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Aquel había sido el día más agotador que había tenido en mucho tiempo. KyungSoo suspiró completamente cansado mientras se observaba en el espejo, después, se sentó sobre la cama y procedió a quitarse los zapatos.

Sus hábiles manos, desabrocharon las agujetas, y después sacó los pies para quitarse los calcetines, que procedió a dejar en el pequeño cesto de ropa que había en la habitación.

Frunció el seño al escuchar a JongIn todavía en la cocina, así que se dirigió al baño para tomar una ducha de agua caliente que esperaba pudiera relajarlo. Aquel día no había sido tan bueno como él lo había esperado.

Llevaban juntos un par de años, se habían acoplado bastante bien en todos los aspectos. KyungSoo era una persona muy seria y reservada. Trabajaba de lunes a viernes en una oficina y en sus tiempos libres disfrutaba de cocinar.

Por su parte, JongIn era un muchacho bastante alegre, que dedicaba sus días al mundo artístico. Se habían conocido en la puesta en escena de una obra de teatro. Ambos habían sido plantados por sus amigos, y así, en aquella extraña situación habían comenzado a sonreirse de manera nerviosa y hablar. JongIn había bromeado sobre cómo los amigos deberían de ser castigados por no asistir a sus compromisos y KyungSoo había asentido ante tan elocuente pensamiento.

El hombrecillo, finalmente salió de bañarse con una toalla en la cabeza y la bata de baño, cubriendo la mayor parte de su cuerpo. Procedió a secarse para después colocarse el pijama. No tenía ganas de hablar, no tenía ganas de hacer nada más que dormir porque pensaba que la mejor manera de evitar una discusión era esa.

KyungSoo no tenía ganas de pelear aquella noche.

Cuando JongIn entró en la habitación, el bajito ya estaba acomodado en su parte de la cama, completamente abrigado y listo para dormir. El más alto comenzó a desnudarse para ponerse la pijama y acostarse a dormir. Aquel había sido un día bastante ajetreado.

Sus amigos habían aparecido de improviso aquella noche y se habían retirado bastante tarde. Y aunque él había tenido planes con KyungSoo no había podido zafarse de la larga charla que había tenido con sus amigos.

Cuando se acostó a su lado, el moreno sabía que el bajito estaba molesto. Podía deducirlo con el simple silencio que inundaba la habitación. Sabía que en parte había sido su culpa, por no haber despachado a sus amigos lo más pronto posible.

Probablemente, ni siquiera estuviera molesto por la reservación que habían perdido en aquel restaurante lujoso y que llevaban esperando desde hacía casi un mes. No, KyungSoo no estaba molesto por eso, casi podía apostarlo. Pero algunas veces el bajito era un poco complicado de entender.

Así, habían decidido mantener un pacto entre los dos de "no silencio incomodo", con el afán de solucionar todos sus problemas y no ignorarse ni herir los sentimientos del otro a base de la ley del hielo.

Escuchó su respiración, tranquila mientras se acomodaba a su lado, y decidió esperar en silencio. Porque seguramente necesitaba un poco de espacio, y también un poco de tiempo para soltar lo que tenía que decir.

ㅡ Hoy sentí que no me quisiste mucho. ㅡ Finalmente habló KyungSoo, después de un largo suspiro.

Jongin permaneció en completo silencio.

ㅡ Es nuestro aniversario, tuve que trabajar e hice el esfuerzo por llegar a tiempo, solo para encontrar con que tenías una importante reunión con tus amigos. Teníamos una cita y probablemente estoy exagerando pero hoy sentí que no me quisiste mucho.

KyungSoo finalmente vació lo que había en su interior. El moreno escuchó atentamente cada una de sus palabras mientras lo observaba de espaldas en la oscuridad. Sabía que aquellos se había salido de sus manos, y sabía que de alguna manera que el día que era especial para los dos se había arruinado por su culpa.

No era que se le hubiera olvidado del todo. Simplemente había pensado que podía manejar el tiempo en que sus amigos estuvieran en su casa. Pero se quedó callado cuando se había llegado la hora y al final había terminado  mandándole un mensaje a KyungSoo.

Por supuesto que su aniversario era especial, por supuesto que que tenía razón, aquellos se había descontrolado pero jamás podría decir que lo quería menos.

No, JongIn lo amaba, lo amaba con todo su corazón. Lo habia amado desde la primera vez que lo vio sonreír y no había podido esperar ni un día para obtener su número de teléfono y llamarlo para invitarlo a tomar un café, ver una obra de teatro, ir al cine o compartir su tiempo.

JongIn quería pasar todo su tiempo con él. Así que lo abrazó, lo atrajo hacia su caja torácica y lo envolvió con perfección, suspirando para después acomodar su cabeza en su nuca y besarlo con suavidad.

ㅡ Es mi culpa, lo siento tanto ㅡ enunció el moreno e inundó sus fosas nasales con su esencia corporal. ㅡ Pero mi amor; no digas que no te quiero, porque te juro que te amo. Eres lo más importante para mí.

KyungSoo abultó sus labios en un inusual puchero que el otro no pudo ver.

ㅡ Hoy no se sintió así.

ㅡ Te amo Doh KyungSoo, lamento mucho haber arruinado nuestro aniversario.

ㅡ No vuelvas a hacerlo, por favor.

JongIn asintió y le susurró solemnemente su amor, mientras KyungSoo se deleitaba de sentir sus labios gruesos revolotear en su oreja.

JongIn era dulce como la miel, era cálido como el verano y tenía un corazón enorme, KyungSoo lo compartía con su familia y con sus amigos sin problema. Pero en días como ese quería ser un poco egoísta, quería tenerlo para él solo. No esperaba que aquello estuviera mal.

El bajito se removió entre los fuertes brazos del otro y se giró sobre la cama para verlo de frente.

ㅡ Entonces bésame, bésame y dime que me quieres hasta que me quede dormido. ㅡ Le pidió con los ojos brillantes y JongIn asintió.

Porque había aprendido la lección y no quería jamás que su amor pensaba que lo había querido menos que otros días.

Era algo que no podía permitir.

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N/a:

No yo actualizando promts de octubre de 2021

Pensé en una pelea justificable de una pareja. Tristemente las peleas que yo he tenido solo me dejaban llena de ansiedad. Horror.