Prólogo
"Tienda de amor."

La palabra mimado en verdad le quedaba bastante grande a Choi Yeonjun, él prefería que le dijeran "afortunado" simplemente por el hecho de haber nacido en una familia de gran importancia, su padre es un reconocido cantante del entrenamiento y su madre era una famosa actriz, por lo cual, desde muy pequeño jamás le a llegado a faltar nada, con el simple dinero era capaz de obtener todo lo que queria, sus padres jamás le pusieron algún límite con el dinero, por más ocupados que estén, sus padres siempre se lo recompensan con dinero.

Choi Yeonjun está acostumbrado al dinero y ama el dinero.

No había nada que él no pudiera tener, bueno, eso era, hasta que conoce a Choi Soobin.

El hijo de su querida nana, una mujer de piel pálida y de hermoso cabello negro que llega hasta su cintura, que a estado con él desde los seis años, al igual que aquel tímido niño que era su hijo. Ambos vivían juntos, ya que sus padres también amaban mucho a Wendy, por lo tanto, le ofrecieron quedarse en esa enorme casa, como agradecimiento de haber criado prácticamente a su hijo.

Provocando que desde niños formaran una especie de "rivalidad" que surgió apenas Yeonjun de entero que su querida nana, se quedaría a vivir en su casa, no le habia parecido mala idea hasta que se enteró de la existencia de Soobin, sintiéndose de alguna forma invadido y celoso, obviamente aquella rivalidad creció con el pasar del tiempo dependiendo de la etapa en la que estaban, actualmente ambos tenian ya 18 años y aquella rivalidad seguia palpable en ellos.

⸻ No entiendo que mierda le ven.⸻ Gruño por lo bajo Yeonjun, mientras de lejos observaba al presumido que conocia bastante bien.

Con el paso del tiempo, Soobin comenzó a hacerse bastante popular en la secundaria, solo por ser más alto que Yeonjun y tener un rostro más atractivo, manteniéndolo en el segundo lugar solo porqué si, aunque para los demás aquella división solo sea en modo de juego, solo provocaba que el sentimiento de odio dentro de Yeonjun aumentara.

Su grupo de amigas no pudieron evitar sonreír al notar como el único chico del grupo, masticaba con cierta rabia acumulada con tan solo presenciar que el de piel pálida volvía ser el centro de atención, con tan solo hacer acto de presencia en el comedor de la escuela.

⸻ ¡Ánimo Yeyo! Para nosotras eres mucho más atractivo.⸻ Solto Karina, mientras miraba a sus demás amigas en busca de apoyo, no desea que su amigo vuelva a estar metido en una pelea con Soobin.

Hanni y Giselle se miraron entre si, para simplemente asentir, ya que ambas estaban muy concentradas en devorar con la mirada a Soobin, ya que debían de admitirlo, era demasiado atractivo, que era imposible sacarle la mirada de encima. Un golpe sordo fue lo que se escuchó por todo el comedor, provocando que los chillidos del grupo de mujeres que se encontraban rodeando a Soobin, dejaran de prestarle atención, al igual que todos los presentes que estaban ahi.

Yeonjun llevo su cabello rosado para atrás, levantándose enojado de la mesa, llevando su bandeja de comida, él había sido el causante de aquel sonoro golpe que le dio a la mesa, si, estaba haciendo un berrinche, típico de un niño que no recibe la atención suficiente. Con aires de gloria, se acercó a pasos rápidos dónde el más alto, siendo atentamente observado por todos.

⸻ ¡Esto te sucede por ser tan insoportable! ⸻ Exclamó el pelirosa, botando toda la comida que le quedaba sobre el rubio.

Un sonoro sonido de sorpresa fue lo que se escuchó por parte de los presentes, su tan aclamado Choi Soobin fue fuertemente atacado por el segundon de Choi Yeonjun, ya sabian lo que se venia después, aquel par siempre salian lastimados, ya que comenzaban a golpearse. Pero está vez, Soobin no le siguió el juego al pelirosa, sorprendiendo al contrario, iba a soltarte algún otro insulto, pero la presencia de una autoridad provocó que sus intentos de elevar el conflicto más allá fueran totalmente arruinados.

⸻ ¡Choi Soobin y Choi Yeonjun, ambos vayan donde la oficina del director!

Era la cuarta vez que eran mandados a la oficina del director durante esta semana.

Ambos se mantenía en total silencio, mientras escuchaban como la madre de Yeonjun los regañaba a ambos, por haberse metido en problemas nuevamente, cuando habian dado su palabra de ya no volver a discutir durante todo un mes en la escuela, un trato que no duró ni dos días sin ser quebrado por parte del pelirosa.

⸻ ¡Mamá! Sabes que Soobin siempre me saca de quicio.⸻ Grito el chico, recibiendo una mirada llena de burla por parte del rubio.

Jisoo rodó por completo sus ojos, mientras llevaba su mano izquierda a su frente, rezando mentalmente con conseguir más paciencia para aguantar a aquel par, a ambos los miraba como sus hijos y les dolia verlos llegar lastimados o peleados la mayoría del tiempo, al inicio imagino que era algo normal entre niños tener cierta rivalidad, pero con el tiempo, aquella rivalidad solo hacia separarlos aún más entre si, volviendo las cosas incómodas dentro del hogar.

⸻ Cierra la boca Yeonjun, ya todos en la escuela sabemos que eres un niño mimado, con razón solo tienes amigas mujeres.⸻ Se burló de forma descarada el rubio, mientras le mostraba un poco de su lengua a Yeonjun.

Si su madre no estuviera ahi presente, en ese mismo instante habría molido a golpes el rostro de aquel mocoso alto, se limito a gruñir por lo bajo, llevando su mirada hacia la ventana del auto, ignorando por completo aquel comentario burlesco. La mayor de los tres se limito a soltar un sonoro suspiro, como si aquel aire lo estuviera retenido desde que los vio comenzar a discutir en el interior del vehículo.

⸻ Yeonjun, quiero que te mantengas en tu habitación durante esta noche, Soobin me comentó que traerá a sus amigos a la casa, para hacer una pijamada.⸻ Menciono la azabache, mirando desde el retrovisor alguna reacción negativa por parte del pelirosa.⸻ Sabes la promesa que le hiciste a Wendy con mantener tu silencio.

Decidio no responder, obviamente su persona recuerda a la perfección aquella promesa que le hizo a su cuidadora, para evitar que su único hijo sufriera de bullying en su año escolar, quedaron en fingir que era parte de su familia y que prácticamente eran hermanos, asi nadie se metería con él. Obviamente aquella mentira llegó muy lejos, ya que muchos comenzaron a crear teorías de que él era un adoptado ya que no se parecía a la famosa cantante Jisoo y ni a su padre, por lo cual, el que termino recibiendo un par de burlas fue él.

De vez en cuando cruzaba por su mente, romper aquella mentira, solo para ver cómo el ego de Soobin parara de estar en las nubes.

Pero no quería lastimar a su querida nana.

⸻ Esta bien, me mantendré en mi habitación.⸻ Respondió finalmente, al notar como su madre le lanzaba una mirada asesina.

Definitivamente odia a Choi Soobin.