rápidamente tratando de seguir algo que Jennie no percibía y se detuvo en su estómago.

— Mami tiene un bebé —sonrió Jane de repente dando palmadas al aire y volviendo a su trabajo— por eso hueles a fresas, mamá también ha cambiado su aroma, huele como a madera —

— No puede ser —Negó Jennie tapando su boca— mi hija es una alfa —

¿En realidad eso era lo que le sorprendía?

— ¡Todos se dan cuenta de mis embarazos antes que yo! —se quejo y el sonido de algo cayéndose llamara la atención de la omega—

Era Lisa que había dejado caer las fresas al suelo debido a la impresión.

— ¡Mamá! ¡Mami tiene un bebé que huele a fresas! —grito Jane emocionada— ¡su panza huele a fresas! —

— ¿Es verdad? —preguntó Lisa acercándose con rapidez a Jennie y comenzar a olerla, la omega sólo se cruzó de brazos en su lugar con molestia— No hueles a flor de cerezo como siempre, hueles más a fresa y a melocotones —

— No me mires, estoy enojada de que todos se den cuenta de estas cosas antes que yo —bufo Jennie—

— ¿Quienes son todos? —preguntó Lisa con burla—

— Tu Y Jane —

— Que pequeño es tu mundo —se burló Lisa y luego recibiera un golpe sin fuerza por parte de Jennie— Auch —

— ¡Alfa inútil! —

— ¿Si mi amor? —

No tengo Internet, pero escribí dos caps en notas y ahorita que tenia datos aproveche para subirlos.